Diseño/Estética
Calidad de acabado
Equipamiento de serie
Equipamiento opcional
Habitabilidad
Maletero
Motor/Refinamiento
Prestaciones
Consumos
Transmisión
Dirección
Frenos y neumáticos
Comportamiento
Calidad de rodadura
Relación valor-precio
7.9
Notable
El Mercedes-Benz Clase B es un movolumen compacto que destaca esencialmente por su comodidad, su practicidad y sus abundantes posibilidades de equipamiento. Tanto al volante como en las plazas traseras el espacio es notable, con unos asientos cómodos y ergonómicos. La oferta mecánica es variada (se irá ampliando con múltiples) y, la carga tecnológica, notable, aunque pagarás por ello...
La tercera generación del Mercedes-Benz clase B ya está aquí y, en esta ocasión, el monovolumen compacto llega con un carácter deportivo acentuado, un aspecto más dinámico y un montón de elementos compartidos con su hermano menor, el nuevo Clase A, por lo que la carga tecnológica a bordo es notable.
Hay que reconocer que el trabajo de los ingenieros en el diseño ha sido notable, pues se trataba de que el Clase B no pareciese un monovolumen y, desde luego, lo han conseguido, aunque para ello ha sido necesario jugar con las diversas cotas exteriores e interiores del modelo, lo que da lugar a un mayor espacio en el habitáculo.
Es más amplio que su predecesor, aunque en cotas resulta muy similar a su principal rival, el BMW Serie 2 Active Tourer, como veremos en unas semanas en la comparativa que os estamos preparando. El Volkswagen Golf Sportsvan, por su parte, es algo más grande y ofrece mayor capacidad de maletero.
Además, el Clase B es la opción más cara de las tres. En cualquier caso, es justo señalar que ofrece amplias posibilidades de equipamiento, especialmente en materia de seguridad y asistencias a la conducción que lo convierten en un gran producto nacido para conquistar a las familias que prefieren optar por un monovolumen frente a la ya asentada moda SUV.
Diseño exterior
El anterior Clase B se caracterizaba por contar con un diseño de monovolumen con marcadas líneas, pero el nuevo compacto de la estrella se presenta al mundo con una silueta más estilizada y curva, mostrando una carrocería más atemporal y un diseño que lo aleja de los tradicionales monovolúmenes para cautivar a aquellos que no quieren un SUV.
La nueva interpretación del diseño de la Clase B es fruto de un diseño compacto de dos volúmenes y unas dimensiones y proporciones optimizadas. El exterior exuda deportividad, dinamismo y emoción, especialmente gracias al avanzado diseño del frontal, caracterizado por el capó bajo y los faros LED High Performance de serie (MULTIBEAM LED en opción -578€-).
La llamativa calandra con la estrella, cuya silueta se ensancha hacia abajo dando una nueva interpretación a la parrilla del radiador, se presenta con dos lamas centrales en color plata que subrayan la deportividad del vehículo. En el extremo inferior vemos una nueva toma de aire central y dos falsas entradas en los extremos.
No faltan los sensores de aparcamiento delanteros y, en esta unidad, la línea Progressive que dota al Clase B de unos paragolpes y unas taloneras más elegantes y discretas que con el agresivo paquete AMG Line -2.075€- . Si buscas un toque más dinámico, lo cierto es que, pese a tratarse de un modelo familiar, el toque deportivo de este paquete no le sienta nada mal.
Y hablando de aerodinámica, hay que señalar que con un coeficiente Cx de 0,24 y un área frontal (A) de 2,4 m2, la nueva Clase B se coloca a la cabeza de su segmento en cuanto a aerodinámica. Además, por primera vez se introduce en la clase compacta un AIRPANEL de dos piezas de serie.
En la vista lateral, la mayor distancia entre ejes y una línea de carácter en los laterales aumentan visualmente la longitud del vehículo. En total, hablamos de 4,42 metros de largo, 1,80 metros de ancho y 1,56 metros de alto. La batalla mide 2.729 mm y las vías delantera y trasera miden 1.567 milímetros en ambos ejes.
La superficie acristalada es algo mayor –lunas traseras tintadas (415€)-, a pesar de mantenerse contenida, y los espejos retrovisores plegables eléctricamente -503€- integran los intermitentes. En esta unidad los cromados se sustituyen por el negro gracias al Paquete Night -1.107€-, lo que le resta algo de elegancia, pero le da un toque más dinámico.
A diferencia del modelo precedente, el capó está más inclinado hacia adelante y destaca mejor la posición erguida del dinámico frontal. La superficie de las puertas es totalmente limpia y los pasos de rueda son más amplios. En este caso, las llantas de 18 pulgadas están calzadas con neumáticos runflat -302€- Hankook Ventus S1 evo2 en medidas 225/45 R18 91W.
La baja altura del habitáculo, así como las ópticas integradas a media altura de la zaga, de estructura modular y divididas en dos secciones por el portón, acentúan visualmente la anchura del modelo, a la vez que resaltan de forma notoria la zona de los hombros. Las delgadas luces traseras aseguran una presencia emocional y le dan un toque de personalidad.
El toque deportivo final lo ponen los aletines negros en los laterales de la luna posterior, un sutil spoiler sobre la zaga que integra la tercera luz de freno y un paragolpes redondeado en el que podemos ver dos salidas de escape que, por desgracia y como es habitual en la marca, son falsas.
Sobre el techo no encontramos antena, pero sí un techo panorámico eléctrico practicable -1.584€-.
Éstas se ubican en un discreto difusor plástico y cuentan con un borde cromado. Tampoco faltan los catadióptricos, la cámara de marcha atrás y los sensores de aparcamiento posteriores. Hay disponibles adicionalmente un paquete de aparcamiento con ayuda activa -824€- y un paquete de aparcamiento con cámara de 360° -566€-.
Diseño interior
La auténtica revolución del nuevo Clase B llega en el interior, donde la tecnología se ha apoderado del salpicadero. El habitáculo propone una nueva definición del vanguardismo y la modernidad y una de las claves de la singular arquitectura es la configuración del tablero de instrumentos.
En términos de calidad, ya sabéis que últimamente se ha criticado a la firma de la estrella por la ausencia de materiales y acabados premium, pero en esta nueva generación del monovolumen mejora bastante este aspecto, con una parte superior totalmente forrada y un tacto de los materiales y los botones más agradable.
En las partes bajas se mantienen los plásticos rígidos, al tiempo que se abusa del odioso y poco práctico Piano Black, muy sucio y tendente a los arañazos. Por su parte, la iluminación de ambiente cuenta con una gama de 64 tonalidades diferentes, con una acentuación de los aspectos emotivos de la iluminación, creando así un nuevo referente en este segmento.
Para las palancas ubicadas tras el volante o los elevalunas se podría haber empleado un plástico de mejor aspecto. Además, en el interior se ve la chapa en los marcos de las puertas.
Mejoran también los ajustes y, sobre todo, la sensación visual de calidad, pudiéndose optar por un total de 11 tapicerías y tres opciones de molduras que incrementan el empaque. A pesar de ello, en la consola central y el salpicadero aún quedan algunos elementos que es fácil mover en bloque con una mano sin hacer excesiva fuerza.
Con todo y con eso, me ha gustado el nuevo Clase B porque mejora en todos los puntos del habitáculo. Una vez en el puesto de conducción, situado en una posición baja, las manos se posan en un volante de tacto y grosor agradable que cuenta con todos los controles necesarios para utilizar ambas pantallas del salpicadero. Puede ser calefactado -220€-.
No soy muy fan de su nuevo diseño, especialmente en esta unidad que lleva los detalles en negro, pero resulta muy práctico y eso ya es cuestión de gustos. Tras este encontramos la pantalla de la instrumentación con infinitas posibilidades de personalización y también está disponible el Head Up Display -1.245€-.
Las pantallas son extremadamente personalizables y están disponible en tres dimensiones. En este caso vemos el más completo con dos visualizadores de 10,25 pulgadas -566€-. Además, en la nueva Clase B también está disponible el innovador sistema multimedia MBUX, que abre una nueva era en Mercedes me Connectivity.
Una característica única de este sistema es su capacidad de aprender gracias a la inteligencia artificial, de forma que MBUX puede personalizarse y adaptarse al usuario. Es potente, accesible, conectado y más intuitivo que nunca, gracias esencialmente al uso del brillante sistema de reconocimiento de voz natural que indudablemente es el mejor del mercado.
