Diseño/Estética
Calidad de acabado
Equipamiento de serie
Equipamiento opcional
Habitabilidad
Maletero
Motor/Refinamiento
Prestaciones
Consumos
Transmisión
Dirección
Frenos y neumáticos
Comportamiento
Calidad de rodadura
Relación valor-precio
8
Notable
El nuevo BMW Serie 4 Cabrio destaca por sus aptitudes deportivas mejoradas respecto a su predecesor y al nuevo BMW Serie 3, un nuevo lenguaje de diseño, un extenso refinamiento, una excelente capota de lona y tecnologías pioneras de asistencia a la conducción, control, manejo y conectividad. También ofrece una nueva tecnología de los propulsores, que brindan más potencia y capacidad de empuje, así como un rendimiento optimizado.
La historia de las carrocerías descapotables tiene una larga tradición en BMW. Dio comienzo con el BMW 326 y alcanzó su más reciente atractivo con el lanzamiento de la primera generación del BMW Serie 4 Cabrio en 2013 (antes conocido como Serie 3 Cabrio). Ahora, nos ponemos al volante de la última entrega del modelo en su versión BMW 430i Cabrio.
Se han vendido ya más de 800.000 ejemplares de la Serie 4 desde que el modelo llegara al mercado en 2013 y, el BMW Serie 4 Cabrio de nueva generación, luce un diseño independiente y un perfil de carácter distintivo dentro del segmento premium de tamaño medio. En la actualidad, esta carrocería acapara el 25% de las ventas mundiales, el 18% en España.
Utiliza una construcción ligera e inteligente para respaldar su manejo y vuelve a la capota de lona. Es una gran muestra de lo que BMW es capaz de hacer. Tiene algunas particularidades que cada uno debe juzgar si se tratan de defectos o de virtudes, pero es innegable que han hecho un excelente trabajo para crear un modelo que roza la excelencia en muchos puntos.
La puesta a punto es su punto fuerte, seguidos de los acabados, ajustes y la calidad de su equipamiento. Entre sus rivales, el Serie 4 Cabrio se caracteriza por ser el más dinámico; el Audi A5 Cabrio por su equilibrio y perfección; y el Mercedes-Benz Clase C Cabrio por el confort y el refinamiento. ¿Todavía quieres más? Ojo al reciente BMW M4 Cabrio.
Diseño exterior
La imagen del nuevo Serie 4 Cabrio pone de manifiesto el nuevo lenguaje de diseño de la marca. Un pequeño número de líneas nítidas y el uso de superficies claras y de generosas dimensiones se unen en un diseño de carrocería que irradia placer de conducir sin adulterar desde cualquier ángulo. Respecto al coupé, hay algunos cambios mínimos en la aerodinámica.
El frontal muestra una imagen ancha y baja. Los nuevos y polémicos riñones de BMW, de gran tamaño, están enmarcados por un simple contorno, y lo cierto es que ganan bastantes puntos en persona. Como en el Serie 4 Coupé, la parrilla es activa, de forma que puede abrirse y cerrarse para refrigerar o bloquear el flujo del aire y mejorar la aerodinámica, según convenga.
Los faros full LED son de serie y, opcionalmente, se puede disponer de funciones adicionales y luces LED diurnas en forma de U. También son opcionales los faros Adaptive LED con dispositivo BMW Laserlight como los de esta unidad, con anillos lumínicos de luz diurna y elementos azules en L en los faros. Alumbran hasta 550 metros de distancia.
En la parte central de los nuevos riñones podemos apreciar una de las cámaras del sistema de visión 360 grados con un sofisticado software. El Park View, el Panorama View y el 3D Top View que lo componen se usan para crear una imagen de 360° del vehículo y su entorno, desde distintas perspectivas, que se muestra en el Control Display.
Por su parte, la función Remote 3D View ofrece a los conductores la capacidad de ver en sus smartphones una imagen tridimensional y en directo del coche y su entorno próximo. En este punto sólo podemos decir que es un equipo impresionante por funcionalidad y utilidad. La calidad es mayúscula y la precisión sobresaliente, resultando muy recomendable.
