Lanzado en 2019 por primera vez, el KIA XCeed acaba de renovarse. Con ello, sigue los pasos de sus hermanos de gama. Tras la actualización es más atractivo visualmente y también recibe mejoras de equipamiento. La oferta mecánica contempla opciones diésel, gasolina y MHEV. Hoy conducimos el KIA XCeed eMotion PHEV.
Según KIA Europa, el XCeed es el favorito de la familia en el mercado europeo. Con vistas a mantener fresco el modelo, la marca le ha practicado un poco de cirugía estética. El Ceed sigue estando disponible en versión hatchback y familiar (Tourer). A ellos se unen el KIA Proceed de aspecto más deportivo y este XCeed crossover.
El KIA XCeed 2022 sigue siendo una apuesta ganadora por su relación calidad-precio-equipamiento. A ello suma un interior práctico, espacio suficiente para que cuatro adultos viajen cómodamente y un equipamiento abundante. Por otra parte, KIA ha llevado a cabo una puesta a punto que hace la conducción más agradable.
En KIA no han apostado por una carrocería SUV al uso, entre otras cosas para no canibalizar ventas del Sportage. Por ello, la mayoría de sus rivales en el segmento C-SUV lucen un aspecto muy diferente. Lo más parecido en este sentido son el Mercedes-Benz GLA, el BMW X2, el Fiat Tipo Cross y el Ford Focus Active.
Diseño exterior
El renovado KIA XCeed llega con múltiples, pero sutiles cambios en su exterior. En el frontal llama la atención una nueva parrilla, que varía en función del acabado. Esta se complementa con varios acentos cromados, así como otros detalles en negro brillante. Al final del marcado capó destaca especialmente el nuevo logotipo de la marca.
En los extremos del frontal del XCeed encontramos un nuevo sistema de iluminación Full LED. Hay nuevos faros delanteros y nueva firma lumínica para estos. Ya en el extremo inferior podemos apreciar un nuevo paragolpes delantero (varía según el acabado). La luna delantera es amplia, ofreciendo buena visibilidad.
En dimensiones, el KIA XCeed cuenta con una longitud de 4.39 metros, una anchura de 1.83 metros y una altura de 1.48 metros. La altura libre al suelo es de 170 milímetros. Su batalla asciende a 2.650 milímetros. Las vías delantera y trasera miden 1.570 y 1.573 mm, respectivamente. El peso es de 1.569 kg en esta versión.
Para la vista lateral, simple y dinámica, hay llantas de 16 a 18 pulgadas. Presume de una musculosa cintura. Se complementa con marcados pasos de rueda. En este caso las llantas de 18 pulgadas calzan unas gomas ContiSportContact 5. Miden 235/45 R18 94V en ambos ejes. El área acristalada es amplia y la superficie de las puertas limpia.
Dependiendo del acabado, el nuevo XCeed también equipa unos nuevos pilotos traseros full LED con intermitentes dinámicos. El alerón de techo con la tercera luz de freno y aletines en negro pone el toque deportivo. El equipo de diseño de KIA también ha ajustado el paragolpes y el difusor en la parte posterior.
En él encontramos acentos en cromado, así como unas salidas de aire simuladas. El nuevo modelo llega con 11 colores de carrocería, tres de ellos nuevos (Yuca Steel, Lemon Splash y Celadon Spirit Green). Se ofrecen acabados sólidos y metalizados, con tonos alegres y clásicos. En este caso podemos ver el Yucca Steel Gray metalizado.
En la zaga tampoco faltan los sensores de aparcamiento posteriores y la cámara de marcha atrás, con una calidad de imagen realmente buena. Sobre el techo descansa una antena de tipo aleta de tiburón, barras en cromado o negro y, dependiendo de la versión, un techo solar practicable con apertura eléctrica.
Diseño interior
En el interior, el XCeed incorpora como novedades algunos botones del volante, el espejo retrovisor de marco más fino y algunas tapicerías. La calidad es buena, como en su predecesor. Vemos múltiples superficies acolchadas en las partes altas y visibles. Por ejemplo, el salpicadero está rematado de material acolchado, con costuras.
