Nos volvemos a poner al volante del Toyota Yaris Hybrid tras un primer contacto en la presentación. El Yaris fue la primera aplicación de la Nueva Arquitectura Global de Toyota —Toyota New Global Architecture (TNGA)— en un modelo urbano, con la plataforma GA-B que garantiza estilo, practicidad, placer de conducción y seguridad.
Según declara la compañía nipona, el nuevo Toyota Yaris Hybrid ha sido diseñado para convertirse en el urbano más seguro del mundo al contar con los últimos avances en sistemas de seguridad activa y pasiva, pero también uno de los más eficientes gracias a la introducción del nuevo sistema híbrido de cuarta generación con motor de tres cilindros.
En España también se ofrece con un bloque de gasolina, en ambos casos con la carrocería de cinco puertas. La excepción que rompe la regla es el picante Toyota GR Yaris, que también hemos probado. A finales de año, la gama del urbano se completará con el esperado Toyota Yaris Cross Hybrid. Con él, Toyota tendrá una oferta SUV muy competa.
Por precio, es de los modelos más caros del segmento sin descuentos, pero uno de los pocos que ofrece una mecánica híbrida con la etiqueta ECO de la DGT. Entre sus rivales podemos destacar el Renault Clio, el Ford Fiesta, el Nissan Micra, el Opel Corsa, el Volkswagen Polo, el SEAT Ibiza, el Hyundai i20, el Kia Rio, el Peugeot 208 o el Citroën C3.
Diseño exterior
La cuarta generación del Toyota Yaris Hybrid no solo es más atractiva, sino también mucho más coche. Su aspecto maduro y tecnológico destaca especialmente en los acabados más altos, que se distinguen por tener un toque de diseño exclusivo, gracias a la parrilla frontal en negro con embellecedor cromado oscuro o las llantas de aleación de 17 pulgadas.
En el frontal destaca la nueva parrilla de grandes dimensiones, que queda dividida en dos partes por la matrícula. En su extremo inferior cobra protagonismo una toma de aire, a cuyos lados encontramos dos faros antiniebla (de serie en toda la gama) redondos enmarcados en un embellecedor plástico. Todo ello queda rematado por un musculoso paragolpes.
Una de las grandes novedades son los faros, que cuentan con iluminación LED desde el acabado Style. Sin embargo, en este acabado encontramos los halógenos que, la verdad, no alumbran especialmente bien. Sobre ellos se extiende un marcado y corto capó que desemboca en una luna delantera de buenas dimensiones para facilitar la visibilidad.
En la vista lateral llama la atención la reducción de los voladizos delantero (-10 mm) y trasero (-45 mm), que alcanzan ahora los 800 mm y 580 mm, respectivamente. La superficie de las puertas queda limpia de ornamentaciones y, en el extremo superior, destaca una superficie acristalada que, debido al nuevo diseño, disminuye su tamaño.
En cuanto sus medidas, curiosamente el Yaris nada a contracorriente en el segmento, pues su carrocería no crece unos centímetros, sino todo lo contrario, es 5 milímetros más corta (3.940 mm). También crece 50 mm en anchura (1.745 mm), lo que lo convierte en un espacioso urbano. Sin embargo, la distancia entre ejes es 50 mm mayor (2.560 mm).
Gracias ello logra una mejor maniobrabilidad en ciudad y a la hora de aparcar, conservando el espacio interior y ofreciendo un habitáculo confortable. Por otra parte, la plataforma GA-B hace posible una reducción de 40 mm en la altura total del modelo (1.470 mm). Por último, los anchos de vía miden 1.518 mm delante y 1.514 mm detrás.
El efecto de las proporciones condensadas se amplifica con unas potentes líneas de carácter que recorren los laterales del nuevo Yaris y proyectan una sensación de movimiento hacia delante. Se complementan con los marcados pasos de rueda, donde encontramos llantas de entre 15 y 17 pulgadas según el acabado elegido. En este caso vemos las de menor tamaño.
