Diseño/Estética
Calidad de acabado
Equipamiento de serie
Equipamiento opcional
Habitabilidad
Maletero
Motor/Refinamiento
Prestaciones
Consumos
Transmisión
Dirección
Frenos y neumáticos
Comportamiento
Calidad de rodadura
Relación valor-precio
7.1
Notable
Sin duda alguna estamos ante uno de los pocos 4x4 de verdad que quedan en el mercado. Se trata de una auténtica declaración de intenciones por parte de Suzuki así como de una apuesta hacia un mercado que prácticamente ha olvidado modelos tan necesarios como este nuevo Suzuki Jimny, un vehículo del que nos hemos enamorado.
Con el paso de los años y tras haber probado centenares de coches cada vez se refuerza más la teoría de que «menos siempre es más». Con un peso ligero, un sistema de tracción total inteligente y una estética que muchos comparan con la del Mercedes-Benz Clase G -a escala- (curiosamente algún preparador ofrece la posibilidad de hacer que tu Suzuki Jimny se convierta en un «mini» Clase G), Suzuki nos ha mostrado la cuarta generación del Suzuki Jimny, un modelo que enamora desde todos los ángulos y que atrapa por una dinámica que a pesar de estar enfocada para ir fuera del asfalto, no dejará indiferente a los que busquen la aventura, lo que necesiten una máquina capaz de seguir cuando se acabe el camino o simplemente quieran dar un paso más y abandonar la moda SUV en busca de una máquina muy capaz.
Lo que más y lo que menos nos ha gustado del exterior
– El nuevo Suzuki Jimny ha sido creado para ser sencillo y tener una funcionalidad offroad mayúscula. El exterior cuenta con un diseño que subrayan la robustez gracias a unas líneas cuadradas y a unos ángulos muy pronunciados. Si nos fijamos en el nuevo Suzuki Jimny veremos que todo nos hace recordar a tiempos pasados. Cada punto de nuevo Suzuki Jimny ha sido creado para recordarnos el pasado del modelo y el pasado del mundo 4×4.
– La parrilla central es uno de los puntos fuertes del modelo. En nuestra unidad de pruebas contábamos con una opcional -accesorio- similar a la que montaban las anteriores generaciones del modelo. Con el nombre de la marca en posición central, el nuevo Suzuki Jimny parece tan robusto como es. A ambos lados de la parrilla pero sin abandonar la parte en color contraste encontramos unos grupos ópticos principales con tecnología LED -para cruce y carretera sólo disponible en Mode 3-. En los extremos encontraremos los indicadores de dirección en color naranja oscuro, algo que le da un toque muy retro al frontal. En la parte baja nos topamos con unos faros redondos con doble función -luz diurna y antiniebla-. La parte inferior del frontal es todo paragolpes. La parrilla central está escoltada por unos añadidos exteriores que montan los faros anteriormente citados y están recortados para mejorar el ángulo de ataque en la parte de los neumáticos. La parte central exhibe el portamatrículas y puede, de forma accesoria montar un embellecedor plateado en el protector de bajos.
– Las líneas angulosas se extienden por el capó hacia una luna delantera que brilla por su verticalidad y termina su extensión en un techo «completamente» plano. en color contraste -dependiendo del acabado-. Visto de perfil el modelo sigue siendo igual de robusto y «cuadrado». Los pasos de rueda son reforzados por unos protectores superiores en color contraste y la distancia entre la carrocería y el neumático manifiesta las intenciones offroad del modelo. La unidad probada equipaba un juego de llantas de aleación en color antracita -las llantas de aleación están presentes en el nuevo Suzki Jimny en el Mode 3, el resto equipa llantas de acero- con unos neumáticos Bridgestone Dueler H/T en dimensiones 195/80 R15 que nos ofrecían la posibilidad de salir del asfalto con total seguridad. Los protectores laterales en color plateado están presentes en la parte baja de las puertas. Los retrovisores con la carcasa a juego con el techo dan una visibilidad notable tanto dentro como fuera del asfalto.
