Diseño/Estética
Calidad de acabado
Equipamiento de serie
Equipamiento opcional
Habitabilidad
Maletero
Motor/Refinamiento
Prestaciones
Consumos
Transmisión
Dirección
Frenos y neumáticos
Comportamiento
Calidad de rodadura
Relación valor-precio
7.7
Notable
Al Stelvio le han sentado fenomenal los cambios introducidos en la nueva gama. Se percibe claramente que Alfa Romeo ha escuchado las críticas y han tratado de resolver todos aquellos apartados que no terminaban de convencer a los usuarios, logrando un producto mucho más completo y apetecible. El motor diésel quizás se haya quedado obsoleto en términos de refinamiento pero sigue siendo un bloque fiable de buenas prestaciones. El comportamiento como buen Alfa Romeo es intachable aunque el exceso de goma haya manchado un poco las sensaciones. Lo que sí tengo claro es que es un producto a la altura de sus rivales, por muy alemanes que sean.
Sin un crossover hoy día es casi imposible encontrar el éxito. Si marcas como Rolls Royce, Bentley e incluso Lamborghini han tenido que dar el salto, es evidente que toda marca que desee triunfar en la actualidad necesita tener un automóvil de ese segmento, llámese SUV, todocamino, turismo alto o lo que sea.
El Alfa Romeo Stelvio es una de esas propuestas inteligentes y atrevidas que por alguna extraña razón no ha terminado de encontrar su sitio en el mercado. Salvo en Italia, las ventas anuales no alcanzan los niveles qué como producto completo merece. Con la actualización realizada en 2019 la situación ha mejorado, logrando un conjunto mucho más apetecible.
He tenido la oportunidad de probar durante unos días un Alfa Romeo Stelvio 2.2 MJT 210 CV Q4 Ti y me ha dejado muy buenas sensaciones. No es el mejor de su clase pero tiene muy buenos argumentos para convertirse en un serio problema para el trío alemán siempre y cuando el público quiera darle una oportunidad.
ESTÉTICA
A nivel de diseño no hay duda que se trata de uno de los SUVs del segmento D más atractivos. En Alfa Romeo no han querido cambiar mucho unos trazos que ya levantaban pasiones así que se han centrado en los detalles para conseguir actualizar su aspecto sin que se pierda la esencia.
Aparecen nuevos colores para la carrocería, llantas de aleación con diseños más atrevidos de hasta 20 pulgadas, nuevos detalles cromados, etc. La unidad testada incluye las pinzas en color amarillo y unas llantas de aleación de opcionales acompañadas de unos gigantescos neumáticos qué pasan cierta factura, afectando al consumo y comportamiento aunque visualmente son impresionantes.
El Stelvio goza de una imagen elegante y deportiva a partes iguales, y dependerá de las opciones que se elijan el poder ensalzar más una faceta u otra. Actualmente pocos rivales gozan de una estampa tan llamativa y musculosa de serie sin necesidad de recurrir a los famosos packs «M-Sport», «AMG» o «S-Line» del trío alemán.
INTERIOR
Uno de los apartados en los que el Alfa Romeo Stelvio no estaba a la altura era en su interior. Pues bien ya puedes ir olvidándote de todo. Ahora se respira un aire más lujoso, cuidado y bien tratado, y eso que no se ha realizado una gran inversión para mejorarlo; solo han modificado aquello que merecía críticas.
Por ejemplo todos los materiales de las zonas superiores y sensibles al tacto ahora tienen un tacto gomoso muy agradable; las inserciones decorativas pueden ser de diversos materiales y se hace un uso mucho más limitado del negro piano. Los asientos en piel tienen un aspecto imponente y solo en las zonas inferiores se utilizan algunos materiales de aspecto algo más sencillo, que no malo.
La instrumentación ha mejorado con una pantalla LCD de siete pulgadas pero no logra el toque futurista de una configurable completamente. Aquí Alfa Romeo va tarde pero es algo que tiene fácil solución si lo ven necesario. Lo bueno es que el ordenador da mucha información y su manejo es sencillo.
