Diseño/Estética
Calidad de acabado
Equipamiento de serie
Equipamiento opcional
Habitabilidad
Maletero
Motor/Refinamiento
Prestaciones
Consumos
Transmisión
Dirección
Frenos y neumáticos
Comportamiento
Calidad de rodadura
Relación valor-precio
7.4
Notable
Toyota ha vuelto a poner toda la carne en el asador y vuelve al segmento C con un sedán. Al tratarse de un modelo global la marca ha presentado tres carrocerías y aunque en nuestro mercado funcionarán mejor la carrocería de cinco puertas y la touring, lo apuesta es admirable, sobre todo si tenemos en cuenta que las ventas de los tres volúmenes son muy bajas. El Corolla sedán pretende llenar el hueco que dejó el Avensis y que hoy en día se ha ampliado si tenemos ne cuenta la llegada al mercado del Toyota Camry.
Con la vuelta a la denominación Corolla, Toyota ha aprovechado la oportunidad para ofrecer tres carrocerías diferentes del modelo. Mientras con el Auris habíamos disfrutado de la carrocería Hatch y de la Touring, en esta ocasión volvemos a ver al Corolla Sedán.
El segmento C es un segmento muy representativo en Europa así que parece lógico que Toyota haya puesto toda la carne en el asador en su último modelo, que recordemos que únicamente se ofrece en nuestro mercado con mecánicas híbridas. Desarrollado desde cero, todas las versiones hacen uso de la plataforma TNGA estrenada en los Toyota C-HR acompañada de un sistema híbrido muy mejorado.
La nueva generación del Toyota Corolla llega con energía para rivalizar con modelos muy populares y tras varios meses en el mercado, podemos confirmar que el modelo está funcionando bastante bien. Aunque las ventas se centran sobre todo en la variante Hatch de cinco puertas y en la Touring, Toyota tiene una alternativa, la versión Sedán que llega para llenar el hueco que dejó el Avensis al marcharse y que intenta acortar el espacio existente entre la gama Corolla y el Camry.
Como curiosidad, me ha llamado la atención que a diferencia de la variante cinco puertas, el Toyota Corolla Sedán atrapa las miradas allá por donde pasa. Esto me ha llamado la atención, sobre todo si tenemos en cuenta de que al final la gente parece decantarse sobre todo por el cinco puertas y la carrocería familiar tal y como indica el mix de ventas.
Diseño exterior
El Toyota Corolla se presenta en el mercado con una evolución en el lenguaje de diseño de la firma nipona, una nueva filosofía en la que las líneas marcadas y la agresividad están muy presentes para conquistar al público global. Con este nuevo lenguaje y este nuevo diseño podemos decir que Toyota nos vuelve a gustar, al menos en cuanto al diseño se refiere.
En el frontal llama especialmente la atención la gigantesca parrilla hexagonal, una seña de identidad de la última generación de modelos Toyota. Sobre la misma, en los extremos, nos encontramos con unos alargados y afilados faros delanteros que, según el acabado, pueden montar tecnología Full LED e incluso ser adaptativos. La unidad probada estaba terminada en el acabado Advance. Se trata del más alto de los cinco acabados disponibles y el que quizá, desde mi punto de vista potencia más el aspecto del modelo.
El paragolpes integra la generosa parrilla en negro contraste y cuenta con ángulos marcados para incrementar la sensación de deportividad, al tiempo que el capó queda definido por dos esculpidos nervios que se prolongan hacia los pilares A y hacen que las líneas fluyan a través del resto de diseño.
En función del acabado encontraremos detalles cromados y en negro piano tal y como encontramos en la parte inferior del frontal de nuestra unidad de pruebas. En la parte inferior del frontal nos encontramos con unos proyectores antiniebla LED encastrados junto a unas decoraciones cromadas que acentúan el ancho y la deportividad. A media altura encontramos el gran logo de la marca en posición frontal que oculta el radar frontal del sistema de seguridad. A ambos extremos nos topamos con los rasgados faros delanteros que en nuestra unidad de pruebas contaban con tecnología LED, en concreto, triple parábola LED. La iluminación de estos faros era aceptable, aunque para equipar tecnología LED, no eran ni de lejos, los mejores del segmento, eso sí, superan con creces la iluminación de cualquier opción halógena por lo que son bienvenidos.
