Diseño/Estética
Calidad de acabado
Equipamiento de serie
Equipamiento opcional
Habitabilidad
Maletero
Motor/Refinamiento
Prestaciones
Consumos
Transmisión
Dirección
Frenos y neumáticos
Comportamiento
Calidad de rodadura
Relación valor-precio
7.4
Notable
El nuevo Nissan Juke cuenta con numerosas mejoras frente a su predecesor. Más allá del diseño, es más grande, espacioso, confortable y tecnológico, convirtiéndose en una alternativa más racional y lógica que el modelo al que sucede. Disponible con un solo motor de gasolina, ofrece buen equipamiento a un precio razonable y caja manual o automática, pero siempre con tracción delantera.
Tras nueve años de éxitos, el fabricante japonés nos presentó en 2019 la nueva entrega del Nissan Juke. Algo más grande que el anterior, este pequeño crossover de diseño exótico se muestra mucho más maduro, asegurando que guste a un mayor número de personas que el anterior. Emplea la misma plataforma modular del Renault Captur, denominada CMF-B.
La evolución del Juke es evidente en todos los aspectos, incluyendo un interior mucho más atractivo y, sobre todo, de mejor calidad (aunque sigue sin destacar en este aspecto), algo que «pedía a gritos» la anterior generación. Otro punto en el que mejora es la habitabilidad, incluyendo el maletero que ahora parte de unos buenos 422 litros de capacidad.
Como buen Juke las posibilidades de personalización son enormes y los clientes pueden adquirir una unidad completamente a su gusto, tanto en el exterior como en el habitáculo, aunque casi siempre con tonos llamativos y juveniles, como los que podemos encontrar en esta unidad de pruebas. La única pega es que solo se ofrece con un motor gasolina.
Como hasta ahora, se fabrica en Sunderland, Reino Unido. Por precio, es una de las alternativas más interesantes. Algunos rivales directos del Nissan Juke son el Peugeot 2008, el Škoda Kamiq, el Mazda CX-3, el SEAT Arona, el Kia Stonic, el Citroën C3 Aircross, el Hyundai Kona, el Volkswagen T-Cross, el Suzuki Vitara, el Jeep Renegade o el Ford Puma.
Diseño exterior
Si bien el Nissan Juke sigue siendo fácilmente reconocible desde el primer vistazo, basta con darse un paseo por la galería de imágenes para comprobar que la evolución ha sido fantástica. Esta generación supone un cambio importante en el modelo para atraer a un mayor volumen de público, aumentando a su vez la longitud, la altura y la anchura para ganar espacio interior.
En la vista frontal destaca la confluencia de todas las líneas hacia el logo -ubicado en posición central-, formando una ‘V’ claramente diferenciada. Los detalles cromados se complementan a la perfección con el marcado paragolpes y los clásicos faros divididos, que dan lugar a una firma lumínica única. En este acabado son Full LED con asistente de luces largas/cortas.
Los sensores de aparcamientos delanteros y la cámara 360º (Pack Technology con ProPILOT) son opcionales.
La entrada de aire inferior queda integrada en el paragolpes, entre los faros antiniebla delanteros y los embellecedores. Bajo esta encontramos una protección plástica que le da un toque robusto al conjunto. En el extremo opuesto, la luna mantiene unas dimensiones contenidas, empeorando en algunas ocasiones la visibilidad a causa del espejo interior.
La vista lateral está protagonizada por una superficie acristalada algo justa -con los cristales posteriores oscurecidos- y unos marcados nervios que parecen avanzar dinámicamente hacia la zaga, mandando gran fuerza visual a la parte trasera. La superficie de las puertas es limpia en su gran mayoría, salvo por el embellecedor plástico inferior a contraste.
Los espejos retrovisores integran los intermitentes y cuentan con una base en color negro a contraste con el marco de las ventanillas y el pilar C, algo grueso y con los tiradores traseros integrados. Llenando los pasos de rueda encontramos unas llantas de aleación de 19 pulgadas calzadas con unos neumáticos Hankook Ventus S1 evo3 en dimensiones 225/45 R19 96W.
Visto de lado, se mantiene compacto pese a haber crecido, pues sus medidas alcanzan los 4,21 metros de largo (+7,5 cm), 1,80 metros de ancho (+3,5 cm) y 1,60 metros de alto (+3 cm), unas cotas en la línea de sus competidores. La batalla mide 2.636 mm, lo que supone una ganancia de nada menos que 10,6 centímetros. Además, es 23 kg más ligero.