La consola central también ha sido revisada. Entre los asientos ahora se incluye un cargador para el móvil por inducción -opcional-, nuevos controles para el sistema de sonido, una palanca de cambios actualizada y una nueva ubicación para los botones. Ahora el manejo es más intuitivo en movimiento.
El sistema multimedia es completamente nuevo y se agradece. Además de una navegación por menús más claros, resulta rápido, intuitivo y por fin cuenta con pantalla táctil. De serie en todos los acabados tiene 8,8 pulgadas y compatibilidad con Apple CarPlay y Android Auto, además de acceso a internet y al control de la mayoría de los parámetros del vehículo.
Repartidos por el habitáculo hay diversos huecos que permiten vaciar los bolsillos sin problemas. La mayoría de ellos tienen una excelente terminación, con suelo de goma e incluso revestimiento, salvo en las bolsas de las puertas que se mantienen «desnudas» como siempre. El apoyabrazos deslizante esconde un generoso hueco climatizado, útil para enfriar latas.
HABITABILIDAD
El espacio habitable en el Alfa Romeo Stelvio no ha cambiado y por tanto sigue estando en la media del segmento. Cuatro adultos viajarán muy cómodos pero un quinto invitado sufrirá el voluminoso túnel de transmisión y una butaca más dura que queda sobre-elevada, reduciendo el espacio para las cabezas.
En las plazas delanteras la sensación de amplitud me ha parecido correcta. Hay que adaptarse a la generosa consola central pero con la nueva disposición de los mandos se logra tenerlo todo bajo control. El botón de arranque se mantiene en el volante y es quizás el toque más diferenciador respecto a otros automóviles. Cuesta hacerse al principio pero no me parece incómodo.
En las plazas traseras los asientos me han parecido cómodos; la banqueta corrida dibuja claramente dos plazas de generosa anchura y tamaño, confortable y con cierta sujeción lateral. Esto lógicamente perjudica al hipotético quinto pasajero. La altura libre para las cabezas puede ser justa si se incluye el techo solar así que un buen consejo es probar antes.
Me ha gustado que para estas plazas se hayan incluido tomas USB, salidas de aire y si el cliente lo desea los asientos laterales pueden tener calefacción. No pueden incluir cortinillas enrollables o mesas plegables, opciones que si están disponibles en algunos modelos rivales y que facilitan la vida a bordo.
La capacidad de maletero con 525 litros de volumen mínimo es buena. La terminación en esta zona está cuidada, hay toma de corriente y sorprende la gran cantidad de material empleado para vestir las paredes, muy agradable al tacto. Aquí Alfa Romeo destaca frente a algunos rivales que han descuidado un poco el aspecto.
EQUIPAMIENTO
Otro de los puntos criticables de la anterior gama Stelvio era la dotación de serie y disponible. Con la renovación se han solucionado la mayoría de las quejas aunque lógicamente no se ha podido dar respuesta a todas las demandas del público, y elementos como los faros con tecnología LED o el Head Up Display no están disponibles.
De serie en todos los acabados ahora son los faros bi-xenón, sistema multimedia con pantalla de 8,8 pulgadas, radio DAB, Apple CarPlay, Android Auto, puerto USB, bluetooth, ordenador de viaje, llantas de aleación de 18 pulgadas, freno de mano eléctrico y asistente al arranque en cuestas.
También estándar son el climatizador automático de dos zonas, sensor de lluvia, encendido automático de luces, SmartBeam, lector de señales de tráfico, espejo interior fotosensible, arranque por botón, sensor de aparcamiento trasero, alerta de cambio de carril, faros antiniebla, etc.
La terminación probada Super Ti cuenta además con el tapizado en piel de alta calidad, llantas de aleación de 20 pulgadas, pinzas de freno a contraste, cámara posterior, sensores delanteros, asistente al aparcamiento, asientos eléctricos y volante calefactables, navegador, pedales de aluminio, control de crucero adaptativo, detector de objetos en ángulo muerto, etc.
