Diseño/Estética
Calidad de acabado
Equipamiento de serie
Equipamiento opcional
Habitabilidad
Maletero
Motor/Refinamiento
Prestaciones
Consumos
Transmisión
Dirección
Frenos y neumáticos
Comportamiento
Calidad de rodadura
Relación valor-precio
7.9
Notable
El BMW Serie 3 es un automóvil completo y en su versión familiar añade versatilidad. El 318d es una mecánica solvente, aunque es cierto que llevando el coche cargado se te puede quedar algo justo. Eso sí, los consumos son realmente ajustados y la calidad de rodadura bastante buena. Lo malo, como siempre, es la relación precio-equipamiento.
He de reconocer que de vez en cuando me gusta dejar de lado los SUV a la hora de viajar para ponerme al volante de algún familiar, y en esta ocasión es el turno del BMW Serie 3 Touring, un vehículo perteneciente al segmento de los coches familiares premium con los ya conocidos aires de deportividad a los que nos tiene acostumbrados la marca germana. ¿Qué en qué supera a un todocamino? Claramente, en dinamismo y en consumos, a lo que hemos de añadirle elegancia y confort para hacer largos viajes.
La renovación efectuada hace unos meses al BMW Serie 3 ha servido para ponerlo al día en ciertos aspectos en los que no terminaba de convencer, logrando con ello un conjunto mucho más satisfactorio para el cliente. Los cambios estéticos han sido pequeños, pero en todo lo relacionado con la dinámica, terminación y posibilidades de equipamiento se nota una evolución positiva, convirtiéndolo de nuevo en una de las alternativas de su segmento más completas.
Sin duda alguna en BMW pueden estar realmente satisfechos con su Serie 3, y es que durante la semana que he tenido ocasión de probarlo pocas son las pegas que puedo sacarle, salvo por el precio, pues lo malo en un coche tan completo es lo rápido que sube la factura. Sin embargo, si eres uno de esos afortunados con una capacidad económica solvente y desahogada, quizás te pueda interesar un modelo como este, ya que es una de las mejores berlinas disponibles en la actualidad.
Para ponerlo a prueba, he decidido viajar con él hasta Pamplona con cinco adultos a bordo y el maletero a rebosar de equipaje, a fin de comprobar si 150 caballos de esta versión 318d son suficientes para viajar en familia con solvencia. Ya te adelanto que no es una bala en estas condiciones y que tendrás que hacer alguna parada de más por el espacio en las plazas traseras, pero cuando recorres 384 kilómetros y solo consumes poco más de un cuarto de depósito… se te dibuja una sonrisa en la cara.
¿Me acompañas a conocerlo?
Diseño exterior
Los modelos de Bayerische Motoren Werke siempre se han distinguido por su deportividad, elegancia y dinamismo, pero el nuevo BMW Serie 3 Touring agrega funcionalidad y versatilidad a estas cualidades. Lo cierto es que se trata de un familiar de corte bastante clásico en el que la pasión por el detalle queda presente en cada lugar, aunque si queremos un exterior más pintón, la solución pasa por rascarse el bolsillo e ir añadiendo unas cuantas opciones como ocurre en la unidad probada.
En el frontal se sigue fiel al formato BMW, con los clásicos riñones tomando todo el protagonismo. A ambos lados se encuentran las ópticas delanteras, que de serie incluyen la tecnología LED de elevada eficacia, aunque opcionalmente podemos hacerlos también autoadaptables. En el extremo inferior del paragolpes vemos las luces antiniebla redondeadas, una segunda entrada de aire alargada y varios embellecedores cromados.
Visto de perfil es un familiar con empaque. El largo y bajo capó le garantiza un aspecto más dinámico y unas proporciones más atractivas, conservando a su vez el porte característico de todo vehículo premium. El modelo presenta una generosa superficie acristalada -aunque echamos en falta el oscurecimiento de los cristales posteriores- y en la parte superior podemos encontrar dos raíles de techo cromados. Llenando los pasos de rueda nos encontramos con unas llantas de aleación de 18 pulgadas calzadas con unos neumáticos Pirelli Cinturato P7 en dimensiones 225/45 R18 95Y.
Hay disponibles 16 colores exteriores para la carrocería entre los que podemos encontrar tonos clásicos o alegres y diversos acabados: uniforme y metalizado. En este caso tenemos un Jatoba metalizado -1.053€-.
