No es ningún secreto que el Škoda Octavia es uno de los ‘niños mimados’ dentro de la casa. Acumula más de 7 millones de unidades vendidas y, si bien ahora le superan en ventas los SUV, en su día fue el corazón de la compañía. Era uno de los más vendidos a particulares y flotas en Europa. Hoy probamos el renovado Škoda Octavia Combi 1.5 TSI 150 CV DSG Design.
Ha llovido mucho desde que conociéramos el primer Škoda Octavia en 1996. Con la llegada del renovado modelo, es mucho más que “el coche de los taxistas” de antaño. Actualmente se acerca peligrosamente a sus hermanos de gama que están un escalón por encima, como el Superb, con un elenco tecnológico y de equipamiento capaz de sorprendernos.
También el diseño es más llamativo y ha perdido los polémicos faros divididos que debutaron en la tercera generación; al tiempo que su interior gana en calidad y espacio. Su gama mecánica se ha reforzado con la introducción de nuevas versiones. Tenemos opciones gasolina, diésel y mild hybrid, pero por ahora no hay híbridos enchufables.
Disponible en berlina y Combi, el Octavia ofrece un precio muy interesante entre los competidores de tamaño similar y la practicidad de las soluciones ‘Simply Clever’. Son competidores del Combi las versiones familiares de los Volkswagen Golf, KIA Ceed, Hyundai i30, Opel Astra, Toyota Corolla, Renault Mégane, Peugeot 308, Fiat Tipo, SEAT León y Ford Focus.
Diseño exterior
El nuevo Škoda Octavia Combi es una actualización de mitad de ciclo comercial. Sin embargo, desde la marca son conscientes de que un producto tan importante no puede retocarse sin más. Hay que ofrecer algo que mejore el producto, pero sin cambiarlo en exceso. Por ello, ha pasado por el quirófano para someterse a algunos retoques estéticos.
El nuevo lenguaje de diseño de Škoda le ha sentado realmente bien al Octavia Combi. En el frontal nos encontramos con unos nuevos faros LED más nítidos. Dejan atrás la época «bifaro» y unifican su diseño -aunque mantienen ese aspecto gracias a luz diurna LED en forma de flecha-. La tecnología Matrix LED de segunda generación es opcional según acabado.
En opción de puede optar por el parabrisas calefactado.
El remozado Škoda Octavia Combi también presenta un paragolpes delantero totalmente nuevo; así como una parrilla ligeramente actualizada. La entrada de aire inferior ocupa todo el ancho del frontal y ahora prescinde de las luces antiniebla. El alargado y nervado capó da paso a una generosa luna que ofrece una buena visibilidad.
Para la vista lateral tenemos nuevos diseños de llantas que van desde las 16 hasta las 19 pulgadas de serie. En este caso vemos las de 18 pulgadas. Calzan unos neumáticos Pirelli Cinturato P7 en dimensiones 225/45 R18 91Y para ambos ejes. Asimismo, se ha actualizado la paleta de colores. Tenemos tonos clásicos y más vivos, con acabados sólido y metalizado.
De los 12 colores disponibles, en este caso vemos el Beige Sahara especial. En cuanto a las dimensiones, no hay grandes variaciones. Mide 4.70 metros de largo, 1.83 metros de ancho y 1.47 metros de alto. La distancia entre ejes asciende hasta los 2.686 mm; mientras que los anchos de vía delantero y trasero alcanzan los 1.546 y 1.55 mm, respectivamente.
Para rematar, la zaga ahora cuenta con unos pilotos Full LED que se ofrecen en dos versiones, dependiendo del acabado. Tampoco faltan un marcado alerón de techo con aletines en negro, la denominación Škoda entre los faros, protagonizando el amplio portón; y un embellecedor plástico en el paragolpes, simulando un difusor. Los escapes no se ven.
Los cristales delanteros pueden ser acústicos y los traseros tintados.