Otro extra muy curioso es el Asistente de Marcha Atrás, que almacena los movimientos del coche hacia adelante, a una velocidad no superior a 36 km/h. Gracias a ello, el sistema es capaz de dar marcha atrás al vehículo a una velocidad máxima de 9 km/h y hasta una distancia de 50 metros, exactamente en la misma línea que cuando el coche se movió hacia adelante.
Lo único que debe hacer el conductor es controlar el acelerador, el freno y vigilar el área alrededor del coche. Si el sistema de cámaras 360 grados nos cautivó, esto ya directamente nos deja perplejos. Resulta extremadamente sofisticado y muy útil para aquellos que suelen circular por estrechos aparcamientos o deben deshacer sus maniobras de forma habitual.
En la parte inferior del frontal nos encontramos con parte de los sensores de aparcamiento perimetrales opcionales -de serie delanteros y traseros-, entradas de aire cuyo diseño varía según el modelo y acabado, y el sistema frontal de radar. A ambos extremos encontraremos los aerodinámicos Air Curtains, así como los faros antiniebla LED de serie.
El capó está conformado por varias líneas de contorno que se dirigen hacia los riñones.
El capó alargado, la larga distancia entre ejes, los cortos voladizos y la elegante capota de lona acentúan su dinámico perfil cuando se ve el coche de costado. La nueva capota, que se abre y se cierra en solo 18 segundos a velocidades de hasta 50 km/h, le permite -junto con otros elementos- reducir el peso en un 40% respecto a su predecesor.
Como todo BMW, el habitáculo está desplazado ligeramente hacia atrás y un par de líneas de carácter, que ascienden hacia la zaga del coche a la altura de las manillas de puerta, refuerzan esa sensación. La superficie acristalada no es especialmente amplia, por lo que la visibilidad hacia detrás es limitada y hacia los tres cuartos traseros, prácticamente nula.
El Serie 4 Cabrio cuenta con un perfil más dinámico y elegante gracias a sus nuevas dimensiones. Es 128 mm más largo (4.768 mm), 27 milímetros más ancho (1.852 mm) y sólo 6 mm más alto (1.384 mm), con 41 mm más de distancia entre ejes (2.851 mm) y vías de mayor anchura (+28 mm delante hasta 1.575 mm y +18 mm atrás hasta 1.611 mm).
Tiene un coeficiente aerodinámico Cx de 0,25. El factor de resistencia es de 0,61 y la superficie frontal de 2,19 m². El BMW Serie 4 Cabrio es 56 mm más bajo que el Serie 3 y, como resultado, su centro de gravedad está 21 mm más cerca de la carretera. Esto se combina con el aumento de la inclinación negativa en las ruedas delanteras y un eje trasero 23 milímetros más ancho.
Los abultados pasos de rueda de esta unidad cuentan con unas llantas de aleación de 19 pulgadas en color negro que van calzadas con unos neumáticos Michelin Pilot Sport 4 S. Estos tienen unas dimensiones de 225/40 R19 93Y en ambos ejes y un agarre excepcional, aunque solo son recomendables si vas a exprimir las cualidades dinámicas del Serie 4 Cabrio.
En la zaga, sus amplias y diferentes superficies representan las influencias dominantes. Las luces traseras LED, delgadas y con estilo, oscurecidas por completo, con barras de luz que iluminan constantemente, subrayan el poderoso aspecto del coche. Destaca el resalte posterior de la tapa de maletero, que sirve de spoiler, dando a la zaga un aspecto musculoso.
En la parte superior del musculoso paragolpes se ubican los catadióptricos, que dan paso a unas marcadas líneas y un prominente difusor que integra dos salidas de escape redondas con un diámetro de 90 milímetros. Las versiones más prestacionales tienen dos puntas de escape trapezoidales.
Son opcionales destacados para el exterior el acceso manos libres, el asistente para luces de carretera y el paquete de fibra de carbono M. Los detalles del exterior pueden ir en aluminio satinado, negro brillante o carbono, como ocurre en esta unidad. También podemos equipar retrovisores en color negro y la capota en antracita efecto plata.
Diseño interior
El interior es uno de los aspectos más cuidados del Serie 4 Cabrio, suponiendo un verdadero paso adelante respecto a la generación anterior. Las superficies acolchadas son abundantes, tanto en las partes altas como en aquellas menos visibles, al tiempo que se ha cuidado el tacto y la apariencia de materiales y ajustes. Eso sí, es prácticamente igual que el del Serie 3.
