Diseño/Estética
Calidad de acabado
Equipamiento de serie
Equipamiento opcional
Habitabilidad
Maletero
Motor/Refinamiento
Prestaciones
Consumos
Transmisión
Dirección
Frenos y neumáticos
Comportamiento
Calidad de rodadura
Relación valor-precio
7.6
Notable
La segunda generación del Touran responde a las necesidades de las familias actuales, superando en todo a su predecesor. Llega con unas tarifas algo elevadas que pueden justificarse por su excelente calidad de realización y unas amplias posibilidades de equipamiento. La gama de motores puede alcanzar los 190 CV en diésel, y los 150 CV en gasolina.
Tras más de 15 años en el mercado y superando los dos millones de unidades vendidas, podemos decir que el Volkswagen Touran es un producto que gusta a los usuarios, y lo cierto es que mucho. Hace un par de años llegó una merecida segunda generación y, en 2017, el modelo recibió novedades en el equipamiento, así como un nuevo bloque diésel que es el que probamos hoy.
Este monovolumen compacto de elevado éxito, rival del Renault Scénic, el Opel Zafira, el Ford C-MAX o el BMW Serie 2 Gran Tourer, se mantiene en la cúspide en un momento complicado. Volkswagen está afrontando con integridad los golpes contra los vehículos diésel, al tiempo que trata de mantener una oferta enfocada a las familias bastante completa, en la cuál este tipo de combustible es el preferido por los usuarios.
Dicha gama está formada por los VW Golf Sportsvan, VW Sharan, VW Touran y, en cierto modo, también por las carrocerías Variant de los populares Golf y Passat. Todos ellos han sido desarrollados para satisfacer las necesidades de espacio de todo tipo de hogares y mejoran los registros de sus predecesores, especialmente en el caso del Touran que nos atañe hoy.
El anterior modelo había logrado sobrevivir gracias a las promociones y a las distintas actualizaciones que lo mantenían como la opción más sobria de la categoría, pero ahora podemos hablar de un producto que nada tiene que envidiar al resto de modelos de la gama alemana, incluso cuando hablamos de las últimas incorporaciones como el VW Polo o el VW T-ROC.
Veamos por qué resulta tan interesante.
Diseño exterior
Exteriormente, el Touran sigue las pautas de estilo de los productos de la firma, incluyendo un mayor dinamismo en sus trazos, pero sin excesos, para mantener el interés de aquellos clientes más tradicionales. El frontal queda marcado por la parrilla cromada y las ópticas con tecnología LED opcional -985€ o 1.315€-, mientras que para las luces antiniebla con función cornering se mantiene el halógeno.
La luna delantera luce unas dimensiones considerables para favorecer la visibilidad, como es habitual en este segmento. En el tercio inferior encontramos una segunda entrad de aire insertada en el marcado paragolpes, justo por debajo de la matrícula y la tira de sensores de aparcamiento delanteros.
En la vista lateral, podemos apreciar una superficie de las puertas generosa y totalmente limpia de protecciones, todo ello acompañado de un marcado nervio a la altura de los tiradores y una superficie acristalada de grandes dimensiones con los cristales posteriores tintados. Los espejos retrovisores integran los intermitentes. Volkswagen ofrece diferentes diseños para las llantas de aleación que pueden ser de hasta 18 pulgadas.
Hay disponibles 10 colores exteriores para la carrocería, entre los que podemos encontrar tonos más bien clásicos, así como dos acabados: sólido o metalizado. En este caso tenemos un Beige Titanio metalizado -525€-.
Esta unidad luce unas llantas de 16 pulgadas calzadas con neumáticos Pirelli Cinturato P7 en medidas 205/60 R16 96V. Respecto a las cotas del modelo, hablamos de 4,53 metros de longitud, 1,83 metros de anchura y 1,66 metros de altura. La batalla alcanza los 2.791 mm y los anchos de vía delantero y trasero 1.569 mm y 1.542 mm, respectivamente. El coeficiente aerodinámico Cx es de 0,296.
En la zaga, la gran superficie de chapa, de líneas horizontales, añade robustez al conjunto. La luna posterior es muy amplia, ofreciendo gran visibilidad, aunque también podemos encontrar una cámara de marcha atrás y sensores de aparcamiento. El toque deportivo lo ponen el sutil spoiler con la tercera luz de freno integrada y el difusor plástico inferior.
