Diseño/Estética
Calidad de acabado
Equipamiento de serie
Equipamiento opcional
Habitabilidad
Maletero
Motor/Refinamiento
Prestaciones
Consumos
Transmisión
Dirección
Frenos y neumáticos
Comportamiento
Calidad de rodadura
Relación valor-precio
8.1
Notable+
Audi Sport nos presentó en 2020 la nueva edición del RS Q3, un modelo que en su segunda generación llega acompañado de este Audi RS Q3 Sportback. Su comedido diseño atrae a los que buscan prestaciones, pero con discreción; su sistema de tracción combinado con las ayudas electrónicas ofrece una gobernabilidad sobresaliente ante cualquier situación y, si todo esto lo unimos a unos imponentes 400 CV, tenemos como resultado un modelo realmente atractivo.
Son muchos los que opinaban que la anterior generación del Audi Q3 no era nada del otro mundo y que no estaba a la altura de lo que se esperaba de un modelo de la firma de los cuatro aros. Que algunos rivales se lo comían con patatas era un hecho, pero se acabó, el nuevo Audi Q3 ha llegado al mercado con suficientes argumentos como para callar muchas bocas.
El Audi Q3 es un modelo clave para la compañía de Ingolstadt, así que no es de extrañar que no se haya escatimado en su desarrollo y hayan aparecido nuevas versiones como este atractivo Sportback. El RS Q3 llega con un diseño más deportivo, una mayor calidad de interiores y una elevada dosis de sistemas de asistencia y entretenimiento.
El SUV germano soluciona esos «problemillas» con los que contaba la anterior generación en capacidad de carga y habitabilidad, pues ahora encontramos el Audi Q2 justo un escalón por debajo. A pesar de su línea de techo más pronunciada que en el Q3 normal, la capacidad de carga y la habitabilidad son tan buenas como en este y puede mirar a sus rivales a la cara.
Si hablamos de rivales para el Audi RS Q3 Sportback, la lista es bastante limitada, ya que ni BMW ni Mercedes-Benz tienen modelos del mismo tamaño y potencia. Similares, que no rivales directos, pueden ser el BMW X2 M35i (306 CV), que es menos potente; y el Mercedes-AMG GLC 43 4MATIC Coupé (390 CV), que en realidad tiene un tamaño mayor.
Diseño exterior
El nuevo Audi RS Q3 Sportback se caracteriza por los detalles deportivos integrados a la perfección en las superficies tensas y bien definidas transmiten potencia y alta calidad. Gracias a la caída del techo, tiene una imagen mucho más deportiva que el RS Q3 y los clientes tienen muchas posibilidades para personalizar su coche.
El frontal irradia masculinidad, con una parrilla Singleframe envolvente en negro brillante con estructura de panal tridimensional, integrada en un parachoques RS con grandes entradas de aire laterales. Éstas son específicas del RS y tienen forma de boomerang. Por otra parte, con el paquete de óptica negro brillante se sustituyen los cromados por negro de alto brillo.
A ambos lados del frontal encontramos los faros Matrix LED opcionales (Full LED de serie). Estos faros LED incorporan funciones especiales para ciudad, cruces, carreteras, autopista, circulación por la izquierda o mal tiempo. Incluyen luz diurna de diodos luminosos y lavafaros, así como intermitentes LED dinámicos (solo en los faros posteriores).
En la vista lateral vemos un largo capó y una marcada línea de cintura que, además de ser ligeramente ascendente, descansa sobre unos pasos de rueda ensanchados en 10 mm. En el Sportback el techo es 45 mm más bajo y su caída hacia la parte posterior comienza antes, lo que empeora la visibilidad a través de la luna trasera y reduce sensiblemente la altura detrás.
Las líneas del frontal fluyen a través de un ligero capó hacia la amplia luna delantera.
Los pasos de rueda se encuentran enmarcados por una zona que en los RS siempre va pintada en color de la carrocería. En este caso, el RS Q3 Sportback equipa unas llantas de aleación Audi Sport de 21 pulgadas de color negro que están calzadas por unos neumáticos Continental SportContact 6 de medidas 255/35 R21 XL 98Y en ambos ejes.
Hay disponibles un total de ocho pinturas con acabado sólido, perlado y metalizado. En este caso vemos el Verde Kyalami sólido. Los retrovisores pueden pintarse en negro brillante, aluminio o carbono; al tiempo que los aros Audi y las inscripciones también se pueden pintar en negro brillante, como es el caso de esta unidad. Hay siete diseños de llantas para elegir.