Los neumáticos son unos Continental EcoContact 6 en dimensiones 185/65R15 88H en ambos ejes.
La zaga es el elemento de diseño con mayor personalidad del nuevo Yaris Hybrid, especialmente cuando se combina con pinturas claras; pero también el más controvertido. Destacan los pilotos LED de serie, el potente spoiler superior y un marcado difusor negro en el extremo opuesto, dando como resultado una vista realmente dinámica.
Visto desde arriba, el modelo cuenta con una antena de tipo aleta de tiburón.
Para rematar su practicidad, el exterior del nuevo Yaris se puede equipar con diversos accesorios entre los que destacan los embellecedores, las carcasas para los espejos retrovisores, los vinilos, las barras transversales, las placas protectoras, la bola de remolque, las molduras, diversas cajas para el techo, porta esquíes, faldillas y un cableado de 13 pines.
Diseño interior
En el interior del nuevo Yaris Hybrid también asistimos a una auténtica revolución, con un diseño mucho más atractivo, un equipamiento de lo más completo y una fuerte carga tecnológica. Además, los asientos se sitúan en una posición más baja, el volante está menos inclinado y todo queda al alcance de la mano, mejorando de forma notoria en ergonomía.
Las manos se posan cómodamente sobre un volante multifunción cuyo tacto es más agradable que antes. En esta unidad no vemos el nuevo cuadro de instrumentos digital, sino dos diales analógicos para la velocidad y el potenciómetro, junto con una pantalla. El conjunto resulta así menos tecnológico, pero brinda gran cantidad de información y todo se lee de forma clara.
En términos de calidad ha mejorado, encontrándonos superficies blandas en el extremo superior del salpicadero e inserciones agradables al tacto en los paneles de las puertas. Los plásticos rígidos siguen estando presentes, pero muestran mejor aspecto que en su predecesor y los ajustes en general son buenos, contribuyendo a una mayor sensación de solidez.
En el salpicadero la protagonista es la pantalla táctil de ocho pulgadas con botones físicos en su marco. Goza de un funcionamiento intuitivo y unos gráficos mejorados, aunque sigue pecando ligeramente en fluidez y funcionamiento respecto a algunos rivales. Incluye Apple CarPlay y Android Auto. En algunos acabados podemos equipar un Head-Up Display.
Punto a favor para Toyota es que se mantengan los controles del climatizador con botones físicos, algo que ya no ocurre en otras marcas. Bajo este encontramos las tomas USB y un hueco portaobjetos de tamaño aceptable en el que se puede equipar carga inalámbrica del smartphone. Inmediatamente a continuación se ubica la palanca del cambio automático.
En materia de seguridad, destaca el nuevo airbag central entre los asientos delanteros, que es único en su clase.
Si seguimos avanzando por la consola central encontraremos algunos controles, el freno de mano eléctrico y dos posavasos sobre los que se ubica un reposabrazos central. A pesar de sus dimensiones, encontramos bastantes huecos donde dejar todos los objetos que solemos llevar en los bolsillos.
Respecto a la habitabilidad, no hay grandes cambios respecto al anterior Yaris, con buen espacio en las plazas delanteras y una cota destacable frente a muchos rivales para las piernas en la segunda fila de asientos. También es algo más ancho, pero no destaca en este aspecto. La altura en las plazas traseras es buena para aquellos que miden menos de 1,80 metros.
Los cinturones no pueden regularse en altura, algo cada vez más habitual.
No ha terminado de convencerme el acceso a las plazas posteriores, que ha empeorado. El tamaño y grado de apertura de las puertas, la posición más baja de los asientos y el diseño del pilar C hacen que sea más incómodo acceder al habitáculo, al tiempo que la sensación de espacio resulta menor al haberse reducido la superficie acristalada.
Respecto al espacio de carga, el nuevo Yaris cubica un total de 286 litros, la misma capacidad que ofrecía su predecesor. Se puede ampliar al abatir los asientos de la segunda fila -60:40- y las formas son muy regulares, por lo que es sencillo aprovechar el espacio. Además, el piso del maletero se puede colocar a dos alturas, lo que nos aporta un plus de polivalencia.