– La vista trasera del modelo es la de un auténtico 4×4. El gran portón de acceso al maletero se abre de izquierda a derecha y monta la rueda de repuesto en el exterior -puede ser cubierta y protegida por varios accesorios opcionales-. En la parte posterior nuevamente destaca el paragolpes que remata la parte inferior e integra los pilotos posteriores a los extremos del portamatrículas. Llegados a este punto he de criticar un par de cosas. Por un lado me ha faltado un sistema de asistencia al estacionamiento ya sea mediante cámara o mediante sensores -el modelo no los monta de serie ni en opción en ningún acabado, tampoco forman parte del catálogo de opcionales. Soy consciente de la sencillez del modelo y de su enfoque pero hablamos de un vehículo que en su acabado más alto supera los 20.000 euros y no ofrece un equipo sencillo de montar y que en cierto modo es barato y puede resultar útil para las aventuras -sugerimos un sistema de cámaras 360 grados-. Por otro lado, el portón lo veo algo incómodo para el día a día. Vale, soy consciente de que no va a ser un modelo que veamos estacionado en los supermercados -o sí, nunca se sabe- pero la apertura del portón es incómoda y aunque práctica -debido a la gran boca de carga que revela- resultaría también útil la apertura individual de la luneta posterior para cargar objetos pequeños sin necesidad de un gran espacio para abrir el portón.
– Uno de los aspectos que más me ha gustado es que debido al diseño de un pilar A más elevado y un capó plano se ha mejorado la visibilidad notablemente, algo que se refuerza con una línea de cintura baja. Uno de los elementos realmente útiles del modelo son los vierteaguas con los que se previenen las entradas de agua en la cabina al abrir o cerrar las puertas.
– El modelo cuenta con una longitud de 3.480 mm (3.645 mm con rueda) , un ancho de 1.645 mm, una altura de 1.720 mm. La distancia entre ejes es de 2.250 mm mientras que el ancho de vías delantero es de 1.395 mm y el trasero es de 1.405 mm.
– La paleta de colores del nuevo Suzuki Jimny ofrece ocho colores entre los que destacan el Kinetic Yellow y el Verde Jungle. También están presentes el Azul Activo metalizado, el Marfil metalizado, el blanco superior, el gris oscuro o el plata seda metalizado.
Lo que más y lo que menos nos ha gustado del interior
– Sí, os confieso que el exterior del nuevo Suzuki Jimny me ha enamorado pero en el interior os confirmo que la cosa mejora. Todo ha sido creado para parecer retro pero el toque tecnológico delata su verdadero año de fabricación. Cuando nos subimos al Jimny nos damos cuenta de que estamos ante un vehículo único, una especie en peligro de extinción. La posición es alta y nos ofrece una visibilidad magnífica. Las manos se posan cómodamente en el volante, un viejo conocido de la actual gama Suzuki. Revestido en cuero y multifunción ofrece un manejo cómodo y muy intuitivo -el volante multifunción de cuero sólo está presente en el Mode 3, el resto equipa volante de uretano sin accesos-. Tras el volante nos topamos con un cuadro de instrumentos muy clásico con remaches decorativos que lo hacen más añejo pero con un toque muy moderno, el display monocromo central que nos da acceso a un montón de indicadores del vehículo actualiza la vista del conductor. La consola central está muy bien estructurada. En la posición superior tenemos el sistema de infoentretenimiento con navegación, conectividad, música -disponible en mode 3-. El modelo cuenta, en los acabados superiores con un módulo de climatización muy intuitivo. La parte inferior queda reservada para una botonera que varía en función del acabado. En nuestro Mode 3 contaba con los botones de los elevalunas, el control de estabilidad y el control de descenso. En el túnel de transmisión tenemos la palanca de cambios de 5 velocidades y el control de la tracción con la palanca 2H, 4H y 4L. El salpicadero cuenta con un agarradero en la posición del asiento del acompañante.
Para que el uso del sistema de audio sea intuitivo, el Mode 3 se ha equipado con una unidad de audio compatible con el Smartphone a través de Bluetooth® que cuenta con una pantalla táctil de 7 pulgadas, Apple Car Play, Android Auto, etc…
– El acceso a las plazas delanteras es el esperado para un vehículo de su corte pero las plazas traseras presentan ciertas dificultades que se deben a la configuración de abatimiento del asiento delantero que no es todo lo buena que debería ser, dificultando notablemente la maniobra de abatimiento pero dejando un generoso espacio para acceder a las plazas posteriores que por cierto son generosas y bastante cómodas.
– Los asientos delanteros pueden ser calefactados -acabados JLX y Mode 3- y son totalmente reclinables por lo que dejan «un par de camas» para pasar una noche de emergencia.
Dependiendo del acabado, el modelo puede equipar sistemas como el control predictivo de frenada, la alerta de cambio de carril, la alerta de fatiga, el asistente de luces de carretera o el reconocimiento de señales entre otras.