Solo hay un detalle que no me ha gustado en este sentido y es el área de la palanca de cambios, con controles plásticos que, si bien cuentan con un buen ajuste y tacto, en mi opinión desmerecen un gran conjunto como este por su aspecto frío y rígido. Lo mismo ocurre con la palanca de cambios ¿Dónde está aquél bonito y ergonómico joystick?
Por lo demás, la marca ha hecho un gran trabajo y el nuevo lenguaje de diseño interior se caracteriza por una clara disposición de las superficies, diseñadas para acentuar la amplitud. Indudablemente el BMW Serie 4 Cabrio es un referente en calidad interior y ajustes, quedando por encima del Mercedes-Benz Clase C Cabrio o el Audi A5 Cabrio en este aspecto.
La ergonomía está muy cuidada, más que en el Audi A5 o el Mercedes Clase C Coupé. Es fácil familiarizarse con todos los mandos.
El puesto de conducción queda orientado al conductor, al tiempo que la disposición y forma del cómodo y deportivo asiento permite que encontremos fácilmente la posición deseada. Podemos equipar en opción ajuste eléctrico y memoria, soporte lumbar, regulación de anchura, calefacción y ventilación. Estos últimos son muy recomendables en un cabrio.
La calefacción para el cuello Air Collar también es muy recomendable si queremos aprovechar el ir descapotado todo el año.
Destacan detalles como que el asiento se sitúe en una posición más baja que en sus rivales. En conjunto, la posición del volante (cerca de la vertical) y los pedales (más bien alejados), así como la altura y el agarre del asiento, ofrecen una postura de conducción más deportiva que distingue al Serie 4 Cabrio de otros descapotables. Los cinturones se acercan al montarnos.
Las manos se posan cómodamente sobre un grueso volante multifunción de suave cuero extremadamente agradable al tacto, un signo característico de BMW que, personalmente, me encanta. Puede ser calefactado y se ofrecen un volante deportivo M como opción. Tampoco falta en esta unidad un recomendable Head-Up display.
La capota de tres capas está muy bien rematada.
Este incluye la velocidad del coche, los límites de velocidad, la prohibición de adelantar, los mensajes del Check Control, los indicadores de estado, avisos de los sistemas de asistencia, información detallada de la ruta, instrucciones del navegador, listas de teléfono y del sistema de entretenimiento. Su superficie es de 9.2 pulgadas, un tamaño muy generoso.
Respecto al cuadro de instrumentos, encontramos dos tipos: uno con diales analógicos y una pantalla digital de 5.1 pulgadas y el Live Cockpit Professional con pantalla de 12,3 pulgadas. Este último es más atractivo, ofrece gran visibilidad y excelente resolución, pero no alcanza en ningún caso el nivel del Audi Virtual Cockpit o el MBUX, mucho más completos.
El salpicadero tiene un aire moderno y ligero. Los acabados más sencillos cuentan con un sistema multimedia con pantalla de 8.8 pulgadas, pero esta unidad equipa de manera opcional el sistema superior, con pantalla de 10.25 pulgadas, control por gestos, asistente personal, 4G, servicios conectados, radio digital (DAB), equipo de sonido Harman Kardon…
En este caso, el sistema de infoentretenimiento es muy superior al de Audi y el asistente de voz mucho menos intrusivo que el de Mercedes-Benz, que parece escuchar y analizar hasta cuando te rascas la cabeza. Recordemos que BMW ya ofrece preparación tanto para Apple CarPlay, que puede ser incluso inalámbrico; como para Android Auto.
Las salidas de ventilación cuentan con un display monocromo central que nos ofrece la información necesaria del climatizador bizona. Es cierto que la botonera ubicada bajo las salidas de ventilación podría ofrecer un mejor acabado, ya que da la misma sensación fría que la zona de la palanca de cambios, además de presentar algunos controles un poco pequeños.
Me ha agradado que BMW haya mejorado el espacio de almacenamiento. Junto a la tradicional guantera y el espacio de almacenaje bajo el reposabrazos central, hay también una bandeja por delante de la palanca de cambios con carga inalámbrica opcional, amplias bolsas rígidas en las puertas (sin base forrada) y un compartimento adicional en el lado del conductor.