El interior del nuevo Yaris también se puede personalizar con diversos accesorios, destacando el soporte de accesorios para los reposacabezas, la moldura para la consola central, las alfombrillas de goma, las sillitas de bebé, el piso de goma para el maletero o el organizador de dos pisos para el espacio de carga, entre otros.
La altura del borde de carga es de 680 mm.
Motorización Toyota Yaris Hybrid
El modelo de acceso equipa el bloque atmosférico de tres cilindros y 1.5 litros de gasolina, el cual eroga 125 CV. Por su parte, el Toyota Yaris Hybrid monta un sistema híbrido de cuarta generación formado por un motor de tres cilindros con 90 CV (66 kW) a 5.500 rpm y 120 Nm de par entre las 3.600 y las 4.800 rpm; y dos propulsores eléctricos en paralelo de 80 CV (59 kW).
Están asociados a una nueva batería de ion-litio, más potente pero también más ligera (-27%). El bloque de combustión forma parte de la familia de motores Dynamic Force. Esta mecánica ofrece 1.5 litros de desplazamiento y ciclo Atkinson. En conjunto, encontramos una potencia de 116 CV (85 kW) y la posibilidad de superar los 130 km/h en modo EV.
El motor de gasolina es un 20% más eficiente, pero con un 16% más de potencia que su predecesor.
A nivel técnico, el nuevo motor 1.5 híbrido ofrece medidas específicas para reducir la fricción interna y las pérdidas mecánicas, además de optimizar la combustión. El transeje híbrido se ha rediseñado totalmente, adoptando una nueva estructura de doble eje, más compacta (9%). Por otra parte, el sistema dispone de una batería más potente, algo que es de agradecer.
El nuevo conjunto mueve con mucha soltura al nuevo Yaris Hybrid. Para que os hagáis una idea en cifras, es capaz de alcanzar los 100 km/h desde parado en 9.7 segundos, de recuperar de 80 a 120 km/h en 7.1 segundos y de declarar una velocidad máxima de 175 km/h. Esto supone una mejora perceptible en la entrega de potencia y aceleración respecto a su predecesor.
La respuesta al acelerador es rápida, especialmente cuando hay carga en la batería, lo que nos aporta un plus de confianza a la hora de adelantar o hacer salidas rápidas en las intersecciones. Además, podemos encontrar hasta tres modos de conducción que modifican, discretamente, la entrega de potencia: Eco, Normal, Power.
También podemos encontrar dos modos de retención en la palanca de cambios: ‘B’, para una mayor frenada regenerativa y ‘D’, que supone una retención eléctrica normal. Como colofón, existe la posibilidad de seleccionar el modo eléctrico (EV), aunque en este caso el rango de funcionamiento es muy limitado (en función de la carga de la batería y la velocidad).
Salvo en autopista o adelantamientos rápidos, en la nueva generación resulta complicado echar en falta más potencia, lo que se complementa con un mayor aislamiento de la mecánica, que además suena más natural. Sigue siendo perceptible en aceleraciones fuertes, pero no resulta tan molesto su sonido y queda mejor disimulado. A velocidades de crucero, apenas lo notarás.
Probablemente, la mayor pega del Yaris Hybrid sigue siendo la transmisión automática, que como en todos los Toyota y Lexus híbridos, es mediante un engranaje planetario (resulta más eficiente). Con un doble embrague todo sería más agradable, pero cabe destacar que están mejor acompasados aceleración y régimen. La tracción es en las ruedas delanteras.
Toyota homologa un consumo combinado de 3,9 l/100 km en ciclo WLTP.
Si hablamos de consumos, podemos seguir hablando de un referente. Durante la semana de prueba he estado haciendo consumos por debajo de 3,0 litros en ciudad y rondando los 4,5 / 5 litros en carretera, dependiendo un poco de la orografía. La media tras una semana ha sido de 3,8 litros a los 100 km. El depósito de combustible es de 36 litros.