Aquellos que quieran darle al Touran un toque más deportivo, pueden optar por el paquete R-Line exterior -1.155€-, que incluye barras de techo en Plata Anodizada; parachoques y ensanchamiento de taloneras en diseño «R»; láminas delanteras y moldura embellecedora detrás en cromo; y parrilla del radiador en negro con moldura cromada en la lámina inferior, con el logotipo «R-Line».
Diseño interior
Últimamente, os habréis percatado de que el segmento que se hace llamar premium está un poquito en decadencia. Modelos muy pintones por fuera pero con serias carencias en el habitáculo se enfrentan a modelos generalistas con materiales de gran calidad y excelentes ajustes por un precio razonable. Muchas veces no podemos apreciarlo por probar unidades muy equipadas, pero en esta ocasión contamos con la versión intermedia de la gama.
Podría deciros que hablar del interior de este monovolumen es un momento delicado, pero lo cierto es que estamos ante un coche muy bien rematado que supera con nota a la gran mayoría de la competencia, sin llegar a considerarse realmente premium del todo, salvo por su precio algo superior. Tiene algunos detalles que desmerecen un poco, como el marco interior de las puertas sin forrar (se ve la pintura de la carrocería), pero nada excesivamente grave.
Además, hay mejor equipamiento y de mayor calidad que en la mayoría de rivales. La calidad a bordo se percibe en casi todos los elementos, sin embargo, en términos de diseño a mí ya me cansa estar ante lo mismo, generación tras generación, sin grandes innovaciones por parte de las marcas.
Realmente la fórmula es básica, modernizar el aspecto visual con las últimas novedades del mercado, que en este caso son la conectividad y una consola con una mayor y mejor conectada pantalla táctil. Una vez en el interior del Touran nos damos cuenta de que esas líneas de corte horizontal que la marca ha querido plasmar en el frontal vuelven a estar presentes aquí.
El salpicadero, hecho de material blando y tacto agradable, es un ejemplo de ese diseño horizontal. En este nos topamos con una gran línea a la altura de las salidas de aire que pretende separar el frontal en dos partes mediante una moldura de aspecto moderno, al tiempo que quedan claramente diferenciados los mandos para conductor y acompañante.
Bajo el sistema de entretenimiento nos encontramos con un climatizador muy convencional, muy en la línea de modelos como el Golf o el reciente T-ROC.
La consola central es clásica y en esta unidad de pruebas se encuentra presidida por una pantalla de 8 pulgadas a todo color, táctil y con sensores de proximidad. Sin lugar a duda, es un sistema de mucha calidad en el que podremos configurar, trastear y disfrutar mucho de todos los sistemas que equipa el modelo, tanto de forma opcional como de serie. Además, la cámara de marcha atrás cuenta con buena resolución.
Para el climatizador vemos un sistema trizona con dos diminutos displays monocromo para las plazas delanteras y un tercer display ubicado tras el posabrazos central que ofrece servicio a las plazas posteriores. Adicionalmente, el nuevo Touran estrena la nueva aplicación Car-Net «Security & Service» con llamada de emergencia, llamada de asistencia y demás opciones que ya hemos visto en el mercado.
Continuando por el túnel de trasmisión, nos encontramos con la palanca de cambios de la caja de cambios manual de seis relaciones que equipa esta unidad de pruebas, que a su vez cuenta con el botón de arranque al lado. Más atrás vemos el freno de mano eléctrico con AutoHold y dos posavasos descubiertos, justo antes del reposabrazos ajustable con un generoso hueco portaobjetos.
Uno de los aspectos más logrados además de la integración y la ergonomía, es la discreción. Sin embargo, en el hueco portaobjetos que hay frente a la palanca del cambio, he de mencionar una pega que le veo a la zona central: en Volkswagen no han sido capaces de ocultar las entradas de USB, la toma de 12V y la toma Aux-In.
Para mi gusto, le falta un poco de grosor al aro del volante, aunque como digo, siempre se trata de una cuestión de gustos.
Ya en el lugar del conductor nos encontramos con un generoso y cómodo asiento, con un mullido confortable para largos viajes y una sujeción suficiente para la espalda y las piernas. Una vez acomodados en él, las manos se posan cómodamente sobre un ergonómico, suave y funcional volante de 4 radios desde el que podemos ajustar decenas de sistemas gracias a los botones que integra.
Tras este, en el acabado Advance encontramos un cuadro de instrumentos convencional, con dos esferas para la velocidad y las revoluciones, así como una pantalla central a color que hace las veces de ordenador de a bordo y ofrece gran cantidad de información sobre el viaje, los sistemas de asistencia o el sistema multimedia y de navegación (no está disponible en este caso el Active Info Display tan popular).