La superficie de las puertas es limpia, sin embellecedores, quedando esta marcada especialmente por el nervio que atraviesa todo el lateral acogiendo los tiradores de las puertas. En este caso los espejos retrovisores integran los intermitentes y cuentan con una base plástica en color negro a contraste. Nuevamente, no faltan los cromados en el marco de las ventanillas para poner el remate de elegancia.
Visto de lado, es más bien compacto para ser un familiar, pues sus medidas alcanzan los 4,63 metros de largo, 1,81 metros de ancho y 1,43 metros de alto, unas cotas en la línea de sus competidores. La batalla mide 2.810 mm y las vías delantera y trasera miden 1.543 y 1.583 mm respectivamente. El coeficiente aerodinámico es de 0,29.
En la zaga también gana en prestancia, con unas ópticas muy parecidas en su formato a las empleadas en los Serie 5 y que llevan tecnología LED. El portón de generosas dimensiones -eléctrico de serie- y el estilizado paragolpes son otras de las señas de identidad de esta vista. Llaman especialmente la atención elementos como el sutil spoiler superior con la tercera luz de freno y la salida de escape cromada. Tampoco falta la tira de sensores de aparcamiento posterior.
Diseño interior
Si pasamos al interior, la calidad de los acabados, el tacto de los controles y el remate de los ajustes es de primera, con una tremenda evolución respecto a la anterior generación del modelo. No hay crujidos, no hay vibraciones y todo funciona como la seda, pues la calidad de realización es excelente, haciendo gran uso de materiales acolchados muy agradables al tacto en la mayoría de guarnecidos y unos ajustes impecables.
Como suele ocurrir en las unidades de prensa, el completo equipamiento hace que sea algo complicado imaginar una versión “de serie”, posiblemente menos impactantes al primer vistazo. BMW ofrece miles de posibilidades de personalización, pudiendo jugar con los tapizados y sus colores, apliques decorativos en madera, aluminio, símil carbono o negro lacado, y el tamaño de la pantalla situada en posición central.
Los asientos son muy cómodos y ofrecen un agarre notable, especialmente en el caso de esta unidad que presume de ajustes eléctricos. Con ellos es fácil encontrar con rapidez la postura óptima de conducción y viajar en ellos es todo un lujo. Por lo demás, en términos de diseño, pocas novedades encontraremos respecto a los productos habituales de la marca, con la parte buena y mala que esto conlleva.
Algo que me encanta de los BMW y que debería mantenerse siempre en los modelos de la marca es el tacto y el grosor del volante. Es diferente al resto y extremadamente agradable (aunque para gustos los colores).
Por ejemplo, un detalle que no termina de convencer es la instrumentación. Los dos relojes principales resultan claros, pero la información inferior queda tapada por el volante para algunos conductores y, por tanto, muchos de los datos del ordenador de viaje (ya sea con la pantalla de serie o la ampliada) no están visibles, debiendo forzar la postura para consultarlos,
En la consola central se incluye de serie en todas las versiones una pantalla de 6,5 pulgadas a color desde la que se pueden consultar los datos del sistema de sonido, el navegador más sencillo si se equipase y algunos parámetros del vehículo. En opción encontramos esta otra pantalla con 8,8 pulgadas, mucho más vistosa y completa. Sus funciones se manejan desde el tradicional iDrive, localizado en la consola central, y goza de excelentes gráficos.
El freno de mano es tradicional, lo que no permite aprovechar tan bien el espacio de la consola entre los asientos. Con uno eléctrico se conseguiría un diseño más limpio, un hueco porta-objetos más grande y mayor sensación de anchura.
Respecto a la habitabilidad, hay que señalar que el acceso a las plazas traseras es bastante cómodo para tratarse de un familiar compacto. No contamos con un acceso excesivamente ancho, pero sí que ofrece un ángulo de apertura generoso. El espacio para las piernas es notable para el tamaño del modelo y la altura al techo más que suficiente -también equipando el techo panorámico-, incluso para personas de 1,85 metros.
La plaza central es utilizable, pero no muy cómoda, ya que presenta las clásicas limitaciones del túnel de transmisión, las salidas de ventilación posteriores y un mullido algo más duro a causa del reposabrazos central. Además, la anchura disponible para los hombros no es precisamente sobresaliente, por lo que tres adultos viajarán bastante justos. Puede hacerse un viaje con tres personas atrás, demostrado queda, pero lo mejor es ir rotando con los pasajeros delanteros en este caso.
El maletero cubica un total de 495 litros, aunque si abatimos los asientos -40:20:40-, el volumen asciende a 1.500 litros. Es ligeramente inferior al del nuevo BMW X1, pero desde luego, el modelo destaca por su modularidad, ya que ofrece unas formas muy regulares, enganches laterales y un doble fondo bajo el piso del maletero bastante generoso. La única pega es que, al abatir los asientos, el piso queda con una ligera inclinación.