La iluminación estándar del habitáculo del nuevo BMW Serie 4 Cabrio está compuesta enteramente por LED. Incluye las luces de lectura en las plazas delanteras y traseras, así como la iluminación de la guantera, el espacio bajo el reposabrazos central, la zona de los pies, los espejos de cortesía y el maletero, además de las luces de cortesía en las puertas.
La luz ambiente opcional produce una exquisita iluminación del habitáculo, que se puede ajustar según se desee. La luz indirecta adicional que recorre el salpicadero y los paneles de las puertas utiliza luz de LED con guías de fibra óptica situadas de forma precisa para crear una atmósfera dinámica y exclusiva.
Respecto a la habitabilidad, crece sensiblemente en cotas, pero solo dos adultos serán los que viajarán realmente cómodos en el Serie 4 Cabrio. Las plazas traseras ofrecen un acceso limitado por el escaso desplazamiento -eléctrico- de los asientos delanteros; así como una altura para la cabeza justa para personas de más de 1,75 metros con la capota puesta.
De igual forma, el espacio para las piernas no es abundante, el respaldo queda muy vertical y, si los pasajeros de delante llevan el asiento en su posición más baja, el espacio para los pies no es amplio. Sí hay un reposabrazos central y posavasos. Por su parte, las plazas delanteras ofrecen el mismo espacio que en el Coupé, pero éste es más cómodo en la segunda fila.
El deflector de viento, de fácil colocación, es muy recomendable para evitar turbulencias al circular descapotados.
Por último, el maletero cubica entre 300 y 385 litros de capacidad en función de si vamos o no descapotados. Si abatimos los asientos traseros (tras ellos hay un espacio para guardar el deflector de viento) podemos obtener unos cuantos litros adicionales. En el maletero hay bolsas laterales, iluminación y toma de 12V. El borde de carga queda a 670 mm del suelo.
Motorización BMW 430i Cabrio
La oferta mecánica del BMW Serie 4 Cabrio es realmente extensa, contemplando opciones gasolina y diésel con micro-hibridación ligera. El abanico de potencias va desde los 190 CV hasta los 510 CV, resultando en todos los casos cifras más que suficientes para mover con soltura el modelo. En esta tabla podéis ver todas las opciones mecánicas disponibles:
Distintivo DGT | Tracción | Potencia | Combustible | |
BMW 420d Cabrio 8AT | ECO | Trasera | 190 CV / 140 kW | Diésel |
BMW 430d Cabrio 8AT | ECO | Trasera | 286 CV / 210 kW | Diésel |
BMW M440d Cabrio xDrive 8AT | ECO | Total | 340 CV / 250 kW | Diésel |
BMW 420i Cabrio 8A | C | Trasera | 184 CV / 135 kW | Gasolina |
BMW 430i Cabrio 8AT | C | Trasera | 258 CV / 190 kW | Gasolina |
BMW M440i Cabrio xDrive 8AT | ECO | Total | 374 CV / 275 kW | Gasolina |
BMW M4 Competition Cabrio Xdrive | C | Total | 510 CV / 375 kW | Gasolina |
Para la prueba me he decantado por la opción intermedia de gasolina, el 430i con tracción trasera, una opción acertada por la combinación entre agilidad y prestaciones que ofrece. Hablamos de un bloque de aluminio con 1.998 cm3, cuatro cilindros, dos árboles de levas en la culata, inyección directa, turbo, intercooler y Start/Stop.
Desarrolla una potencia total de 258 CV (190 kW) entre las 5.000 y las 6.500 rpm, más que suficiente para satisfacer las necesidades de la gran mayoría de usuarios e incluso ofrecerles un plus de diversión. Se complementa con un par de 400 Nm disponibles entre 1.550 y 4.400 rpm, lo que le permite ofrecer un buen empuje desde abajo y en un amplio rango de vueltas.
Al estar asociado a la transmisión automática de ocho relaciones es bastante aprovechable y tiene buen tirón, con un empuje progresivo y decidido. Además, acompaña cada aceleración de un agradable sonido. Empieza a empujar con fuerza a partir de las 2.000 rpm, aunque en una conducción tranquila la transmisión sube de marcha en el entorno de las 1.900 vueltas.