El tamaño de la luna delantera es generoso, lo que garantiza buena visibilidad hacia delante, algo que no podemos repetir en la luneta trasera. En nuestra unidad de pruebas no faltaban unos sensores de aparcamiento delanteros y laterales.
Visto de perfil, el nuevo Toyota Corolla gana enteros con una superficie de las puertas totalmente limpia y un área acristalada generosa. Su línea es dinámica gracias al marcado nervio ascendente que termina en la elegante caída del pilar C, junto con el cristal de custodia.
En dimensiones, hablamos de una longitud de 4.630 mm (260 mm más que el hatch), una anchura de 1.780 mm (10 mm menos que el hatch) y una altura de 1.435 mm, todo ello acompañado de una batalla de 2.700 milímetros (60 mm más que el hatch).
Con 10 mm más de longitud total, Corolla Sedan recorta 5 mm el voladizo delantero y alarga 15 mm el trasero frente al modelo precedente.
La altura total de Corolla Sedan se ha rebajado 20 mm, además de haberse reducido la altura del capó 35 mm. En combinación con la menor altura de la cintura de los asientos delanteros y traseros, 23 y 9 mm respectivamente, estas reducciones también confieren a la berlina de un centro de gravedad más bajo.
Los espejos retrovisores integran los intermitentes, cuentan con plegado eléctrico, son calefactables y lo único que podemos echar en falta es el detector de ángulo muerto para el que hay que subir un escalón en los acabados.
Los pasos de rueda de nuestra unidad de pruebas contaban con unas llantas de aleación de 18″ y unos neumáticos Falken ZIEX ZE914b en dimensiones 225/40 R18 92W. Estas gomas ofrecen un agarre más que suficiente y una calidad de rodadura buena y de baja sonoridad, aunque debido a las dimensiones, las prestaciones del modelo se ven algo mermadas y las irregularidades del firme son más acusadas.
Hay disponibles 9 colores exteriores para la carrocería, entre los que podemos encontrar tonos clásicos y alegres, así como varios acabados: sólido, metalizado y perlado. En este caso nos hemos disfrutado de una pintura Gris Celestita que por cierto, tiene un sobrecoste de 550 euros y sinceramente le sienta perfectamente bien al modelo.
En la parte posterior, los atractivos pilotos con tecnología LED confieren al Corolla una mayor visibilidad y lo hacen más reconocible sobre la carretera. Una línea cromada subraya los pilotos posteriores y otorga una mayor anchura al modelo. Las formas están muy marcadas y parecen dividir en dos partes el maletero, portón y paragolpes. En posición central están el logotipo de la marca y la denominación del modelo. Un discreto spoiler ubicado en la tapa del maletero le da un puntito deportivo al diseño que le sienta muy bien.
La luneta trasera con protección solar se encuentra bien integrada entre los pilares C.
En el paragolpes no faltan los dos catadióptricos horizontales disimulados en el marcado nervio que recorre el ancho del paragolpes. En nuestra unidad de pruebas contábamos con una batería de sensores de aparcamiento traseros y de una cámara trasera con líneas de dirección que a pesar de no ofrecer una resolución extraordinaria, cumple con su función.
Visto desde arriba, el modelo cuenta con una antena de tipo aleta de tiburón rematada en color de la carrocería.
Hay que señalar que el Corolla Sedán tiene un estilo bastante agresivo para tratarse de un híbrido.
Diseño interior
Si hace un momento hablábamos de un cambio radical en el exterior, el habitáculo tampoco va a defraudarte. El interior se ha rediseñado por completo para ofrecer mayor amplitud, ergonomía y sencillez a la hora de controlar las diversas funciones. Al mismo tiempo, la calidad percibida se ha incrementado, aunque todavía encontramos algunos «peros» respecto a lo que nos encontramos en la competencia.
Los materiales blandos recubren la mayor parte del salpicadero que nos queda a mano y vista, con un aspecto agradable tanto al tacto como a la vista, pero la presencia de algunos plásticos rígidos en zonas altas y visibles hacen perder un poco de empaque al conjunto. Uno de los aspectos que menos me ha gustado ha sido la discontinuidad entre salpicadero y puertas, algo que queda, bastante raro pero que no es la primera vez que vemos en un coche.