Motorización
Entre las novedades más importantes hay que destacar la introducción de las mecánicas con tres cilindros que tienen cabida en los 318i y 316d. El primero recurre al 1.5 Turbo con 136 CV/100 kW de potencia que se puede solicitar con cambio manual de seis relaciones o automático de ocho velocidades. Siempre será tracción trasera.
El segundo también cuenta con 1.5 litros, pero su potencia se queda en los 116 CV/85 kW. Va asociado a la transmisión manual de seis relaciones o a la automática de ocho y la tracción es siempre al eje trasero, como ocurría en el caso anterior.
Con cuatro y seis cilindros están el resto de motorizaciones, pudiendo elegir en algunas de ellas entre la tracción trasera o la tracción total (330i y 340i). En gasolina tenemos el 320i con 184 CV/135 kW, el 330i con 252 CV/185 kW y el 340i con 326 CV/240 kW de potencia, todos ellos con caja de cambios automática estándar o deportiva (la manual de seis velocidades está disponible para el 320i).
En diésel se pueden elegir los 2.0 litros con 150 CV/110 kW (318d), 163 CV/120 kW (320d EfficientDynamics) y 190 CV/140 kW (320d); o los bloques de 3.0 litros y seis cilindros en línea con 258 CV/190 kW (330d) y 313 CV/230 kW (335d). Los más potentes está ligados siempre al cambio automático de ocho velocidades (o al cambio deportivo automático), siendo este opcional para los 318d, 320d y 320d EffDy. Lo mismo ocurre con la tracción total, siendo opcional solo para el 320d.
Para la prueba me he decantado por la mecánica 318d, una de las más vendidas en nuestro mercado, aunque lo cierto es que el mayor equilibrio lo guarda el bloque 320d. Hablamos de un bloque de aluminio con dos árboles de levas en la culata, turbo, inyección directa por conducto común, geometría y admisión variables e intercooler que, con 1.995 cm3 y cuatro válvulas, desarrolla una potencia de 150 CV (110 kW) a 4.000 rpm, todo ello asociado a un par máximo de 320 Nm entre las 1.500 y las 3.000 rpm.
Podemos encontrar tres modos de conducción: Eco Pro, Confort y Sport, con un notable salto en reacciones entre ellos. La mejora en insonorización queda patente nada más arrancar y el funcionamiento del Start/Stop es destacable.
Para ser un diésel, empuja en un rango bastante amplio de revoluciones, y asociado a la transmisión automática de ocho relaciones es bastante aprovechable. Realmente, empieza a empujar con fuerza a partir de las 1.700 rpm, aunque en una conducción tranquila, la transmisión sube de marcha en el entorno de las 1.900 vueltas, lo que ayuda a contener los consumos.
En frío es algo ruidoso y notaremos alguna vibración, pero por lo general es un motor suave que nos ofrece una entrega de potencia lineal y progresiva, moviéndonos enérgicamente en la mayor parte de las situaciones. Si bien es cierto, cuando lo llevamos cargado de pasajeros y equipaje, no resulta una mecánica explosiva en prestaciones, por lo que a algunos usuarios se les podría quedar ligeramente corto de potencia este bloque.
Con sus cifras de potencia es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 8,8 segundos, recuperando de 80 a 120 km/h en torno a los 8,1 segundos y alcanzando una velocidad máxima de 210 km/h. En carretera el motor gira a 1.800 rpm a 120 km/h.
Para muchos usuarios las cifras de esta versión serían suficientes para cualquier uso del vehículo en diversos entornos (ciudad, autopista, carreteras secundarias, algún que otro viaje en familia…), ofreciendo buen equilibrio en consumo-prestaciones. Sin embargo, es cierto que si te gusta llevar bastante potencia bajo el pie derecho o acostumbras a llevar el coche muy cargado, deberías plantearte optar por la mecánica superior, el coche irá más desahogado. Si 190 CV te parecen excesivos, quizás la versión 320d EfficientDynamics con 163 CV pueda resultarte una opción acertada.
Respecto a los consumos, la marca homologa un consumo urbano de 4,9 l/100 km, un extraurbano de 3,7 l/100 km y un consumo combinado de 4,1 l/100 km, datos que he podido comprobar que se alejan ligeramente de los consumos reales, aunque estos se mantienen muy razonables.
