Presentado por primera vez en sociedad en el Salón del Automóvil de Turín de 1971, el Ferrari 365 GT4 BB fue el predecesor del 512 BB y del mítico Testarossa. Las siglas BB respondían al concepto ‘Berlinetta Boxer‘, esa denominación tan característica de los modelos coupé biplaza con motor bóxer; convirtiéndose a su vez en el primer Ferrari de motor central y 12 cilindros nacido para plantar cara al Lamborghini Miura.
Algunos dicen que no es el Cavallino Rampante más bonito de la historia y otros que resulta deslumbrante. Sea como sea, indudablemente destacan sus enormes tomas de aire tras las puertas y su carrocería bitono que le dotaban de una elegante agresividad. Solo vieron la luz 400 ejemplares y ahora parece haber salido a la luz un oscuro secreto acerca del icónico automóvil.
Puede que el nombre de la publicación The Road Rat no te suene demasiado y lo cierto es que nadie te culpará por ello, pues se trata de una nueva y ambiciosa revista automotriz de Inglaterra que sólo publica en papel. De cara a la creación de su primera entrega, el veterano periodista automotriz Michael Harvey viajó a Maranello, Italia, a fin de hablar con el legendario diseñador de automóviles Leonardo Fioravanti sobre la historia de este deportivo.
Leonardo Fioravanti puede presumir a sus 80 años de haber trabajado en Pininfarina y, posteriormente, en Ferrari. Son obra suya el Ferrari 250 LM de carretera, el 365 GTB4 ‘Daytona’ y el Dino 206 GT, aunque en este último únicamente colaboró.
Cual fue su sorpresa cuando, en el proceso de la entrevista, descubrió una historia inédita sobre cómo el 365 GT4 BB se convirtió en un homenaje secreto a un influyente icono francés: Brigitte Bardot. En realidad no es nada descabellado. Pensémoslo detenidamente, ya que siempre ha habido algo desconcertante en su nombre. En primer lugar, en el lenguaje de Ferrari, «Berlinetta» normalmente significa un automóvil con motor delantero, lo cual no es así en este caso.
Por otra parte, sabemos que en un motor «boxer» cada pistón va unido a una muñequilla, mientras que en el caso de Ferrari, como ya analice detenidamente en su día, cada par de pistones comparten muñequilla en el cigüeñal. En otras palabras, el motor del Ferrari 364 GT4 BB no es un motor boxer, sino más bien un motor V12 a 180º, por lo que las siglas ‘BB’ no hacían realmente referencia a ‘Berlinetta Boxer’.
Tal y como explica el propio Fioravanti, Brigitte Bardot fue todo un icono de la cultura pop en los años ’50, ’60 y ’70. Nacida en Francia en 1934, actuó en nada menos que 47 películas -la gran mayoría de gran éxito- y muchos seguramente la recuerden como la primera persona a la que vieron usar un bikini. Es más, si preguntáis a gente de la época (padres, abuelos…), probablemente todavía protagonice alguno de sus mejores sueños.
El término «sex kitten» -o ‘gatito sexual’- no tardó en ser acuñado para describirla en uno de sus papeles principales, y de ahí desembocó su posterior homenaje en un Ferrari. Recordando la primera maqueta del modelo, Fioravanti confiesa que «todos pensamos lo mismo cuando [el diseño del 365 GT4] llegó como un modelo a escala real: Wow … es muy bueno. Es muy hermoso. Muy … bien formado … Por supuesto, todos estábamos pensando en Brigitte Bardot«.
Continúa su declaración añadiendo que «No recuerdo qué película era, pero sin duda era una película antigua, en blanco y negro, y había muchas ‘Maninas’. Ella era muy joven y llevaba poca ropa. Todos la habíamos visto recientemente y desde el principio el coche fue apodado como BB«. Pero claro, cuando llegó el momento de presentar el vehículo a los responsables de la marca, quedó patente que era imposible denominar comercialmente así el modelo.
Fue entonces cuando a alguna mente brillante se le ocurrió la idea de bautizarlo como ‘Berlinetta Boxer’, una denominación que mantenía la esencia de Bardot (BB) pero que, en realidad, no era correcta, porque el coche ni era ‘Berlinetta’ ni era ‘Boxer’, sólo un homenaje descarado a una de las bellezas más famosas del mundo en la década de 1970.