Diseño/Estética
Calidad de acabado
Equipamiento de serie
Equipamiento opcional
Habitabilidad
Maletero
Motor/Refinamiento
Prestaciones
Consumos
Transmisión
Dirección
Frenos y neumáticos
Comportamiento
Calidad de rodadura
Relación valor-precio
7.2
Notable
Sin lugar a dudas, de lo mejor del segmento en lo que a comportamiento se refiere. Así es, el Mazda CX-3, ha sido concebido para ofrecer una movilidad ilimitada y emocionante. Además de todo lo anteriormente comentado, el modelo se encuentra disponible en versiones de tracción delantera y sistema de tracción total inteligente, algo que sin lugar a dudas el mercado aprecia notablemente. Eficiente, fácil de conducir y muy superior a la mayoría de la competencia.
Mazda no deja de sorprendernos. Su renacer comenzó con la tecnología Skyactiv y el diseño Kodo y desde entonces, su gama no ha hecho más que crecer y triunfar en todo el planeta.
En la actualidad, hay marcas que lo están haciendo muy pero que muy bien y como en el caso de Mazda, el mercado termina respondiendo de una forma positiva. Así es, Mazda va viento en popa gracias a una gama completamente renovada que mejora año tras año y que aúna diseño, tecnología, buenos acabados así como un interesante equipamiento a un precio que pese a no ser de los más bajos, se ajusta a muchos bolsillos. Mazda ha dado con el punto de partida perfecto ya que su producto es parecido al alemán en acabados, al japonés en calidad y como no, cuenta con el característico diseño y buen gusto de la marca.
En los últimos años, Mazda ha renacido gracias a mucho esfuerzo, inversión y a la ampliación de una gama que no ha perdido el norte. Lo que ya se ofrecía en el mercado lo siguen ofreciendo -incluido su conocido roadster- y lo que no ofrecía -lo que viene siendo su familia SUV- lo han creado, mejorado y lo venden como “churros”.
Sin salirse de su familia SUV, la marca japonesa creó hace ya un tiempo el CX-3, el hermano pequeño del CX-5 y el modelo que actualmente se consolida como el modelo de acceso a la gama más robusta. Sí, es rival para Aronas, Konas y demás y lo cierto es que mantiene muy bien la compostura.
Diseño Exterior
Sin lugar a dudas las líneas maestras del diseño KODO han evolucionado hacia un segmento inédito en la marca. Las claves de este diseño resultan más que evidentes y quedan plasmadas en todos y cada uno de los modelos de nueva creación que la marca presenta en el mercado.
Ya en la parte frontal, el nuevo Mazda CX-3 cuenta con una interesante parrilla, similar en forma a la que nos encontramos en el resto de los modelos de la gama. En esta ocasión, la calandra ha adaptado su tamaño y cuenta con un marco cromado que se extiende hacia la zona de los faros, creando sensación de unidad y reforzando la mirada del pequeño crossover.
A continuación de la calandra, lo que más nos llama la atención son los rasgados faros que en el acabado básico -Style +- son halógenos pero que en nuestra unidad contaban con la tecnología Full LED (de serie a partir del acabado Luxury). La iluminación es más que correcta y es un interesante debut de esta tecnología en el segmento -tenéis que tener en cuenta que el CX-3 no es tan moderno como sus rivales-.
En una posición inferior, el frontal del CX-3 cuenta con los intermitentes engarzados en un paragolpes que cambia sus líneas en la parte baja para dar cabida a estos y a unos detalles en piano black y cromado.
Justo a continuación del punto más bajo de la calandra nos topamos con el hueco del portamatrículas, ubicado justo encima de una gran estrada de aire horizontal doble que se encuentra subrayada por una zona en color contraste que además ejerce como protector de bajos y se extiende, tal y como ya os iré contando a lo largo del diseño del modelo.
Personalmente echo en falta la disponibilidad de sensores de aparcamiento frontales.
Las líneas del frontal fluyen hacia el resto del vehículo a través del capó gracias a unas nervaduras en forma de V que desembocan en los pilares A.
Visto de lado, nos damos cuenta de que el Mazda CX-3 cuenta con una curva línea de cintura que asciende desde la parte delantera del vehículo, se fluctúa en la parte media del modelo y asciende en la parte trasera para descender posteriormente en el último momento.
Gracias a estas líneas, el modelo transmite sensaciones muy intensas de velocidad, calidad y vitalidad. Estas líneas tan trabajadas hacen que su aspecto destaque entre la mayoría de los modelos ofertados por el resto de marcas en este mismo segmento. La parte acristalada ligeramente tintada parece aún más generosa y unificada gracias a la presencia de elementos en piano black estratégicamente montados en el tercio superior del diseño.
