Adicionalmente, nuestra unidad de prueba contaba con un paquete específico que ya os comentaba al inicio de la prueba. No es otro que el pack decorativo de la selección española de fútbol que han tenido a bien llamar “La Roja Limited Edition”. En total incluye alfombrillas, protectores de entrada delanteros y un emblema trasero, todo de la selección, por un precio de 100€. Al principio pensé que el alerón trasero y la moldura delantera cromada en rojo también formaban parte del paquete, lo que lo convertía en algo interesante. Sin embargo, no siendo así, creo que es absolutamente prescindible.
Motorización:
El Nissan Note ofrece tres opciones mecánicas caracterizadas por las bajas emisiones de CO2. Los dos motores de gasolina del Note tiene una cilindrada de 1.198 cc y son ligeras y compactas unidades de 3 cilindros y 12 válvulas. El motor de acceso de 1,2 litros desarrolla 80 CV de potencia a 6.000 rpm y 110 Nm de par a 4.000 rpm. Su consumo es de 4,7 l/100 km, y sus emisiones de CO2 de 109 g/km. Por encima, encontramos el motor 1.2 DIG-S que desarrolla 98 CV a 5.600 rpm y 147 Nm de par a 4.400 rpm. Con unas emisiones de 99 g/km, su consumo es de 4,3 l/100 km en ciclo combinado, siempre según cifras oficiales.
En lo que nos afecta a nosotros, la unidad de prueba facilitada por Nissan montaba un motor diésel 1.5 dCi turbodiésel. Este motor de 90 CV desarrollado Renault-Nissan sólo emite 95 g/km de CO2 y gasta, en ciclo combinado, apenas 3,6 l/100 km en base a lo que figura en su ficha técnica.
Durante nuestra prueba de aproximadamente 600 kilómetros, el Nissan Note fue sometido a una conducción sosegada tanto en ciudad como carretera, arrojando un consumo final de 4,5 litros a los 100 kilómetros. Como tantas otras veces, me parece una buena marca pese a situarse por encima de la oficial.
Entre sus características más destacables, una vez activado el sistema stop-start, el Note arranca en sólo 0,5 segundos después de accionar el pedal de embrague. Además, se nota que se ha trabajado en la reducción del ruido y las vibraciones durante el proceso con el resultado de una puesta en marcha suave y apenas perceptible.
La caja de cambios manual de cinco velocidades ha sido desarrollada específicamente para las carreteras europeas, por lo que es diferente a la de la versión japonesa. Cables de baja fricción y un amortiguador de peso pendular proporcionan los cambios suaves y precisos que demandan los conductores europeos.
Adolece de un mal bastante extendido por desgracia entre los modelos más pequeños del mercado, enfocados a un uso urbano. No es otro que el hecho de llevar frenos de tambor detrás en lugar de frenos de disco, algo que ya vimos hace no mucho en el Opel Adam [Ver Prueba Opel Adam], sin ir más lejos, un coche que se define por su modernidad.
En lo que a la suspensión se refiere, el nuevo Note presenta columnas McPherson con muelles en el eje delantero y un compacto eje torsional detrás. Las barras de torsión se han diseñado de manera que resulten lo menos intrusivas posibles para preservar el espacio de maletero. Nuevamente, vemos como prima el aspecto funcional.
Todos estos elementos hacen del Note un coche agradable de conducir tanto en carretera como en ciudad, si bien en vías secundarías con demasiadas curvas, llevado al extremo puede tender a cabecear un poco. Nuestra unidad de prueba calzaba unos neumáticos Dunlop 195/55 con unas llantas de 16 pulgadas. Unas gomas estrechas y poco propicias para una conducción deportiva, algo lógico en su búsqueda de la eficiencia.
Por ello, y para ir terminando antes de pasar a hablar de rascarnos el bolsillo, no debemos dejarnos llevar por el aspecto más radical del nuevo Note. No nos equivoquemos, su llamativo alerón mejora el diseño, pero no lo convierte en un coche para correr. Para eso están otros. El Note es un coche muy válido para el día a día, útil y funcional, que lo mismo nos permite ir a hacer la compra, que llevar a los niños al colegio o al fútbol, o incluso irnos a pasar un fin de semana familiar a la sierra.
Precio:
El Nissan Note puede parecernos muy económico o muy caro en función de la versión por la que nos decantemos. Seguramente, si os digo que podéis disfrutar de un Note desde 14.490 euros, todos estemos de acuerdo en que es algo razonable. Sin embargo, si nos decantamos por una unidad semejante a la que nosotros hemos probado, es posible que el sentir también sea unánime pero en sentido opuesto. La versión 1.5 dCi con el acabado Tekna Premium parte de 20.200 euros, yéndose hasta los 21.500 si incluimos las opciones que montaba nuestro Note. Quizá demasiado, ya que por ese precio el mercado ofrece muchas posibles alternativas.
Aun así, la valoración final del Nissan Note no desmerece en absoluto por tener un precio algo elevado. Compite de tú a tú con modelos como el mencionado Ford B-Max y el Hyundai ix20. El KIA Venga también lucha en la misma liga, así como el Citroën C3 Picasso, el Chevrolet Spark o el Subaru Trezia.
Lejos quedan otros modelos más grandes como pudieran ser los monovolúmenes de tamaño medio Mazda5 [Ver Prueba Mazda5], Peugeot 3008 [Ver Prueba Peugeot 3008] e incluso Opel Meriva y Ford C-Max.
Resumen de Prueba
Equipamiento
Diseño
Confort
Consumo
Motor
7.1
NOTABLE
Un modelo que es algo más que la nueva generación del Note. Un vehículo completamente nuevo con un amplio equipamiento, bajos consumos y prestaciones razonables