Diseño/Estética
Calidad de acabado
Equipamiento de serie
Equipamiento opcional
Habitabilidad
Maletero
Motor/Refinamiento
Prestaciones
Consumos
Transmisión
Dirección
Frenos y neumáticos
Comportamiento
Calidad de rodadura
Relación valor-precio
7.7
Notable
El Mercedes C300de Estate ofrece una motorización casi única hoy en día que resulta muy interesante al gasta poco combustible en todo momento. La autonomía eléctrica no ha sido la esperada pero eso ocurre en la mayoría de vehículos de este tipo. Quizás con temperaturas más elevadas se puedan ganar algunos kms de utilización en modo 100% eléctrico. El principal defecto de este modelo está en un maletero poco práctico de capacidad algo justa para una familia.
El Mercedes Clase C es todo un clásico entre las berlinas premium que goza de gran popularidad en los principales países europeos. A pesar de los años que posee, la actual generación se mantiene vigente gracias a las constantes actualizaciones que la marca ha ido introduciendo.
Si bien España no es un mercado especialmente importante para los “station-wagon”, en otros países europeos son los preferidos del público gracias a su mayor versatilidad, una boca de carga mucho más generosa y también por su diseño atractivo. No hay que olvidar que la evolución en este apartado ha sido enorme respecto a las formas cuadradas de hace unos años.
He tenido la oportunidad de probar un Mercedes C300de Estate, posiblemente la mejor opción de la gama gracias a la mecánica híbrida enchufable que hace uso de un bloque diésel de bajos consumos. Es una solución poco habitual en el mercado y ya te adelanto que resulta mucho más eficaz que el equivalente en gasolina.
DISEÑO
El Mercedes Clase C ha conseguido envejecer bastante bien en estos años y con las ligeras actualizaciones efectuadas ha sido suficiente para seguir captando la atención del público. La versión familiar es muy atractiva y si además suma varios paquetes opcionales puede convertirse en todo un “giracabezas”.
La unidad testada no es especialmente llamativa a pesar de la completa dotación. Incluye el paquete AMG-Line que añade paragolpes más deportivos, llantas de aleación de mayor tamaño y además se ha prescindido de la mayoría de los elementos cromados para conseguir un efecto más deportivo. El color azul de la unidad redondea un conjunto atractivo y al mismo tiempo discreto.
Lo mejor de las marcas Premium es que permiten configurar al gusto cada detalle, pudiendo modificar el aspecto para darle más importancia a la elegancia o la deportividad. Para ello es posible jugar con las pinturas, llantas, apliques decorativos, etc., aunque el precio podrá aumentar considerablemente.
INTERIOR
Una vez se pasa al habitáculo el Mercedes Clase C te recibe con un diseño algo ya gastado pero bien dispuesto. Hay detalles que denotan el paso del tiempo como es el uso de una pantalla de tipo tableta de buenas dimensiones sin manejo táctil, siendo engorroso su control desde el mando en la consola inferior.
La instrumentación se ha actualizado con la última renovación y es configurable aunque de manera mucho más limitada que en un Clase A. Es evidente que en un producto de ciertos años no se pueden adaptar todos los gadgets, y es en conectividad dónde más retrasado se ha quedado. A pesar de esto cuenta con Apple CarPlay y Android Auto.
La calidad de realización está a buen nivel pero no despunta, haciendo uso de algunos plásticos cuestionables para un vehículo de su precio. Hay productos rivales con una presentación más cuidada como son los Audi A4 Avant y Volvo V60, este último toda una sorpresa muy agradable.
Por el interior hay repartidos multitud de huecos para depositar objetos, la mayoría de ellos con suelo de goma para evitar que aquellos que se deje vaya de un lado a otro. Las bolsas de las puertas me han parecido suficientes por tamaño, algo extensible al hueco bajo el reposabrazos central.
HABITABILIDAD
El Mercedes Clase C Estate es un automóvil correcto para que puedan viajar cuatro adultos sin problemas. Pensar en invitar a un quinto pasajero para un viaje largo puede ser un error al no contar con una anchura especialmente holgada ni suelo completamente plano (lo que obliga a modificar la postura robando espacio a las plazas laterales para esquivar el enorme túnel central).
