Diseño/Estética
Calidad de acabado
Equipamiento de serie
Equipamiento opcional
Habitabilidad
Maletero
Motor/Refinamiento
Prestaciones
Consumos
Transmisión
Dirección
Frenos y neumáticos
Comportamiento
Calidad de rodadura
Relación valor-precio
8
Notable
Si eres un devorador de kilómetros, el acoso que está sufriendo el diésel seguro que no te importa tanto como tu bolsillo. Este Mazda6 y su mecánica 2.2 diésel de 184 CV pueden proporcionarte todo lo que necesitas, es decir, prestaciones y unos consumos sobresalientes. La cuidada estética y los buenos acabados interiores se alejan de lo general y se adentran en el segmento premium.
La última actualización del Mazda6 es la más completa hasta la fecha y ha subido el listón de la calidad en prácticamente todos los detalles del modelo. Aunque ya hemos probado en varias ocasiones el Mazda6, una vez más traemos al modelo a la sección de pruebas, solo que en esta ocasión lo hacemos asociado a una mecánica diésel muy ahorradora y recomendable que sin duda, se planta en la gama como una de las opciones más recomendables para aquellos conductores que busquen una buena dinámica, unas estética espectacular y unos consumos sobresalientes.
La ecuación es sencilla. Un producto con una estética que aúna elegancia, deportividad y tecnología y como no, un comportamiento rompedor. El renovado Mazda6 se presenta con un diseño exterior evolucionado, una revisión profunda de su interior, una mejora de todas sus motorizaciones SKYACTIV y como no, una buena dosis de novedades en materia de seguridad y conectividad.
Sumados los ingredientes, el producto de la nipona es, sin lugar a dudas muy similar a los laureados modelos germanos y pese a que me pueda costar alguna crítica, muchos de sus vehículos están por encima de sus rivales Premium, sobre todo en los apartados estético y dinámico así que vamos a analizarlo.
Diseño Exterior
En mi opinión, estamos ante unos de los mejores diseños disponibles en la actualidad en el mercado. Detrás de este magnetismo que emanan los nuevos diseños de Mazda y en particular el del nuevo Mazda6, nos topamos con KODO, un lenguaje inspirado según la marca en la belleza y en la fuerza de la naturaleza. Se trata de un diseño que no pasa desapercibido en la calle y en la carretera, es difícil no echarle un segundo vistazo.
Vale, quizá me he pasado con lo de nuevo, sin embargo, la nueva puesta a punto y como no, la nueva oferta en equipamiento en la gama nos obliga a tratar al modelo como algo nuevo.
En la parte frontal el modelo equipa una nueva parrilla delantera con un diseño más profundo en el que además destaca una línea cromada que fluye hasta los faros y dota de una mayor expresividad y protagonismo a los mismos.
En nuestra unidad de pruebas hemos podido disfrutar de unos grupos ópticos delanteros Full LED. Cabe destacar que el sistema Smart Full Led (Faros Led Adaptativos (ALH) y direccionales (AFLS) son una auténtica pasada. Los faros están compuestos por varios grupos de diodos luminosos por cada faro, controlables de forma independiente e informados gracias a una cámara montada en la base de retrovisor interior del modelo. Los nuevos grupos ópticos además de ser más anchos y dotar al frontal de un diseño más elegante, incluyen intermitentes LED.
La iluminación que proporcionaban nuestra unidad de pruebas está por encima de la media que ofrecen otros faros LED. Aunque no llegan a ofrecer la cantidad y la calidad de alguna marca alemana, sin duda alguna es una opción muy recomendable. El sistema de iluminación es rápido e inteligente, sobre todo a la hora de conectar el modo automático de luces de carretera, que detectará con soltura cualquier conductor que venga de frente.
Es una lástima que la luz de marcha diurna tan sólo está activa cuando el vehículo inicia la marcha, aunque esta esté pensada para cuando el vehículo está rodando y se apaga para ahorrar energía.
En la parte central nos topamos con una parrilla que gana en profundidad. En posición privilegiada encontraremos el logo de la marca. Justo bajo la parrilla nos encontramos con el portamatrículas. A la misma altura, el modelo monta la línea de sensores de parking delanteros que en nuestra unidad venía acompañado de un sistema de cámaras 360 grados -la delantera bajo el logo frontal, y las laterales bajo los retrovisores-.