Cabe destacar que la amplia superficie acristalada del modelo puede complementarse con un techo solar panorámico practicable. Tiene cortinilla eléctrica. Mirando el Octavia Combi desde arriba, también tenemos una antena de tipo aleta de tiburón en negro y barras longitudinales en color plata. En opción se puede equipar gancho de remolque.
Diseño interior
Los cambios no sólo se han centrado en el exterior, el interior recibe nuevos materiales para los asientos, el salpicadero y los paneles de las puertas; así como más tecnología y conectividad. Es cierto que tanta digitalización requiere cierto período de adaptación. Sin embargo, en el gigante alemán han sabido crear un conjunto bastante intuitivo.
En general, su aspecto se ha enriquecido, al igual que ocurre con la calidad percibida y el empaque. Ahora va más en la línea del Superb, del segmento superior. Vemos mucha calidad a bordo, con superficies blandas en las partes altas y plásticos rígidos en las zonas bajas. Sin embargo, hay detalles que no se han mimado tanto en algunos puntos.
Por ejemplo, la chapa en el marco de las ventanas se ve desde el interior. Por el contrario, nos gusta que el uso de superficies en negro brillante es más moderado que en otros modelos de VAG. En este acabado destaca también el salpicadero tapizado, un detalle de alto valor; así como la base de los huecos portaobjetos de las puertas forrada.
Llama la atención que esas líneas de corte horizontal que la marca ha querido plasmar en el exterior vuelven a estar presentes en el habitáculo. Por otra parte, el salpicadero está ahora mucho más descargado de botones. Quizás demasiado, ya que incluso la mayoría de los controles del climatizador trizona opcional están integrados en la pantalla.
Prácticamente todas las funcionalidades las asume la nueva pantalla táctil de 13 pulgadas. Gracias al nuevos hardware y software, se trata de un sistema de mucha calidad. Ofrece actualizaciones inalámbricas, sensores de proximidad, personalización de los accesos directos en el menú principal y un control por voz optimizado.
También incluye la integración de ChatGPT, aunque sus funciones irán mejorando con el tiempo. Además, ofrece una amplia conectividad y equipa de serie Android Auto y Apple CarPlay (inalámbrico). No solo es más intuitivo, sino que también se han mejorado los gráficos, la fluidez, la sensibilidad y la respuesta a nuestras órdenes.
Ciertas funciones básicas se han dejado fuera, para acceder a ellas a través de botones directos. Es el caso del deslizador táctil del volumen ubicado bajo la pantalla, ahora con retriluminación; así como la tira de botones físicos ubicados sobre las salidas de ventilación. Lo cierto es que el salpicadero luce elegante y sofisticado a partes iguales.
Continuando por el túnel de trasmisión, nos encontramos con dos tomas USB-C (45W), un hueco portaobjetos con carga inalámbrica refrigerada para el smartphone (15W), el nuevo selector de cambio, el freno de mano eléctrico, el Auto Hold y dos posavasos con una cortinilla para cubrirlos. La consola central culmina en un reposabrazos deslizable y ajustable en altura.
En su interior se esconde una guantera con refrigeración y la toma de 12V. A ambos lados encontramos dos cómodos asientos de buena sujeción y mullido confortable. La pena es que la banqueta no sea algo más larga y agarre mejor las piernas. Pueden sumar apoyo lumbar, calefacción, ventilación, ajuste eléctrico, memoria e incluso masaje.
Adicionalmente, podemos ajustar el cinturón en altura. El Octavia cuenta con detalles muy interesantes como la luz ambiental LED personalizable y múltiples funcionalidades Simply Clever. El elenco de accesorios disponible lo convierte en una de las opciones más prácticas y polivalentes del segmento, ideal para familias con niños.
Una vez acomodados, las manos se posan sobre un ergonómico, suave y funcional volante de dos radios calefactado opcional. Desde el mismo podemos manejar el sistema multimedia, la instrumentación y acceder a los ADAS. Esta tiene un tamaño de 10 pulgadas y ofrece abundante información, siendo personalizable en varias vistas.