Version | Yaris 120H Active Tech - 3 cilindros en línea + eléctrico |
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Cilindrada | 1.490 cm³ |
Potencia | 116 CV (85 kW) |
Par | N.D. |
Peso | 1.085 kilos |
Dimensiones Lar/An/Al mm | 3.940 / 1.745 / 1.500 mm |
Volumen Maletero | 286 litros |
Aceleración 0 a 100 km/h | 9,7 segundos |
Recuperación 80 a 120 km/h | 7,1 segundos |
Velocidad máxima | 175 km/h |
Consumo homologado | 3,9 l/100 km en ciclo combinado WLTP |
Emisiones CO2 por km | 87 g/km de CO₂ (Euro 6) |
Pegatina de la DGT | Eco |
Precio de partida | 22.950 euros (este motor y acabado sin descuentos ni extras) |
Comportamiento Toyota Yaris Hybrid
Merece especial atención la puesta a punto que los ingenieros han llevado a cabo sobre la nueva generación del Yaris Hybrid. Junto a unas mejores cotas, el capó pierde altura para incrementar la visibilidad, que es buena en términos generales, al tiempo que la dinámica de conducción se ha mejorado para incrementar el placer de conducción.
Gran parte de la mejora en el confort a bordo se debe a las modificaciones en la postura de conducción, que resulta mucho más ergonómica y sencilla de encontrar. El volante está menos inclinado y vamos sentados en una postura más baja (21 mm), con lo que las piernas no van tan flexionadas y la postura es, en esencia, más natural, propia de un turismo.
Esto lo convierte en un coche muy maniobrable en ciudad, con un diámetro de giro de solo 9,8 metros entre bordillos y múltiples asistencias a la conducción; pero también en un polivalente capaz de aventurarse en viajes largos por carretera, un aspecto en el que fallaba su predecesor. Ahora el Yaris se asemeja más en conducción al Corolla que al Aygo.
Quizás la única pega que podemos sacarle a la nueva generación es su dirección, que sigue pecando de un exceso de asistencia y no resulta todo lo informativa que nos gustaría en algunas circunstancias. Es cómoda para moverse por la urbe, pero es cierto que, en tramos de curvas, cuando le buscamos las cosquillas, no marca con gran precisión por dónde van las ruedas.
Con todo y con eso, las sensaciones que podemos sacar del conjunto son muy buenas, dando la impresión de que llevamos un coche más ancho y bajo. Esto se debe a la excelente puesta a punto del conjunto de las suspensiones, que dan como resultado un coche más estable, cómodo y aplomado incluso cuando circulamos deprisa.
En el nuevo Yaris encontramos un esquema de suspensiones McPherson con torretas reforzadas en el eje delantero y un eje de torsión un 80% más rígido en el trasero.
Es fácilmente apreciable que el Yaris no resulta tan sensible ante las imperfecciones del asfalto y el paso por curva es más natural a cualquier ritmo, transmitiendo mayor sensación de seguridad y control. Por otra parte, el motor responde de forma enérgica y los balanceos quedan muy bien contenidos, filtrando de forma eficaz en los tramos peor asfaltados.
Sin duda alguna, podemos afirmar que ha adquirido notoriedad en el segmento B gracias a su mejora en estabilidad, su respuesta natural y más precisa, su agilidad y la confianza que transmite al conductor en prácticamente todo momento. Además, el interior queda mejor aislado, dando la impresión de estar en un coche más sólido que antes.
Por último, respecto al equipo de frenos, el Yaris Hybrid monta discos ventilados en el eje delantero y macizos en el trasero. Me ha gustado que la respuesta es más natural y fácil de dosificar, aportándonos buen tacto y eficacia, algo que no ocurre en todos los híbridos del mercado. En el siguiente apartado tenéis información acerca de las asistencias a la conducción.
Equipamiento y precio
La gama del nuevo Yaris Electric Hybrid está formada por tres niveles de equipamiento: Business Plus, Active Tech y Style, a los que se une el paquete Style Plus. El acabado Business Plus es el más enfocado al cliente de flotas, mientras que el resto se dirige especialmente a clientes particulares.
