Diseño/Estética
Calidad de acabado
Equipamiento de serie
Equipamiento opcional
Habitabilidad
Maletero
Motor/Refinamiento
Prestaciones
Consumos
Transmisión
Dirección
Frenos y neumáticos
Comportamiento
Calidad de rodadura
Relación valor-precio
7.5
Notable
El Hyundai Kona 1.0 TGDI Klass es una de las apuestas del segmento más completas e interesantes por sus buenas prestaciones, dotación interesante y diseño diferenciado. Es cierto que el Renault Captur está ofreciendo promociones sensacionales pero también es un producto muy visto y quizás está demasiado gastado. La propuesta de Hyundai incluye cinco años de garantía.
El Hyundai Kona es uno de los modelos más importantes para el fabricante surcoreano. Lanzado hace tan solo unos meses, se ha convertido en un pilar fundamental al competir en uno de los segmentos más reñidos en la actualidad: los crossovers pequeños.
Desarrollado pensando en Europa pero también en los gustos de otros mercados como el australiano o estadounidense, el Kona trata de plantar a los Renault Captur, Peugeot 2008 y Fiat 500X arriesgando en su diseño exterior y ofreciendo versiones con tracción total, algo poco habitual en este segmento.
He tenido la oportunidad de probar un Kona 1.0 TGDI 120 CV Klass, es decir, una de las alternativas más sencillas disponibles y debo reconocer que me ha gustado bastante por su buen andar, comportamiento de noble reacciones y una relación valor-precio interesante. Si quieres conocerlo más en profundidad solo tienes que seguir leyendo.
DISEÑO
Al igual que hizo con Nissan con el Juke hace tiempo, Hyundai ha querido arriesgar un poco más de lo habitual en el diseño del nuevo Kona. Sus formas puede que no gusten a todo el mundo pero al menos se alejan bastante de lo que ofrecen el resto de rivales, consiguiendo esa ansiada personalidad que enamora a muchos clientes.
Los trazos más complicados están en el frontal, mezclando grupos ópticos quizás de manera confusa –aunque cumplen muy bien con su función- y realzando su enfoque crossover con detalles como las molduras plásticas en color negro, protectores de bajo y la suspensión algo más elevada.
Con el acabado Klass las llantas de aleación de 16 pulgadas que vienen de serie se quedan “visualmente” pequeñas aunque son las coherentes con su filosofía. Provocan que la vista lateral no resulte tan dinámica como en los acabados más completos pero se mantiene atractivo. La zaga es más convencional y quizás lo menos arriesgado de su diseño exterior.
INTERIOR
Una vez en el interior lo más llamativo del Kona es que resulta muy “familiar”. Si conoces los modelos de la marca o incluso de Kia, reconocerás la mayoría de botones/mandos, y la distribución general de todos los elementos. Es más práctico que bonito y al contrario de lo que sucede con el exterior, aquí los diseñadores de Hyundai parecen no haber querido correr riesgos.
En el nivel de acabado Klass se incluye de serie el sistema multimedia con pantalla táctil de siete pulgadas, siendo el elemento más representativo del interior (o al menos el que se lleva todas las miradas). Incluye Apple CarPlay, Android Auto, cámara de visión posterior, radio digital y la calidad del sonido no está mal, resultando completo y equilibrado para una mayoría.
La instrumentación es la clásica en la marca, sin grandes lujos pero sencilla en su lectura. En la pantalla LCD de información hay datos sobre el ordenador de viaje, velocímetro digital, alerta de cambio de carril, sistema de sonido y algunos parámetros del vehículo. Se maneja desde el propio volante de manera intuitiva.
La calidad de terminación es mejor que los materiales usados, en general rígidos y sensibles a arañazos. Los ajustes entre piezas son notables y no he visto fallos pero sí es cierto que los plásticos poco vistosos restan atractivo al interior. Está en un escalón superior al Kia Stonic pero un Citroën C3 Aircross tiene detalles más cuidados (marcos de las ventanillas forrados) y un Opel Mokka X presume de materiales acolchados de mejor calidad (por citar dos ejemplos).