Respecto a la habitabilidad, hay que señalar que el acceso a todas las plazas es cómodo. El ángulo de apertura de las puertas está en la media del segmento; mientras que el espacio para las piernas es muy bueno para el tamaño del modelo y destaca especialmente la altura al techo. Personas de hasta 1,90 metros de altura viajarán cómodas.
Está por debajo de algunos rivales en anchura. Además, la plaza central presenta las clásicas limitaciones del túnel de transmisión, las salidas de ventilación posteriores y un mullido algo más duro a causa del reposabrazos. Me gusta el hecho de que cuente con una trampilla de acceso al maletero y un espacio específico para el móvil en los respaldos delanteros.
En la segunda fila, el Octavia Combi ofrece opcionalmente un enchufe de 230V, cortinillas enrollables para las ventanillas, soportes para tabletas en los reposacabezas delanteros y unos reposacabezas traseros con piezas laterales extensibles para la segunda fila de asientos. También hay salidas de ventilación, tomas USB-C (45W) y reposabrazos.
El maletero cubica 640 litros, siendo uno de los mayores del segmento. Si abatimos los asientos -60:40-, el volumen asciende a 1.700 litros. Basta con tirar de unas palancas. El portón puede ser eléctrico y se ofrecen múltiples accesorios. Destaca por su modularidad, ya que ofrece unas formas muy regulares y un piso que se puede ajustar a dos alturas.
Bajo el maletero puede equiparse una rueda de emergencia o el kit antipinchazos. El espacio de carga cuenta con ganchos para colgar bolsas, puntos de sujeción, iluminación y una toma de 12 voltios. Además, la cortinilla cubre equipaje puede ser eléctrica. La altura al suelo del borde de carga se sitúa en los 610 milímetros.
Motorización Škoda Octavia Combi 1.5 TSI 150 CV DSG
La gama de propulsores del Octavia actualizado contempla opciones gasolina, gasolina micro híbridos y diésel. No hay ni híbridos enchufables ni eléctricos, al menos por ahora. Te resumimos en una tabla las diferentes posibilidades mecánicas:
Motores de gasolina | |||
Potencia | Par máximo [Nm] | Tracción | Transmisión |
1.5 TSI 115 CV (85 kW) | 220 | FWD | Manual 6 vel. |
mHEV 1.5 TSI 115 CV (85 kW) | 220 | FWD | DSG 7 vel. |
mHEV 1.5 TSI 150 CV (110 kW) | 250 | FWD | DSG 7 vel. |
2.0 TSI 204 CV (150 kW) (2025) | 320 | AWD | DSG 7 vel. |
2.0 TSI 265 CV (195 kW) | 370 | FWD | DSG 7 vel. |
Motores diésel | |||
Potencia | Par máximo [Nm] | Tracción | Transmisión |
2.0 TDI 115 CV (85 kW) | 300 | FWD | Manual 6 vel. |
2.0 TDI 150 CV (110 kW) | 360 | FWD | DSG 7 vel. |
Entre las novedades, cabe destacar que los motores 1.5 TSI cuentan con un turbocompresor que presenta una geometría de turbina variable y una eficiencia térmica superior. Por su parte, los 2.0 TSI inyectan combustible con una presión de 350 bares. Además, incorporan un sistema de distribución variable de válvulas.
La mejora de la admisión de aire y la optimización de la fricción contribuyen a aumentar la potencia. La variante de 204 CV (150 kW) funciona en ciclo Budack. Tiene una relación de compresión aumentada de 12,2:1 y es 10 kW (14 CV) más potente que su predecesor. El Octavia RS produce ahora 265 CV (195 kW), 15 kW (20 CV) más que antes.
En el caso de los 2.0 TDI, un cigüeñal con pistones de acero reduce eficazmente las pérdidas de calor; al tiempo que aumenta la velocidad de combustión. La presión de inyección es de 2.200 bares; mientras que el turbocompresor se beneficia de la geometría variable de la turbina. Esto garantiza una presión de sobrealimentación óptima.