Durante la prueba, el consumo medio se detuvo en los 6,0 litros (haciendo gran parte del recorrido por carreteras y autopistas), ascendiendo a los 7,3 litros en ciudad y bajando hasta los 5,4 litros en carretera. En cualquier caso, recordemos que íbamos cinco personas a bordo con equipaje. El depósito es de 57 litros.
Ficha técnica
Version | 318d - 4 cilindros en línea |
---|---|
Cilindrada | 1.995 cm³ |
Potencia | 150 CV (110 kW) @ 4.000 rpm |
Par | 320 Nm @ 1.500 - 3.000 rpm |
Peso | 1.595 kilos |
Dimensiones Lar/An/Al mm | 4.633 / 1.811 / 1.429 mm |
Volumen Maletero | 495 (1.500) litros |
Aceleración 0 a 100 km/h | 8,8 segundos |
Recuperación 80 a 120 km/h | 8,1 segundos |
Velocidad máxima | 210 km/h |
Consumo homologado | 4,9 / 3,7 / 4,1 l/100 km (urb. /extraurb. / comb.) |
Emisiones CO2 por km | 109 g/km de CO₂ (Euro 6) |
Precio de partida | 38.750 euros (esta mecánica con cambio manual sin descuentos) |
Comportamiento
Como buen BMW que es, el Serie 3 Touring destaca especialmente en este apartado por su dinamismo. Sí, es un familiar, pero el compromiso entre confort y deportividad está tan logrado como en el resto de sus hermanos de gama. Igualmente, a la hora de moverse en la ciudad tampoco te defraudará, con unas medidas contenidas y una buena visibilidad en todos los ángulos. Manejarse con él incluso en aparcamientos es extremadamente sencillo, especialmente si equipamos algunas ayudas como la cámara de marcha atrás, de excelente resolución, por cierto.
A la hora de enfrentarte a tramos algo más revirados, podrás pensar que el hecho de ser un a «ranchera» le penaliza cuando vamos a enlazar curvas, pero lo cierto es que tienes que forzarlo mucho para llegar al límite y no se le pueden poner reproches, pues el trabajo de los ingenieros sobre el chasis y las suspensiones está muy conseguido y apenas hay balanceos, con cambios de apoyo impecables y rápidos. Es cierto que no es tan bueno como, por ejemplo, un BMW 320d Touring con tracción integral xDrive, pero el conjunto es excelente.
Respecto a las suspensiones, hablamos de un esquema McPherson delantero y de paralelogramo deformable trasero, con una firmeza suficiente para alcanzar un paso por curva rápido sin perjudicar a la comodidad de los pasajeros cuando circulamos por autopista. Es quizás sobre firmes irregulares o tramos de carretera en peor estado donde esta resulta un poco más seca, pero en ningún caso llega a resultar incómoda. Como os decía, se ha conseguido un gran equilibrio entre confort y dinamismo sin que hablemos de un vehículo enfocado a ir de rally con la familia.
La calidad de rodadura es elevada y la buena aerodinámica contribuye a que el viento no nos moleste en exceso cuando circulamos algo ligeros por autopista. Lo más ruidoso del modelo es la mecánica, aunque la insonorización del habitáculo está lograda (sólo modelos como el Audi A4 o el Volkswagen Passat le superan en este aspecto).
Si bien es algo menos confortable que rivales como el Clase C o el Audi A4, el tacto del volante y la dirección invitan a practicar una conducción algo más dinámica que en sus competidores y te hace partícipe de la conducción. Está claro que no tiene un tacto de dirección como el de un deportivo, pero en este aspecto tampoco le podemos poner reproches al Serie 3 Touring, pues es suficientemente rápida, precisa e informativa como para buscarle las cosquillas a este familiar en una mañana de domingo por la sierra.
Equipamiento y precio
En BMW dicen haber cambiado la política de equipamiento y desde hace un tiempo han enriquecido la dotación de serie desde los niveles más básicos. Si bien es cierto, también es justo decir que dado el precio que se paga se echan en falta algunos elementos que deberían ser de serie.
En cualquier caso, todos los Serie 3 Touring incluyen los controles de estabilidad y tracción, ABS, EBD, múltiples airbags, climatizador automático de dos zonas, paquete eléctrico completo, ordenador de viaje, sistema de sonido con pantalla de 6,5 pulgadas, llantas de aleación de 16 pulgadas, faros antiniebla, encendido automático de luces, sensor de lluvia, bluetooth, selector de modos de conducción, portón posterior eléctrico y puerto USB, entre otras cosas.