Esto ayuda a contener los consumos, complementándose con el sistema Start/Stop, cuyo funcionamiento es realmente suave. Con sus cifras de potencia es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 6.2 segundos, recuperando de 80 a 120 km/h en 4.3 segundos y alcanzando una velocidad máxima de 250 km/h. En carretera el motor gira a 1.900 rpm a 120 km/h.
El 430i ofrece unas prestaciones más que buenas y, al no tratarse de un modelo de enfoque deportivo como tal, no es imprescindible acudir a una versión más potente, salvo que busques más de picardía en el motor o una reserva de potencia abundante. A nivel refinamiento, es un motor muy suave, aunque lógicamente su consumo es más elevado que el del diésel.
Respecto a los consumos, la marca homologa un combinado WLTP de 6.9 l/100 km. La ruta no nos permitió medir los consumos reales con precisión, pero en autopista rueda fácilmente en el entorno de los 6.2 litros con capota, y por encima de 7.0 litros sin ella. Tras probarlo en diversas circunstancias y carretera, la media se detuvo en 9.2 l/100 km.
El depósito de combustible es de 59 litros.
Por último y, respecto al cambio, este es muy suave y suficientemente rápido para un uso tanto normal como más dinámico del Serie 4 Cabrio, siendo prácticamente imperceptible y respondiendo muy rápido a las órdenes que le damos al seleccionar las levas o el modo secuencial en la palanca de cambio. En posición D es algo más perezoso.
Ha demostrado buen funcionamiento incluso en maniobras a baja velocidad, algo que en otros modelos dentro de la propia gama de BMW me pareció ligeramente brusco. La palanca tiene un modo secuencial y posición Sport, añadiéndose unas levas tras el volante que, pese a ser de plástico, ofrecen un tacto bastante agradable. Giran solidarias con el volante.
No falta el selector de modos de conducción que nos permite elegir entre las opciones Eco Pro, Comfort y Sport para ajustar diversos parámetros del vehículo a nuestras necesidades, como la respuesta del acelerador, la suspensión y la caja automática, entre otros. En todos, salvo en Sport, encontramos también el modo de avance por inercia para contener los consumos.
En los BMW Serie 4 Cabrio equipados con el paquete M también se incluye la nueva función M Sprint. Al mantener pulsada la leva izquierda, permite que las características del motor y del cambio maximicen el rendimiento dinámico cuando se produce una repentina demanda de velocidad o un adelantamiento (esencialmente baja varias marchas de golpe).
Version | 430i - 4 cilindros en línea |
---|---|
Cilindrada | 1.998 cm³ |
Potencia | 190 CV (140 kW) @ 5.000 - 6.500 rpm |
Par | 400 Nm @ 1.550 - 4.400 rpm |
Peso | 1.790 kilos |
Dimensiones Lar/An/Al mm | 4.768 / 1.852 / 1.384 mm |
Volumen Maletero | 300 - 385 litros |
Aceleración 0 a 100 km/h | 6,2 segundos |
Recuperación 80 a 120 km/h | 4,3 segundos |
Velocidad máxima | 250 km/h |
Consumo homologado | 6,9 l/100 km en ciclo combinado |
Emisiones CO2 por km | 158 g/km de CO₂ (Euro 6) |
Pegatina de la DGT | C |
Precio de partida | 61.400 euros (este motor sin descuentos ni extras) |
Comportamiento BMW 430i Cabrio
Los ingenieros de BMW han logrado un gran equilibrio entre confort y comportamiento dinámico en el BMW Serie 4 Cabrio. Según la marca, la agilidad y la precisión de la dirección del automóvil, cuyo ajuste es específico, vienen de la mano de unos anchos de vía más amplios y unas caídas de las ruedas más acentuadas. También se ha ajustado la suspensión.
El equipo de desarrollo del nuevo BMW Serie 4 Cabrio ha adoptado un enfoque específico del modelo para incorporar la tecnología del chasis y conectar la suspensión a la carrocería. Los frutos de su trabajo impulsan al nuevo descapotable a la vanguardia del segmento en términos de deportividad y experiencia de conducción, algo habitual en el fabricante.
