Esta semana nos hemos decidido por el Renault Laguna Coupé, nuestra primera prueba con la marca del rombo empieza con uno de los vehículos más representativos dentro de la gama que ofrece la casa francesa.
Heredero en cuanto a diseño se refiere del concept car Fluence, su línea se identifica con el show car Laguna Coupé Concept del que toma su esencia y espíritu.
Sin lugar a dudas un vehículo elegante y deportivo con una apariencia estética nunca antes vista en la marca.
Presentado por primera vez al público en el Salón de Paris de 2008 y comenzada su venta en octubre de ese mismo año, la marca oficializa su vuelta al segmento de los coupés de gama alta.
Diseño exterior
Con un diseño elegante algo futurista, las fluidas líneas y la depurada esencia de la carrocería resalta dentro de la gama Laguna.
Con una longitud de 4,64 metros de largo y 1,81 de ancho, sus proporciones equilibradas le posicionan inmediatamente en el universo de los coupés.
Su atractivo frontal no difiere mucho del de un Laguna convencional salvo por la parrilla con acabado cromado que ocupa la parte inferior del paragolpes. Justo encima encontramos el aerodinámico capó con un abombamiento que nace de la insignia de la marca. A ambos lados del capó nos topamos con los increíbles faros Bi-Xenón con los que venía equipada nuestra unidad de pruebas y que poseen iluminación diurna LED. Esta misma iluminación otorga un aspecto distinguido al vehículo durante el día y especialmente durante la noche. Lo primero que nos viene a la mente es la ausencia de luces antiniebla en la parte inferior del frontal del vehículo. Echo en falta sensores de aparcamiento de serie en la parte delantera ya que hablamos de un vehículo que la marca enmarca en el segmento Premium y dado su prolongado capó carecemos de referencias claras durante el estacionamiento (es posible su montaje en acabados superiores).
De lado, el Renault Laguna Coupé nos recuerda a las gotas de agua, su aerodinámica figura parte de una luna delantera realmente inclinada y finaliza con un arco lateral que acaba en la parte superior del maletero.
Las grandes puertas proporcionan un acceso realmente cómodo tanto a las plazas delanteras como a las traseras pese a la reducida altura del modelo.
El pilar C del Renault Laguna Coupé, es quizá uno de los puntos fuertes del diseño del modelo ya que por así decirlo mueren en el espectacular abombamiento del portón del maletero. Este abombamiento nos recuerda a las partes traseras de los Aston Martin. Ya sabéis que no soy muy de comparaciones pero la verdad es que la zaga del vehículo me parece espectacular.
Los pilotos traseros dotan al Laguna Coupé de una fuerte personalidad en la noche ya que la luz de posición y la de freno están fabricadas en técnica LED. Respecto al resto de luces os debo comunicar que son bombillas normales. Quizá Renault ha errado en este sentido ya que un faro completamente de LED habría puesto la guinda al diseño futurista.
Bajo el portón trasero encontramos el paragolpes con la matrícula y bajo este un difusor de aire escoltado por dos tubos de escape, uno a cada lado. En este nivel encontraremos los sensores de aparcamiento traseros que resultan necesarios en este tipo de vehículos dada la reducida visibilidad que nos ofrecen.
La estética del Renault Laguna Coupé se ve reforzada por sus llantas de aluminio específicas de 17 o de 18 pulgadas que le proporcionan una aumentada sensación de robustez.
Diseño interior
El Renault Laguna Coupé posee el mismo nivel de confort que la berlina o el ranchera.
El puesto de conducción es realmente confortable. Los asientos delanteros poseen unos laterales prominentes que nos ofrecen una buena sujeción lateral
Con relación a la berlina, el Coupé ofrece asientos más deportivos y más envolventes.
El confort de la suspensión es destacable. Gracias al dominio de los movimientos de gran amplitud vertical, con amortiguadores presurizados delante y bi-tubos detrás permiten afrontar bacheados y obstáculos a velocidad moderada manteniendo el confort y la seguridad.
El silencio es un punto clave en el interior del modelo. Los ruidos de motor son prácticamente imperceptibles, no solo por la suavidad del mismo sino por el hincapié que ha querido prestar la marca en la acústica.
La aerodinámica de Renault Laguna ha sido tenida muy en cuenta por lo que los silbidos y las rachas son prácticamente nulos. Además este estudio aerodinámico beneficia muy positivamente al consumo del modelo.
El salpicadero está fabricado en materiales blandos y posee pespuntes de contraste que simulan a los salpicaderos con acabados en cuero. En la parte derecha encontraremos un volante precedido por unos relojes claros y un ordenador de abordo con amplia información. El volante revestido en cuero es de diseño continuista y monta los botones que regulan y activan el cruise control.
A la derecha de la columna de dirección encontraremos el conocido brazo de control que monta la marca para el manejo de la radio y el teléfono. El arranque se efectúa mediante botón previa introducción del mando-tarjeta en la ranura (la operación de la tarjeta es opcional pues podemos dejar la llave en el bolsillo y el vehículo la reconoce el interior y acepta la puesta en marcha)
El equipo de música en un viejo conocido y el control del Navegador de origen TomTom se maneja mediante una unidad de manejo ubicada entre la palanca de cambios y el apoyabrazos, justo al lado de freno de mano eléctrico. La guantera es generosa y refrigerada. Bajo el reposabrazos encontraremos la toma de USB.
Los pasajeros se benefician de un gran confort interior. Delante, la altura del asiento es similar al de la berlina de 268 mm y la altura entre el suelo y el guarnecido del techo alcanza 1.055 mm, ofreciendo una habitabilidad delantera vertical buena.
En la parte trasera, las limitaciones impuestas por la línea merman la habitabilidad. Con un ancho a los codos de 1.436 mm, un radio en las rodillas de 172 mm y una altura bajo techo de 823 mm que puede ser algo molesta para personas altas.
Como os comentaba en el apartado de diseño el Renault Laguna Coupé posee unas grandes puertas que dotan al modelo de una gran accesibilidad delantera. El acceso a las plazas traseras se realiza por el basculamiento del respaldo de los asientos delanteros gracias al accionamiento de un mando (función “easy entry”). El respaldo se abate y el asiento puede avanzar 240 mm, procurando un acceso fácil a las plazas traseras.
Gracias al bloque de climatización desarrollado en común con Nissan y a la adopción de un compresor de gran cilindrada de pilotaje exterior sobre el conjunto del circuito refrigerante la temperatura a bordo siempre es óptima si bien es cierto que el manejo del sistema es algo complejo dado que el panel de mandos está muy aglutinado y es de talla pequeña.
El parabrisas atérmico reduce en un 30% la radiación solar en el interior. El captador solar está integrado en lo alto del parabrisas junto al sensor de lluvia y al de luminosidad.
A pesar de los inconvenientes que presentan ciertos Coupé, el maletero no ha caído en el olvido en el diseño del Laguna Coupé. El modelo posee un maletero de excelentes dimensiones y forma que puede verse ampliado si abatimos los asientos traseros.