La superficie lateral está plagada de superficies limpias, curvas y convexas que realzan el aspecto del modelo. En el lateral destacan los abultados pasos de rueda que están más presentes que nunca en el diseño gracias a que la superficie en color contraste de la que antes os he hablado subraya su presencia y extiende su superficie hacia la parte trasera.
Los pasos de rueda de mi unidad de pruebas contaban con la presencia de unas llantas de aleación de 18” e interesante diseño que montaban unos neumáticos Toyo Proxes R40 en dimensiones 215/50 R18 92V. He de confesar que no son los mejores neumáticos que he probado y que sus prestaciones en mojado dejan algo que desear.
Ya en la parte trasera nos encontramos con el desenlace de las líneas del diseño KODO. Mi unidad de pruebas contaba con unos pilotos posteriores con iluminación parcial LED y una firma lumínica muy característica que hacía inconfundible al modelo en la noche. Todas las líneas de la trasera se centran en el logo de la marca que por cierto, se encuentra en una posición privilegiada en el centro del portón de acceso al maletero. Dicho portón contaba con un alerón superior más grande que el que el modelo trae de serie.
Uno de los problemas que veo en el diseño del CX-3 es la luna trasera. Sus dimensiones hacen casi obligatorio el montaje de un sistema de asistencia al aparcamiento –en este casi se trataría de una cámara trasera-. Su altura y su poca visibilidad pueden resultar un hándicap para algunos, pero lo cierto es que no se puede tener todo y en este punto hay que renunciar un poco a la practicidad si queremos destacar en diseño.
La parte inferior de la trasera cuenta con un paragolpes muy extendido que redunda en un aspecto mucho más robusto del modelo así como en una presencia más asentada en la carretera. Otro de los puntos de controversia son los accesos a los maleteros de esta clase de modelos en los que nos topamos con una boca de carga bastante elevada que resta comodidad a la hora de realizar las tareas de carga y descarga.
La parte inferior de la trasera cuenta con la presencia de la zona en color contraste de la que os he hablado a lo largo y ancho del diseño. En la trasera cuenta con la presencia de las luces antiniebla y los catadióptricos montados en las esquinas inferiores. Mi unidad de pruebas contaba con la presencia de una salida de escape doble que aumentaba el aspecto deportivo del vehículo.
Vista desde arriba, nuestra unidad de pruebas contaba con un curvo techo en el que destaca la antena con forma de aleta de tiburón ubicada en la zona posterior.
Para los más curiosos, nuestra unidad de pruebas venía rematada exteriormente con el color Machine Grey, un extra con un sobrecoste de 600 euros. Si vas a optar por un Senses Edition has de saber que también está disponible en color Ceramic con un sobrecoste de 450 euros.
Diseño Interior
Una vez nos subimos al Mazda CX-3 nos damos cuenta de que estamos ante uno de los interiores líderes de su segmento. Tenemos todo lo que queremos, desde diseño hasta practicidad pasando por el toque deportivo y sin abandonar la sobriedad y la elegancia.
Cuando nos sentamos en los cómodos asientos delanteros nos damos cuenta de que todo nos queda a la vista (hay que destacar que los asientos sujetan realmente bien la espalda para el tipo de moldeo del que hablamos). Las manos se posan cómodamente sobre el volante revestido en cuero. El tacto del mismo es deportivo y su apariencia también, además cuenta con superficies con diferentes texturas y apariencias. Desde el cálido cuero pasando por la interesante textura del plástico que rodea la botonera compuesta por 15 botones a la zona fría en acabado metálico de los radios inferiores.
Los Senses Edition cuentan con una sofisticada tapicería de cuero en color marrón oscuro que mejora la sensación de calidad notablemente.
Tras el volante nos encontramos con un panel de instrumentos compuesto por un dial central en el que encontramos el velocímetro. Esta zona circular se encuentra acompañada por dos pantallas en las que encontraremos el resto de información de vital importancia para la conducción, desde el ordenador de viaje al cuentarrevoluciones, pasando por la representación de los sistemas de asistencia.
El salpicadero fabricado en plásticos duros con diferentes diseños cuenta con una apariencia duradera y está rematado por superficies acolchadas tapizadas en piel sintética con pespuntes claros. Los ajustes son impecables, aunque siempre hay algún que otro «pero» y nos topamos con algunos fallos en las partes bajas.