En la parte inferior del frontal encontramos una entrada de aire horizontal. A ambos lados de esta entrada de aire, justo en las esquinas inferiores nos encontraremos con unas líneas cromadas que dan una mayor anchura al frontal.
La característica “V” del frontal se extiende a través del capó delantero hacia los pilares “A”.
Visto de perfil, el modelo parece ensancharse en la parte trasera y el arqueado techo se aplana cuando llega a la trasera. Los abultados pasos de rueda de nuestra unidad de pruebas con acabado Signature albergaban unas bonitas llantas de aleación oscurecidas de 19” con un diseño de 5 “V” que montaban unos neumáticos Bridgestone Turanza T005A en dimensiones 225/45 R19 92W.
La zona acristalada del lateral resalta por su forma que va de mayor a menor y tal y como podréis ver en nuestra unidad, contaba con los elementos acristalados oscurecidos por detrás del pilar B. Toda la superficie de cristal está enmarcada por un reborde cromado.
En la zaga nos encontramos con un tercer volumen propio de un sedán. Debido a la inclinación de la luneta posterior y a la longitud del modelo, resulta recomendable equipar una ayuda al estacionamiento, ya sea acústica o visual. Nuestra unidad de pruebas montaba sensores y un recomendable e intuitivo sistema de visión 360 grados que hacía del estacionamiento algo simple allá a donde fuéramos. Este sistema te permite optar entre las cuatro cámaras perimetrales que a gusto de los conductor se pueden aunar para ofrecer una interesante vista cenital.
Unos rasgados faros en tecnología FULL LED -todas las funciones cuentan con iluminación mediante diodos luminosos- ofrecen una singular firma lumínica que hace que el Mazda6 resulte inconfundible en la noche. El montaje de un listón cromado como nexo en las unidades ópticas acrecienta la sensación de uniformidad. El abultado paragolpes hace que aumente la sensación de robustez y aplomo del modelo.
A media altura nos topamos con la línea imaginaria protagonizada por los 4 sensores de aparcamiento que equipaba nuestra unidad de pruebas -dos de ellos son de largo alcance y nos ofrecen el sistema de alerta de tráfico cruzado, un avance notable en materia de seguridad-. La parte inferior alberga la doble salida de escape redonda con la que cuenta la motorización probada. En la parte superior de esta zona de contraste se encuentran engarzados unos curvos catadióptricos.
Uno de los aspectos que más me ha sorprendido del modelo en cuestión ha sido el excelente montaje de todos los paneles así como las reducidas holguras que resaltan la sensación de calidad de montaje.
Diseño interior
Algunos lo han definido como espartano o simple, sin embargo, yo lo considero un verdadero acierto y un salto cualitativo en lo que a calidad de materiales y ajustes se refiere.
Las atractivas formas de la carrocería crean grandes expectativas sobre el interior que esperamos que se vean cumplidas cuando abrimos la puerta para acceder al habitáculo.
Al sentarnos al volante un anillo empieza a mostrarnos los latidos del coche en el cuadro de instrumentos. Al encender el motor, las agujas, los indicadores y los demás instrumentos se iluminan. A continuación, el Head Up Display se enciende y empieza a proyectar información en el parabrisas – este punto es importante ya que el head up display ha evolucionado notablemente de un elemento monocolor carente de información a un proyector con muchas opciones-. Sin lugar a dudas, el cuadro de instrumentos rebosa calidad pero si me permites, he de confesarte que le falta la posibilidad de equipar un panel de instrumentos más digitalizado. En la actualidad, el cuadro es algo pobre y aunque han dado un paso de gigante incorporando la pantalla a color en posición central para el velocímetro, me falta algo de información y posibilidades de configuración.
Sin duda alguna Mazda escucha las críticas y hay que decir que han hecho un buen trabajo con la notable mejora del cuadro de instrumentos y del head up display, pero nosotros siempre queremos más.