La superficie de las puertas queda totalmente limpia de protecciones y el espacio acristalado es suficiente para favorecer la visibilidad, pero algo claustrofóbico en la segunda fila, contando con las lunas posteriores tintadas. Adicionalmente, esta unidad de pruebas equipa los retrovisores eléctricos y calefactables, así como la llave de confort manos libres.
El Audi RS Q3 Sportback alcanza los 4.51 metros de longitud, 1.85 metros de ancho y 1.56 metros de alto. La batalla se mantiene en 2.681 milímetros, una de las mejores del segmento, mientras que las vías delantera y trasera miden 1.590 mm y 1.583 mm, respectivamente. El Cx es de 0.37, con una superficie frontal de 2,42 m² y un factor de resistencia de 0,9.
En la zaga encontramos un diseño más atrevido que rebosa poderío. Con la ventanilla trasera baja, el alerón específico de RS en negro brillante -que integra la tercera luz de freno- y los aletines en esta misma tonalidad, el RS Q3 Sportback parece aún más ancho que su hermano. Los afilados grupos ópticos de efecto tridimensional cuentan con tecnología Full LED.
En esta unidad no faltan la tira de sensores de aparcamiento posteriores ni la cámara trasera, aunque podemos equipar cámara de 360º con Park Assist. En el extremo inferior descansa un sistema de escape RS de doble salida con grandes tubos de escape ovalados. Se integra en un paragolpes específico RS con difusor trasero y palas horizontales en negro brillante.
Diseño interior
El interior del RS Q3 es realmente similar al del resto de la gama, salvo por los paquetes de colores que se ofrecen para algunos elementos, los asientos deportivos y pequeños detalles específicos de la familia RS como el anillo rojo en el botón de arranque y parada, las siglas RS en el volante o las pantallas especiales RS en el Audi virtual cockpit plus.
Los materiales empleados son blandos en su mayoría, con escasos componentes en plástico rígido, salvo en las partes más bajas y en las puertas, donde en varias unidades del Q3 Sportback ya he notado fuertes crujidos al abrir. Salvo en este caso concreto, los ajustes en general son buenos y los plásticos vistosos, con ausencia de otros crujidos o vibraciones incluso al hacer fuerza sobre ellos.
Las teclas que hay en el salpicadero recuerdan a los tradicionales conmutadores y bajo los mismo, encontramos un generoso hueco portaobjetos que puede equiparse con sistema de carga por inducción. En el salpicadero resaltan los embellecedores en aluminio y el anagrama de quattro, resaltado por la iluminación ambiental con hasta 30 colores.
Los detalles en aluminio Race pueden escogerse de forma opcional en negro piano o fibra de carbono.
También se presenta más despejado el túnel central, donde encontramos dos posavasos, el freno de mano eléctrico y la palanca del cambio automático S-tronic de siete relaciones. En una posición algo más retrasada nos topamos con el reposabrazos, que se puede ajustar en longitud y en altura. Esconde bajo el mismo una guantera de tamaño medio.
Esta unidad dispone de un deportivo volante multifunción de tres radios opcional con levas solidarias (de plástico) que cuenta con la corona achatada y está revestido en cuero, montando el emblema ‘RS’ en la parte inferior. Hay dos volantes a elegir: el deportivo y el deportivo achatado. Además, el tacto y grosor del mismo son muy agradables.
Tras el volante y, para la instrumentación, encontramos el conocido y personalizable Audi Virtual Cockpit de 12,3 pulgadas con abundante información, además de algunos detalles exclusivos de esta versión como la presión de los neumáticos, el par, la potencia, los tiempos de vuelta, las fuerzas g y las mediciones de aceleración.
Uno de los elementos más destacables del Audi RS Q3 Sportback son los asientos deportivos RS opcionales, disponibles por primera vez en cuero Nappa fino con patrón de panal específico y reposacabezas integrados. En esta unidad son eléctricos para conductor y acompañante y equipan calefacción, regulación lumbar y anclajes ISOFIX en el caso del pasajero.
Estos asientos son realmente cómodos y ofrecen un agarre más que suficiente. Los cinturones tienen regulación en altura.
El climatizador automático trizona opcional regula la temperatura del habitáculo en tres zonas y puede funcionar en dos modos climáticos diferentes, denominados eco y normal. En eco, el climatizador automático se basa en una línea característica de consumo optimizado para establecer la temperatura interior seleccionada, aumentando así aún más la eficiencia.