En el salpicadero destaca la presencia del sistema de conectividad MZD Connect (acabado Style de regalo con Pack Navegador opcional) y de la salida de aire simulada que abarca casi todo el ancho del frontal del salpicadero. Tres de las cuatro salidas de aire son redondas y cuentan con detalles en color rojo mientas que la cuarta cuenta con un diseño muy integrado en el salpicadero.
La consola central cuenta con el climatizador manual integrado en la parte intermedia, la ranura del lector de discos, las dos tomas USB, la toma AUX in y la de 12V en la parte inferior. Al alcance de la mano y justo en la parte más baja de la consola central nos encontramos con la precisa palanca de la caja de cambios de 6 velocidades. Me ha encantado el deportivo tacto de la palanca de cambios, sin lugar a dudas, no sólo es de lo mejor que podemos encontrar en este modelo sino de los mejores tactos que podemos encontrar en el segmento.
En el limitado espacio existente entre los asientos delanteros encontraremos la prolongación el túnel de transmisión en el que nos topamos con la palanca de cambios y los controles de fácil manejo del sistema MZD Connect. Sin lugar a dudas, me falta el apoyabrazos central en este modelo. No sé si es que ya estoy acostumbrado a verlo en todos los modelos o en realidad es necesario pero sí, Mazda debería de montarlo de serie.
Pese a que el acceso a las plazas delanteras y traseras es cómodo y muy vertical, es en la zona trasera donde se aprecian las dimensiones del modelo. Dada la forma de la apertura, algunas personas pueden tener algunos problemas para acceder debido, sobre todo a una pequeña curvatura de chapa ubicada en la parte derecha de la apertura. Pese a esto, la habitabilidad es más que generosa y pueden viajar cómodamente tres niños o dos adultos, casi sin importar su altura. Pese a ser una unidad con tracción 4X2, el modelo cuenta con un pronunciado túnel de transmisión que resta espacio en el hueco para las piernas de la plaza central trasera.
La zona de carga es flexible y cuenta con 350 litros de capacidad, ampliables hasta 1.260 litros con los asientos traseros abatidos. Uno de los puntos fuertes del diseño del maletero es la posibilidad de reducir la altura mediante una bandeja que puede retirarse para ofrecer la máxima capacidad. Esta posibilidad permite que el maletero quede compartimentado en dos alturas y de esta forma nos da la posibilidad de preservar elementos más frágiles en la parte inferior. Nuevamente quiero destacar que el umbral de carga es alto y también debo deciros que la superficie de carga con los asientos abatidos no es plana a no ser que elevemos el suelo móvil, aspecto con el que perderemos varios cm de altura. En nuestra unidad nos encontramos con un equipo de música Bose con 7 altavoces que restaba algo de capacidad en el compartimento inferior del maletero pero que por otro lado, proporcionaba una experiencia de sonido muy recomendable.
Motorización
Sin lugar a dudas, es uno de los puntos en los que más me está sorprendiendo la marca japonesa. Para la prueba nos hemos decantado para una mecánica gasolina de 120 CV que sin lugar a dudas es la elección más recomendable. Su suavidad, su desahogada cilindrada y su potencia la convierten, junto a sus impresionantes y ajustados consumos en una mecánica más que recomendable.
Se trata de un motor de 1.998 cm3 que ofrece una potencia de 88 kW (120 CV) a 6.000 rpm y un par de 204 Nm a 2.800 rpm. Gracias a estas cifras y a un peso de 1.155 kg en orden de marcha, el modelo ofrece una interesante aceleración lineal y se mueve con relativa soltura.
El principal problema es sin duda su cilindrada que penaliza mucho en el impuesto de tracción mecánica. Para hacernos una idea, sus rivales montan mecánicas de tres cilindros turboalimentadas de 1000 cc mientras que Mazda monta mecánicas atmosféricas de cuatro cilindros y 2.000 cc. ¿La razón?, según la marca, menor contaminación y mayor fiabilidad.
La mecánica destaca por su respuesta progresiva desde parado y, además, por su gran eficiencia en su variante manual. Gracias a esta mecánica el modelo es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 9 segundos y es capaz de alcanzar su velocidad punta fijada en los 192 km/h.
Tal y como he comentado anteriormente, uno de los puntos fuertes es, además del comportamiento, el tacto de la caja de cambios manual de 6 velocidades. Es precisa, cuenta con unas relaciones muy conseguidas y su afinidad con la mecánica probada es remarcable. Sin lugar a dudas, Mazda sabe darle el toque deportivo a todos los modelos gracias a detalles como este.