Cuando accedemos al habitáculo nos damos cuenta de que se trata de un coche en el que todo está al alcance de la mano del conductor. Sus cómodos asientos nos acogen y sujetan con la mayor eficacia. Tengo que comentar que la tapicería de cuero negro perforado y su contraste con el interior metálico queda francamente bien con el color exterior Soul Red Crystal -una evolución del ya icónico Soul Red-. Nuestra unidad destacaba además por unos asientos eléctricos, calefactables, ventilados y con memoria que hacían juego con algunas superficies de la consola central.
Enfrente del asiento del conductor tenemos el volante multifunción deportivo forrado en cuero. Desde el volante podremos acceder a diversas funciones del vehículo gracias a sus 16 botones.
La zona del conductor, que converge en el centro, contrasta con el salpicadero del lado del acompañante, relativamente bajo. La consola central asimétrica señala la frontera entre las dos zonas, delimitando sus respectivos atributos.
En el Mazda6 sin duda han buscado que prime la comodidad a la hora de conducir, por lo que Mazda ha situado los controles necesarios para manejar directamente el vehículo manteniendo los ángulos naturales y una postura relajada. Como ejemplo de esta afirmación, observamos que la posición del volante es más baja que en otros modelos o que los pedales están colocados simétricamente a la derecha e izquierda del eje central del conductor, en las posiciones más óptimas.
La consola central es minimalista al máximo y se encuentra presidida por una gran pantalla táctil de 7” que toma protagonismo cuando adquirimos el paquete de navegación. Los sistemas que se reflejan en la pantalla son accesibles desde un mando giratorio y unos botones (HMI Commander) situados tras la palanca de cambio automática. El sistema de infoentretenimiento de nuestra unidad de pruebas estaba asociado a un sistema de sonido BOSE® de 9 altavoces. Desde mi punto de vista, Mazda debería dar un nuevo paso y evolucionar su sistema de infoentretenimiento con nuevos gráficos, más depuración de la interfaz y pantallas más grandes, para seguir con la línea de sus competidores.
Gracias también a la distancia entre ejes, el Mazda6 ofrece un excelente espacio en su clase en cuanto a espacio para los hombros en las plazas delanteras y traseras se refiere; también es de los mejores en la cota de espacio para las piernas. El interior es amplio y confortable. Asimismo, Mazda ha sabido mantener un espacio para la cabeza más que respetable.
Echamos en falta iluminación de cortesía LED tanto en techo como en puertas y espejos interiores.
Los asientos son capaces de envolver a los ocupantes, pese a no ser de corte extremadamente deportivo, proporcionándoles una posición natural con buen apoyo y una sujeción magnífica.
Las líneas virtuales del salpicadero se alargan hacia las salidas de aire laterales y hasta los tiradores de las puertas. De este modo, se acentúa la sensación de pureza y uniformidad del diseño del habitáculo. La consola central también ofrece un diseño sencillo y funcional. Los mandos de climatización, que están situados debajo de las salidas de ventilación centrales, poseen un elegante aspecto tridimensional, con mandos circulares.
La sensación que tenemos es que el interior del Mazda6 ha sido muy cuidado, con unos materiales de calidad que alcanzan el equilibrio entre la deportividad, la practicidad y la comodidad.
El acceso a las plazas traseras es cómodo, sin embargo, la habitabilidad de la banqueta trasera para tres personas que nos ofrece la homologación para cinco pasajeros con la que cuenta el nuevo Mazda6 se reduce tan sólo a la comodidad de los pasajeros de las plazas exteriores.
Mecánicas Mazda6
El nuevo Mazda6 se presenta asociado a cuatro motores: un gasolina 2.0 l. SKYACTIV-G de 145 CV, un 2.5 l. SKYACTIV-G con 194 CV y desactivación de cilindros, y dos variantes, de 150 CV y 184 CV, del turbodiésel 2.2 l. SKYACTIV-D de Mazda.
Todos los motores se han homologado conforme a los requisitos del nuevo ciclo de ensayo WLTP/RDE, y cumplen el reglamento de emisiones Euro 6d temp.
Todos ellos se pueden combinar con una transmisión manual o automática de seis velocidades, con excepción del 2.5 l. SKYACTIV-G y el 2.2 l. SKYACTIV-D de 184 CV con tracción total, que solo se encuentran disponibles con transmisión automática.