En la zaga la horizontalidad está presente, con un generoso portón que corta las ópticas LED posteriores. Llaman la atención elementos como el sutil spoiler superior con la tercera luz de freno y aletines en negro o el embellecedor plástico inferior que hace las veces de paragolpes. La salida de escape queda oculta y no faltan la cámara y la tira de sensores de aparcamiento.
Diseño interior
En cuanto al habitáculo, el salpicadero se ha rediseñado por completo, compartiendo algunos elementos con el Micra. En esta generación, el Juke añade materiales más cuidados, pero conserva la lógica ubicación de todos los mandos y la completa instrumentación analógica. Como se puede ver, el acabado bitono también se puede trasladar al interior.
El salto de calidad es notable, aunque la presencia de plásticos duros es inevitable en el segmento. El impacto visual y el tacto de los materiales resultan agradables en su conjunto, pero se ha abusado del tedioso negro brillante y los ajustes necesitan una vuelta de tuerca, ya que no es difícil oír crujidos al presionar o al circular sobre firmes en peor estado.
En cualquier caso, se nota que Nissan ha puesto esmero en la realización y el diseño del modelo, con un aumento de equipamiento del que luego hablaremos y elementos muy atractivos como el nuevo volante multifunción -regulable en altura y profundidad, lo que facilita encontrar la postura óptima- que también equipan otros modelos de la marca.
Respecto a los asientos en piel con el reposacabezas integrado, estos son igual de vistosos por su aspecto deportivo y cómodos tanto en textura como en mullido, mostrando un buen agarre lateral, más que suficiente para la mayor parte del uso del Juke. Con el Pack BOSE opcional de ocho altavoces encontramos altavoces en los reposacabezas de los asientos delanteros.
Tras el volante encontramos una instrumentación de lectura clara que se mantiene analógica, salvo por la pantalla central de 7” que nos aporta una información limitada y cuyo manejo resulta sencillo. Por su parte, el salpicadero queda presidido por una pantalla multimedia de ocho pulgadas cuyo manejo es simplemente adecuado, presentando algunas carencias.
Si bien es compatible con Android Auto y Apple CarPlay, cuenta con una respuesta táctil algo lenta y unos gráficos anticuados en comparación con sus rivales más directos. Además, no resulta todo lo intuitivo que nos gustaría en muchas ocasiones. En el Nissan Juke no podemos equipar una superficie de recarga inalámbrica para teléfonos móviles.
El climatizador es en todos los casos monozona y resulta muy sencillo de utilizar. En este acabado tenemos adicionalmente asientos delanteros calefactables. Bajo este hay un hueco portaobjetos con base de goma justo antes del botón de arranque y de la palanca de cambios. Les siguen los posavasos y un reposabrazos central fijo que alberga una pequeña guantera.
Respecto a la habitabilidad, las plazas delanteras son realmente cómodas y amplias, con un cómodo acceso y una postura de conducción sencilla de encontrar. Atrás, el acceso es también cómodo por el tamaño y grado de apertura de las puertas, ofreciendo a su vez un mayor espacio para las piernas y la cabeza que su predecesor.
Una iluminación LED interior le aportaría un plus de calidad.
Atrás pueden montar hasta tres ocupantes, aunque lo recomendable es que solo viajen dos personas si el trayecto es medio o largo. La altura al techo no es excesiva para alguien de más de 1,75 metros, al tiempo que la sensación es algo angosta con los cristales tintados por el tamaño de las ventanillas. Los cinturones delanteros son regulables en altura.
El nuevo Juke ofrece un maletero de 422 litros (un valor bueno en el segmento), aunque si abatimos los asientos -60:40- el volumen asciende a 1.088 litros. Ofrece unas formas muy regulares, ganchos y una bandeja que lo divide en dos alturas. Bajo el piso del maletero puede equiparse una rueda de emergencia y el borde de carga queda a 770 mm del suelo.
Motorización
Una de las principales pegas que podemos sacarle al Nissan Juke frente a su competencia directa es que solo esté disponible con un motor tricilíndrico de gasolina con 117 CV de potencia. Si bien se trata de una opción racional que mueve con soltura el vehículo, la mayoría de los modelos comparables ofrece un mayor abanico de mecánicas disponibles.
Se ofrece siempre con tracción delantera, algo habitual en este segmento, y la firma nipona nos da la opción de optar por una caja automática o por una transmisión manual de seis relaciones que, a mi parecer, por tacto de conducción y por las prestaciones que nos permite extraer del motor, es la opción más acertada para el Juke.