Y lo hace en una amplia gama de revoluciones, lo que se traduce en una curva de potencia más lineal. El sistema optimizado de tratamiento de los gases de escape que reduce las emisiones de óxido de nitrógeno (NOx) está situado cerca del motor. Utiliza un proceso de dosificación doble para inyectar AdBlue antes de dos catalizadores SCR. Van dispuestos uno detrás del otro.
Para la prueba me he decantado por el 1.5 TSI mHEV, una de las versiones más interesantes de la gama por prestaciones y consumos. Cuenta con un bloque de aluminio con 1.498 cm3, cuatro válvulas, dos árboles de levas en la culata, inyección directa, turbo e intercooler. Eroga una potencia de 150 CV (110 kW) entre las 5.000 y las 6.000 rpm.
Está asociado a un par máximo de 250 Nm a partir de las 1.500 rpm y hasta las 3.500 rpm. Es un rango amplio de revoluciones que, unido al buen empuje desde bajas vueltas, el elástico DSG y el buen funcionamiento del sistema mHEV, le permite ser tremendamente aprovechable. Nos brinda una correcta aceleración en múltiples circunstancias.
A 120 km/h, el motor gira a 2.200 rpm en 7ª velocidad.
Además, es una mecánica muy refinada. Tiene un funcionamiento prácticamente imperceptible por sonido y vibraciones, incluso cuando actúa el Start/Stop. También ofrece una respuesta al acelerador medianamente ágil, salvo cuando pisamos a fondo. Si hablamos de cifras, es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en unos razonables 8.6 segundos.
Asimismo, recupera de 80 a 120 km/h en 6.4 segundos y alcanza una velocidad máxima de 225 km/h. Para la mayoría de los usuarios, las cifras de esta versión serán más que adecuadas para un uso racional y polivalente del vehículo. Además, con el DCC podemos elegir cinco modos de conducción: Normal, Sport, Comfort, Eco e Individual.
Estos modifican diversos parámetros del vehículo (respuesta del acelerador, gestión del DSG…). Por ejemplo, en Individual se pueden elegir hasta 15 ajustes distintos de dureza de suspensiones. Y todo ello asociado a un gran equilibrio prestaciones-consumo. Lo cierto es que el Octavia con este motor es capaz de sorprenderte gratamente en este aspecto.
El 2.0 TDI de 150 CV ofrece un consumo inferior y un rendimiento muy parejo.
Respecto a los consumos, la compañía checa declara un consumo combinado de solo 5 l/100 km en ciclo WLTP. Durante la semana de pruebas la cifra final fue de 6,5 l/100 km. En una conducción real en carretera obtuve 5,8 l/100 km; mientras que en ciudad rondaba los 7,5 l/100 km. El depósito de combustible tiene una capacidad de 45 litros.
A nivel técnico, uno de los elementos más destacados del 1.5 eTSI es el sistema de desconexión de cilindros. Desactiva temporalmente los cilindros 2 y 3 cuando el motor funciona en carga baja o media. Si hablamos de esta versión mild hybrid, en el motor de combustión hay un alternador-motor de arranque accionado por correa (BAS).
Este alimenta a un sistema eléctrico de 48V que integra una compacta batería de iones de litio situada bajo el asiento del pasajero delantero. Un transformador lo conecta con el sistema eléctrico convencional de 12 V. En condiciones de circulación normales, el sistema mHEV logra una sensible reducción del consumo de combustible.
Cuando el conductor deja de acelerar o frena ligeramente, el BAS puede recuperar hasta 12 kW de potencia y alimentar la batería. Al arrancar y al acelerar desde un régimen bajo, ayuda al TSI con hasta 18 kW (13,5 kW). En ciertas situaciones de marcha puede variar la carga en el motor de tal manera que aumenta aún más su eficiencia.
También gestiona el estado de carga de la batería de 48 V. Almacena suficiente energía para que, en muchas situaciones, el Octavia Combi pueda desplazarse por inercia con el motor apagado (eco-coasting). Si el conductor levanta el pie del acelerador entre 55 y 160 km/h, el nuevo Octavia es capaz de circular con el motor de combustión apagado.