La unidad probada además suma unas llantas de aleación de 20 pulgadas extra-serie muy llamativas, la pintura exterior en color «Gris Stromboli», el techo solar panorámico deslizante con cortinilla eléctrica, portón trasero automático, faros antiniebla con tecnología LED, alarma antirrobo, etc.
El precio base del Alfa Romeo Stelvio 2.2 MJT 210 CV Q4 Ti arranca en los 54.496 € sin opciones aunque es fácil encontrar en los concesionarios ofertas muy interesantes que lo sitúan en una posición más ventajosa. Nuestro consejo es que echéis un vistazo por la red antes de descartarlo.
MOTOR
Bajo el capó la nueva gama del Alfa Romeo Stelvio tiene varias alternativas en gasolina y diésel. De los primeros están los 2.0 Turbo con 200 y 280 CV con un andar muy bueno, y unos consumos que sorprenden por ser bastante contenidos teniendo presente que es un automóvil voluminoso y pesado. El QV de 510 CV lo dejamos como vehículo independiente al ser una fiera a otro nivel.
En diésel la gama arranca con la versión de 160 CV con propulsión posterior que puede resultar algo escasa para mover con alegría el conjunto. Mejor situadas quedan las unidades con 190 y 210 CV en cuanto a prestaciones. Todos los diésel comparten el bloque de 2,2 litros con tecnología Multijet.
Según la motorización elegida los usuarios podrán escoger entre la propulsión posterior (para los diésel de 160 y 190 CV) o bien la tracción total inteligente a las cuatro ruedas Q4 que es de serie en el resto, y opcional para el 2.2 Multijet 190 CV. Común en todos es la caja de cambios automática con ocho velocidades.
La unidad probada está asociada al diésel más potente con 210 CV y es capaz de mover correctamente el conjunto aunque no lo hace de manera más refinada, ni tampoco con el brío esperable. Contar con unos neumáticos tan grandes perjudica las prestaciones y el tacto de conducción, además de los consumos.
En marcha el Stelvio 2.2 MJT se mueve bien pero no tiene carácter. Para conseguir cierta agilidad será necesario hacer un uso intensivo del modo «Dynamic». Si por el contrario se selecciona el A (Advanced Efficiency) se percibe torpe, algo lento e incluso brusco, con una caja de cambios que entiende debe priorizar los bajos consumos por encima de todo. En este modo y el normal se incluye la función «modo vela» que deja al vehículo avanzar por inercia.
Este motor de cuatro cilindros tampoco me ha gustado demasiado por la falta de refinamiento. Suena mucho a diésel y aunque las vibraciones se han contenido bastante, también se pueden apreciar en el interior y en modelos de este precio es un detalle que debería estar más cuidado. Teniendo presente el intachable funcionamiento del 2.0 Turbo en gasolina, da «rabia» no encontrar un diésel a la altura.
Los consumos registrados durante la prueba tampoco han sido de libro, rondando los 7,5 L/100 en autovía y cerca de los 9,0 L/100 en tráfico urbano. Solo en carreteras secundarias buscando la máxima eficiente he logrado coquetear con los 5,5 L/100. Curiosamente hace dos años probé el Stelvio con este mismo motor y los consumos fueron mucho más bajos así que supongo que la adaptación a la nueva norma Euro 6d-Full le ha pasado factura.
Ficha técnica
Version | 2.2 Multijet High |
---|---|
Cilindrada | 2.143cc |
Potencia | 210 CV a 3.500 rom |
Par | 470 Nm a 1.750 rpm |
Peso | 1.820 kg |
Dimensiones Lar/An/Al mm | 4687 / 1903 / 1671 |
Volumen Maletero | 525 / 1.600 litros |
Aceleración 0 a 100 km/h | 7,1 seg en prueba |
Recuperación 80 a 120 km/h | 5,3 seg en D |
Velocidad máxima | 215 km/h |
Consumo homologado | 6,5 L/100 (7,3 L/100 en prueba) |
Emisiones CO2 por km | 170 gr |
Precio de partida | Desde 54.496 € (2.2 MJT 210 CV Ti Q4) |
COMPORTAMIENTO
Si en la anterior ocasión cuando probé el Stelvio dejaba claro que lo mejor del modelo era su comportamiento dinámico, ahora solo puedo reiterar lo dicho pero con matices y es que los neumáticos sobredimensionados condicionan mucho su manejo en todo momento, incluido el tráfico urbano.