El sistema MMI que se monta a bordo cuenta con una pantalla fija que, en esta versión, tiene una diagonal de 10,1 pulgadas. Es muy rápida, cuenta con excelente percepción táctil y los gráficos son de primera. Los sistemas Audi connect y Navegación básicos no requieren ser activados en opción como en otros acabados, son de serie Apple CarPlay y Android Auto.
El acceso a las plazas traseras es cómodo gracias al buen ángulo (aunque no destacable) de apertura de las puertas, pero algo peor que en el RS Q3. De igual forma, hay un poco menos de anchura, altura y espacio para las piernas, aunque alguien de hasta 1,85 metros irá cómodo. Eso sí, sólo podrán viajar cómodamente dos ocupantes, como es habitual en el segmento.
El maletero cubica un mínimo de 530 litros (dependiendo de la posición de los asientos de la segunda fila, que se desplaza dos centímetros menos que en el Q3), que aumentan hasta los 1.400 litros abatiendo el respaldo de los asientos traseros -40:20:40-. La superficie de carga es plana, aunque podemos colocar la base del piso a dos alturas.
Por su parte, el portón eléctrico del maletero de serie deja una apertura de carga ancha, quedando el borde de carga a una altura libre al suelo de 820 milímetros (casi un centímetro más alto que en el Audi RS Q3). Bajo el suelo del maletero encontramos un espacio para la rueda de repuesto de emergencia y un altavoz de graves con el equipo de Bang & Olufsen.
Motorización
Uno de los elementos más suculentos del Audi RS Q3 Sportback es lo que esconde en sus entrañas. El corazón de la bestia es el bloque de cinco cilindros TFSI con 2.5 litros ya visto en el Audi TT RS 2019. Con una potencia específica de 161.3 CV por litro, el bloque y la culata son de aluminio, por lo que el peso total del conjunto es 26 kg menor que en el anterior RS Q3.
Cabe destacar el empleo del aluminio en algunos elementos como el cigüeñal (-18 kg), el desarrollo de las camisas de los cilindros recubiertas de plasma o la fabricación de los cojinetes principales del cigüeñal 6 milímetros más finos; al tiempo que se reducen las fricciones para que el beneficio también sea notorio en el consumo de combustible y las emisiones.
El par máximo de 480 Nm está disponible desde 1.590 rpm y se mantiene constante hasta las 5.850 rpm, permitiendo al Audi RS Q3 Sportback acelerar de 0 a 100 km/h en 4,5 segundos y de 80 a 120 km/h en apenas 3,2 segundos. Como no podía ser de otra manera, el modelo cuenta con función Launch Control y la velocidad máxima está limitada a 250 km/h de serie.
Opcionalmente, Audi puede incrementar la velocidad punta hasta los 280 km/h y podemos equipar una cubierta del motor en carbono Sigma.
Gracias a sus 400 CV (294 kW) de potencia entre 5.850 y 7.000 rpm, es una mecánica insaciable, capaz de pegarte al asiento en cada aceleración incluso cuando ya vas circulando a un ritmo bastante ligero. La única pega es el lag o retraso perfectamente apreciable entre que pisas a fondo el acelerador y la caja responde para que el motor saque todo su potencial.
Como decía en la introducción, te resultará bastante complicado encontrar un coche de sus características con semejante aceleración en el mercado. Otro elemento realmente jugoso que tiene el Audi RS 3 es el sistema de escape. Dos mariposas controlan el flujo de los gases para proporcionar un sonido aún más intenso, que varía con la carga del motor y con la velocidad.
Este se puede agudizar con el sistema de escape deportivo RS, que es todo un espectáculo auditivo. El conductor puede controlar la actuación de las mariposas mediante el sistema Audi drive select. En el modo dynamic aporta un toque de deportividad y unos ‘petardeos’ que, sinceramente, son adictivos. También se puede regular en los modos RS1 y RS2 específicos.
La aliada perfecta de esta mecánica es la transmisión S tronic de siete velocidades. Podemos manejarla por medio de la palanca o través de las levas situadas tras el volante, aunque mucho me temo que más de uno echará en falta jugar con una transmisión manual. Su funcionamiento es muy bueno, aunque si no vamos en modo Sport, “piensa” demasiado.
Respecto a los consumos, cabe destacar que éstos varían de manera muy notable en función de cómo tengamos el día, resultando extremadamente sensibles a los cambios de ritmo. Conduciendo de forma tranquila, el ordenador indica una media de 9,6 l/100 km en carretera (el motor gira a 2.100 rpm a 120 km/h), cifra que se sitúa sobre los 15 litros en ciudad.