Está conectado a la nube constantemente e incluso reconoce expresiones comunes, lo que lo convierte en un sistema sensacional. Entre las novedades no faltan una nueva interfaz de diseño sencillo y vistoso, un asistente personal capaz de aprender de nuestros gustos y órdenes o una pantalla táctil capacitiva capaz de permitirnos interactuar con ella como la de un smartphone.
Por otra parte, con la nueva generación del sistema de infoentretenimiento MBUX se inicia también una serie de servicios nuevos y mejorados que van más allá, como la posibilidad de compartir tu coche entre particulares -69€- o las funciones de navegación basadas en la comunicación Car-to-X.
Esto hace referencia a la información transmitida de un vehículo a otro sobre circunstancias registradas por los sensores, como una frenada de emergencia o comunicaciones manuales del sistema transmitidas por el conductor como un accidente.
Las salidas de aire redondas y la tira de botones para las funciones de climatización -entre otros- le dan un toque visual muy acertado.
Tampoco faltan la localización del vehículo, la localización de plazas de aparcamiento incluso en la calle y una alerta en caso de que el vehículo haya sido golpeado o remolcado mientras está aparcado. Como veis, un sistema de lo más completo, aunque personalmente tendría un poco de miedo a que mi coche sepa tanto sobre mí y me escuche constantemente.
En términos de habitabilidad, la nueva Clase B ofrece una utilidad notablemente mayor. Mejoran todas las cotas y cuenta con un acceso más sencillo a la parte trasera. Atrás viajarán muy cómodos dos adultos, pero la plaza central queda restringida a un uso esporádico por las clásicas limitaciones de anchura, espacio para las piernas y mullido.
Por otra parte, en los asientos se incorporan equipos de confort de los segmentos de gama alta: para las plazas delanteras se ofrecen opcionalmente, además de los ajustes eléctricos y la memoria -478€ conductor y 396€ acompañante-, la calefacción -402€-, la climatización -830€-, el apoyo lumbar -214€- y el paquete de asientos multicontorno con función de masaje -817€-.
En la nueva Clase B se puede elegir entre tres tipos diferentes de asientos delanteros: junto al modelo básico, se ofrece el asiento de confort (cómodos, pero con un agarre limitado, sobre todo en la banqueta), así como el asiento deportivo -327€-. Estos últimos no integran los reposacabezas como en el Clase A, lo cuál me parece más cómodo.
El maletero tiene una capacidad de 445 litros (1.530 litros con los asientos abatidos -40:20:40-), por lo que es menor (20 litros) que en su predecesor y que en sus rivales. Los asientos traseros pueden regularse longitudinalmente en 14 centímetros -465€-, con lo que ganamos un maletero de hasta 705 litros. El borde de carga queda a 650 mm del suelo.
Las formas son regulares, pero he echado en falta la presencia de más anclajes para sujetar la carga. Opcionalmente, es posible colocar los respaldos traseros en varias posiciones, así como abatir el asiento del acompañante -207€-. El piso tiene dos posiciones y un doble fondo, mientras que el portón puede contar con accionamiento eléctrico.
Motorización
La gama mecánica del Mercedes-Benz Clase B es todavía reducida, pero se irá ampliando. Podemos ver tres opciones de gasolina y otras tres versiones diésel. En gasolina, la oferta parte con el B 180 de 136 CV (100 kW), que puede estar asociado al cambio manual de seis relaciones o a la caja automática de siete velocidades (7G-DCT).
En un escalón superior encontramos el B 200 de 163 CV (120 kW), por ahora solo con cambio manual de seis relaciones. Le sigue el B 220 con 190 CV (140 kW) que únicamente puede pedirse con el cambio automático de siete relaciones (7G-DCT) y la tracción total 4MATIC. Las versiones más sencillas tienen tracción delantera.
En comparación con su antecesor, el nuevo Clase B equipa mecánicas homologadas bajo la normativa Euro 6d-TEMP.
La oferta diésel arranca con el B 180 d con 116 CV (85 kW), seguido del B 200 d con 150 CV (110 kW) y el B 220 d de 190 CV (140 kW). Todos ellos tienen tracción al eje delantero y están asociados a un cambio automático, aunque en el caso de la versión de acceso tiene siete relaciones (7G-DCT) y en los dos más potentes, ocho (8G-DCT).