La extrema rigidez de la carrocería se refuerza aún más gracias a los refuerzos específicos de la versión Cabrio, un nuevo panel de aluminio enmarcado en la parte inferior del paragolpes delantero y unos largueros con una rigidez de torsión extremadamente alta. Como resultado, la rigidez torsional del nuevo BMW Serie 4 Cabrio es un 4% mayor que la de su predecesor.
Una inteligente mezcla de materiales sirve para optimizar tanto el peso como la seguridad. El bajo centro de gravedad del coche, las mejoradas propiedades aerodinámicas y los ajustes específicos del modelo en la geometría del chasis, el montaje y la configuración dan como resultado una agilidad y una precisión aún mejores sin comprometer la comodidad.
La suspensión estándar y la M Sport incluyen amortiguadores con una puesta a punto específica, aunque la suspensión deportiva se muestra algo dura y seca al circular sobre tramos peor asfaltados o zonas urbanas con resaltos. A mi juicio, las más acertadas son la de serie y la amortiguación adaptativa M con amortiguadores controlados electrónicamente.
Esta es ideal si queremos dotar de gran agilidad al Serie 4 Cabrio sin perder mucho confort, aunque incluso equipándola, el modelo no llega a ser incómodo, pero un Clase C Coupé o un A5 Coupé transmiten menos a los pasajeros las irregularidades del asfalto. La dirección deportiva variable se incluye con las dos variantes de suspensión opcionales.
La renovación completa de la suspensión, dirección y frenos ha proporcionado a los desarrolladores una amplia gama de oportunidades para optimizar el confort de marcha y el rendimiento dinámico, permitiendo que el cabrio vuelva remasterizado en esta nueva generación. El centro de gravedad también está más pegado al suelo que su predecesor.
Tras ponerlo a prueba, considero que el BMW Serie 4 Cabrio está orientado hacia un estilo de conducción más dinámico que sus rivales -sin llegar a transmitir las sensaciones de un deportivo-, ya que redondea mejor la trayectoria y su zaga nos aporta cierto juego en curvas cerradas, pero al igual que el Coupé, ha perdido la naturalidad de antaño.
Esto se debe a dos motivos: la intrusión constante de las ayudas a la conducción y la asistencia de la dirección, que no nos permite compenetrarnos tanto con el coche cuando vamos jugando con sus límites. Si bien la dirección nos transmite más información que la de Mercedes o Audi, ha perdido ese tacto tan natural del que hacían gala antes los BMW.
La dirección deportiva variable sí que me resulta más cómoda y rcomendable que la de serie en todos los modelos de la gama que he probado, ya permite una gran maniobrabilidad en la ciudad y en espacios reducidos (el diámetro de giro es de 11,4 metros entre paredes), al tiempo ofrece un mayor peso en autopista y mejor feedback en tramos revirados.
El conjunto siempre muestra reacciones naturales, con cambios de apoyo enérgicos y una intervención algo intrusiva de los asistentes a la conducción si los neumáticos no son los más acertados, aunque éstas pueden configurarse al gusto del conductor. Además, la propulsión permite controlar la salida de la curva a la perfección, dotándole de un toque distintivo.
Podríamos decir que es un coche que te apetece conducir, ya que en autopista también hablamos de un modelo que destaca en aplomo e insonorización pese a la capota de lona. Además, el balanceo de la carrocería en el paso por curva, aunque vayamos deprisa, es muy neutro, por lo que los pasajeros viajarán con gran comodidad en este sentido.
Con la capota de lona cerrada, el aislamiento acústico es muy bueno, aunque peor que en un Serie 4 Coupé. El ruido aerodinámico es más elevado.
Lo cierto es que pocas pegas se le pueden poner al BMW Serie 4 Cabrio durante la conducción, excepto por los detalles mencionados en naturalidad de la dirección y confort con la suspensión más deportiva. Respecto al equipo de frenos, encontramos discos ventilados en ambos ejes cuya eficacia es buena, pero su tacto resulta algo artificial a causa de la asistencia.
En cualquier caso, aquellos que vayan a practicar una conducción más deportiva y no quieran apreciar una fatiga del conjunto, deberían equipar los frenos deportivos M, ya que resultan más eficaces que los de serie. Los frenos M Sport opcionales están disponibles con pinzas de freno azules o rojas.