Los plásticos duros se mantienen para las zonas bajas. En todo caso, tienen un aspecto muy agradable al tacto y a la vista, como la botonería. Todo se ha cuidado mucho en su conjunto y encontramos un excelente nivel ensamblado. Esto evita la aparición de crujidos y vibraciones. Hay también detalles que resaltan la calidad del interior.
El salpicadero cuenta con un diseño muy horizontal que crea una sensación de mayor espacio interior. Los asientos, que van 44 mm más elevados que los del Ceed, ofrecen buen agarre sin llegar a ser deportivos. Son cómodos en respaldo y banqueta, aunque el reposacabezas es demasiado duro para mi gusto.
Todo queda al alcance de nuestras manos. Estas se posan cómodamente en un volante con ajuste en altura y profundidad. Con ocho botones y cuatro elementos giratorios, da la oportunidad al conductor de acceder a la mayoría de los sistemas. A él sumamos el control por voz que, a pesar de no ser de los más sofisticados, funciona bastante bien.
Tras el volante encontramos un cuadro de instrumentos digital. Hace gala de un tamaño de 12,3 pulgadas. Es personalizable y permite visualizar cuatro diseños. Tres de ellos van en función del modo de conducción, aunque pueden seleccionarse independientemente). El cuarto es el más más llamativo.
Los cinturones son regulables en altura.
La instrumentación, muy clara e intuitiva, reemplaza a los indicadores convencionales del velocímetro y del tacómetro. Su pantalla única incorpora indicadores visibles con una alta frecuencia de actualización. En la parte central encontramos un área multifunción que se controla mediante unos botones situados en el volante.
En esta sección de la instrumentación, el conductor puede ver claramente dentro de su campo de visión las indicaciones de giro del navegador, así como la información del sistema de audio, las llamadas de teléfono, las notificaciones de varios sistemas de seguridad activa, de tecnologías de asistencia a la conducción, los contactos o información detallada del viaje.
Las versiones más sencillas llevan un cuadro de instrumentos compuesto por dos diales en los extremos y una pantalla a color. Tiene un tamaño de 4,2 pulgadas. La pantalla del sistema multimedia es de 5 pulgadas en los Concept y de 8 pulgadas en los Drive. En los Tech, GT-Line y eMotion ya es de 10,25 pulgadas.
Al igual que en el resto de los modelos de la gama, el salpicadero está dividido en dos alturas. Presidiendo el mismo tenemos la pantalla táctil flotante. Nos da acceso al sistema de infoentretenimiento. Este sistema es muy claro y funcional. Ofrece buenos gráficos y compatibilidad con la aplicación UVO Connect con interesantes funciones.
Se incluyen 7 años de servicios conectados gratuitos (estadísticas de conducción, estado del vehículo, función de búsqueda del coche, enviar direcciones al navegador…). El equipo es rápido e intuitivo, con Apple CarPlay y Android Auto integrados. El más completo equipa el sistema de sonido JBL Premium.
En la parte inferior del salpicadero nos encontraremos con los controles para el audio y la climatización bizona en este acabado. La única pena es que en días soleados la pantalla de los diales del climatizador no se ve nada bien. También se abusa del odioso Piano Black en diversos elementos, que “atrae” la suciedad y produce reflejos.
Entre las plazas delanteras hay un reposabrazos central deslizable con una guantera espaciosa. Tampoco faltan dos posavasos con cortinilla y suficientes huecos portaobjetos. El del salpicadero puede equipar cargador inalámbrico de smartphone. Me han parecido algo pequeñas las guanteras de las puertas, que carecen de base forrada.
El espacio interior del modelo es muy generoso, un poco más incluso que en el Ceed. En la segunda fila de asientos, el cristal con forma de media luna y la inclinada línea de techo proporcionan a los pasajeros un ambiente luminoso y un mayor espacio para la cabeza que en otros competidores dentro del segmento de los crossover compactos.