En esta gama celebra su debut una versión adaptada para el montaje en posición transversal de la familia de motores diésel de dos litros OM 654 con 110 kW y 140 kW, bloque motor de aluminio y procedimiento de combustión con pistones de cavidad escalonada, que es el que he elegido para la prueba.
Se trata de un bloque con dos árboles de levas en la culata, turbo, inyección directa por conducto común, geometría variable e intercooler que, con 1.950 cm3 y cuatro válvulas, desarrolla una potencia de 150 CV (110 kW) entre las 3.400 y las 4.400 rpm, todo ello asociado a un par máximo de 320 Nm entre las 1.400 y las 3.200 vueltas.
Este motor cumple con la normativa Euro 6d que entrará en vigor en 2020, más exigente que la Euro 6d-TEMP.
Gracias a ello, ofrece unas recuperaciones notables y, asociado al cambio automático 8G-DCT, resulta tremendamente elástico. Si bien no es una mecánica prestacional, sí que me ha parecido muy equilibrada y, probablemente, la mejor opción entre los diésel si no necesitamos altas dosis de potencia ni viajamos excesivamente cargados.
A algunos usuarios, los 116 CV del B 180 d podrían quedárseles algo justos si van a aprovechar todas las capacidades del vehículo en viajes largos, especialmente aquellos donde podamos encontrarnos pendientes empinadas. Además, con el cambio de ocho relaciones, el B 200 d va más desahogado en autopista, girando el motor a solo 1.700 rpm a 120 km/h (en D8).
Por otra parte, se siente ágil cuando requerimos acelerar enérgicamente para adelantar, con una respuesta al acelerador bastante rápida en cualquier modo de conducción. En cifras, hablamos de un 0 a 100 km/h en 8,3 segundos, recuperando de 80 a 120 km/h en 6,6 segundos (entre marchas) y alcanzando una velocidad máxima de 219 km/h.
La única pega que le he encontrado a este motor es su sonoridad y vibraciones para tratarse de una mecánica de nuevo desarrollo. Si bien no son molestas porque llegan muy filtradas, no es un motor diésel tan suave como el de algunos modelos de la competencia y dista bastante del refinamiento de las mecánicas de gasolina que ofrece la gama.
Cuando activamos el modo de conducción ECO, el motor tiene la función de avance por inercia.
Sus buenas prestaciones se complementan con cuatro modos de conducción que modifican diversos parámetros del vehículo, como la respuesta al acelerador, la dureza de la dirección… Estos son los Comfort, Sport, Eco e Individual. Además, la diferencia entre ellos es palpable, especialmente en el modo Sport.
Respecto a los consumos, es extremadamente poco tragón. La marca homologa entre 5.1 y 5.5 litros a los 100 kilómetros en ciclo combinado según el procedimiento WLTP. En una conducción real ha rondado los 7.0 litros en ciudad y los 4.0 litros en carretera, incluso ha llegado a marcar consumos medios de solo 3.7 l/100 km en autopista.
El consumo medio se detuvo en unos más que sobresalientes 5.1 litros a los 100 km tras la semana de pruebas, donde tuve la oportunidad de rodar unos 700 kilómetros. El depósito de combustible tiene una capacidad de 43 litros, salvo en los B 220 d y B 200 4MATIC que es de 51 litros, lo que incrementa la autonomía.
Respecto al cambio automático de doble embrague y ocho velocidades, este se muestra tan suave y rápido como es habitual en la marca subiendo de marcha en el entorno de las 1.800 rpm cuando circulamos tranquilos. Me ha gustado la rapidez del cambio cuando jugamos con las levas, pero la palanca del cambio podría ser de un plástico más vistoso.
Ficha técnica
Version | B 200 d - 4 cilindros en línea |
---|---|
Cilindrada | 1.950 cm³ |
Potencia | 150 CV (110 kW) @ 3.400 - 4.400 rpm |
Par | 320 Nm @ 1.400 - 3.200 rpm |
Peso | 1.535 kilos |
Dimensiones Lar/An/Al mm | 4.419 / 1.796 / 1.562 mm |
Volumen Maletero | 445 [705 banqueta deslizable] (1.530) litros |
Aceleración 0 a 100 km/h | 8,3 segundos |
Recuperación 80 a 120 km/h | 6,6 segundos |
Velocidad máxima | 219 km/h |
Consumo homologado | 5,5 - 5,1 l/100 km (combinado WLTP) |
Emisiones CO2 por km | 115 g/km de CO₂ (Euro 6d) |
Precio de partida | 34.775 euros (este motor y acabado sin descuentos) |
Comportamiento
A nivel dinámico, el Mercedes-Benz Clase B es muy similar al Clase A, aunque está más enfocado al confort de los pasajeros en lugar de ofrecer un tacto dinámico. Por ejemplo, la altura libre al suelo de la carrocería es la misma que la del compacto, pero nuestra postura de conducción es más elevada porque el asiento va ubicado más alto.