Los modelos con motor 2.0 l. SKYACTIV-G y el 2.5 l. SKYACTIV-G tienen tracción delantera, mientras que las variantes con motor 2.2 l. SKYACTIV-D pueden tener tracción delantera o total (solo en modelos Wagon).
Para nuestra prueba nos hemos decantado por la mecánica diésel. Se trata de un motor de 2.2 l. -2.191 cm3- que ofrece unas prestaciones sobresalientes, un elevado par motor y unos consumos inigualables si tenemos en cuenta la cilindrada -por encima de la media- y la potencia, también por encima de la media.
A pesar de la envergadura del modelo, la clave de esta mecánica es su elevado par motor de 445 Nm disponibles desde las 2.000 rpm y su potencia de 135 kw/184 CV a 4500 rpm.
Sin dudarlo, se trata de una mecánica muy recomendable para los que busquen sensaciones enérgicas y respuestas instantáneas sin acudir a mecánicas gasolina de mayores prestaciones pero también, muy elevados consumos.
Asociado a esta mecánica, el Mazda6 y sus casi 2000 kg se mueven con soltura y aunque lo más probable es es que el conductor medio opte siempre por ir tranquilo y mejorar consumos, la mecánica también se presta a practicar una conducción dinámica o deportiva gracias a su perfecta implementación en un modelo que cuenta con una puesta a punto que nos ofrece un comportamiento de un vehículo mucho más deportivo y dinámico de lo que podríamos esperar en una berlina de este calibre.
Esta mecánica diésel de cuatro cilindros y 2191 cm3 ofrece, según la marca, un consumo medio de 5.5/4.1/4.7 litros a los 100 km, lo que equivale a unas emisiones de unos 124 g/Km de CO2. Lo cierto es que durante la prueba de consumos el motor nos sorprendió con medias en autopistas y en autovías que pueden bajar fácilmente de los 5 litros a los 100 km. Durante la fase de prueba de consumos obtuvimos resultados extraordinarios de 4,8 y 5,0 litros a los 100 km. En carretera secundaria, a 90 km/h, el consumo puede bajar hasta los 4.5 / 4.7 litros a los 100 km mientras que en la urbe, si hacemos uso del ieloop podemos rondar los 7 litros a los 100 km, aunque esto dependerá del tráfico, la ciudad y la forma de conducir de cada uno de nosotros.
El comportamiento del modelo es silencioso y deportivo, siendo esta segunda cualidad muy dependiente del excelente funcionamiento de la caja de cambios manual de 6 velocidades que equipaba nuestra unidad de pruebas. No sólo hablamos de recorridos cortos, hablamos de mucha precisión, algo que cuesta encontrar en este segmento.
Como pega al conjunto motor he de subrayar el Adblue y ojo, no al sistema de Adblue en sí, que seguro que funciona a la perfección para reducir emisiones, sino al diseño del mismo. A diferencia de otras marcas y modelos, en caso de querer rellenar el depósito de urea en el Mazda6 tendremos algún que otro problema, sobre todo si el modelo tiene el maletero lleno de maletas o trastos. Mientras otros fabricantes ubican la boca de carga del depósito de Adblue junto a la boca de carga del depósito de combustible, en este caso la boca de llenado está bajo la moqueta del maletero. Esto puede ser un engorro ya que deberemos de levantar la moqueta para encontrar el depósito de Adblue y en caso de llevar carga puede ser caótico. Además, corremos el riesgo de derramar gotas de Adblue en la moqueta del maletero.
Ficha técnica
Version | 2.2L SKYACTIV-D |
---|---|
Cilindrada | 2191 cm3 |
Potencia | 184 CV a 4500 rpm |
Par | 445 Nm a 2000 rpm |
Peso | 1426 Kg (peso mínimo en orden de marcha) |
Dimensiones Lar/An/Al mm | 4870 mm / 1840 mm / 1450 mm |
Volumen Maletero | 480 litros |
Aceleración 0 a 100 km/h | 8,5 segundos |
Recuperación 80 a 120 km/h | N.D. |
Velocidad máxima | 227 Km/h |
Consumo homologado | 5,5 / 4,1 / 4,7 litros a los 100 km |
Emisiones CO2 por km | 124 g/Km |
Precio de partida | 40.225 € |
Comportamiento
Una vez concluida la prueba pudo decir que se ha prestado mucha atención al tacto general del modelo, a la suavidad, al buen comportamiento y a la ausencia de ruidos.