En una conducción sosegada y modo ‘auto’, el cambio sube de marcha en el entorno de las 2.000 vueltas. Tras la semana de prueba, el consumo medio se detuvo en 12,1 l/100 km practicando todo tipo de conducción, mientras que Audi homologa un combinado WLTP de 9,9 l/100 km. El depósito de combustible tiene una capacidad de 63 litros.
El Audi RS Q3 Sportback cuenta con hasta 6 modos de conducción: efficiency, comfort, auto y dynamic, que actúan sobre la tracción quattro, la caja de cambios, la dirección, las características de funcionamiento del motor y las válvulas del sistema del escape. La forma de trabajar de todos ellos se puede configurar libremente en los dos programas de conducción específicos RS1 y RS2.
Ficha técnica
Version | 2.5 TFSI - 5 cilindros en línea |
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Cilindrada | 2.480 cm³ |
Potencia | 400 CV (294 kW) @ 5.850 - 7.000 rpm |
Par | 480 Nm @ 1.950 - 5.850 rpm |
Peso | 1.775 kilos |
Dimensiones Lar/An/Al mm | 4.507 / 1.851 / 1.557 mm |
Volumen Maletero | 530 (1.400) litros |
Aceleración 0 a 100 km/h | 4,5 segundos |
Recuperación 80 a 120 km/h | 3,2 segundos |
Velocidad máxima | 250 km/h (280 km/h opcional) |
Consumo homologado | 9,9 l/100 km en ciclo combinado |
Emisiones CO2 por km | 223 g/km de CO₂ (Euro 6) |
Precio de partida | 75.890 euros (este motor sin descuentos ni extras) |
Comportamiento
Puede que al sentarte al volante del Audi RS Q3 Sportback no te sientas a bordo de un auténtico deportivo por la postura de conducción más elevada y el espacio que tienes a tu alrededor, pero basta con poner el modo dynamic, la palanca en modo Sport y pisar con fuerza el acelerador para darte cuenta de que te lo vas a pasar bien, muy bien.
No, al volante, el Audi RS Q3 Sportback no decepciona. La postura de conducción es algo más elevada que la de un turismo, algo que se agradece a la hora de entrar y salir del habitáculo, pero en ningún caso tenemos la sensación de ir en un vehículo grande y la visibilidad es aceptable en todos los ángulos (salvo a través de la luna posterior, muy estrecha).
Las cámaras y sensores nos ayudan a maniobrar en los espacios más reducidos para evitar disgustos con alguna columna revoltosa que se cambia de sitio repentinamente, pero como os digo, ni sus dimensiones ni la visibilidad son un hándicap en la urbe y los aparcamientos. Además, ofrece un diámetro de giro de 11,8 metros entre paredes, un valor adecuado.
La dirección progresiva cuenta con asistencia en función de la velocidad, desmultiplicación no lineal y un buen equilibrio entre rapidez y precisión. También podemos ajustar su dureza con los modos de conducción, pero es una pena es que no sea algo más informativa, ya que al buscar los límites hay ocasiones en las que no terminamos de saber por dónde van las ruedas.
Eso sí, es muy sencillo de conducir deprisa por sus reacciones nobles y el excelente trabajo de la tracción quattro, que transfiere la potencia del motor al asfalto con suma facilidad, ofreciendo gran sensación de seguridad. No hay diferencial central, es un embrague multidisco controlado electrónicamente el que se encarga de transmitir más o menos potencia al eje trasero.
El control del embrague multidisco está integrado en el sistema Audi drive select. En su configuración más deportiva, el sistema utiliza toda la información relevante, como el ángulo de giro de la dirección. En el programa dinámico y, con el sistema de control de estabilidad ESC en modo deportivo, se transmite mayor cantidad de par y de forma más rápida al eje trasero, a fin de conseguir un comportamiento más ágil y directo que sin duda notarás.
Esto permite realizar deslizamientos controlados sobre superficies de baja adherencia, con ligeros sobrevirajes que en ningún caso te resultarán difíciles de controlar (salvo que te pases buscándole las cosquillas al “cacharro”, claro está). Además, el empuje del eje delantero ayuda a dirigir de nuevo el coche al salir de una curva.
Como decía, es una pena que la dirección no sea un poco más informativa cuando jugamos con él enlazando curvas lentas.