La unidad testada suma además los faros Full LED, tapizado en piel, asientos eléctricos y calefactables, alerta de cambio de carril, control de crucero adaptativo, el citado techo solar doble, Head Up Display, el paquete exterior Luxury Line con las llantas de 17 pulgadas, navegador, servicios conectados BMW Connected, espejo interior fotosensible, etc. En total, nos encontramos ante un precio final que sin descuentos ronda los 54.000 euros.
Echando cuentas no es más caro que un Audi A4 Avant Quattro o un Mercedes Clase C Estate con tracción 4MATIC, aunque lógicamente sí se aleja mucho de lo que costaría un Opel Insignia Sports Tourer o un Volkswagen Passat Variant 4Motion. En su defensa hay que decir que BMW está realizando constantes promociones en las que se aumenta la dotación por precios más ajustados, además de ofrecer algunos descuentos a pie de concesionario.
Para evitar que el precio se eleve en exceso, BMW propone las líneas de equipamiento que añaden a un coste ventajoso más equipamiento. Estos son los acabados Advantage -2.500€-, Sport -3.800€-, Edition Sport Line Shadow -4.522€-, Luxury -5.500€-, Edition M Sport Shadow -6.447€- y Edition Luxury Line Purity -6.700€-.
Los precios para toda la gama del BMW Serie 3 Touring sin descuentos son los siguientes:
Modelo | Potencia | Precio |
DIÉSEL | ||
316d 6MT | 116 CV | 36.750€ |
316d 8AT | 116 CV | 39.198€ |
318d 6MT | 150 CV | 38.750€ |
318d 8AT | 150 CV | 41.198€ |
320d EfficientDynamics 6MT | 163 CV | 41.700€ |
320d EfficientDynamics 8AT | 163 CV | 44.148€ |
320d EfficientDynamics 8AT dep. | 163 CV | 48.899€ |
320d 6MT | 190 CV | 40.900€ |
320d 8AT | 190 CV | 43.348€ |
320 d 8AT dep. | 190 CV | 48.276€ |
320d xDrive 6MT | 190 CV | 44.200€ |
320d xDrive 8AT | 190 CV | 44.979€ |
320d xDrive 8AT dep. | 190 CV | 51.681€ |
330d 8AT | 258 CV | 55.000€ |
330d 8AT dep. | 258 CV | 59.937€ |
330d xDrive 8AT | 258 CV | 57.500€ |
330d xDrive 8AT dep. | 258 CV | 62.437€ |
335d xDrive 8AT | 313 CV | 60.600€ |
335d xDrive 8AT dep. | 313 CV | 65.537€ |
GASOLINA | ||
318i 6MT | 136 CV | 36.300€ |
318i 8AT | 136 CV | 38.845€ |
320i 6MT | 184 CV | 41.300€ |
320i 8AT | 184 CV | 43.845€ |
320i 8AT dep. | 184 CV | 48.781€ |
330i 8AT | 252 CV | 48.650€ |
330i 8AT dep. | 252 CV | 53.587€ |
330i xDrive 8AT | 252 CV | 51.150€ |
330i xDrive 8AT dep. | 252 CV | 56.086€ |
340i xDrive 8AT | 326 CV | 60.000€ |
340i xDrive 8AT dep. | 326 CV | 64.946€ |
- Comportamiento dinámico excelente, tanto por dirección como por suspensiones y puesta a punto del chasis, parece un compacto de la marca. Es una pena que con este motor no se pueda pedir la tracción total.
- Destaca por presentación, acabados y posibilidades de equipamiento.
- El portón posterior resulta práctico y viene de serie con la apertura/cierre automáticos. Destaca, además, la versatilidad del modelo.
- El motor diésel tiene unas prestaciones buenas y no gasta demasiado.
- El funcionamiento del cambio automático permite aprovechar muy bien las posibilidades del motor y su funcionamiento es reseñable, muy recomendable equiparlo.
- Nuevo sistema de entretenimiento y navegación.
- La finura del motor de cuatro cilindros se está quedando muy atrás respecto a otros competidores, especialmente en frío, pues no es muy silencioso ni tampoco demasiado agradable.
- Los neumáticos excesivos perjudican ligeramente el confort.
- La dotación de serie podría ser más completa teniendo en cuenta el precio. El precio recomendado está en la línea con los rivales directos, pero este es elevado y resulta obligado añadir algunas opciones que elevan en exceso las tarifas.
- El ancho en las plazas traseras es algo justo y la tercera plaza posterior no permite viajar con comodidad por su mullido duro y su posición más elevada.
- La instrumentación no termina de verse bien al quedar tapada por el volante.