La dirección y la suspensión están perfectamente equilibradas y aportan una experiencia muy satisfactoria cuando nos ponemos al volante. A diferencia de modelos idolatrados en el segmento, el Mazda6 ofrece información al conductor sobre la carretera y la dirección del modelo lo que se traduce en un aumento de la confianza en la conducción del mismo.
Durante la prueba me llamó la atención el comportamiento en uno de los circuitos que recorro todas las semanas y en las que analizo el comportamiento en prácticamente todas las condiciones y a casi todas las alturas. Las transferencias de carga del modelo son extraordinarias y la estabilidad tanto en carreteras muy complicadas como a altas velocidades es digna de mención. El control de estabilidad hace que el modelo vaya sobre raíles pero deja cierto margen que puede resultar incluso juguetón.
El ajuste de la dirección asistida eléctrica reduce los movimientos del volante, lo que mejora la agilidad y nos ayuda a evitar grandes movimientos de volante sobre todo en urbes y carreteras especialmente viradas.
Uno de los puntos fuertes en el comportamiento del modelo es el sistema de frenado que combina lo último en sistemas antibloqueo con un reparto de frenada mejorado, unos neumáticos con mayor componente adherente y una holgura del pedal casi imperceptible.
La suspensión delantera de barras McPherson y suspensión trasera multibrazo incorporan mejoras importantes que realzan notablemente las prestaciones del chasis. Ahora, el comportamiento del modelo es más fluido y lineal, con mayor calidad de marcha tanto en ciudad como en carretera.
Con este restyling el modelo llega con una mayor dotación de sistemas de asistencia y seguridad. Sistemas como el i-ACTIVSENSE han sido ampliados y ahora ayudan al conductor a identificar riesgos potenciales y reducir la posibilidad de sufrir lesiones o daños.
Además de unos sistemas de asistencia mejorados hay que volver ha subrayar la mejora de los faros Smart Full Led adaptativos, el nuevo control de crucero adaptativo por radar y el monitor de visión 360 grados, sistemas que han llegado para quedarse y que nos han sorprendido por su preciso funcionamiento y su excelente integración.
Precios Mazda6
Mazda6 Evolution 2.2 Skyactiv-D 150 CV manual 32.825 euros
Mazda6 Evolution 2.2 Skyactiv-D 150 CV Auto 34.825 euros
Mazda6 Evolution Tech 2.2 Skyactiv-D 150 CV manual 34.125 euros
Mazda6 Evolution 2.2 Skyactiv-D 150 CV Auto 36.125 euros
Mazda6 Zenith 2.2 Skyactiv-D 150 CV manual 35.725 euros
Mazda6 Zenith 2.2 Skyactiv-D 150 CV Auto 37.725 euros
Mazda6 Zenith 2.2 Skyactiv-D 184 CV manual 39.375 euros
Mazda6 Zenith 2.2 Skyactiv-D 184 CV Auto 41.375 euros
Mazda6 Signature 2.2 Skyactiv-D 184 CV manual 40.575 euros
Mazda6 Signature 2.2 Skyactiv-D 184 CV Auto 42.575 euros
- Pese a que los precios son claramente elevados, Mazda ya ha traspasado la barrera que separa lo generalista de lo Premium.
- La oferta de elementos SKYACTIV es inmejorable y su comportamiento es más que bueno. Los consumos son contenidos y todas las mecánicas se homologan conforme a la norma Euro 6d Temp.
- Excelente dinámica, baja rumorosidad y elevado confort de marcha en un modelo que mejora en casi todos los puntos.
- Hay algunos elementos tecnológicos que desmerecen la apariencia interior del modelo, sin embargo, tienes que saber que se trata de un lavado de cara y no de un modelo de nueva generación, tal y como pasa con sus rivales más directos.
- El listado de precios es capaz de ascender por encima de las nubes, sin embargo, no hace falta mucho desembolso para adquirir unidades con un elevado e interesante equipamiento.
- Nos falta algo más de refinamiento en los sistemas de infoentretenimiento.