– El maletero es extremadamente limitado en configuración de cuatro plazas. Si optamos por abatir los asientos posteriores disfrutaremos de un «generoso» maletero con una boca de carga alta pero un portón cómodo (si no tenemos limitaciones de espacio). Los Mode 3 cuentan con banquetas traseras abatibles en relación 50:50, no así el resto de acabados en los que el respaldo es continuo y en caso de necesitar más espacio, perderemos las dos plazas posteriores (en el Mode 3 podemos abatir sólo una). El maletero en su máxima configuración ofrece 830 litros (377 litros hasta la altura máxima de los respaldos traseros) así como varios anclajes para sujetar la carga. En la parte inferior encontraremos un pequeño cofre para guardar herramientas, triángulos de emergencia, guantes y demás elementos necesarios. En configuración 4 plazas el volumen de maletero es de 85 litros.
– El interior es todo lo silencioso que cabe esperar en un vehículo de este corte pero hay que subrayar que ha mejorado notablemente respecto a sus antecesores.
Oferta mecánica, tracción, dinámica y transmisión
– Si algo ha caracterizado a Suzuki en toda su historia es la fiabilidad de sus modelos y de sus motores. En el nuevo Suzuki Jimny la marca se ha atrevido con un motor de 1.5 litros diseñado para aguantar todo lo que le echen. Este nuevo motor de Suzuki ha sido denominado como K15B y es mucho más eficiente, fiable y ligero -15% de reducción de peso respecto al 1.3 litros de la generación anterior-. Estamos hablando de un motor de 4 cilindros y 16 válvulas que con sus 1.462 cc produce 75 kW (102 CV) a 6.000 rpm y 130 Nm de par a 4.000 rpm. El motor se mueve con soltura en los terrenos más escarpados pero es en la carretera donde nos muestra sus claras limitaciones pero ojo, no todo es culpa del motor que en cierto modo es lo necesario para el limitado peso del modelo – 1.435 kg de peso bruto y 1.090 kg en orden de marcha– sino en la caja de cambios -al menos la manual de 5 velocidades, la automática de 4 relaciones no la hemos probado-.
– No hemos podido efectuar una prueba de consumos como nos gustaría pero en condiciones normales de circulación a velocidades por debajo de las legales hemos rodado en una media de 6,5 litros a los 100 km. El fabricante anuncia un consumo medio de 6.8 litros a los 100 km (combinado), un consumo medio urbano de 7.7 litros a los 100 km y un consumo medio extra urbano de 6.2 litros a los 100 km.
[Ficha]
– Su chasis de vigas de mayor rigidez torsional ofrece una conducción más confortable y sólida en la carretera, y el nuevo amortiguador de la dirección minimiza las vibraciones en el volante. Tanto si se mueve por la urbe o si se aleja de los caminos transitados, el nuevo Suzuki Jimny convence. Si bien es cierto que se ha atendido al confort fuera del asfalto, es en el asfalto donde nos encontramos con varios «peros». Para empezar el coche pide a gritos una sexta velocidad para autopistas -a 120km/h rodamos a la friolera de 4.000 rpm- y aunque el consumo no se resiente en exceso, el motor podría ir más relajado con una sexta relación -esto puede deberse a que la velocidad máxima del modelo en cuestión es de 145 km/h-. Las relaciones son cortas, muy en la línea de un coche de corte aventurero, sin embargo esto es algo incómodo en día a día donde unido a la justa potencia hacen que las aceleraciones sean muy prologadas. Por otro lado, la dirección es muy «offroad» por lo que informa poco al conductor a altas velocidades y cuenta con muchos puntos «muertos».
– El chasis de escalera supone una sólida base para los componentes de la suspensión durante la conducción off-road y también ayuda a proteger los bajos del vehículo incluso en superficies irregulares. Al nuevo Suzuki Jimny se le han añadido un refuerzo en forma de equis y dos travesaños para reforzar la estructura y aumentar la rigidez torsional. Algunos de los protectores de bajos que puedes apreciar en la galería forman parte del catálogo de accesorios. Son muy recomendable si lo que vas a hacer es moverte por zonas muy rotas debido a que protegen zonas vitales.
– Un amplio ángulo de ataque de 37 grados, un ángulo central de 28 grados y un ángulo de salida de 49 grados le permiten al nuevo Suzuki Jimny pasar sobre obstáculos y subir rampas sin dañar los guardabarros ni los bajos.