Las plazas delanteras me han parecido cómodas por disponer de todos los mandos cerca. Salvo el sistema multimedia, todo se controla de forma muy intuitiva y rápida. Los asientos pueden contar con reglajes eléctricos, ajuste lumbar e incluso mayor sujeción lateral aunque para ello siempre hay que pasar por caja.
En la segunda fila las plazas laterales también me han parecido cómodas mientras que la central, al estar sobre-elevada, no creo que deba ser utilizada por un adulto. Sí me gusta que haya tomas USB y salidas de aire direccionales para estos ocupantes, además de un apoyabrazos central “escondido” en el respaldo.
La capacidad de maletero en el Clase E Estate es normal aunque no destaca. En el caso de esta unidad con motor híbrido enchufable se puede decir que es mala y además poco aprovechable debido al espacio que roba la batería, dejando un escalón enorme. Si se desea aumentar la capacidad de carga abatiendo los respaldos habrá que salvar como sea ese escalón. Esto es lo malo de introducir la última tecnología en una plataforma que no había sido pensada para ello desde el principio.
EQUIPAMIENTO
En los últimos años Mercedes-Benz España ha ido aumentando la dotación de serie en todos sus modelos para evitar que a nivel estético parezcan básicos, algo que sí se encuentra en otros mercados europeos (con faros halógenos, tapacubos, etc). Con ello se consigue mejorar la imagen de marca y de paso ganar público, algo que parece ha funcionado.
En todos los Clase C son de serie los faros LED, las llantas de aleación, control y limitador de velocidad, sistema de sonido con bluetooth, puertos USB, aviso pre-colisión, sensores de aparcamiento delanteros y traseros, climatizador automático de dos zonas, sensor de lluvia y encendido automático de luces.
También de serie llevan cámara de visión posterior, selector de modos de conducción, asientos con reglajes parcialmente eléctricos, portón trasero automático, arranque sin llave, barras de techo, umbral de puertas con logo Mercedes, freno de estacionamiento eléctrico, etc. Las versiones C300de añaden el cable de recarga, dirección directa de confort, sistema de frenos sobredimensionados, etc.
Los usuarios tienen un montón de opciones para personalizar al gusto cada unidad. Entre los elementos más interesantes están el techo panorámico doble, acceso sin llave, control de ángulo muerto, faros Multibeam, tapizado en piel, asientos calefactables, Head Up Display, control de crucero adaptativo, sistema de visión cenital, cargador de móvil sin cables, etc.
El precio recomendado sin incluir promociones para el Mercedes C300de Estate se ha fijado en los 58.775 €, un coste elevado pero que no se aleja demasiado de lo que ofertan otros fabricantes por productos PHEV. Sí sabemos que en los concesionarios se aplican promociones importantes así que si te gusta el modelo deberías acercarte a cualquier distribuidor oficial para comprobar el precio real.
MOTOR
La oferta de vehículos con motor híbrido enchufable está aumentando considerablemente. En pocos meses casi todos los fabricantes han lanzado al menos un producto de este tipo y eso se está notando en las matriculaciones que siguen aumentando incluso con la recesión que ha provocado la crisis sanitaria.
Mercedes-Benz ha logrado convertirse en uno de los principales jugadores del segmento gracias a su enorme ofensiva que incluye la tecnología EQ Power en multitud de vehículos y además sin olvidarse de los segmentos inferiores. Si el A250e ya es todo un éxito, no es menos cierto que a los Mercedes Clase C300de y C300e no les va mal.
Lo que ofrece el C300de respecto a los rivales es un motor diésel en combinación con otro eléctrico. Esto permite aumentar el ahorro cuando no hay suficiente batería para mover el vehículo, registrando unos consumos bastante bajos que será muy difícil que superen los 5,5 L/100 (funcionando con la batería totalmente descargada).
La batería de iones de litio tiene una capacidad de 13,5 kWh y se supone otorga una autonomía de unos 51 km con una sola carga pero debo reconocer que durante la prueba no he conseguido superar los 40 km en ningún caso. Es probable que un uso 100% urbano se pueda alcanzar la cifra homologada.
