El Juke, el hermano pequeño del Qashqai llegó al mercado automovilístico con un diseño radical destinado a un público joven cansado de los polivalentes convencionales. El modelo combina la actitud y el atrevimiento juvenil con un diseño de última moda y una energía claramente orientada a la diversión.
Basado en la plataforma B de la Alianza Renault Nissan, que ha sido actualizada para esta nueva aplicación. Tiene una distancia entre ejes de 2.530 mm y mide 4.135 mm de largo, 1.765 mm de ancho y 1.570 mm de alto.
Hoy os ofrecemos la prueba de este magnífico correcaminos de 190 cv y tracción integral con aire juvenil.
Diseño exterior
Con un diseño que te puede gustar o puedes detestar, el Juke fue creado en Londres, en el Centro de Diseño Europeo de Nissan (NDE) y afinado en el Centro de Diseño de Nissan (NDC) en Japón. Sus llamativas formas ya se descubrieron en el show car Qazana, presentado en el Salón del Automóvil de Ginebra en 2009, unas líneas personalísimas que se han mantenido prácticamente idénticas en el modelo.
El equipo de diseño del NDE se inspiró en varias fuentes. Sus componentes se fijaron, por ejemplo, en una amplia gama de vehículos que destacaron a lo largo de la historia por representar un modo de vida activo y deportivo, entre ellos, los coches de rally y las motocicletas.
El resultado combina influencias de numerosos elementos, pero con el ADN de Nissan muy presente. El Juke tiene una carrocería de apariencia sólida, que refleja el lado SUV de todo crossover, pero al mismo tiempo, tiene líneas sensuales con curvas de gran complejidad y una silueta coupé, acentuada por las formas de los cristales laterales y por las manecillas de las puertas traseras escondidas en el montante, lo que visualmente le da un aspecto de coche de dos puertas más que de cuatro.
El ADN propio de Nissan está muy presente en el diseño -los pilotos traseros en boomerang, por ejemplo, recuerdan a los del 370Z.
Con una generosa distancia al suelo, ruedas y neumáticos grandes y una línea de hombros elevada, la parte inferior del coche es la de un auténtico SUV. Esta impresión se acentúa con algunos elementos, como por ejemplo, las estriberas y los pasos de rueda en color negro contrastado, o la parte inferior de la carrocería que, tanto delante como detrás, parece emerger de los bajos del coche, imitando las protecciones de los SUV.
En el frontal, la parte inferior del paragolpes, esconde parte de las entradas de aire pero en lugar de diseñar una simple rejilla en forma de red, el equipo de diseño ha desarrollado un molde con una serie de agujeros circulares.
Por encima de la línea de cintura, sin embargo, el Juke exhibe el ADN propio de un coche deportivo. El parabrisas notablemente inclinado, junto a la firma tradicional de los crossover de Nissan, expresada en la forma de la ventanilla lateral trasera y el diseño del techo en caída, configuran las líneas que recuerdan a las carlingas de los aviones.
La parte trasera del techo, incorpora un alerón integrado que reduce la elevación aerodinámica para mejorar la estabilidad a alta velocidad. Su limpia parte posterior en cola de pato resulta perfecta en términos de dinámica de fluidos, de acuerdo con las pruebas realizadas en el túnel del viento.
Los faros reflejan asimismo la deportiva agilidad del coche. En la parte delantera, se han dividido en dos elementos principales. En la parte alta del capó, los estilizados grupos ópticos superiores contienen las luces de día y los intermitentes, mientras que los faros principales redondos están montados más abajo, en el frontal del coche, e inspirados en los faros auxiliares de los coches de rally de los años sesenta y setenta.
Del mismo modo, en lugar de disponer los limpiaparabrisas de forma visible, incluso cuando no se utilizan, la línea del capó se ha prolongado hacia el parabrisas para esconder debajo los limpias. Además, se ha creado un control electrónico para parar los limpiaparabrisas en posición vertical, con el contacto quitado, para que facilitar su limpieza o su sustitución.
El acabado que hemos probado es el Juke Tekna 4×4 Premium con motor 1.6i DIG-T que desarrolla 190 CV y va asociado a una caja de cambios automática denominada XTRONIC CVT M6
Exteriormente no llama la atención (en cuanto a potencia se trata) ya que no monta ningún accesorio diferente ni posee un diseño más deportivo, es un Juke normal y corriente.
Diseño interior
El exterior dinámico y deportivo del Juke tiene su continuidad en el interior, donde los elementos dominantes responden también a esa sensación global de diversión: la consola central recuerda al depósito de una motocicleta, mientras que los detalles decorativos de las puertas se han pintado con esmalte de alto brillo.
Manteniendo el mismo concepto de combinación de atributos exterior de un SUV y un deportivo, el interior proporciona la elevada posición de conducción de un SUV pero con características propias de un coche deportivo. La palanca de la caja de cambios se encuentra muy cerca del volante, en la parte superior del «depósito de motocicleta», para garantizar cambios de marcha rápidos, mientras que el propio «depósito» no tiene únicamente una función estética sino que proporciona el apoyo necesario para la rodilla del conductor cuando se conduce de manera deportiva en una carretera de montaña.
Los instrumentos están montados bajo una visera «flotante», que también se inspira en las de las motocicletas de gran cilindrada. En los modelos equipados con el motor turbo de gasolina, cuando el botón de puesta en marcha se acciona para arrancar el motor, los instrumentos cobran vida y las agujas realizan el recorrido completo de ida y vuelta, a modo de comprobación, tal como sucede en las motos de gran cilindrada.
De manera similar, el panel central del salpicadero, que incorpora un nuevo y avanzado sistema de información, se ha diseñado de manera ergonómica para asegurar que el conductor tendrá un acceso instantáneo a la información y al mando de los modos de conducción.
La atención al detalle se pone de manifiesto en todo su diseño. Las inserciones cromadas y los materiales de alta calidad así lo demuestran, además existen dos opciones de colores interiores para la consola, rojo o gris metálico, en función del nivel de equipamiento. Incluso los apoyacodos de las puertas, con un diseño que recuerda al de las aletas de buceo, reflejan un estilo de vida activo.
Los asientos están pensados para que resulten cómodos y al mismo tiempo para que dispongan de una buena sujeción lateral. Existen dos tipos de tapicerías de tela. La más Premium, está disponible con detalles en gris o en rojo, mientras que la tapicería de piel tiene detalles en rojo para subrayar el carácter deportivo del coche.
Pese a sus compactas dimensiones, el amplio habitáculo ofrece un espacio adecuado para cuatro adultos: el espacio delantero hasta el techo y el trasero para las rodillas son más que suficientes para todos los ocupantes siempre y cuando los pasajeros no sean muy altos.
Uno de los problemas es la insuficiente área de carga de hasta 251 litros. Los asientos traseros se abaten en proporción 60:40 y el plegado se efectúa en un único movimiento para habilitar un piso de carga completamente plano, que permite aumentar el espacio de cara hasta 830 litros medidos hasta el techo.
Para esconder la carga de miradas no deseadas, el maletero dispone de una bandeja superior que, al contrario de las tradicionales, está anclada al portón y se eleva con éste cuando se abre el maletero.