Antes de que termine el año, Jaguar tendrá en los concesionarios la nueva generación del XF Sportbrake, una interesante opción que destaca por la mayor versatilidad que le otorga el generoso portón posterior. Mantiene las cinco plazas y aumenta ligeramente la capacidad de maletero.
El nuevo XF Sportbrake no rompe esquemas en términos de diseño, siendo muy similar a la generación anterior. Las mayores ventajas respecto a la berlina están en el interior, con un respaldo posterior abatible en tres partes y un maletero que oscila entre los 565 y 1.700 litros de capacidad.
En la zona del maletero se han provisto varias argollas y ganchos para la sujeción de la carga, además de una loneta que evita la visión de aquello que se lleve en él. El portón posterior puede tener accionamiento eléctrico para la apertura y cierre, incluida la función «manos libres» si el cliente lo desea.
Una importante novedad es el enorme techo panorámico de cristal con unas dimensiones de 1,6 m² con cortinilla retráctil para evitar que el sol sea molesto. Un detalle propio de esta carrocería es la ubicación de los altavoces traseros en el techo, mejorando la calidad del audio sin robar espacio de carga.
Entre los detalles que facilitan las cosas en el día a día está el sistema «Activity Key». Se trata de una pulsera que el usuario puede utilizar cuando hace deporte al aire libre o cualquier otra cosa. Evita tener que llevar la llave (se puede dejar dentro del coche) y una vez se cierra el vehículo con la pulsera la llave se desactiva.
El XF Sportbrake puede tener suspensión posterior neumática nivelante, de forma que si se carga bastante el vehículo la altura del eje posterior se mantiene siempre al mismo nivel. En principio es de serie para todas las unidades comercializadas en el mercado español.
La oferta de motores en diésel está formada por los conocidos 2.0d de 163 y 180 CV, además de la última evolución con 240 CV de potencia. Según la opción elegida podrá ir combinada con la tracción sencilla o total, y con cambio manual o automático. El tope de gama en diésel es el 3.0TDV6 con 300 CV exclusivamente asociado a la caja automática de ocho relaciones.
En gasolina también están disponibles varias alternativas. De momento llegarán con el 2.0 SI4 de 250 CV, cuatro cilindros y un par máximo de 365 Nm. Disfruta de unas prestaciones elevadas con un consumos medio de 6,8 L/100, cifra bastante ajustada. Más adelante se sumará una opción con seis cilindros y mejores prestaciones.