Respecto a la habitabilidad, junto a lo ya mencionado hay que señalar que el acceso a las plazas traseras es simplemente sensacional gracias a la gran dimensión de las puertas posteriores. No sólo contamos con un acceso ancho, sino que además va acorde a un ángulo de apertura generoso. En la segunda fila, el espacio para las piernas es sobresaliente y la altura al techo más que generosa, incluso para personas de gran altura.
A diferencia de otros modelos, la plaza central es cómoda porque es individual y no presenta las clásicas limitaciones del túnel de transmisión y las salidas de ventilación posteriores, pero si un mullido algo más duro en el respaldo a causa del reposabrazos central. Además, esta plaza es sensiblemente más estrecha. Los dos asientos laterales de esta fila pueden ser adaptables para niños.
En este caso, la tercera fila de asientos es limitada, como también ocurre en sus competidores directos. Son plazas pensadas para una emergencia o destinadas a los más pequeños de la familia, pues alguien de 1,70 metros se dará con el techo y con las rodillas -aunque deslicemos hacia delante la segunda fila de asientos-, llevando las piernas bastante flexionadas. Además, la sujeción del cinturón de seguridad queda muy arriba.
Su acceso requiere no requiere especial agilidad, como se puede ver en las imágenes, pero el espacio resulta limitado. En dichas plazas podemos encontrar posavasos, reposabrazos e iluminación propia, pero carecen de salidas de ventilación. Como ya he comentado, el Touran ofrece de serie una banqueta trasera desplazable en 200 mm, pudiéndose reclinar también el respaldo unos grados (en tres posiciones).
Respecto al espacio de carga del modelo, el maletero cubica un total de 633 litros (743 litros en el cinco plazas), aunque si abatimos los asientos -20:20:20- el volumen asciende a 1.857 litros, quedando totalmente plano. Con las siete plazas desplegadas, apenas quedan 137 litros, pero en conjunto está entre los monovolúmenes que mayor capacidad ofrecen.
Por lo general, el aspecto del maletero está muy bien cuidado y es fácil plegar y desplegar los diversos asientos, sin apenas esfuerzos. Está bien iluminado y cuenta con un pequeño doble fondo compartimentado en la parte posterior, así como una toma de 12V, un enchufe de 230V, varios ganchos y perchas.
El sistema de apertura y cierre automático es opcional -385€-, pero las formas son muy regulares y puede equipar rueda de repuesto convencional -295€-. Una solución muy práctica es el hueco específico para guardar la cortina cubre-equipajes cuando desplegamos las siete plazas, lo que nos permite no tener que dejarla en casa o llevarla a los pies de la segunda fila.
Motorización
El Volkswagen Touran se puede adquirir actualmente en versiones de gasolina y diésel. En gasolina, está disponible con los motores 1.2 TSI con 110 CV y 1.4 TSI de 150 CV, ambos con caja de cambios manual de seis velocidades o DSG opcionalmente en el caso del más potente. Ya no está disponible el 1.8 TSI 180 CV asociado únicamente al cambio DSG de siete relaciones.
En diésel podemos encontrar el nuevo 1.6 TDI, la última evolución que incorpora el sistema SCR y eleva la potencia hasta los 115 CV, el 2.0 TDI de 150 CV -ambos con caja de cambios manual de seis velocidades o DSG en opción- y el poderoso 2.0 TDI con 190 CV también asociado a la misma caja DSG. Por ahora, no está previsto un Touran con tracción total 4MOTION.
Para la prueba me he decantado precisamente por la última incorporación a la gama, el 1.6 TDI, un bloque fabricado en hierro y aluminio que, con una cilindrada de 1.598 cm³, dos árboles de levas en la culata, inyección directa por conducto común, turbo, geometría variable, Start/Stop e intercooler, es capaz de desarrollar una potencia total de 116 CV (85 kW) entre 3.250 y 4.000 rpm y 250 Nm entre las 1.500 y 3.250 vueltas.
En cifras, este motor es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 11,4 segundos, de pasar de 80 a 120 km/h en cuarta velocidad en 9,2 segundos y de alcanzar una velocidad máxima de 190 km/h.
Si bien es un motor con buenas recuperaciones y una aceleración aceptable en el entorno de las 1.500 revoluciones, el verdadero empuje no llega hasta pasadas las 1.700 vueltas, con algunas vibraciones por debajo de ese rango. Además, su ciclo es fácilmente perceptible, especialmente en frío y desde el exterior del modelo. Podría haberse refinado/aislado mejor.