Lo hace durante un tiempo máximo que supera los 30 segundos. En el momento preciso, el BAS vuelve a arrancar rápidamente el motor TSI. El Start/Stop se puede activar desde una velocidad de 22 km/h. Respecto al cambio DSG, este se muestra tan eficaz como de costumbre. Proporciona una rapidez notable y unos cambios de marcha suaves.
En una conducción tranquila, sube de marcha en el entorno de las 2.000 rpm. Se puede utilizar con las levas ubicadas tras el volante, pero la “palanca” no tiene modo secuencial, solo posición ‘S’. Por último, cabe destacar que, gracias al sistema micro híbrido, esta versión luce el codiciado distintivo ‘ECO’ de la Dirección General de Tráfico.
Version | 1.5 TSI 150 CV DSG Design - 4 cilindros en línea |
---|---|
Cilindrada | 1.498 cm³ |
Potencia | 150 CV (110 kW) @ 5.000 - 6.000 rpm |
Par | 250 Nm @ 1.500 - 3.500 rpm |
Peso | 1.403 kg |
Dimensiones Lar/An/Al mm | 4.698 / 1.829 / 1.468 mm |
Volumen Maletero | 640 (1.700) litros |
Aceleración 0 a 100 km/h | 8,6 segundos |
Recuperación 80 a 120 km/h | 6,4 segundos |
Velocidad máxima | 225 km/h |
Consumo homologado | 5 / 6,7 - 4,8 - 4,3 - 5,1 l/100 km (Comb. / vel. baja - media - alta - muy alta) |
Emisiones CO2 por km | 114 g/km |
Pegatina de la DGT | Eco |
Precio de partida | 37.450 euros (este motor y acabado sin descuentos, ayudas ni extras) |
Comportamiento Škoda Octavia Combi 1.5 TSI 150 CV DSG
Como su predecesor, el nuevo Škoda Octavia Combi destaca especialmente en materia de confort y calidad de rodadura para viajar. Respecto al Golf o al León, el Octavia Combi apuesta por la comodidad de los ocupantes antes que por la agilidad al volante. Pero no me malinterpretes, tampoco podemos decir que se trate de un coche torpe, ni mucho menos.
El Octavia Combi nos ofrece una gran polivalencia, pero es un coche que nos invita a practicar una conducción más sosegada. En definitiva, más familiar. Es un producto de buena calidad, con gran empaque, y su comodidad está por encima de la de muchos rivales. Por ejemplo, el Focus Sportbreak o el León Sportstourer, ambos de carácter más dinámico.
En ciudad, la visibilidad es buena en todos los ángulos. Además, sus medidas tampoco son excesivas y la superficie acristalada es generosa. En suma, añade múltiples asistentes a la conducción, sensores y un completo sistema de cámaras. Lo que sí mejoraría ligeramente es la calidad de estas. El diámetro de giro entre bordillos es de 10,4 metros.
A la hora de enlazar curvas, el Octavia Combi responde con efectividad. Lo hace de una forma tranquila, siempre con movimientos suaves, seguros y predecibles. Como os decía, no invita a llevar a cabo una conducción más deportiva. Pese a cumplir con su cometido, el conjunto de suspensiones y dirección muestran un tarado más bien blando.
La versión Sportline tiene una suspensión rebajada más firme y una dirección más directa.
A cambio, el conjunto de suspensiones -McPherson delantera y eje rígido trasero- se “traga” prácticamente lo que le echen, con movimientos poco acusados para los pasajeros. En suma, si equipamos el nuevo DCC podemos ajustar la suspensión adaptativa (además de la respuesta del motor y del cambio) a nuestras necesidades.
Esta reacciona permanentemente a la calzada y a la situación de conducción. Tiene en cuenta los procesos de dirección, frenado y aceleración. Lo convierte en una auténtica delicia en autopista, donde se muestra todavía más aplomado y estable que de serie incluso a velocidades elevadas. Parece claramente un coche de un segmento superior.
