Los cinco asientos principales son de generosas dimensiones a la vez que muy cómodos. La fila central permite regular la distancia de los asientos así como la inclinación del respaldo. Los tres asientos son del mismo tamaño por lo que la plaza central es completamente útil.
El puesto de conducción es elevado y cómodo, muy similar al de un SUV, permitiendo al conductor tener un amplio campo de visión, algo que también se ve influenciado gracias a un parabrisas de importantes dimensiones.
La palanca de cambios, situada en una consola central muy elevada, puede parecer, en un principio, incómoda de usar, aunque es cuestión de acostumbrase.
La orientación de los mandos en la consola central así como la pantalla, desde donde podemos controlar el GPS, la radio o el teléfono, cuenta con un diseño ergonómico, permitiendo al conductor tener que desviar en menor medida la vista de la carretera.
Los materiales que predominan en el interior son el plástico y la tela, ambos de buena calidad. En opción, el Peugeot 5008 cuenta con tapicería de cuero, un extra caro y poco aconsejable en un vehículo donde los niños pequeños serán el día a día del uso de este, pudiendo mancharlo y estropearlo.
Otro aspecto que ayuda al conductor a mantener la atención en la carretera es el Head-up Display, donde podremos optar a información como la velocidad, el control de crucero o la distancia que hay entre nosotros y el vehículo que nos precede.
El Peugeot 5008 destaca no solo por su amplio habitáculo, si no por la cantidad de huecos repartidos por su interior para guardar objetos. La marca francesa asegura que la capacidad de dichos espacios es superior a los 48 Litros. El monovolumen posée dos guantaras y además, bajo los pies de los pasajeros de la segunda fila hay dos cajones escondidos tras las alfombrillas.
Motorizaciones
Los motores disponibles en el Peugeot 5008 van desde el 1.6 HDI con 114 CV pasando por el 2.0 HDI de 150 CV hasta el 2.0 HDI con 163CV para las variantes diésel y desde el VTi de 120 CV hasta el THP de 150CV. Todos ellos hacen uso de bloques de cuatro cilindros, turbocompresor e inyección directa. Además, como medida de ahorro de combustible, utiliza en los cambios manuales, un sistema que recomienda la marcha adecuada en cada situación. No posée la opción de parada y arranque automático del motor en las detenciones (Start&Stop).
En nuestro caso, nos hemos decantado por el 2.0 HDI de 150 cv, una mecánica prestacional y una de las que menos consume dentro de la gama del monovolumen.
De serie, el 5008 cuenta con una caja de cambios manual, pero en opción, los clientes podrán optar por una automática de convertidor de par para los motores más potentes o bien por una caja manual con automatismo que seleccionan automáticamente la marcha correcta. Todas ellas tienen seis relaciones.
Nuestro motor desarrolla 340 Nm de par disponible en su totalidad desde las 2.000 rpm hasta las 2.700 rpm. En la práctica, la entrada del turbo se produce desde las 1.700, siendo desde ese régimen cuando el 2.0 HDI comienza a ganar velocidad rápidamente. El motor es suave y a la vez poco ruidoso.
El consumo medio obtenido en la prueba ha sido de 6,5 Litros/100km. Haciendo uso de una conducción eficiente, es posible rebajar hasta 0,5 Litros/100 km.
Gracias a su depósito de 60 litros y un consumo moderado, el Peugeot 5008 se beneficia de una autonomía superior a los 750 km antes de entrar en la reserva.
El la versión sport-pack con cuero y techo, 2.0hdi con 103000km en burdeos con bola de remolque desmontable que al final nunca use