Su aceleración es lineal y progresiva, con una potencia que no resulta excesiva y escaso empuje por encima de las 3.300 rpm, lo que hace necesario anticiparse en ciertas maniobras de adelantamiento en carreteras secundarias. Es una motorización frugal, por lo que, si acostumbras a ir cargado, por carreteras secundarias y por tramos de fuertes ascensos, deberías plantarte el salto al bloque 2.0 TDI de 150 CV.
El motor de 150 CV diésel es mucho más equilibrado en prestaciones-consumos, siendo mucho más polivalente que esta mecánica.
En carretera el motor gira a apenas 2.100 revoluciones por minuto cuando circulamos a 120 km/h, lo que ayuda a contener los consumos. En la mayoría de las ocasiones, el Touran mantiene el ritmo sin esfuerzos, pero cuando nos topamos con pendientes o adelantamientos en autopista yendo algo cargados, es necesario reducir una o dos marchas para mantener la velocidad de crucero.
Y hablando de consumos, lo cierto es que estos resultan bastante contenidos en condiciones reales, moviéndose en el entorno de los 7.0 litros en ciudad y 5.0 litros en carretera, con un consumo combinado de 5.6 litros a los 100 km tras la semana de pruebas. Oficialmente, Volkswagen homologa unas cifras de 5.4, 4.1 y 4.6 litros/100 km, respectivamente.
Por último y, respecto al cambio manual de seis relaciones, este cuenta con un tacto agradable tanto de la palanca como del embrague, resultando sencillo pillarle el “truco”, aunque para mi gusto resulta algo blando y tiene bastante holgura. Eso sí, en este caso el AutoHold y el Start/Stop resultan menos bruscos que asociados al cambio DSG.
El guiado es suficientemente preciso para este tipo de vehículo, con unos recorridos bastante largos y un escalonamiento más bien tirando a abierto. En conjunto, me gusta más el cambio automático DSG, pues resulta mucho más cómodo y aprovecha mejor la capacidad de la mecánica, pero también supone un desembolso de unos 2.000 euros adicionales.
Ficha técnica
Version | 1.6 TDI - 4 cilindros en línea |
---|---|
Cilindrada | 1.598 cm³ |
Potencia | 116 CV (85 kW) @ 3.250 - 4.000 rpm |
Par | 250 Nm @ 1.500 - 3.250 rpm |
Peso | 1.436 kilos |
Dimensiones Lar/An/Al mm | 4.527 / 1.829 / 1.659 mm |
Volumen Maletero | 633 (1.857) litros - 137 litros con 7 plazas |
Aceleración 0 a 100 km/h | 11,4 segundos |
Recuperación 80 a 120 km/h | 9,2 segundos (en cuarta) |
Velocidad máxima | 210 km/h |
Consumo homologado | 5,4 / 4,1 / 4,6 l/100 km (urb. /extraurb. / comb.) |
Emisiones CO2 por km | 119 g/km de CO₂ (Euro 6) |
Precio de partida | 30.760 euros (este motor y acabado sin descuentos) |
Comportamiento
Si hay algo que rápidamente llama la atención al volante del Touran es su facilidad de conducción. Incluso en las versiones menos equipadas muestra un comportamiento muy similar al de un turismo, con reacciones nobles y predecibles, dando la impresión de que es un vehículo más pequeño en dimensiones.
La visibilidad es buena en todos los ángulos y el diámetro de giro entre paredes es de 11,5 metros, todo ello acompañado de una dirección con asistencia en función de la velocidad que nos facilita las maniobras en ciudad. Además, la suspensión filtra muy bien las irregularidades del asfalto incluso cuando nos enfrentamos a resaltos propios de las zonas residenciales. En este sentido, destaca en el segmento.
Es quizás en tramos de curvas más lentas donde salen a relucir sus características de monovolumen, con unos cambios de apoyo más lentos, un balanceo sensiblemente más acusado y una dirección menos rápida para este tipo de conducción. En cualquier caso, esto es solucionable equipando la suspensión adaptativa DCC, de dureza variable en tres posiciones -Comfort, Normal y Sport-.
El aislamiento acústico es bueno en carretera y los asientos son muy cómodos, por lo que el Volkswagen Touran es un rutero en toda regla.
