Prueba del Honda Civic 1.6 i.DTEC: Promete y cumple

Hoy os traemos en autonocion.com un coche que seguro que mucha gente se está planteando seriamente como compra. Os hablo del Honda Civic, con el nuevo motor diésel 1.6 de 120 cv.

Con este motor, Honda quiere ofrecer un vehículo con un consumo más bajo que el que ofrece el motor diésel 2.2 i-DTEC de 150 cv, que probamos hace unos días. De esta forma, la marca nipona se suma al “downsizing” que caracteriza a los nuevos motores.

Diseño Exterior:

Exteriormente, el Honda Civic presenta unas formas muy características que no dejan a nadie indiferente. Bajo mi punto de vista tiene algo muy importante, y es que no hay duda de que tiene su propia personalidad. Al verlo por la calle nadie tiene ninguna duda, es un Honda Civic, no se parece a ningún otro modelo.

Al diseñar este Civic, desde Honda querían mantener el espíritu deportivo y futurista del coche, pero adaptarlo para transmitir una personalidad aún más elegante. Las líneas exteriores también se han diseñado para acentuar este nuevo look más bajo y firme.

En líneas generales, el exterior es el mismo que el que ya nos describió Luis en la prueba de la versión 2.2 del Honda Civic:

“El nuevo modelo es 20 mm más bajo y 10 mm más ancho que la anterior generación y sus líneas consiguen que el Civic 5 puertas tenga la estética deportiva que suele encontrarse en los vehículos de 3 puertas.

A continuación de los faros encontramos un embellecedor en color negro que ocupa toda la parte central del paragolpes delantero, viene de serie en todos los acabados y le da esa estética tan característica al modelo. El hueco para la matrícula marca aproximadamente el ecuador de la altura total del frontal y es a esa altura a la que se encuentran los sensores delanteros de aparcamiento que son realmente recomendables dada la escasa visibilidad y la caída que experimenta el frontal del vehículo.

A ambos lados de este embellecedor que  rodea por abajo la rejilla superior y por encima la inferior, encontraremos los llamativos faros de luz diurna LED.

En las esquinas inferiores del frontal, Honda monta los faros antiniebla.

Visto de lado, el diseño del habitáculo tiene forma de cuña, aspecto que queda enfatizado por el pequeño tamaño de las lunas laterales (en particular, las traseras) en relación con la superficie total del lateral del coche. Esto produce un efecto más estilizado si se compara con los habitáculos que encontramos habitualmente en los modelos de 5 puertas del segmento C. El acceso al habitáculo es cómodo y sencillo gracias al ángulo de apertura de sus puertas.

Los retrovisores laterales incorporan indicadores intermitentes LED y la superficie del espejo es muy amplia, lo que mejora claramente la visibilidad a través del mismo.

Esta mejora en los retrovisores laterales, combinado con el estrechamiento del pilar A, contribuye a mejorar la visibilidad en general.

Las líneas exteriores del nuevo Civic también se han diseñado para acentuar este nuevo look más bajo y firme.  Los arcos de las ruedas poseen un diseño aerodinámico que fluye desde la carrocería para conferir al nuevo Civic ese aspecto limpio y elegante.

Los pasos de rueda están enmarcados en color contraste y el interior de los mismo revestido de material textil para mejorar la acústica interior.

En la parte trasera, una combinación única de luces se ha optimizado para producir el máximo impacto visual y la máxima eficiencia aerodinámica.

Las luces traseras del nuevo modelo se han elevado para asegurar buena visibilidad de los vehículos que circulan detrás. La luz de freno también hace las veces de spoiler con función aerodinámica, ya que dirige el flujo de aire procedente de la parte superior del coche. Igualmente, las luces traseras poseen una función aerodinámica y sobresalen hasta una posición óptima para mejorar el coeficiente de penetración lateral.”

Diseño Interior:

Tal y como ocurre con el diseño exterior, en el interior apenas encontramos diferencias relevantes entre la versión que ya hemos probado y la que hoy nos ocupa:

“El Civic es conocido por el original diseño futurista de su interior y sus líneas deportivas, que conviven con un habitáculo espacioso y versátil. Estos rasgos característicos del diseño se han mantenido en la nueva versión, pero se han refinado todas las características que definían al interior.

La fuente de inspiración fue la cabina de un caza, pensada para facilitar un uso intuitivo de los mandos. Esta nueva y funcional cabina incluye dos zonas de control que separan las áreas conocidas como interfaz de información e interfaz de conducción.

La interfaz de conducción proporciona toda la información esencial en el punto al que se dirige normalmente la vista y la interfaz de información se encuentra en la parte central del salpicadero. La zona situada frente a los ojos del conductor es profunda y espaciosa, en sintonía con el estilizado diseño exterior, en tanto que la interfaz de información ofrece máxima facilidad de manejo al situar dispositivos como el sistema de audio, el navegador, los mandos de la calefacción y el climatizador al alcance del conductor y el acompañante.

Entre los dos asientos delanteros hay un compartimento con capacidad para dos botellas de 1 litro y dos botellas de 350 ml. También incluye una toma de corriente, entradas USB y Auxiliar.