La imaginación de Liberty Walk no tiene límites. Ya sabéis que este especialista del mercado de accesorios del automóvil acostumbra a hacer de las suyas sobre la base de deportivos alemanes e italianos, pero los vehículos japoneses son su verdadera especialidad y en esta ocasión han cogido un Nissan GT-R como conejillo de indias.
Lo cierto es que, cuando debutó el Nissan GT-R R35, Apple le estaba quitando las envolturas a su primer iPhone y todavía faltaban tres años para que Instagram fuese inventado. Actualmente, vamos por el iPhone de 11ª generación, Instagram es todo un éxito y el Nissan GT-R sigue siendo prácticamente el mismo, pero es innegable que se ha labrado una sólida reputación en su categoría.
Existen numerosas razones por las cuales el Nissan GT-R se ha ganado el alias de «Godzilla», pero si tuviéramos que destacar una rematadamente buena es su monstruosa capacidad de rendimiento. Puede que no se trate del mejor superdeportivo en términos de calidad de acabados o el más avanzado tecnológicamente, pero si hacemos una comparación rendimiento-calidad-precio, el GT-R es el líder indiscutible.
Recién salido de la fábrica, viene equipado con un potente bloque V6 de doble turbo y 3.8 litros capaz de producir hasta 600 caballos de potencia en las variantes Nismo, y multitud de preparadores de todo el mundo son conscientes de que a este coche se le puede sacar mucho más partido. Liberty Walk nos ofrece dos acabados para su paquete.
Los dos kits de carrocería destacan principalmente por los enormes pasos de rueda de los que hacen gala, así como nuevos parachoques delanteros o traseros y un alerón trasero que es realmente espectacular a la vista. La compañía nipona ofrece estos kits con diferentes materiales, ya sea con polímeros reforzados con fibras o con fibra de carbono. El precio varía ligeramente.
El primero asciende hasta los 62.575 euros en su configuración más completa, mientras que el segundo es 3.000 euros más caro. Ambos están disponibles en FRP, CFRP y Dry Carbon, combinándose o por separado, pero sino queremos adquirir el kit completo podremos comprar cada pieza por separado. Además, podemos añadir una suspensión neumática que cuesta 6.639 euros.
También podremos elegir entre un amplio catálogo de llantas que nos ofrece Liberty Walk. La única pena es que no esté disponible ninguna mejora en el rendimiento del GT-R, solo modificaciones y mejoras visuales, aunque ya sabéis que en el mercado de accesorios del automóvil siempre ha habido suculentos paquetes de rendimiento para el GT-R R35.