Si hay algo que caracteriza a este modelo es el aplomo con el que circula por carretera, transmitiendo siempre buena sensación de control. Hay que tener claro que no hablamos de un deportivo ni mucho menos y la información y rapidez que nos transmite la dirección es limitada, pero tanto en carreteras reviradas como en autopistas una mayor dureza te hace sentirte más cómodo y seguro.
Junto a la dirección, el Touran equipa un estable sistema de frenos compuesto por un asistente de freno confort, el sistema ESC y un freno de estacionamiento electrónico (señalar que los discos de freno delanteros disponen de ventilación interna). Estos son fácilmente dosificables y efectivos, con un corto recorrido del pedal y un buen hacer del sistema.
Equipamiento y precio
Como viene siendo habitual en la marca, el Touran podrá solicitarse en tres niveles de acabado: Edition, Advance y Sport, aunque echamos en falta un toque más deportivo de las versiones R-Line. En todos ellos es de serie la tercera fila de asientos que permite acomodar en su interior hasta a siete pasajeros. Existe la posibilidad de dejarlo únicamente en configuración de cinco plazas (-745€).
El nivel Edition incluye de serie el control de estabilidad, múltiples airbags, ABS, EBD, TPMS, control de velocidad de crucero, freno de mano eléctrico, cuatro elevalunas y espejos eléctricos, cierre centralizado con mando, detector de fatiga, aire acondicionado, sistema de frenado anti-colisiones, volante y pomo del cambio en piel, asistente al arranque en cuestas, molduras exteriores pintadas en color carrocería y pantalla de 6,5 pulgadas.
El nivel Advance suma al Edition el ordenador de viaje Plus, los faros antiniebla con cornering, pantalla de 8 pulgadas, barras de techo negras, asientos delanteros confort, cajones bajo asientos delanteros, mesas plegables en respaldos de asientos delanteros, sensor de lluvia y luces, espejo interior fotosensible y sistema de frenada de emergencia “Front Assist”, entre otros.
En cuanto al nivel Sport, suma a lo anterior las llantas de aleación de diseño especifico, el climatizador automático de tres zonas, los sensores de aparcamiento delanteros y traseros, la cámara posterior, navegación, sistema de amplificación de la voz (para poder conversar con los pasajeros posteriores de manera más cómoda al transmitir la voz por los altavoces) y el paquete cromado exterior.
Para hacerlo más atractivo, los Sport suman sin coste el techo solar panorámico con accionamiento eléctrico, las llantas de aleación de 17 pulgadas con neumáticos de tecnología autosellante AirStop, el Paquete Luz y Visibilidad, el R-Line Pack (R-Line exterior y sistema de cierre y arranque sin llave «Keyless-Access»), los faros LED básicos, la cámara marcha atrás y el amplificador de voz.
Los precios para toda la gama del Volkswagen Touran en España sin descuentos ni promociones quedan de la siguiente manera:
Motor | Edition | Advance | Sport |
1.2 TSI 110 CV | 27.100€ | – | – |
1.4 TSI 150 CV | – | 32.160€ | 35.055€ |
1.4 TSI 150 CV DSG | – | 34.275€ | 37.300€ |
1.6 TDI 115 CV | 28.050€ | 30.760€ | 33.530€ |
1.6 TDI 115 CV DSG | – | 32.785€ | 35.700€ |
2.0 TDI 150 CV | – | 32.965€ | 35.750€ |
2.0 TDI 150 CV DSG6 | – | 36.375€ | 39.410€ |
2.0 TDI 190 CV DSG | – | – | 41.950€ |
- Soluciones muy prácticas y multitud de huecos portaobjetos y de almacenaje repartidos por el habitáculo. El maletero cuenta con un hueco específico para guardar la cortina cubre-equipajes, algo necesario cuando desplegamos la tercera fila de asientos.
- Dinámica muy lograda que disimula la mayor altura del conjunto.
- Calidad y presentación muy cuidados.
- Modularidad del habitáculo.
- Muchas posibilidades de equipamiento.
- Oferta mecánica muy amplia con hasta 190 CV de potencia.
- Ofrece una calidad de rodadura elevada.
- Tercera fila de asientos muy limitada, sólo útil para niños.
- Mecánica algo justa de potencia en algunas circunstancias para tratarse de un monovolumen.
- Precio superior incluso con ofertas al de la mayoría de sus rivales.
- Plaza central de la segunda fila más estrecha.
- Dotación de serie algo escasa teniendo en cuenta el precio.
- Listado de elementos opciones con tarifas algo altas.