Una vez nos sentamos en los asientos nos percatamos de que la sensación de calidad se ha incrementado y las impresiones del conjunto son buenas, aunque hay ajustes y materiales que pulir en algunos elementos. El odioso Piano Black es abundante y esto es algo que resta calidad y durabilidad al interior. Hay que destacar la presencia de un plástico duro rugoso al tacto a la altura del volante (lado izquierdo) que podría mejorarse y una vez sentados nos percatamos de lo cómodos que son los asientos, no así el reposabrazos central que carece del mullido suficiente. Curiosamente, los apoyabrazos de las puertas son muy cómodos y mullidos.
El volante es igual al que encontramos en el nuevo RAV4, cuenta con 12 botones y 2 crucetas para acceder a las funciones del cuadro de instrumentos digital. El nuevo salpicadero queda mucho más limpio de botones y en posición central encontramos una pantalla de ocho pulgadas como protagonista y la botonería justa y necesaria para gestionar el equipo multimedia y el climatizador bizona.
Respecto a este nuevo sistema de infoentretenimiento, su funcionamiento es muy similar al que ya hemos podido ver en otros vehículos de la marca. Cumple su función de manera aceptable, pero resulta mejorable en fluidez, gráficos y capacitación táctil. Además, sólo es compatible con Apple CarPlay, no con Android Auto y el navegador GO es opcional -850€- y lo cierto es que tampoco nos ha gustado ni la guía, ni la visualización, ni la forma de interactuar con el mismo. Sinceramente, creo que Toyota se ha quedado muy atrás en esto
La pantalla central no está bien integrada, no parece de mucha calidad, el sistema táctil deja que desear y tanto la interfaz como los gráficos son anticuados en exceso.
No menos interesante es el nuevo cuadro de instrumentos digital parcial que ofrece gran cantidad de información tanto del motor de combustión interna como del motor eléctrico y su flujo de energía, al tiempo que presenta un diseño muy original, aunque ojo, porque también debería de haber trabajado más en este punto. Como puntos a favor podemos destacar su calidad y el hecho de que resulte controlable desde los botones del volante y sea sencillo de manejar y bastante intuitivo. Como puntos en contra, nos faltan configuraciones, visualización de mapas y algo más de fluidez.
Los huecos portaobjetos no son abundantes ni en las plazas delanteras ni en las traseras, donde la guantera de las puertas es mínima y sin base forrada, algo que hará que todos los objetos que depositemos suenen en cada curva.
La consola central también queda despejada, aglutinando un pequeño hueco portaobjetos con carga inductiva para el smartphone, la palanca del cambio y un par de botones para controlar los modos de conducción y el modo EV. Al final de la misma encontramos el freno de mano eléctrico – por fin abandonan el freno de estacionamiento de pie – y un reposabrazos deslizable -con sus «peros» anteriormente descritos y con una guantera algo estrecha.
El nuevo Toyota Corolla Sedán está homologado para cinco ocupantes, aunque como suele ser habitual, cuatro pasajeros viajarán con mayor comodidad a causa de las limitaciones de la plaza central (aunque el túnel no es muy prominente en este caso). En las plazas exteriores encontramos anclajes ISOFIX y, por supuesto, no falta un apoyabrazos central pero sí que nos faltan salidas de aireación en las plazas posteriores en nuestro acabado. Si la banqueta trasera se ocupa con 3 adultos, los pasajeros de las plazas exteriores rozarán el techo con la cabeza. No me ha terminado de convencer el diseño de los reposacabezas posteriores que restan bastante visibilidad al conductor y no son escamoteables.
Nos hemos percatado de que el modelo ofrece un acceso algo estrecho -fruto de una limitada apertura de las puertas traseras- y complicado para personas de gran tamaño, pero en el interior hay buenas cotas para la cabeza, hombros y piernas.
Respecto a la capacidad de carga, disponemos de un total de 471 litros de capacidad (90 adicionales respecto al hatch de cinco puertas). Como crítica podemos decir de que la terminación y tapizado del maletero debería tener un mejor aspecto. El umbral de carga es alto y retirar maletas u objetos pesados puede resultar un poco farragoso. Para contar con un mayor espacio para el equipaje podremos abatir el respaldo de la banqueta trasera en relación 60:40 obteniendo.
Motorizaciones
El Toyota Corolla sólo se comercializa con mecánicas híbridas y en el caso de la carrocería sedán, sólo con la motorización de acceso. Hablamos de un bloque 1.8 HSD de 122 CV, que cuenta con un motor eléctrico de 72 CV y otro de gasolina de 98 CV. Está asociado a una batería de iones de litio y a una transmisión automática de tipo CVT específico de Toyota y que ha sido gratamente refinado en esta generación.