Es cómodo para dos adultos de estatura media-alta en lo que a anchura, altura y espacio para las piernas se refiere -incluso con techo solar-. Sin embargo, tres personas irán incómodas en trayectos largos. Si bien el túnel de transmisión no es muy intrusivo, la altura de la plaza central es menor, la anchura reducida y el mullido más duro por el reposabrazos central.
El volumen de carga se sitúa en 291 litros en los PHEV, una cifra reducida. El umbral de carga no queda muy alto (740 mm), pero no podemos variar la altura del piso. Solo hay un pequeño doble fondo para los cables y el kit antipinchazos. Los asientos traseros se pueden abatir -60:40- para ofrecer hasta 1.378 litros. El portón en este acabado es eléctrico.
Motorización KIA XCeed eMotion PHEV
La oferta mecánica del XCeed es muy amplia en nuestro país. En gasolina (C) arranca con el tricilíndrico 1.0 TGDI de 120 CV en combinación con la caja manual de seis velocidades. En un escalón intermedio está el MHEV (ECO) 1.4 TGDI de 160 CV. Se ofrece con la caja manual con seis velocidades como con la DCT con siete relaciones.
Como alternativa más prestacional está el cuatro cilindros 1.6 TGDI con 204 CV (C) que, igualmente, se puede adquirir con cambio manual o de doble embrague DCT. A pesar del toque campero, todas las versiones incluyen el sistema de tracción sencillo al eje delantero, no estando prevista ninguna alternativa con tracción integral.
En diésel, se pueden elegir las nuevas versiones mild hybrid (ECO) con motor de cuatro cilindros 1.6 con 136 CV. Combinan este motor con otro eléctrico de 12 CV y con una batería de iones de litio con 0,4 kWh de capacidad. Se asocia a la caja de cambios manual iMT de seis velocidades o a la caja DCT de siete velocidades.
El sistema de parada y arranque Intelligent Stop & Go (ISG) está equipado de serie en todas las versiones.
Para la prueba me he decantado por la opción híbrida enchufable (CERO). El motor de combustión es el conocido bloque de aluminio T-GDi con 1.580 cm3 de cilindrada. Cuenta con dos árboles de levas en la culata, inyección directa y Start/Stop. Eroga 105 CV (77 kW) de potencia a 5.700 rpm y 147 Nm de par a 4.000 vueltas.
Se combina con un motor eléctrico de 61 CV (45 kW) y 170 Nm de par. En conjunto, ofrece una potencia combinada de 141 CV (104 kW) y 265 Nm de par. La batería tiene 8,9 kWh de capacidad. Gracias a ello, la autonomía es de 42 km en ciclo combinado WLTP. La caja de cambios es la automática de doble embrague y seis relaciones.
No hay levas ubicadas tras el volante, pero sí modo secuencial de la palanca de cambios. Encontramos, además, dos modos de conducción: ECO y SPORT. En el segundo son apreciables una respuesta más reactiva al acelerar, cambios más rápidos y la dirección se endurece. Brinda un empuje lineal que resulta más que suficiente en la mayoría de las circunstancias.
Por otra parte, un botón en la consola central permite elegir entre modo híbrido, eléctrico o Auto. En conjunto, brinda un empuje lineal que resulta más que suficiente en la mayoría de las circunstancias, aunque no es un coche rápido como tal. En cifras, hablamos de un 0 a 100 km/h en 11 segundos. Recupera de 80 a 120 km/h en 8,2 segundos.
La velocidad punta es de 160 km/h (135 km/h en eléctrico). Más convincentes que las prestaciones resultan los consumos. Con la batería cargada es posible moverse en ciudad por debajo de los 2 litros. Depende de la frecuencia con la que entre en acción el motor de combustión. En carretera, con batería, podemos movernos por debajo de 4.0 litros.