Adicionalmente, el trabajo de insonorización es notorio, tanto en términos aerodinámicos como de rodadura. En este sentido me parece que se sitúa un peldaño por encima del León Sportstourer e incluso del Volkswagen Golf Variant. Y si quieres mejorar este aspecto, puedes optar por los cristales delanteros laminados.
Para el equipo de frenos, monta discos ventilados en el eje delantero y discos macizos en el trasero. Cumplen su función satisfactoriamente y su tacto resulta agradable y sencillo de dosificar, no hay nada que destacar al respecto. Como sugiere el título, estamos ante una de las mejores opciones compactas generalistas para recorrer kilómetros en familia.
En materia de ADAS, no faltan el control de crucero adaptativo, alerta y asistente de mantenimiento de carril, asistente de colisión frontal con detección de vehículos, peatones y asistente de esquiva; alerta de tráfico cruzado trasero, lector de señales de tráfico, asistente de aparcamiento mejorado, asistente dinámico de luz de carretera, detección y frenado trasero con detección de peatones…
Equipamiento y precio
Los niveles de acabado para el Škoda Octavia se denominan Selection, Design y Sportline. Desde el básico ya cuentan con faros LED, control y limitador de velocidad, alerta de carril con asistente de mantenimiento, sensor de lluvia, asistente en cuestas, lector de señales de tráfico, aviso pre-colisión, frenada automática en ciudad, detector de fatiga…
También de serie son otros elementos interesantes como las llantas de aleación ligera de 17 pulgadas, climatización automática dual, instrumentación digital, cuatro elevalunas eléctricos, arranque sin llave, sistema multimedia con Apple CarPlay y Android Auto, radio DAB, bluetooth, USB, sensores de aparacamientos delanteros y traseros o cámara posterior, entre otros.
En las versiones más completas también podemos encontrar control de crucero adaptativo, pantalla táctil de mayor tamaño, portón trasero automático, detector de objetos en ángulo muerto, sistema de audio Hi-Fi, techo solar panorámico practicable, volante calefactable, asientos térmicos y con regulación eléctrica, cargador de móvil por inducción y un largo etcétera.
Los precios recomendados para la gama Škoda Octavia Combi 2025 arrancan en 36.040€. El tope de gama es el RS, que arranca en 46.650€. Un Škoda Octavia 1.5 TSI 150 CV DSG Design como el de la prueba parte de 37.450€. En todos los casos, sin descuentos ni promociones. La carrocería familiar supone un sobre coste de unos 800€ con respecto a la berlina.
Diseño/Estética
Calidad de acabado
Equipamiento de serie
Equipamiento opcional
Habitabilidad
Maletero
Motor/Refinamiento
Prestaciones
Consumos
Transmisión
Dirección
Frenos y neumáticos
Comportamiento
Calidad de rodadura
Relación valor-precio
8.1
Notable+
Cuando hablamos del Škoda Octavia hablamos de espacio, tecnología, funcionalidad, fiabilidad y, sobre todo, accesibilidad. El nuevo Octavia es mejor que nunca: más espacioso, con más maletero, más seguro y tremendamente conectado. Y lo mejor de todo, su relación precio-equipamiento no defrauda para demostrar la valía de las berlinas y familiares frente a los SUV. Asimismo, cuenta con una variada oferta mecánica en gasolina, MHEV y diésel.
Lo bueno
- Gran relación precio-equipamiento.
- Detalles Simply Clever para el habitáculo con buena altura al techo, espacio para las piernas y excelente maletero.
- Buenos consumos, potencia y rumorosidad con pegatina ‘ECO’
- Hay calidad a bordo y los ajustes son muy buenos.
- Calidad de rodadura, una gozada para recorrer kilómetros.
Lo mejorable
- Anchura algo limitada en la segunda fila de asientos.
- Echo en falta que la banqueta del asiento del conductor recoja mejor las piernas en viajes largos.
- Su excesiva digitalización requiere de un período de adaptación para algunas personas.
- Algunas lagunas de equipamiento de serie y abundantes opcionales.
- No hay versiones híbridas enchufables, al menos por ahora.