Las prestaciones del C300de son muy buenas, algo normal para un automóvil que cuenta con 306 CV en el mejor de los casos. El sistema se apoya en una caja de cambios automática con nueve velocidades de buen funcionamiento, y con el sistema de propulsión posterior (no hay por el momento alternativa con tracción total).
Para poder recargar la batería en el Mercedes C300de Estate se puede utilizar una toma doméstica convencional de 2,3 kW o bien un Wallbox de hasta 7,4 kW. En este último caso el tiempo necesario para una carga completa ronda la hora y media, una cifra muy inferior a las siete que requiere en el peor de los casos.
Si se aprovechan las tarifas económicas que ofrecen varios proveedores por la noche para recargar el coche, el coste por una carga total podría ser inferior a los 10 céntimos. Poder recorrer unos 40 km por esa cantidad es sin duda un coste muy bajo, y esto junto con la etiqueta ambiental CERO de la DGT hacen de esta versión una alternativa muy apetecible.
Ficha técnica
Version | C300de ESTATE |
---|---|
Cilindrada | 1.950cc |
Potencia | 306 CV |
Par | 700 Nm |
Peso | 1.955 kg |
Dimensiones Lar/An/Al mm | 4702 / 1810 / 1465 |
Volumen Maletero | 315 / 1.335 litros |
Aceleración 0 a 100 km/h | 5,7 seg |
Recuperación 80 a 120 km/h | 4,3 seg en D |
Velocidad máxima | 250 km/h |
Consumo homologado | 1,2 L/100 |
Emisiones CO2 por km | 33 gr |
Precio de partida | 58.775 € (sin descuentos) |
COMPORTAMIENTO
El Mercedes C300de Estate se comporta muy bien por regla general pero ya te puedes ir olvidando del refinamiento habitual de las gamas superiores. El Clase C no ha disfrutado en esta última generación de una calidad de rodadura a la altura de lo esperable en un coche de la marca, en parte por el abuso de neumáticos muy anchos y suspensiones firmes.
Que no sea el mejor del segmento no implica que resulte incómodo para viajes largos o ruidoso aunque esto último depende mucho de si el motor diésel está funcionando, y a qué régimen. En ciudad cuando no queda batería puede se percibe su ciclo pero no me ha parecido un ruido especialmente molesto. En cualquier caso, pagando una factura cercana a los 60 mil euros se puede exigir un mayor silencio de marcha.
Lo mejor del Clase C es la seguridad que transmite rodando a ritmos altos y lo poco aparatoso que parece al circular en ciudad a pesar de sus dimensiones. No todas las berlinas medias se perciben a sus mandos tan ágiles, destacando aquí también el reducido radio de giro que permite cambiar de dirección en muy pocos metros.
La toma de recarga está situada en la esquina derecha del paragolpes trasero, en una posición excesivamente expuesta a golpes. En los modelos más modernos de la marca se ha situado la boca en el lateral, justo al lado contrario de la toma de combustible. Desconozco si hay usuarios que hayan tenido problemas con la boca del C300de en golpes y rozones, y si el coste de reparación es muy elevado.
Los usuarios pueden elegir varios modos de utilización que modifican el comportamiento del coche. Además de los normales Sport, ECO y Normal, hay varios relativos al sistema híbrido como son el modo 100% eléctrico o el que permite recargar la batería con el motor diésel. Esto es poco eficiente al elevar considerablemente el consumo de combustible pero puede ser práctico si por ejemplo solo podemos acceder a un lugar en modo eléctrico tras un viaje.
El carácter familiar del C300de Estate queda algo marcado por una capacidad de maletero reducida y de formas irregulares pero salvando esto, es un automóvil adecuado para un uso plural. Hacer uso de un motor diésel como propulsor principal permite reducir los costes de utilización notablemente aunque para ello requiere invertir 3.700 € adicionales respecto al 300e Estate.
Consumos ajustados
Etiqueta ambiental CERO de la DGT
Precio algo elevado
Boca de recarga expuesta