En el acabado Active Tech equipa airbags delanteros, central, laterales y de cortina, Toyota Safety Sense 2.5, llantas de aleación de 15’’, volante de cuero, acceso y arranque sin llave, cámara de visión trasera, sensores de luz y lluvia, sistema de geolocalización (DCM), sistema multimedia con pantalla táctil multifunción de 8’’, sistema de llamada de emergencia (e-Call), integración móvil vía Apple CarPlay y Android Auto y servicios conectados con app MyT, entre otros.
El acabado Style suma las llantas de 17’’, faros Full LED, tapicería mixta de cuero y tela, pomo y palanca de cambios de piel o climatizador bizona. Con el paquete Style Plus añade Head-Up Display de 10”, cargador inalámbrico de smartphone, sistema de sonido JBL con 8 altavoces, Monitor de Ángulo Muerto (BSM), asistencia de freno en aparcamiento y navegador.
Toyota Safety Sense incluye Control de Crucero Adaptativo Inteligente (a cualquier velocidad), Sistema de Seguridad Precolisión con detección de peatones, ciclistas y vehículos en intersecciones, Control Inteligente de Luces de Carretera, Asistencia al Cambio de Carril, Reconocimiento de Señales de Tráfico y Asistencia a la Dirección en Maniobras de Emergencia, entre otros.
En España, los precios para toda la gama del Toyota Yaris Hybrid 2020 sin descuentos ni promociones son los siguientes:
Business Plus | S-Edition | Active Tech | Style | Style Plus | |
Yaris 1.5 125 CV | – | 19.650 € | – | – | – |
Yaris Hybrid 120H | 22.050 € | – | 22.950 € | 24.500 € | 26.250 € |
Diseño/Estética
Calidad de acabado
Equipamiento de serie
Equipamiento opcional
Habitabilidad
Maletero
Motor/Refinamiento
Prestaciones
Consumos
Transmisión
Dirección
Frenos y neumáticos
Comportamiento
Calidad de rodadura
Relación valor-precio
7.2
Notable
El nuevo Toyota Yaris Hybrid presenta una imagen más robusta y también mucho más diferenciada dentro de la gama. Luce un aspecto maduro, tecnológico, futurista y, sobre todo, más personal. Está disponible con una mecánica híbrida, incluye Toyota Safety Sense de serie y pone a disposición de los clientes varios acabados muy completos, aunque su precio es elevado sin los descuentos.
Lo bueno
- Total ruptura de diseño con su predecesor, es más moderno, más maduro, más atractivo.
- Incremento en la calidad interior, con buenos ajustes en términos generales y una mejora en la insonorización y el aislamiento de la mecánica.
- Mejora notable en la postura de conducción, ahora más similar a la de un turismo.
- Fuerte carga tecnológica, especialmente en materia de seguridad gracias al Toyota Safety Sense 2.5.
- Puesta a punto dinámica, especialmente de la suspensión. Ahora estamos ante un conjunto más estable, ágil, natural, cómodo y sólido.
- Presume del distintivo ECO de la DGT, con las ventajas que ello supone.
- Buenos consumos, poco sensible a los cambios de ritmo.
Lo mejorable
- Precio elevado sin los descuentos frente a rivales de combustión, aunque es más barato que un Renault Clio E-TECH.
- Gama mecánica muy reducida, que se limita a dos opciones (si exceptuamos el GR Yaris que juega en otra liga).
- El acceso a las plazas posteriores ha empeorado y la sensación de espacio detrás es menor debido a la reducción de la superficie acristalada.
- Pantalla táctil del salpicadero y sistema operativo mejorables, aunque disfrute de un mejor funcionamiento.
- La puesta a punto de la dirección podría afinarse, ya que se muestra demasiado asistida y no transmite toda la información que nos gustaría en tramos de curvas.
- La caja de cambios CVT sigue sin ser nuestra preferida por funcionamiento, un doble embrague le sentaría de maravilla.