Sube a unos 6.0 litros cuando ésta se descarga. En este sentido, destaca la gestión que hace el sistema entre ambos motores. No agota desde un principio toda la batería, sino que equilibra el uso de ambos motores todo el trayecto. La media de consumo tras más de 1.000 km recorridos fue de 3.9 l/100 km, una cifra muy buena.
KIA, por su parte, homologa un consumo combinado de 1,7 litros a los 100 km en ciclo WLTP. En una conducción real te será prácticamente imposible igualar o acercarte a esa cifra. El depósito de combustible tiene una capacidad de 37 litros, lo que permite obtener una autonomía muy decente. Pierde 13 litros de capacidad respecto a los gasolina y diésel.
El cambio, por su parte, resulta muy suave, como en el resto de la gama KIA. Sí me he percatado que en modo ECO se siente algo más lento en ciertas situaciones. En todo caso, su funcionamiento es más que adecuado al tipo de vehículo, mucho mejor que un CVT. Cabe destacar que la capacidad de carga máxima es de 3,3 kW en CA.
Version | 1.6 PHEV eMotion - 4 cilindros en línea + eléctrico |
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Cilindrada | 1.580 cm³ |
Potencia | 141 CV (104 kW) |
Par | 265 Nm |
Peso | 1.596 kilos |
Dimensiones Lar/An/Al mm | 4.395 / 1.826 / 1.483 mm |
Volumen Maletero | 291 (1.243) litros |
Aceleración 0 a 100 km/h | 11 segundos |
Recuperación 80 a 120 km/h | 8,2 segundos |
Velocidad máxima | 160 km/h |
Consumo homologado | 1,7 l/100 km en ciclo combinado |
Autonomía eléctrica | 42 kilómetros WLTP |
Emisiones CO2 por km | 38 g/km de CO₂ (Euro 6) |
Pegatina de la DGT | Cero |
Precio de partida | 40.625 euros (este motor y acabado sin descuentos ni extras) |
Comportamiento KIA XCeed eMotion PHEV
Salvo por la postura de conducción, sensiblemente más elevada, existen pocas diferencias entre el KIA Ceed y el XCeed al volante. Sí me parece que el XCeed sigue un peldaño por encima de este en dinamismo, aislamiento y calidad de rodadura. En cualquier caso, no hay novedades a nivel técnico tras el lavado de cara.
Lo cierto es que la puesta a punto del XCeed en comportamiento es digna de mención. Se parece mucho más a un turismo que a un SUV. Es cierto que hay alternativas más deportivas y directas, como es el caso del BMW X2. Sin embargo, KIA ha logrado un gran equilibrio entre confort y agilidad, creando un conjunto muy polivalente.
Se nota que el chasis permite una puesta a punto dinámica, aunque el cliente no sea lo que busca. Para lograr la máxima polivalencia, la suspensión -esquema McPherson en el eje delantero y paralelogramo deformable en el trasero- añade topes hidráulicos en los amortiguadores y un tarado intermedio. Cómodo, pero sin apenas balanceos.
Con ello, ofrece una respuesta suave a las irregularidades del terreno y una reducida tendencia a los rebotes sobre firmes deteriorados. Por ejemplo, el mencionado BMW X2 es más incómodo, igual que un GLA con paquete AMG. Además, brinda un paso por curva muy controlado, con reacciones naturales y una gran facilidad de conducción.
En carreteras reviradas, el modelo se mueve con bastante precisión. Transmite confianza y aplomo, aunque se percibe que la asistencia de la dirección es elevada con el objetivo de favorecer la conducción en largos viajes y a bajas velocidades. En otras palabras, le falta feedback. El diámetro de giro entre bordillos es de 10,4 metros.
El tacto de los frenos es normal, con las particularidades de los PHEV. Es perceptible su asistencia, pero en general hace gala de buena sensibilidad y graduación a la hora de aplicar la fuerza de frenada. Encontramos discos de freno ventilados de 320 milímetros en el eje delantero y discos macizos de 284 milímetros en el trasero.
