En un entorno aún impactado por la crisis de los semiconductores, particularmente en el 1er semestre de 2022 (pérdida total estimada en 300.000 vehículos sobre la producción de 2022), y por el aumento de los precios de las materias primas, el Grupo Renault nos ha presentado sus resultados y sus objetivos (planes de Renault y Dacia). Los ingresos del Grupo alcanzaron los 46.213 millones de euros, un 6,3 % más que en 2020.
La nueva política comercial, puesta en marcha en el 3er trimestre de 2020 y centrada en los segmentos más rentables. El éxito de Arkana, lanzado en el segundo trimestre de 2021 y que destaca el regreso de la marca Renault al segmento C, y el desempeño de los vehículos comerciales ligeros generaron un efecto positivo en los resultados.
Durante la conferencia de algo más de dos horas, la marca del rombo nos comentó sus planes a medio plazo con la vista puesta en los lanzamientos de aquí a 2025. Para empezar además de los lanzamientos que ya se han anunciado este mismo año, la marca lanzará un vehículo de Mobilize y otro comercial en 2023.
En 2024 el fabricante francés nos traerá un sustituto 100% eléctrico del Dacia Spring, el nuevo Renault 5 100% eléctrico, un modelo de Alpine que podría ser la variante deportiva del Renault 5, un modelo comercial de gran tamaño y dos modelos aún sin identificar entre los que podríamos ver el Renault 4.
En 2025 la marca lanzará otro modelo de Alpine de mayor tamaño.
El reemplazo del Dacia Spring es sin duda uno de los puntos fuertes y es que el pequeño modelo procedente de China ha causado furor y también ha levantado mucha polémica con su seguridad.
Durante la conferencia, el CEO de Renault, Luca de Meo, reveló que el nuevo Dacia eléctrico se montará en la plataforma CMF-A. Con solo 3.734 milímetros de largo, el Spring actual encaja en el segmento A de Europa. Su sucesor debería tener aproximadamente las mismas proporciones ya que el R5 que se montará sobre la plataforma modular CMF-B.
Con este plan y la presentación de Renault Group se confirma la ambición del grupo de electrificar toda su gama en Europa antes de 2030.
Al mismo tiempo, el Grupo Renault también está estudiando la posibilidad de reunir sus actividades y tecnologías de motores y transmisiones ICE e híbridos fuera de Francia pero dentro de una empresa específica, algo que no termina de convencerme y veo bastante raro (opinión personal: esta desvinculación y deslocalización de suelo europeo, ¿no será para protegerse de algo?).
Fuente | Renault