Por ejemplo a la hora de estacionar y mover el volante se percibe el exceso de goma; en tramos con curvas se logra un buen agarre pero no me ha terminado de convencer la sensación que transmite a pesar de ser de los mejores automóviles de su clase por cómo se recompone de cada giro. Estoy convencido que con otro juego de ruedas la cosa sería bien distinta.
Para realizar viajes largos el nuevo Stelvio me parece sensacional. Es agradable y la falta de refinamiento del motor queda en segundo plano, logrando un silencioso habitáculo agradable para nuestros acompañantes. También me ha gustado la sensación de aplomo y seguridad que transmite a cualquier velocidad.
En ciudad aunque es grande y para nada resulta sencillo encontrar un hueco de su tamaño, se desenvuelve con soltura. Es menos aparatoso de lo que aparenta y la posición sobre-elevada permite controlar bastante bien todo lo que sucede alrededor. Quizás con un cambio algo más rápido en modo eficiente podría mejorarse la experiencia.
Aunque es un crossover con tracción a las cuatro ruedas, el Stelvio es un claro ejemplo de producto pensado para carretera. Si bien la electrónica podría ayudar a solucionar algunos problemas en conducción off-road, está claro que con el juego de ruedas de esta unidad es casi imposible salir de caminos en buen estado con éxito. Esa tracción total sí resulta valiosa para zonas con climas lluviosos, si hay nieve, etc.
Me ha gustado el sistema de iluminación con bi-xenón. De serie ahora en toda la gama, además son los de 35W con AFS, es decir, los más caros que se ofertaban en las anteriores versiones. Tienen potencia suficiente y nada que envidiar a muchas ópticas con tecnología LED que utilizan algunas marcas.
El sistema SmartBeam también me ha sorprendido por un funcionamiento bastante bueno, algo que no es fácil de lograr. El encendido/apagado de luces también cumple su función en todo momento, y no resulta lento a la entrada y salida de los túneles, ni se vuelve loco al atardecer.
En resumen debo decir que el Alfa Romeo Stelvio tiene grandes argumentos para conquistar a los usuarios; podrá conseguirlo por diseño, acabados, presentación y equipamiento, además de una gama en gasolina que es sensacional. La oferta diésel queda algo rezagada por refinamiento pero no creas que el bloque de dos litros diésel de BMW es mejor ni mucho menos. Por tanto el Stelvio sale bien parado y solo será necesario configurar una unidad con los zapatos más apropiados.
Comportamiento dinámico
Estética atractiva
Quinta plaza incómoda
Precio sin promociones
Es una crítica bastante ecuánime y completa, pero… Un 7,7? Vaya notas que les ponen a los Alfa Romeo. Si fuera alemán o japonés tendría un punto más , como mínimo.
Hola Alex, entiendo «tu frustración» y me ocurre lo mismo pero no es un problema de las notas sino del sistema que tenemos. Si te fijas en otros rivales no sacan mucha mejor nota y casi todas las pruebas terminan rondando entre 7,5 y 8,0 puntos. Tendremos que revisar el sistema aumentando las variables para poder ser más justos y se marquen claramente las diferencias.
Por ejemplo el Mercedes GLC Coupé obtuvo un total de 7,5 puntos, el Audi Q5 TFSIe (más prestacional) un 7,9, el Volvo XC60 un 8,1 y el BMW X3 un 8,2 … como ves hay pocas diferencias.
Vale no es un 10
No es un 9
Pero si un 8 u 8.5 digan lo que digan los demasssss ( rafael )