En el apartado de seguridad y asistencias a la conducción, el XCeed recibe novedades en el control de crucero inteligente (función predictiva) y un detector de objetos en el ángulo muerto con asistencia sobre los frenos. Mantiene el asistente dinámico para luces de carretera, detección de fatiga, asistente de aparcamiento, asistencia de carril, sistema de advertencia de colisión frontal con frenada de emergencia…
Equipamiento y precio
Los niveles de acabado se denominan Concept, Drive, Tech, Emotion y GT-Line. Desde el más sencillo cuenta con aire acondicionado, múltiples airbags, cuatro elevalunas eléctricos, ordenador de viaje, control de velocidad con limitador, sistema de sonido integrado, bluetooth, puerto USB, alerta de cambio de carril, aviso pre-colisión, volante en piel…
El nivel Drive añade el climatizador automático de dos zonas, sistema multimedia con pantalla de 7”, Apple CarPlay, Android Auto, cámara de visión posterior, sensores de aparcamiento traseros, sensor de lluvia, llantas de aleación de 16 pulgadas, pilotos traseros LED, faros antiniebla, espejo interior fotosensible y SmartBeam, entre otros.
En el acabado Tech suma el apoyabrazos central trasero, sistema de navegación con pantalla de 10.25 pulgadas, cristales sobretintados, llantas de aleación de 18 pulgadas, retrovisores plegables con mando eléctrico, tapizado de diseño específico, red de maletero…
El nivel GT-Line es la gran novedad. Cuenta con el paquete deportivo exterior, techo solar panorámico, pedales y volante deportivos, lector de señales, instrumentación digital, monitor de ángulo muerto, acceso sin llave, arranque por botón, sistema de aparcamiento automático con sensores delanteros, llantas específicas, etcétera.
Por último, la terminación Emotion regresa como tope de gama. Añade a lo anterior el techo de cristal deslizante, faldones laterales, tapizado mixto tela/piel, acceso y arranque sin llave, asistente al aparcamiento automático, sistema de sonido JBL con subwoofer, panel de instrumentos digital de 12,3” y faros Full LED, entre otros.
La gama del KIA XCeed 2022 parte de los 24.950 euros para el XCeed Concept 1.0 T-GDi 120 CV. Asciende hasta los 40.625 euros en el caso de este XCeed eMotion 1.6 PHEV 141 CV DCT. Puedes tenerlo con pegatina ECO desde 27.800 € y con pegatina CERO desde 37.075 €. Todos los precios son sin descuentos ni promociones.
Diseño/Estética
Calidad de acabado
Equipamiento de serie
Equipamiento opcional
Habitabilidad
Maletero
Motor/Refinamiento
Prestaciones
Consumos
Transmisión
Dirección
Frenos y neumáticos
Comportamiento
Calidad de rodadura
Relación valor-precio
7.6
Notable
La nueva entrega del KIA XCeed representa una vuelta de tuerca respecto al gran producto que era el anterior modelo. Con un logotipo revisado, un diseño muy europeo, mecánicas actualizadas y un habitáculo cargado de equipamiento a precios aptos para la mayoría de los bolsillos, el nuevo Kia XCeed se planta en el mercado como una apuesta acertada en el reñido segmento C-SUV.
Lo bueno
- Calidad interior al tacto y a la vista.
- Es más dinámico que los SUV tradicionales.
- Buena habitabilidad.
- Muy bueno en sonoridad, vibraciones y calidad de rodadura.
- Equipamiento de serie elevado desde los acabados de acceso.
- Novedades en materia de seguridad.
Lo mejorable
- No se ofrecen versiones con tracción total, ni siquiera un sistema que mejore la tracción con baja adherencia del tipo Grip Control.
- Falta un diésel algo más potente.
- Precio algo elevado sin descuentos.
- Reflejos provocados por las superficies en negro brillante los días soleados.
- El brillo del displaydel clima es muy bajo y a veces no se ve la temperatura seleccionada.
- Las versiones PHEV pierden mucho maletero.