Lo que no admite tacha es la cantidad de lugares disponibles para dejar objetos, algo que facilita mucho las cosas en el día a día. No tienen suelo de goma ni están guarnecidos pero se agradecen para dejar el móvil, la cartera o las llaves. En cuanto a la guantera principal, tiene capacidad holgada para la documentación, los chalecos y algunas cosillas adicionales.
HABITABILIDAD
El espacio disponible en el interior del Hyundai Kona se puede considerar correcta, estando en un término medio respecto a los rivales más directos. Si esto es algo vital, hay opciones como los Citroën C3 Aircross, Opel Crossland X o SEAT Arona con mejores cotas o soluciones para el día a día.
En las plazas delanteras hay buenas dimensiones en todas las direcciones, con un ancho generoso que deja al acompañante lo suficientemente alejado para que no resulte molesto (no rozan los brazos al apoyarlos), una altura al techo correcta (con techo solar sí es limitada) y un puesto de conducción cómodo con todos los mandos a mano.
En las plazas posteriores dos adultos podrán viajar sin problemas y un tercero podría acomodarse si no es demasiado voluminoso (mejor un niño). Está más limitado que otros modelos similares pero las diferencias no son demasiado grandes. El espacio para las piernas es bueno para personas de hasta 1,85 metros mientras que la cota de altura es suficiente para que no rocen las cabezas.
Con 361 litros de capacidad el Hyundai Kona no es el modelo más indicado para viajar cargados pero queda mejor situado que los Kia Stonic y Peugeot 2008. Está bien terminado aunque carece de una práctica toma de corriente y las argollas o puntos de sujeción pueden ser insuficientes. El borde de carga está un poco elevado aunque el escalón que deja no requiere realizar esfuerzos.
EQUIPAMIENTO
La gama actual del Kona está formada por los acabados Essence, Klass, Tecno y Style. El más interesante para una gran mayoría es precisamente el probado al incluir sin coste todos los elementos imprescindibles hoy día más alguna que otra cosilla adicional que seguro agradecen los usuarios.
De serie cuentan con climatizador automático (una zona), sistema multimedia con pantalla de 7 pulgadas, bluetooth, USB, ordenador, cámara trasera, faros antiniebla, espejos y elevalunas eléctricos, control de velocidad, encendido automático de luces, volante en piel, llantas de aleación, asiento posterior abatible, alerta de cambio de carril con asistente y ayuda al arranque en cuestas.
Las únicas opciones disponibles son el sistema de frenada automática en ciudad con aviso pre-colisión y detector de peatones (350 €) y la pintura metalizada (400 €). Si se desean otros elementos habrá que ir subiendo niveles de terminación. Es una pena que no dejen en opción algunos extras interesantes como los faros LED o unas llantas de aleación más vistosas.
El precio base del Hyundai Kona 1.0 TGDI 120 CV Klass 2WD 6MT se ha fijado en los 20.640 € sin promociones. Si se aplican todos los descuentos (incluida la financiación con la marca y la sobretasación por entregar un usado), el precio se reduce hasta unos más atractivos 17.040 € sin opciones.
Echando un vistazo a los rivales, el Hyundai Kona tiene un precio algo superior al de un Renault Captur 1.2 TCe 120 CV Zen (16.115 €), Kia Stonic 1.0 TGDI 120 CV Concept (15.038 €) o Ford EcoSport 1.0 Ecoboost 125 CV Trend+ (16.009 €), similar al de un Citroën C3 Aircross 1.2 e-THP 110 CV Feel (17.150 €) o SEAT Arona 1.0 TSI 115 CV Style (16.760 €) y bastante más asequible que los VW T-Roc, Audi Q2, Mazda CX-3 y Honda HR-V.
MOTOR
Uno de los motores más explotados del Grupo Hyundai-Kia en la actualidad es el 1.0 TGDI de tres cilindros. Disponible en varias potencias, tiene un funcionamiento agradable y no vibran mucho aunque la sonoridad es un tanto particular y los consumos no suelen ser tan bajos como prometen.
En el caso concreto del Kona he tenido oportunidad de probar el 1.0 TGDI de 120 CV con cambio manual de seis velocidades y debo reconocer que se muestra más que suficiente para mover con soltura la carrocería del crossover. Me ha sorprendido que su funcionamiento sea más agradable que en el Kia Stonic, un modelo de corte parecido.