Los 122 CV a 5200 rpm y sus 142 Nm de par a 3600 rpm son suficientes para mover su tara de 1310 Kg, sin embargo, si lo que queremos son prestaciones y somos fans de la conducción enérgica deberemos de acudir a la nueva mecánica más prestacional. Hay que subrayar que entre las diferentes carrocerías no hay mucha diferencia de peso y es que hablamos de un aumento de peso de unos 25 kg respecto a la carrocería de cinco puertas más liviana.
He de confesar que la versión de 122 CV, en su conjunto, me pareció sencilla pero interesante, aunque está claramente enfocada para gente que lo que busca es un coche apto para una conducción normal, interesante para una conducción urbana y suficiente para viajes en familia.
A pesar de ser el sistema híbrido de acceso, la combinación ofrece un buen empuje y una sonoridad más trabajada en la que se ha depurado el «resbalamiento» del CVT y esas incómodas fases de aceleración en las que la aguja se sitúa pegada a la zona «power». El sistema ha sido muy depurado y además de estar mejor acompasada la aceleración con la posición del acelerador, he percibido que la mecánica de gasolina se revoluciona menos, o al menos, es mucho menos sonora.
La posición B de la palanca de cambios nos permite obtener una mayor recuperación de energía en las fases de deceleración, sobre todo en bajadas prolongadas, donde gracias a este modo, no abusaremos de los frenos y regeneraremos más energía.
Durante esta prueba de corta duración, hemos registrado unos consumos excelentes. Durante la conducción ciudad, los consumos medios obtenidos han sido de unos 4.5 litros a los 100 km. Los consumos medios en carreteras secundarias obtenidos han sido de 4.3 litros a los 100 km y el consumo medio durante una prueba en una conducción del día a día con tramos de carretera de todo tipo hizo que la media ascendiera hasta los 4.8 litros a los 100 km, unos consumos sensacionales.
Aunque con el botón EV ubicado en la consola podríamos recorrer hasta 2 km en modo 100% eléctrico, lo cierto es que apenas lo usamos pues la gestión de la energía y de los diferentes motores es excelente, haciendo que en la mayoría de trayectos del día a día obtengamos un uso del sistema eléctrico muy superior al 50%.
Aunque los híbridos siempre han estado penalizados en autopistas y autovías donde el uso del motor térmico es mayor, en este caso no se penalizado el consumo a pesar de haber realizado un 77,31% del total de la prueba con el motor de combustión encendido y un 22.69% de la prueba con el sistema eléctrico.
También podemos encontrar tres modos de conducción a disposición del conductor: Eco, Normal y Sport. Las sensaciones no varían mucho en cada uno en la dirección y el acelerador pero siempre ayuda en caso de ir a adelantar o querer rodar de una forma más económica.
Por último, hay que subrayar que el modelo cuenta con un depósito de 43 litros, un volumen muy escaso.
Ficha técnica
Version | 1.8L HYBRID 2ZR-FXE |
---|---|
Cilindrada | 1.798 cc |
Potencia | 122 CV / 90 kW a 5.200 rpm |
Par | 142 Nm a 3.600 rpm |
Peso | 1.310 Kg |
Dimensiones Lar/An/Al mm | 4.630 / 1.780 / 1.435 mm |
Volumen Maletero | 471 litros |
Aceleración 0 a 100 km/h | 11 segundos |
Recuperación 80 a 120 km/h | N.D. |
Velocidad máxima | 180 km/h |
Consumo homologado | 3.2 / 3.6 / 3.3 litros a los 100 km |
Emisiones CO2 por km | 76 / 76 / 77 g/km |
Precio de partida | 21.350,00 € |
Comportamiento
Al volante, el Toyota Corolla Sedan representa un gran avance en dinámica respecto a otros modelos de la marca. Es un coche más natural que te permitirá implicarte más en la conducción, asemejándose más dinámicamente a los vehículos tradicionales de combustión interna que a los híbridos que encontramos en el mercado.
En ciudad, es un coche manejable, con buena visibilidad en todos los ángulos y diversas ayudas a la conducción fruto de la integración en todos los acabados del sistema Toyota Safety Sense.
