EN MARCHA
Si estas pensando en máxima deportividad puedes olvidarte del Veloster Turbo. Es un automóvil con el que se puede rodar rápido pero muestra mayores limitaciones que un MINI Cooper, mucho más ágil en todos los aspectos y bastante más divertido.
En Hyundai han optado por un tarado de suspensiones ideal para convivir con el Veloster entre semana sin perder demasiado en eficacia por tramos virados… pero claro, en este tipo de coches con estampa deportiva quizás se espere más de lo segundo aunque se pierda en comodidad.
De todos modos los que tengan que ir a trabajar todos los días en un Veloster Turbo agradecerán la suavidad con la que reacciona y el silencio de marcha, debiendo prestar atención sólo a los badenes y baches de cierto tamaño para evitar una respuesta seca y brusca (es lo que tiene llevar una llanta con un perfil tan bajo).
A la hora de enlazar curvas el Veloster se defiende pero a poco que el asfalto no esté inmaculado, las ayudas electrónicas saltarán para cortar posibles excesos. Sin balancear apenas, juega bien en tramos virados siempre que tengamos control del acelerador para evitar que las ruedas patinen y de nuevo el ESP corte por lo sano la diversión.
La sensación de aplomo a alta velocidad me ha parecido fantástica, algo extensible a la calidad de rodadura. Más que deportivo, el Veloster me parece un GT capaz de rodar rápido con un elevado confort de marcha. La dirección ha sido otra de las sorpresas que me he llevado, al ser directa y bastante más precisa que la que encontrarías en un i30 o Cee’d. Aquí Hyundai ha sabido calibrar el Veloster para garantizar giros precisos.
El conductor puede seleccionar desde un botón en el volante tres modos de funcionamiento de la dirección: Comfort, Normal y Sport. El primero tiene un tacto blando que ayuda en las maniobras de aparcamiento pero superando los 40 km/h da la sensación de ir demasiado ligera. La normal es interesante para un conducción tranquila mientras que la Sport, con una dureza notable, es la ideal para esos días en los que te apetece exprimir las posibilidades del Veloster.
En ciudad el Veloster es relativamente cómodo. No tiene una visibilidad extraordinaria pero mejora a otros rivales. La caja automática, en modo ECO, es suave y permite una conducción muy relajada. Cuando toca estacionar la cámara posterior y el sensor de parking son de gran ayuda aunque he echado de menos los delanteros dado que por las formas del capó no se tiene un control absoluto de las esquinas desde el puesto de conducción.
La iluminación me ha parecido satisfactoria con los faros de xenón incluidos de serie. Las largas son halógenas y se percibe ese tono más amarillento cuando se accionan pero en general tienen una potencia suficiente. Otro apartado en el que brilla es el frenado. Los discos de buen tamaño que incluye este Turbo son capaces de parar al Veloster en pocos metros, aguantando el tipo cuando se abusa de ellos sin mostrar síntomas de fatiga.
Diseño/Estética
Calidad de acabados
Equipamiento de serie
Habitabilidad
Maletero
Motor/Refinamiento
Prestaciones
Consumos
Comportamiento
Dirección
Frenos
Calidad de rodadura
Relación valor-precio
7.4
Notable
Diferente, exótico y relativamente cómodo para ser un coupé, el Veloster es un rara-avis en nuestras carreteras. Mucho equipamiento y una presentación llamativa son sus señas de identidad. A pesar de su diseño deportivo, ni el motor ni el comportamiento transmiten lo mismo, siendo más GT que GTI
Ficha técnica
Version | 1.6 TGDI |
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Cilindrada | 1.591 cc |
Potencia | 186 CV a 5.500 rpm |
Par | 265 Nm a 4.500 rpm |
Peso | 1.330 kg |
Dimensiones Lar/An/Al mm | 4250 / 1805 /1405 |
Volumen Maletero | 310 / 1.015 litros |
Aceleración 0 a 100 km/h | 8,1 segundos (8,5 seg en prueba) |
Recuperación 80 a 120 km/h | 6,9 segundos en D |
Velocidad máxima | 214 km/h |
Consumo homologado | 7,7 L/100 (8,2 L/100 en prueba) |
Emisiones CO2 por km | 165 g/km de CO2 |
Precio de partida | Desde 27.700 € con descuentos (1.6 TGDI 186 CV 7DCT) |
Poco tirón tiene este coche en España, tiene que ir bien y la verdad que es llamativo dado que no hay un coche similar a este, según las ventas son bastantes malas al menos en España.
Juanjose Olmo
Quiza un peso superior al Mini y BMW descapotables lo hagan algo mas lento en salidas y recuperaciones.
En el caso del Leon TDI es un motor de mayor cilindrada creo.
Una cosa buena que tiene este motor es que monta cadena de distribucion en lugar de correa y que ya puedes exprimirlo cuanto quieras durante los 5 años de garantia sin limite de km.
Hola, me refería al León 1.8 TSI 180 CV de gasolina. En cuanto al peso, el MINI que comento es el Clubman y no el normal. Y el Serie 4 pues es grande y pesado, más el cabrio
Es asqueroso. No hay mas que decir.
L E N T O S T E R jjJajaja jamas se debio llamar veloster ese auto
Tengo un Veloster turbo de 186 CV y estoy encantado con el.
Te garantizo que el único LENTOSTER eres tú, opinas sin criterio.