No es ningún secreto que veremos un Porsche Macan eléctrico con la llegada de la nueva generación. Ahora también sabemos que le acompañará un Porsche Cayenne eléctrico a partir de 2026. Así lo ha confirmado la propia marca junto con sus planes de alcanzar el 80% de ventas de vehículos eléctricos en 2030. Al parecer, el Taycan será solo uno de muchos.
La revelación ha sido hecha por el presidente de la marca, Oliver Blume, durante la Conferencia de Prensa Anual 2023. El ejecutivo de 54 años se refirió específicamente al Porsche Cayenne eléctrico como un SUV de cuarta generación. Eso significa que no se basará en el modelo actual, que recibirá un lavado de cara el próximo mes de abril.
Un Porsche Cayenne eléctrico y mucho más
Antes de que conozcamos el Porsche Cayenne eléctrico, la marca nos mostrará el nuevo Porsche Macan eléctrico en 2024. Es más, lo habríamos conocido este año de no haber sido por algunos problemas técnicos con el software Cariad por parte del Grupo Volkswagen. El Macan eléctrico se venderá junto con los modelos de combustión y será muy similar a estos.
Se desarrollará sobre la plataforma PPE diseñada específicamente para vehículos eléctricos. Le seguirá un Porsche 718 totalmente eléctrico para reemplazar a los actuales Boxster y Cayman. Nos anticipó sus líneas el Porsche Mission R de 2021 estará a la venta «a mediados de la década«, probablemente a principios de 2025. Se venderá iniocialmente junto con las versiones de combustión.
Esperamos un diseño de tracción trasera con un solo motor para las versiones de acceso; así como una configuración de motor doble en las opciones más prestacionales. De ser así, sería el primer Boxster/Cayman con tracción en las cuatro ruedas. En 2026 llegará la nueva entrega del Porsche Cayenne con versión 100% eléctrica. Pero tranquilos, también habrá opciones de combustión.
Porsche no ha revelado ningún detalle técnico ni las opciones de carrocería. Sí sabemos que llegará con motores duales y tracción total de serie. Tampoco faltará un Porsche 911 híbrido antes de 2030, aunque no habrá versión eléctrica. Remata la jugada un SUV de código K1 que se ubicaría por encima del Cayenne. La idea es crear un modelo de nicho con ediciones especiales.
Nacerá como respuesta a mercados cada vez más rentables como China y Estados Unidos. El nuevo miembro de la creciente cartera está siendo «diseñado para ofrecer un gran rendimiento y funciones de conducción automatizadas con la típica línea de vuelo de Porsche, junto con una experiencia completamente nueva dentro del vehículo«.