– Las suspensiones de eje rígido se crecen en la conducción off-road. Cuando una rueda es empujada hacia arriba por un obstáculo, la rueda del otro lado es presionada hacia abajo proporcionando un agarre superior en terreno desigual. El Jimny equipa suspensión de eje rígido en ambos ejes lo cual permite una conducción estable en caminos agrestes.
– El nuevo Suzuki Jimny cuenta con un sistema 4WD a tiempo parcial con reductora que puede hacer fácilmente el cambio entre los modos 2H (2WD-marcha alta (propulsión), a 4H (4WD-marcha alta) y 4L (4WD-marcha corta) gracias a una palanca conectada directamente a la caja transfer. Comparado con el modo 4H, el modo 4L puede transferir más par a las ruedas en marchas bajas para conseguir una mejor tracción en cuestas empinadas y terreno desigual.
– El modelo carece de diferencial pero cuando dos ruedas situadas diagonalmente pierden tracción, el control de tracción SLD del Jimny las frena automáticamente para redistribuir el par al otro lado y permitir que el vehículo recupere la tracción. Este sistema permite al Jimny salir de superficies resbaladizas y caminos con baches.
– En la ruta offroad me sorprendió la efectividad del modelo, la capacidad del mismo ( su radio de giro es de 4.9 metros) y sobre todo, la configuración de muchos de sus elementos. Para empezar, el sistema «anticalado» es espectacular y nos permite rodar muy lentos sin necesidad de estar desembragando continuamente, estresando al embrague más de la cuenta o dando tironcitos como en otros modelos. La efectividad del control de descenso también es destacable. Su funcionalidad se limita a los descensos pronunciados que queramos que sean controlados de forma segura. Con apretar un botón, el nuevo Suzuki Jimny descenderá por la pendiente sin necesidad de pisar el freno. He de confesaros que como mejor funcionaba el sistema era en «punto muerto», donde su suavidad era sobresaliente, sin embargo, aquellos que sepan de lo que hablo, verán el descenso en punto muerto como un peligro ya que bajamos sin retención mecánica alguna y cualquier problema en los frenos o la electrónica del sistema puede derivar en un accidente, así que cada uno obre en consecuencia y elija descender con una marcha engranada (lo más recomendable) y el sistema «anticalado» asociado al control de descenso o con el punto muerto y el sistema de control de descenso.
– Otro de los puntos que no me ha convencido del modelo ha sido la capacidad de frenada. El modelo se inclina en exceso y parece levantarse de la parte posterior. Sea cosa del recorrido de suspensión o no, algo a mejorar serían los frenos ya que en su parte posterior monta tambor en vez de disco.
– La seguridad ha quedado algo tocada con las últimas pruebas de la EuroNCAP en las que el modelo obtiene 3 estrellas. Esto no se debe a que el modelo presente lagunas de seguridad -su equipo es muy generoso- pero carece de sistemas que las pruebas de choque evalúan de forma muy positiva y cuya ausencia resta estrellas de forma automática algo que resulta incomprensible.
Precios nuevo Suzuki Jimny
– Suzuki Jimny JX 17.000 euros
– Suzuki Jimny JLX 18.795 euros
– Suzuki Jimny JLX Auto 20.560 euros
– Suzuki Jimny MODE 3 20.820 euros
Los únicos opcionales disponibles son la pintura metalizada que va de los 360 a los 372 euros dependiendo del acabado (el más caro es la variante Auto) o la pintura metalizada bicolor que va de los 572 a los 595 euros. El modelo no puede equipar más opcionales pero sí que hay disponible un gran catálogo de recomendables accesorios.
El modelo carece de descuentos oficiales, campañas o descuento por financiación y tiene un plazo de espera elevado, pero ya sabes lo que dicen, lo bueno, se hace esperar…
- Uno de los pocos modelos con encanto que queda en el mercado y uno de los pocos 4×4 reales.
- Estética atrevida para los tiempos que corren y que nos recuerda al pasado de los 4×4 puros
- Excelente combinación de lo «retro» con lo moderno.
- Dinámica offroad fuera de serie.
- Precio de partida.
- Algunas lagunas de equipamiento
- Motor y caja de cambios algo justa para la carretera
- Plazos de entrega muy dilatados
- Ausencia de promociones y descuentos
- Dinámica en el asfalto poco desarrollada.
Muy bonito, pero desde octubre pedido y aún no dicen nada de cuando lo entregaran en España