A pesar de tener un sonido algo curioso, en el Hyundai Kona no resulta molesto ni en aceleraciones fuertes, más por mérito del propio motor que del aislamiento (bastante normal). Tiene un medio régimen correcto y bastante garra en altos pero tampoco se olvida de unos bajos muy buenos que permiten circular en marchas largas sin problemas. El selector de modos de conducción no influye demasiado en su comportamiento aunque en Sport se nota que la potencia es un poco más inmediata.
El tacto del cambio es bueno. Las seis marchas están bien escalonadas, con la última de desahogo para reducir el gasto y sonoridad en autovía. La única pega que se le podría poner es un tacto algo tosco y una marcha atrás que no siempre es capaz de engranar al primer intento.
Durante la prueba los consumos han rondado los 7,0 L/100, es decir, es un dato correcto pero no sensacional. Para conseguir bajar el gasto requiere demasiada atención y aunque se pueden conseguir registros muy buenos, puede no compensar. Sí me ha gustado que no suba demasiado realizando una conducción dinámica y decidida.
Ficha técnica
Version | 1.0 TGDI 3 cilindros |
---|---|
Cilindrada | 998cc |
Potencia | 120 CV a 6.000 rpm |
Par | 172 Nm a 1.500 rpm |
Peso | 1.308 kg |
Dimensiones Lar/An/Al mm | 4165 / 1800 / 1550 |
Volumen Maletero | 361 / 1.143 litros |
Aceleración 0 a 100 km/h | 12,0 seg |
Recuperación 80 a 120 km/h | 7,4 seg |
Velocidad máxima | 181 km/h |
Consumo homologado | 5,2 L/100 |
Emisiones CO2 por km | 117 gr |
Precio de partida | 17.058 € (1.0 TGDI 120 CV Klass) |
COMPORTAMIENTO
Hyundai Kona y Kia Stonic fueron presentados casi al mismo tiempo y, siendo del mismo grupo empresarial, podría pensarse que son productos casi idénticos con diferente diseño como ocurre con otros modelos (i30 y Ceed son el claro ejemplo). En esta ocasión solo comparten algunos motores, cajas de cambio y poco más dado que ni siquiera la plataforma es igual.
Para que te puedas hacer una idea, el Kia Stonic es algo así como la propuesta sencilla y económica de las dos, desarrollado para cumplir con las expectativas de un público menos exigente en todos los apartados. El Kona se sitúa en un escalón superior por tecnología, motores, equipamiento y comportamiento, incluyendo incluso un eficaz eje posterior multibrazo en las versiones con tracción total.
En el caso concreto de la unidad probada hace uso de un eje torsional con brazos tirados pero con muy buena puesta a punto en amortiguación, logrando un sensacional compromiso entre confort y eficacia. Basta decir que el Kia Stonic juega con la dureza y sequedad de reacciones para lograr un comportamiento igual de dinámico.
Precisamente el Kona me parece más completo que su primo por estos pequeños detalles, siendo más cómodo, silencioso y eficaz sin que pierda en otros apartados, salvo el precio. Es un coche fácil de conducir con el que se pueden realizar largos desplazamientos sin problemas o síntomas de cansancio.
Cuando llegan las curvas, el Kona se desenvuelve bastante bien, con un guiado eficaz. Se parece mucho a un turismo convencional por sus nobles reacciones y es capaz de enlazar curvas con mucha facilidad, recuperando muy bien de los cambios de apoyo (ayuda que los balanceos estén muy controlados). En caso de jugar con las leyes de la física, el control de estabilidad actúa con contundencia.
Una vez de vuelta a la ciudad, el Kona resulta manejable con sus 4,16 metros de longitud. La visibilidad podría ser mejor pero es suficiente para controlar lo que sucede alrededor y cuando hay que estacionar, la cámara posterior resulta de gran ayuda (no se echan de menos los sensores de parking).
Diseño personal y diferenciado
Comportamiento eficaz
Ausencia de opciones
Detalles de acabado