Motor y conducción:
El Lexus GS 250 monta un motor V6 de 2.500 cc y 208 cv. Con un chasis de nuevo diseño, el nuevo GS inspira e invita al conductor a un manejo vigoroso y preciso. La suavidad de sus movimientos en combinación con la firmeza de la dirección hacen que el volante transmita una sensación de deportividad como la de los vehículos de competición. Buena parte de culpa la tiene el preciso volante de tres radios que monta el Lexus GS. Cada movimiento nuestro tiene su fiel reflejo en el asfalto, y enseguida conductor y automóvil entran en perfecta sintonía para disfrute del primero.
Pero no todas las situaciones en la carretera requieren los mismos esfuerzos, y en Lexus, conscientes de ello, han preparado distintos modos de conducción para según qué circunstancias. Conducción a la carta, podríamos decir:
– Modo ECO revisa la cartografía del acelerador, calefacción de asientos y sistemas de control climático para la economía de combustible. En el modo ECO, la luz del cuadro de mandos cambia a azul siendo la tensión de trabajo de la batería híbrida de 500 v.
– Modo SPORT S revisa la cartografía del acelerador y la transmisión del cambio, priorizando al máximo las capacidades del motor. En el modo SPORT S, la luz del cuadro de mandos cambia a rojo, aquí sin embargo, la tensión de trabajo de la batería híbrida pasa a 650 v.
– Modo SPORT S + disponible para este modelo por ser el F-Sport, incrementa aún más las capacidades deportivas del nuevo GS ya que incorpora una suspensión variable adaptativa, se modifica la sensibilidad de la dirección asistida y se hace menos intrusivo el VSC y al igual que en el modo SPORT S la batería trabaja a 650 v.
– Modo NORMAL con la rueda en posición central.
En condiciones normales recomendaría llevarlo siempre en posición ECO, ya que la potencia proporcionada por el motor es más que suficiente, y se nota bastante en el consumo. No obstante, de vez en cuando no está de más darse el capricho de seleccionar la opción Sport o Sport Plus para sentir como el motor nos otorga toda su potencia y nos pega al asiento. Nos vendrá bien también para determinados adelantamientos y, como no, para pasar un buen rato por carreteras reviradas.
El nuevo sistema de suspensión está diseñado para ayudar a guiar al GS en las curvas con extrema precisión. La suspensión de doble trapecio tiene incorporada brazos de aluminio y silent-blocks sobredimensionados. El subchasis trasero ha sido rediseñado por completo para dar cabida a una suspensión trasera completamente nueva, de tipo multi-link, que mejora el control del eje posterior.
Comentemos ahora uno de los puntos débiles del Lexus GS 250: el consumo. Los datos ofrecidos por la marca japonesa nos dicen que el consumo de este coche oscila entre los 6.9 litros en carretera y los 12.4 en ciudad, con un combinado de 8.9 litros. A tener en cuenta que es de las marcas que más se han aproximada al gasto de combustible durante nuestra prueba.
Bien, si analizamos que una berlina premium gasolina con 208 cv y un peso de 2.170 kg gasta alrededor de 9 litros, creo que podremos darnos con un canto en los dientes y estar de acuerdo en que es una cifra dentro de lo que cabe razonable. El problema es que su enemigo se encuentra en casa. El Lexus GS 450h nos hizo un consumo medio de 6.5 litros mientras que el Lexus GS 250 ha oscilado entre los 9 y los 9.5 litros. La diferencia de precio también es significativa (si nos referimos al GS 250 más barato), pero conviene que el potencial comprador se detenga a analizar cuál de los dos le compensa.
Precio:
Podemos hacernos con un Lexus GS desde 59.600 euros. No está nada mal equipado pero carece de algunos elementos de confort que traía nuestra unidad de prueba. A nivel estético, también presenta leves modificaciones, como por ejemplo en la parrilla delantera. El acabado intermedio, GS 250 Drive está disponible a partir de 64.600 euros. Por último, el Lexus GS 250 F-Sport lo tenemos en el mercado exactamente por 72.000 euros. ¿Caro? Probablemente, pero tengamos en cuenta que no vamos a tener que añadirle ni un solo euro en complementos o extras, pues trae absolutamente todo. Otras marcas pueden ofrecernos un precio base más asequible, sin embargo, al equiparlo como nuestro Lexus es muy probable que nos vayamos a un coste superior.
En cualquier caso, como ya decía anteriormente, donde si encontramos un duro rival es dentro de la propia marca, pues el Lexus GS 450h tiene un precio final de 70.700 euros, con tecnología híbrida, teniendo en cuenta el ahorro que puede suponer, y 343 cv de potencia. Cuestión de gustos, de ser más o menos puristas, pero está claro que más de uno se debatirá entre uno u otro. Eso sí, bendita preocupación.
Resumen de Prueba
Equipamiento
Diseño
Confort
Consumo
Motor
9
Sobresaliente
Un vehículo de corte clásico pero renovado para proporcionarnos una experiencia de conducción de lo más placentera