Cabe mencionar que los modelos más potentes (desde este 430i) pueden equipar el diferencial deportivo M, que ofrece una función de bloqueo controlada electrónicamente vinculada al Dynamic Stability Control (DSC). Esto asegura la limitación de la velocidad de rotación entre las ruedas traseras en el interior y el exterior de la curva.
Con este sistema es posible actuar de manera preventiva ante situaciones de subviraje y el sobreviraje sin intervención del freno. A su vez, el bloqueo del diferencial activo distribuye el par entre las ruedas traseras, proporcionando niveles más altos de aceleración transversal, así como un impulso perceptible en el rendimiento dinámico al acelerar cuando salimos de las curvas.
Por último y, en materia de asistencias a la conducción, están disponibles el control de crucero activo con asistente de atascos, el aviso de ángulo muerto, el asistente de carril activo, la alerta de tráfico trasero, el asistente de aparcamiento, la detección de peatones y vehículos con frenada de emergencia y una alerta al detectar que se circula en dirección prohibida, entre otros.
Equipamiento y precio
Entre el equipamiento de serie para España podemos encontrar la caja automática Steptronic, llantas de aleación de 17 a 19 pulgadas (según motor); faros LED, faros antiniebla LED, volante deportivo de cuero multifunción, capota de lona eléctrica en negro, climatizador trizona, paquete iluminación, retrovisor interior anti-deslumbramiento y tapicería de tela, entre otros.
También son de serie algunos asistentes a la conducción como el sensor de lluvia y luces, control de crucero, control de distancia en aparcamiento (PDC) delantero y trasero, sistema Active Guard Plus, llamada de emergencia inteligente, BMW Live Cockpit o Connected Package, así como la garantía de reparación extendida hasta el tercer año o los 200.000 km.
Como es habitual en BMW, se ofrecen varias líneas de equipamiento que aumentan la dotación a un precio más atractivo. En el nuevo Serie 4 Coupé se denominan de serie y M Sport (el que equipa esta unidad). Con el paquete deportivo se cambia incluso el enfoque del vehículo, mejorando considerablemente el impacto visual.
Y si todavía quieres más, puedes optar por una amplia selección de elementos M Performance. Igualmente, podemos recurrir al extenso listado de opcionales de los que hace gala el modelo, aunque cuidado con las cifras que puede alcanzar la factura final. También se ofrecen varios paquetes de equipamiento muy completos: Convertible e Innovation.
En España, los precios de la gama del BMW Serie 4 Cabrio 2021 sin descuentos ni promociones son los siguientes:
Potencia | Precio | |
BMW 420d Cabrio 8AT | 190 CV / 140 kW | 58.250 € |
BMW 430d xDrive Cabrio 8AT | 286 CV / 210 kW | Julio 2021 |
BMW M440d Cabrio xDrive 8AT | 340 CV / 250 kW | Noviembre 2021 |
BMW 420i Cabrio 8AT | 184 CV / 135 kW | 57.300 € |
BMW 430i Cabrio 8AT | 258 CV / 190 kW | 61.400 € |
BMW M440i Cabrio xDrive 8AT | 374 CV / 275 kW | 83.400 € |
BMW M4 Competition xDrive Cabrio | 510 CV / 375 kW | Finales de 2021 |
- Capote de lona rápida en funcionamiento -peo menos que el A5 Cabrio- y con excelente aislamiento acústico.
- Gran calidad de realización tanto en el exterior como en el interior.
- Amplias posibilidades de equipamiento.
- Maletero más grande que el de sus rivales.
- Fuerte carga tecnológica en materia de asistencias a la conducción y de seguridad.
- Excelente dinámica de conducción con una gran calidad de rodadura.
- Pequeñas lagunas de equipamiento.
- Las sensaciones están más enfocadas al confort que a una conducción deportiva intensa.
- Detalles en plástico rígido que no terminan de convencer, como la palanca de cambios, los botones de alrededor y los controles del clima.
- La dirección podría ser más informativa y natural.
- La suspensión deportiva resulta incómoda cuando el asfalto no está en buen estado o hay resaltos.
- Plazas traseras poco aprovechables.