Más concretamente, este motor fabricado en aluminio con 999 cm3 de cilindrada, inyección directa, turbo, intercooler y Start/Stop desarrolla una potencia total de 117 CV (86 kW) a 5.250 rpm y un par máximo de 200 Nm entre las 1.750 y las 3.750 vueltas. Además, el par máximo se obtiene durante un máximo de 25 segundos gracias a la función Over Torque.
Ésta se activa cuando, al llevar seleccionada la segunda marcha o una superior, pisamos el acelerador a fondo. Con ello, el conjunto se muestra solvente en la mayoría de las situaciones, siendo capaz de mantener velocidades de crucero en autopista sin necesidad de reducir marchas, salvo que nos enfrentemos a pendientes pronunciadas yendo cargados.
Por el contrario, en maniobras rápidas, como al adelantar en carreteras secundarias, esta mecánica requiere que circulemos a un régimen elevado para extraer todo su potencial, ya que tanto a bajo régimen como en marchas largas la respuesta es más bien tímida. Además, al ralentí y por debajo de 2.000 rpm las vibraciones son palpables en el habitáculo.
También es a partir de este régimen cuando el motor empieza a entregar su verdadero empuje, sin prejuicio de que sea capaz de recuperar desde más abajo. Para que os hagáis una idea, el Juke con caja manual declara un 0 a 100 km/h en 10,4 segundos, una velocidad máxima de 180 km/h y una recuperación de 80 a 120 km/h en 10,6 segundos en 4ª velocidad.
Para variar la respuesta del tren motriz encontramos tres modos de conducción: Eco, Standard y Sport, produciéndose el salto más notable en respuesta del acelerador entre los Eco y Sport. En cualquier caso, la cifra de potencia no es tan elevada como para apreciar grandes diferencias, ni como para obtener una respuesta realmente deportiva en Sport.
Respecto al refinamiento del conjunto, es justo señalar que Nissan ha trabajado bien el aislamiento y no se trata de una de las mecánicas de tres cilindros más ruidosas y molestas del mercado, aunque siempre haya un margen de mejora en este sentido. Incluso en aceleraciones fuertes la sonoridad del motor se muestra contenida en el habitáculo.
Me ha gustado especialmente el cambio manual de seis relaciones, que es muy cómodo de utilizar tanto por el tacto de la palanca como por el del embrague. El escalonamiento es bueno, el guiado está bien marcado y los recorridos son acertados en su conjunto. Si tuviera que sacarle alguna pega sería la longitud de la palanca de cambios y su ligera holgura.
Respecto a los consumos, Nissan declara 6.2 l/100 km en ciclo combinado. Sin embargo, en una conducción real por carretera (en sexta), la cifra fue de 7.4 litros. Esto representa casi un litro más a los 100 km que, por ejemplo, el Ford Puma 1.0 EcoBoost MHEV de 155 CV que probé recientemente; o solo 0,2 l/100 km menos que un Mercedes-AMG A 45 S 4MATIC+.
Circulando a 120 km/h, el motor gira a 2.700 rpm en sexta velocidad.
En los tres casos el recorrido (Madrid-Torrelavega), la velocidad de crucero (120 km/h reales) y la carga (una persona con un bulto) fueron los mismos, por lo que me parece un coche bastante tragón. En ciudad sube hasta los 9.0 litros si circulamos a un ritmo tranquilo y, tras la semana de pruebas, la media se detuvo en 7.9 l/100 km. El depósito es de 46 litros.
Ficha técnica
Version | DIG-T - 3 cilindros en línea |
---|---|
Cilindrada | 999 cm³ |
Potencia | 117 CV (86 kW) @ 5.250 rpm |
Par | 200 Nm @ 1.750 - 3.750 rpm |
Peso | 1.182 kilos |
Dimensiones Lar/An/Al mm | 4.210 / 1.800 /1.595 mm |
Volumen Maletero | 422 (1.088) litros |
Aceleración 0 a 100 km/h | 10,4 segundos |
Recuperación 80 a 120 km/h | 10,6 segundos (en 4ª) |
Velocidad máxima | 180 km/h |
Consumo homologado | 6,2 / 7,4 - 5,7 - 5,3 - 6,9 l/100 km (Comb. / vel. baja - media - alta - muy alta) |
Emisiones CO2 por km | 141 g/km de CO₂ (Euro 6) |
Precio de partida | 25.550 euros (este motor y acabado sin descuentos ni extras) |
Comportamiento
Es en el apartado dinámico donde el nuevo Juke puede terminar de convencerte, ya que encontramos una conducción similar a la de un turismo. Ha mejorado notablemente en comodidad, aunque es cierto que sigue sin destacar en este aspecto; mientras que en tramos de curvas nos transmite una gran confianza desde el primer momento.