Lo mejor de todo es que también hablamos de un modelo agradable de conducir en cualquier circunstancia, haciendo gala de un gran confort gracias a la suspensión opcional RS plus con Control Dinámico del Chasis, que equipa amortiguadores de dureza variable controlados electrónicamente. De serie equipa una suspensión deportiva que baja la carrocería 10 mm.
A mi juicio, la suspensión opcional merece la pena si pasas cierto tiempo en la carretera.
Pese a no resultar seca salvo cuando pasamos a cierta velocidad por resaltos o tramos en mal estado, no es difícil apreciar que su puesta a punto es mucho más firme que en las versiones menos potentes del Q3 Sportback, lo que le permite contener muy bien los balanceos de la carrocería y cambiar de trayectoria con gran agilidad.
Para el equipo de frenos se recurre a un sistema de altas prestaciones con pinzas de seis pistones y discos delanteros de hierro fundido, ventilados y perforados de 375 mm de diámetro; y discos macizos traseros de 310 mm de diámetro. Opcionalmente se ofrecen unos frenos delanteros carbocerámicos con pinzas fijas de aluminio de 380 mm de diámetro.
A nivel de asistencias, podemos equipar el regulador de velocidad activo, el asistente de conducción adaptativo, la alerta por cambio involuntario de carril, el asistente de tráfico trasero cruzado o el frenado automático de emergencia con detección de peatones y ciclistas en la carretera, entre otros. Muchas de estas tecnologías son de serie.
El Audi RS Q3 Sportback goza de unas cotas todoterreno meramente aceptables y equipa asistente de descenso de pendientes, pero ni su altura libre al suelo (160 milímetros) ni el tamaño y perfil de sus neumáticos son los ideales para aventurarse fuera del asfalto. Lo ideal es no salirse de los caminos de baja dificultad y en momentos meramente puntuales.
Equipamiento y precio
En nuestro país, todos los Audi RS Q3 Sportback incluyen de serie el paquete deportivo exterior, llantas de aleación de 20 pulgadas, colas de escape cromadas, faros LED para todas las funciones, alerta pre-colisión, detector de peatones, espejos retrovisores plegables, sensor de lluvia, encendido automático de luces, espejo interior fotosensible y volante multifunción en piel.
También sin coste cuentan con sistema de navegación integrado con pantalla de siete pulgadas, bluetooth, USB, sistema de escape RS, sistema de frenos de acero RS, Audi Virtual Cockpit de 12,3 pulgadas, Wi-Fi, tapizado en piel, sensores de aparcamiento delanteros y traseros, alarma, freno de mano eléctrico o suspensión deportiva, entre muchos otros.
Como buen modelo alemán que es, existe la posibilidad de equiparlo con un amplio catálogo de opcionales capaces de subir el precio final como la espuma, destacando especialmente los sistemas de asistencia al conductor, la cámara trasera, faros Matrix LED con indicadores dinámicos, el equipo de sonido Bang&Olufsen o el escape deportivo RS.
En España, los precios de la gama Audi RS Q3 2021 sin promociones ni descuentos son los siguientes:
Modelo | Potencia | Precio |
Audi RS Q3 | 400 CV / 294 kW | 74.160€ |
Audi RS Q3 Sportback | 400 CV / 294 kW | 76.260€ |
- Diseño que exuda deportividad, pero libre de ornamentaciones o elementos aerodinámicos exagerados, lo que le da mayores posibilidades de uso al modelo.
- Polivalencia de uso, es divertido a la hora de enlazar curvas exprimiendo su potencia y cómodo para viajar (al menos con la suspensión opcional), todo ello rematado con una capacidad de aceleración y un sonido que enamoran.
- Como siempre, la calidad percibida es elevada.
- Buena insonorización interior.
- Generoso y atrevido equipamiento de serie. Amplio catálogo de opcionales disponible.
- Si quieres un RS Q3 Sportback bien equipado, la factura final se dispara.
- Abuso del Piano Black, muy sensible a arañazos y manchas.
- Es demasiado perfecto. Es cuestión de gustos, pero resulta tan fácil conducirlo que no requiere gran concentración al volante y, por tanto, se merman las sensaciones que ofrece respecto a otros crossovers deportivos más “juguetones”.
- Pierde en habitabilidad respecto al RS Q3 y cuesta 2.100 euros más.
- Empleo abundante de plástico rígido en algunas zonas como la consola central, aunque sean agradables al tacto y la vista.