Otro de los puntos fuertes de esta mecánica es, además del gran confort de marcha y las bajas vibraciones, su más que impresionante eficiencia. Durante la prueba, el consumo medio del vehículo en autopistas y autovía se situó entre los 5.1 y los 5.5 litros a los 100 km mientras que el consumo combinado se situó en los 6.2 litros a los 100 km.
En la urbe el consumo tampoco va nada mal ya que se situaba muy por debajo de los 7 litros a los 100 km, algo que para un gasolina de esta potencia es más que un logro. Si a estos consumos le sumamos un depósito con una capacidad de 48 litros (en las versiones manuales), las autonomías son destacables.
Ficha técnica
Version | 2.0L GASOLINA 120 CV |
---|---|
Cilindrada | 1998 cm3 |
Potencia | 88 kW (120 CV) a 6000 rpm |
Par | 204 Nm a 2800 rpm |
Peso | 1.155 Kg |
Dimensiones Lar/An/Al mm | 4275 mm / 1765 mm / 1535 mm |
Volumen Maletero | 350 litros ampliables a 1.260 litros |
Aceleración 0 a 100 km/h | 9,0 s |
Recuperación 80 a 120 km/h | N.D. |
Velocidad máxima | 192 Km/h |
Consumo homologado | 7,4 l. / 4,9 l. / 5,9 l. a los 100 km |
Emisiones CO2 por km | 137 g/Km |
Precio de partida | 22.295 euros |
Comportamiento
Sin lugar a dudas, de lo mejor del segmento en lo que a comportamiento se refiere. Así es, el Mazda CX-3, ha sido concebido para ofrecer una movilidad ilimitada y emocionante. Además de todo lo anteriormente comentado, el modelo se encuentra disponible en versiones de tracción delantera y sistema de tracción total inteligente, algo que sin lugar a dudas el mercado aprecia notablemente.
Se trata de un modelo que cuenta con una conducción que inspira confianza, ofrece una excelente estabilidad en carretera y mucha seguridad en caso de colisión.
El Mazda CX-3 cuenta con el aclamado SKYACTIV-Chassis. Esta plataforma contribuye a la precisión de la respuesta, a la sensación de confianza y tranquilidad y, de paso, a unos niveles de confort muy mejorados, ya que se ha hecho una revisión en profundidad de la suspensión y la dirección y se ha adaptado a lo que se demanda en este segmento.
El chasis monta un sistema de suspensión trasera de barras de torsión aligeradas. Pese a que no es la mejor opción, esta redunda en una mayor eficiencia de la plataforma y a una mayor economía de construcción. Los amortiguadores delanteros y traseros aportan una rodadura más lineal y un confort de marcha con notas de alta calidad.
El sistema de la dirección está concebido para que la conducción en ciudad resulte ágil y suave, con buenas dosis de estabilidad en carreteras secundarias viradas y en autovías.
El sistema de frenos garantiza un excelente control del vehículo a velocidades bajas y medias. Su rendimiento es extraordinario a altas velocidades.
Se ha conseguido un habitáculo muy silencioso mediante distintas medidas de control de la resonancia de la suspensión, de ajuste de la forma, la dureza y la posición de los soportes del motor, y de colocación de materiales absorbentes y de aislamiento acústico en puntos óptimos.
El concepto de seguridad proactiva de Mazda busca minimizar el riesgo de accidentes y maximizar las condiciones en las que el conductor controla el vehículo de forma segura. Por otro lado, el equipamiento de tecnologías de seguridad activa i-ACTIVSENSE del Mazda CX-3 forma parte integral de su propuesta de movilidad sin límites. Cabe destacar el Sistema de asistencia a la frenada en ciudad (SCBS), de serie en toda la gama, además de otros opcionales como el Control de ángulo muerto (BSM), el Sistema de alerta de cambio de carril (LDWS) o el Sistema de control de luces de largo alcance (HBC).
Precio Mazda CX-3
Aunque ya te adelantamos que el Mazda CX-3 Senses Edition y su completo equipamiento parte de los 24.660 euros, lo mejor es que le eches un vistazo a los precios del Mazda CX-3 en nuestra sección de ofertas.
Sin lugar a dudas, un punto a destacar es su comportamiento
La eficiencia es uno de sus puntos fuertes así que olvídate del diésel y pásate a la gasolina
Calidad percibida
Calidad de la rodadura
Tacto de la palanca de cambios
Habitabilidad
Elevado número de combinaciones posibles
El precio es elevado sin descuentos y promociones
Algunas lagunas de equipamiento en los acabados más básicos
Calidad percibida en alguna terminación aislada