Esto es así porque el conjunto de suspensiones -McPherson delantera y eje de torsión trasero- sigue mostrando un tarado más bien firme, lo que se traduce en una agilidad notable a la hora de negociar curvas, con balanceos contenidos y cambios rápidos de trayectoria; pero también en un confort que se ve comprometido al circular por tramos de carretera en mal estado.
El aislamiento en carretera es bueno, aunque el ruido aerodinámico es elevado y perceptible.
Si bien filtra de manera adecuada las imperfecciones del asfalto, hay opciones más confortables en el mercado, como un SEAT Arona o un Škoda Kamiq. Por el contrario, es difícil encontrar rivales más ágiles y precisos en tramos revirados, destacando en este aspecto junto al Ford Puma, al cuál supera en algunos aspectos como el tacto de la dirección.
El Nissan Juke equipa una dirección con asistencia en función de la velocidad muy cómoda tanto para realizar maniobras en ciudad como para enlazar curvas con gran sensación de control. El tacto y la asistencia destacan por naturalidad, resultando sencillo marcar y conocer el guiado de las ruedas delanteras. Además, los asistentes no resultan muy intrusivos.
En ciudad, la mayor pega es la visibilidad, con una luna delantera estrecha y curva, pilares C demasiado gruesos y una luna posterior limitada que no nos permiten hacernos una idea real de los límites del vehículo. En cualquier caso, los sensores y las cámaras solventan estos inconvenientes, al tiempo que ofrece un buen diámetro de giro (11 metros entre paredes).
El equipo de frenos se compone de discos ventilados de 280 mm de diámetro en el eje delantero y discos macizos de 260 mm en el eje trasero (equipa tambor en los más básicos). Su funcionamiento es más que adecuado, con buena resistencia a la fatiga, un tacto correcto del pedal y gran efectividad incluso cuando le pedimos un esfuerzo adicional.
Respecto a las asistencias a la conducción y de seguridad, podemos contar con ProPILOT (programador de velocidad activo y sistema de mantenimiento de carril), avisador de ángulo muerto, lector de señales de tráfico, asistente al arranque en cuestas, frenada de emergencia con detección de peatones y ciclistas, limitador de velocidad…
Equipamiento y precio
En nuestro mercado, los niveles de acabado del nuevo Nissan Juke se denominan Acenta, N-Connecta, N-Design (Active o Chic) y Tekna. El modelo de acceso cuenta de serie con faros LED, lector de señales de tráfico, detector de peatones, múltiples airbags, asistente al arranque en cuestas, control y limitador de velocidad y asistente de luces cortas y largas.
Otros elementos de serie son el aire acondicionado, sensor de presión de los neumáticos, anclajes ISOFIX, cuatro elevalunas eléctricos, llantas de 17 pulgadas, sensores y cámara traseros, asientos deportivos, sistema multimedia con pantalla de 8 pulgadas, Apple CarPlay, Android Auto y DAB, bluetooth, puerto USB, volante multifunción, asiento posterior partido…
La terminación N-Connecta suma llantas de aleación específicas, cristales tintados, freno de mano eléctrico, climatizador automático, sensor de lluvia, retrovisores plegables, tomas USB traseras, espejo interior fotosensible, pantalla de siete pulgadas a color en instrumentación, etc.
El N-Design añade las llantas de 19”, carrocería bitono, ambientes diferentes para el interior y tapicería en piel, entre otros. Por último, el Tekna cuenta con detector de fatiga, alerta de objetos en ángulo muerto marcha atrás, Nissan ProPilot para cambio EDC, cámara 360º, asientos calefactables, acceso y arranque sin llave, control de crucero adaptativo…
En España, los precios recomendados de toda la gama Nissan Juke 2020 sin descuentos ni promociones quedan de la siguiente manera:
Motor | Acenta | N-Connecta | N-Design | Tekna |
1.0 DIG-T 117 CV 6MT | 21.300 € | 22.850 € | 25.550 € | 25.000 € |
1.0 DIG-T 117 CV 7EDC | 22.900 € | 24.450 € | 27.150 € | 26.700 € |
- Múltiples opciones de personalización.
- Aumento del espacio interior.
- Calidad y ajustes mejorados, pero también mejorables.
- Buen maletero.
- Comportamiento dinámico, excelente dirección.
- Tacto del cambio manual. La mejor opción.
- Sistema de infoentretenimiento algo desfasado frente a la competencia.
- Visibilidad desde el interior algo limitada.
- Plazas traseras poco luminosas.
- Ligeras lagunas de equipamiento frente a sus rivales.
- Un único motor disponible.
- Consumos elevados.