Al salir de la urbe y adentrarnos en autopista, me ha gustado la mejora en confort del modelo, con unos asientos cómodos y de gran agarre en el respaldo (no tanto en la banqueta). Su aislamiento está trabajado y únicamente el ruido aerodinámico es algo más perceptible, sin ser molesto. Además, las versiones tope de gama cuentan con el doble acristalamiento de serie.
Lo cierto es que en Toyota han logrado un buen compromiso entre confort y cierto dinamismo para tratarse de un vehículo híbrido. No llega a ser deportivo ni mucho menos, ni está a la altura de otros modelos como el Focus o el Ceed, pero el esquema de suspensiones -McPherson delantero y multibrazo trasero- aúna un buen filtrado del asfalto y un paso por curva ágil-.
Quizás a la hora de enlazar curvas el mayor problema sea la dirección, que peca de exceso de asistencia y una generosa desmultiplicación, lo que nos lleva a no saber qué está pasando en el eje delantero cuando aumentamos el ritmo. Aunque se endurece mínimamente en el modo Sport, podría haberse trabajado un poco más para resultar más precisa, directa e informativa.
En todo caso, el Corolla se muestra natural, estable y seguro, con cambios de apoyo un poco perezosos, pero más que suficientes para el uso que deberíamos darle a un vehículo de esta índole. La dirección es suficientemente rápida para “divertirnos” un rato y los balanceos contenidos, pues la carrocería vira prácticamente plana aún cuando nos pesa el pie derecho.
Por último, me ha sorprendido gratamente el tacto de los frenos, que se ha trabajado en profundidad para ser muy similar al de un vehículo convencional, sin que la frenada regenerativa sea especialmente perceptible. Se dosifican muy bien y gozan de buena resistencia.
Equipamiento Toyota Corolla Sedán
Los niveles de acabado en España para el Toyota Corolla 2019 se denominan Business Plus, Active, Active Tech, Feel! y Advance. Todos incluyen faros LED, sistema multimedia con pantalla táctil de ocho pulgadas, bluetooth, USB, cámara de visión posterior, alerta de cambio de carril, aviso pre-colisión, frenada automática en ciudad, SmartBeam, lector de señales de tráfico, arranque por botón y Toyota Safety Sense 2.0.
También de serie desde el básico son los sensores de luz y lluvia, cuatro elevalunas eléctricos, climatizador automático de dos zonas, llantas de aleación de 16 pulgadas, cargador de móviles sin cables, antinieblas LED, elevalunas en las cuatro puertas, espejos térmicos, asiento posterior abatible… En nuestra unidad además contábamos con cargador inalámbrico de Smartphones, pantalla TFT a color en cuadro de mandos de 7″, retrovisor interior electrocrómico y sensor de lluvia.
Precio Toyota Corolla Sedán
Los precios recomendados en España para la gama del Toyota Corolla Sedán 2019 con las promociones oficiales son:
Toyota Corolla Sedan 1.8l 125H e-CVT Business Plus 21.350,00 €
Toyota Corolla Sedan 1.8l 125H e-CVT Active 21.450,00 €
Toyota Corolla Sedan 1.8l 125H e-CVT Active Tech 21.750,00 €
Toyota Corolla Sedan 1.8l 125H e-CVT Feel! 23.000,00 €
Toyota Corolla Sedan 1.8l 125H e-CVT Advance 25.900,00 €
- Mayor presencia de materiales blandos en el habitáculo.
- Buen compromiso entre confort y dinamismo. No es deportivo, pero sí que ofrece más sensaciones que anteriores generaciones.
- Contenidos consumos y excelente gestión del sistema eléctrico
- Tacto del pedal de freno trabajado, similar al de un vehículo convencional.
- Abundante equipamiento y soluciones prácticas.
- Beneficios de contar con la codiciada pegatina ECO de la DGT.
- Mecánica 125H eficaz en empuje, eficiente y con una sonoridad contenida.
- Ajustes, vibraciones y calidades en algunas zonas visibles del interior mejorables. Hay grapas en el techo que deberían estar ocultas y quedan muy visbles
- El sistema multimedia está desfasado.
- El cambio CVT es el principal hándicap
- Acceso y habitabilidad en las plazas traseras.
- La dirección con un poco menos de asistencia y desmultiplicación ganaría muchísimo, aunque este es un problema que adolece todo el segmento, no solo el Corolla.
- Bajo ruidos aerodinámicos pero acusado ruido de rodadura.