Esto hace que llevemos una postura de conducción más vertical, pero para nada incómoda. Además, los múltiples ajustes de los asientos nos permiten encontrar rápidamente la postura óptima, especialmente en aquellas unidades más equipadas. Por otra parte, cabe destacar la visibilidad en todos los ángulos, sobre todo a través de la generosa luna delantera.
A pesar de poder equipar múltiples asistentes a la conducción, es de agradecer la buena visibilidad para maniobrar en ciudad, lo que se complementa con unas medidas ajustadas y un diámetro de giro que se detiene en 11 metros entre paredes. Destaca también en la urbe el asistente de frenado activo con funciones ampliadas.
Es importante señalar que dicho asistente es de serie y, en función de la situación, este equipo puede ayudar eficazmente a evitar una colisión por alcance con vehículos precedentes que circulan a menor velocidad o están parados, e incluso con peatones o ciclistas que atraviesan la calzada, o al menos a reducir las consecuencias de un accidente.
En materia de confort, es reseñable su comportamiento suave y exento de vibraciones (salvo las mencionadas del motor) durante la conducción, con una calidad de rodadura muy buena y una insonorización mejorada. Se ha logrado un mayor aislamiento acústico a bordo que no te costará apreciar en autopista o al atravesar zonas urbanas con mayor ajetreo.
En conjunto, el tren de rodaje del nuevo Clase B conserva la agilidad del modelo predecesor, aumentando al mismo tiempo el nivel de confort. En función del modelo y de la configuración básica es posible elegir entre varias opciones, entre ellas un tren de rodaje de confort de altura rebajada y un tren de rodaje con amortiguación adaptativa.
La suspensión delantera es de tipo McPherson y cuenta con un brazo transversal de aluminio forjado, al que se sujetan manguetas de fundición de aluminio. En la parte trasera, los modelos con el motor básico incorporan de serie un eje de brazos combinados, mientras que las versiones de mayor potencia equipan un eje trasero de cuatro brazos.
Este está fabricado en gran parte en aluminio para reducir el peso e incrementar la rigidez. También encontraremos este esquema si optamos por el mencionado tren de rodaje de confort de altura rebajada en 15 mm, el cual cuenta con muelles y amortiguadores adaptados que aseguran un comportamiento algo más deportivo.
La verdad es que la puesta a punto alcanza muy buen equilibrio entre confort y firmeza, filtrando adecuadamente las irregularidades, aunque tiene cierta tendencia hacia la dureza. Opcionalmente, hay un tren de rodaje multilink posterior con amortiguación activa regulable -1.370€- que mejora la filtración.
Otro aspecto para destacar es la dirección de asistencia eléctrica, la cual también ha sido optimizada en el nuevo modelo. En conjunto, no solo permite una mayor comodidad en autopista, sino que también mejora su comportamiento en curvas algo más lentas y a la hora de maniobrar gracias a su asistencia en función de la velocidad.
La dirección guía con mayor precisión las ruedas y goza de suficiente rapidez para que podamos enlazar curvas con cierta agilidad, pero no es muy informativa y, cuando aumentamos el ritmo, llega un momento en el que no tenemos muy claro lo que ocurre en el eje delantero. En todo caso, siempre encontraremos reacciones seguras.
En mi humilde opción, el Clase B ha perdido cierta sensación de aplomo en el paso por curva a pesar de que los balanceos están mejor contenidos, algo que se agradece en un vehículo de corte familiar, pero es justo señalar que, en este aspecto, un BMW Serie 2 Active Tourer es más ágil y nos permite compenetrarnos más con la conducción.
Por último, hay que mencionar que el Clase B equipa opcionalmente los sistemas de asistencia a la conducción más avanzados -2.496€-, que actúan en cooperación con el conductor. Gracias a ello ofrece el nivel más alto de seguridad activa en su segmento, además de algunas funciones reservadas hasta ahora a la Clase S.
Al mismo tiempo, utiliza los datos de los mapas de carreteras y de navegación para las funciones de asistencia. De ese modo, el asistente activo de distancia DISTRONIC, puede ayudar al conductor en muchas situaciones y adaptar cómodamente la velocidad del vehículo, por ejemplo, en curvas, cruces o rotondas, en función del trazado de la ruta prevista.
A ello se añaden el asistente activo de parada de emergencia y un asistente activo para cambio de carril de funcionamiento muy intuitivo, aunque bastante intrusivo de serie, pues actúa sobre el ESP -frenando las ruedas- en lugar de sobre la dirección.
Equipamiento y precio
En el nuevo Mercedes-Benz Clase B, el equipamiento de serie para España contempla la alerta de cambio de carril involuntaria, sensor de lluvia, arranque por botón, selector de modos de conducción, lector de señales de tráfico, faros Full LED, pilotos traseros LEDs, parrilla efecto diamante, llantas de aleación de 17 pulgadas y faldones laterales en color carrocería.
También de serie son el climatizador de dos zonas, pack iluminación interior, tapizado mixto tela/piel, banqueta posterior abatible en tres partes, portón trasero automático con EASY-PACK, línea Progressive, función de Car Sharing , freno de mano eléctrico, cámara de marcha atrás, ordenador de viaje, encendido automático de luces y cuatro elevalunas eléctricos.
Adicionalmente hay toda una serie de paquetes opcionales y un extenso listado de extras para que cada cliente pueda equipar el monovolumen compacto a su gusto, pero es importante tener en cuenta que la gran mayoría tienen un precio elevado y pueden incrementar la factura hasta límites insospechados.
Adicionalmente, la firma de la estrella ofrece varios niveles de acabado para el nuevo Clase B, los denominados Style, Progressive, AMG Line y Edition 1 (este último durante el primer año de comercialización, más o menos).
Los precios recomendados en España para el nuevo Mercedes-Benz Clase B sin descuentos ni promociones son los siguientes:
Modelo | Potencia | Precio |
B 180 6MT | 136 CV (100 kW) | 32.025€ |
B 180 7G-DCT | 136 CV (100 kW) | 33.375€ |
B 200 6MT | 163 CV (120 kW) | 35.650€ |
B 200 7G-DCT | 163 CV (120 kW) | 37.907€ |
B 220 7G-DCT 4MATIC | 190 CV (140 kW) | 43.625€ |
B 180 d 6MT | 116 CV (85 kW) | 32.025€ |
B 180 d 7G-DCT | 116 CV (85 kW) | 34.197€ |
B 200 d 8G-DCT | 150 CV (110 kW) | 34.775€ |
B 220 d 8G-DCT | 190 CV (140 kW) | 41.850€ |
- Consumos sobresalientes.
- Prestaciones más que suficientes para la mayoría de los usuarios.
- El interior es atractivo, ergonómico y muy vistoso.
- Fuerte carga tecnológica, especialmente en materia de asistencia a la conducción, con sistemas propios de segmentos más altos como la conducción autónoma.
- Confort mejorado y buena calidad de rodadura.
- La fluidez, la interfaz y el funcionamiento del sistema MBUX es sensacional, al igual que el del sistema de reconocimiento de voz natural, inmejorable.
- Touchpad, faros LED y algunos asistentes interesantes de serie.
- Precio de partida bastante elevado sin los descuentos.
- Precio desorbitado de algunos opcionales.
- A pesar de la buena sensación visual y al tacto, algunos ajustes y plásticos (palanca de cambios, elevalunas…) no son dignos de un modelo premium. Aun así, el salto de calidad es muy notable.
- Abuso del Piano Black y de las pantallas: son sucios, provocan reflejos, son sensibles a los rasguños y parecen atraer al polvo constantemente.
- Las tomas USB son USB-C, lo que obliga a la mayoría de usuarios a tener un adaptador.
- No ofrece versión de siete plazas como sí que ocurre en el caso del BMW Serie 2 Grand Tourer y el Volkswagen Golf Sportsvan.
- Menor maletero que sus rivales directos y que su predecesor.
- Plazas traseras sin elementos de confort como calefacción o regulación de temperatura (tampoco en el BMW o el Volkswagen).