Peugeot 5008 Allure HDi 115 CV ETG-6: Espacio habitable

Hay que decir que esas plazas extra, plegables, son solo aptas para personas de corta talla o para niños, porque son algo escuetas y cuentan con poco espacio para las piernas. Son todo un acierto para viajes en familia, aunque como es común en este tipo de coches, el maletero se queda en una pequeña fracción de su capacidad inicial.

Equipamiento y seguridad

El equipamiento de este coche es muy interesante. Es la opción Allure, el tope de gama de equipamiento, y lo que vemos en el interior nos gusta desde el primer momento: la tapicería, los mandos, la consola central, las alfombrillas,… En general todo está muy al alcance y es de tacto suave y agradable. El nivel de detalle llega hasta el punto de disponer de cortinillas en los ventanucos laterales del espacio del maletero, algo que quien viaje en los asientos plegables agradecerá, sin lugar a dudas.

El volante me ha gustado, y la supuesta dirección poco sensible al terreno no me ha parecido tan mala, de hecho me ha encantado. No es un coche pensado para transmitir grandes emociones en carretera, así que tampoco puedo exigirle cierto nivel de sensibilidad.

En la versión Allure de equipamiento, tenemos el sistema WIP NAV PLUS de serie, que incluye el sistema de navegación GPS en una pantalla a color de 7″, incluye mapas de toda Europa y además un kit de manos libres, una toma USB y Jack. Es de agradecer no tener que adquirirlo como extra, y esto diferencia al Peugeot 5008 de otros coches de la competencia. Otro elemento interesante es la opción de incluir el PEUGEOT CONNECT, un sistema que incluye la llamada de urgencia SOS y la asistencia localizada. En la unidad de pruebas teníamos ese extra, pero evidentemente no lo sometimos a prueba.

Detalle del equipamiento extra que proporciona la versión Allure sobre la Active+Access

• Detección de presión de inflado
• WIP-Nav Plus: Sistema de navegación GPS + Pantalla color + Cartografía europea + Kit manos libres Bluetooth con streaming audio + toma USB y jack
• Head-up Display Color
• Distance Alert (alerta de distancia de seguridad)
• Dectector de obstáculos delantero
• Medición de espacio para estacionamiento
• Techo panorámico de cristal
• Embellecedores cromados de techo
• Retrovisor interior fotosensible
• Retrovisores exteriores plegables eléctricamente
• Volante de cuero con insertos cromados
• Combinado de relojes: fondo negro con contornos cromados, agujas blancas, iluminación diurna / nocturna blanca y gran matriz de puntos
• Llanta de aleación 17»

En cuanto a los pasajeros que vayan en los asientos traseros, tienen la posibilidad de ver películas y vídeos gracias al PACK VIDEO, que incluye dos pantallas de 7″ detrás de los reposacabezas delanteros, más dos cascos bluetooth y la preinstalación de vídeo, aunque no se incluye el reproductor de DVD. En la unidad de pruebas pudimos ver la preinstalación de vídeo y los cascos bluetooth, pero no las pantallas.

El habitáculo dispone de seis airbags para proteger a los ocupantes en caso de accidente: dos frontales, dos laterales y dos de cortina. Éste último cubre incluso la tercera fila en esta versión de siete plazas y se despliega simultáneamente con el airbag lateral, mediante un generador, para una mayor seguridad.

En marcha

Llegamos a la parte interesante de la prueba, al menos desde mi punto de vista. En marcha este coche sorprende por lo fácil que es de conducir y lo sencillo que resulta maniobrar. El tamaño aparente del coche y lo amplio que es por dentro dan la sensación de que nos vamos a rozar con todo, o que no va a girar lo suficiente. Es todo mentira: precisamente a lo largo de esta prueba me pasó una cosa que vino a reforzar en mí la admiración de haber conseguido por parte de Peugeot un coche tan grande que es tan sencillo de meter por sitios imposibles.

Por esa senda me metí, en Guadalupe (Cáceres), ya que estaba haciendo la prueba de conducción en carretera y decidí pararme en este bonito pueblo. Lo que no sabía yo era que por ese caminillo iba a llegar a una zona en la que el ancho de la calle era un par de centímetros más que el ancho del coche, espejos incluidos, y que los sensores de obstáculos estarían pitando en modo infarto terminal durante mi corto recorrido.

Ahí sentí respeto por este Peugeot 5008. Su peso hizo que en un momento dado, gracias a la severa cuesta, se deslizase unos centímetros mientras maniobraba, pero con apenas unas horas de adaptación a este modelo pude salir sin más problemas que mi enfado por haberme metido en semejante atolladero.

En carretera el coche se comporta bien, pero no podemos exigirle mucho. No por la parte del motor, porque con esos 115 CV sorprende el nivel de agilidad que muestra. Parece mentira que lleve tan contenida caballería y que empuje con tanta soltura la tonelada y media que pesa. El problema, como digo, no es de motor, sino de sujeción lateral en los asientos (prácticamente nula cuando «hacemos curvas»), y sobre todo de caja de cambios.

Hemos llegado ya al, para mí, punto menos positivo del coche: la caja ETG-6. Esta caja de cambios funciona a la perfección si circulamos de forma tranquila y sosegada, propia de los padres de familia que somos (algunos). En entorno urbano y conduciendo con suavidad no hay nada que declarar más que, al ser una caja automatizada, que no automática, se anticipa mal a los deseos del conductor y hasta que nos acostumbramos, nos sorprende con un cambio inesperado.

En carretera, si queremos exprimir el motor, lo mejor es pasar la palanca de cambios a la posición M y utilizar las «levas» (son botones en realidad, con forma de levas) para estirar el motor y gestionar los cambios a placer. El cambio en ese caso es, para ser sincero, preciso y cómodo, lo que ocurre es que a menos que tengamos una necesidad especial, preferiría una caja totalmente manual antes que la ETG-6.

Sin embargo, si necesitamos cierto automatismo, por ejemplo por una discapacidad, es la caja más indicada por precio (es la más barata) y porque cumple su función perfectamente, que es la de cambiar de marchas. Eso sí, hay que tener en cuenta que no anticipa bien, y que cuando queremos una recuperación rápida es posible que notemos demasiado retraso en la reacción, siendo la mejor opción bajar una o dos marchas con las levas.

Versiones y precios

El Peugeot 5008 viene con unas cuantas motorizaciones interesantes, cuatro diésel y tres de gasolina, que nos permiten elegir entre potencia y comodidad de uso, aunque si somos sinceros y reconocemos que el motor HDi de 115 CV es más que suficiente para uso normal, si cargamos hasta los topes nos vendrá mejor el 2,0 HDi de 155 CV.

Diésel:

Gasolina: