Resumen de Prueba
Equipamiento
Diseño
Confort
Consumo
Motor
8.1
Notable
Con esta tercera generación, Audi se ha marcado un tanto con uno de los TT más deportivos de la historia que destaca por un comportamiento dinámico extraordinario que no renuncia a la tecnología, al confort, a los buenos acabados o a las últimas tecnologías de infoentretenimiento. Sin lugar a dudas un deportivo “asequible” que puede emplearse para el día a día gracias a su polivalencia
Esta semana hemos invitado a la sección de pruebas a un vehículo que teníamos muchas ganas de conocer por ser ya, la tercera generación de un modelo que ya se puede denominar icono y que marcó el inicio de una nueva era dentro de los deportivos “asequibles”.
El Audi TT destaca desde hace más de 15 años por su concepción vanguardista y deportiva que no renuncia a una polivalencia relativa que hace que el modelo pueda conducirse cómodamente de forma diaria. Con un diseño depurado y con un completo arsenal tecnológico, el TT se presenta en un formato renovado, más ligero, potente y eficiente.
Diseño exterior
Como icono, las líneas del Audi TT continúan con el estilo que la marca de germana de los cuatro aros inició con la primera generación que salió al mercado en 1998.
En el frontal nos topamos con la parrilla hexagonal en negro brillante que ha sido abandonada por el logo de los cuatro aros, que en este nuevo ADN ha migrado al capó, a una situación aún más privilegiada.
En esta tercera generación podemos afirmar que el TT ha abandonado parte de sus líneas curvas y las ha sustituido por unas líneas mucho más horizontales que ofrecen un carácter más serio, frío y concentrado en la carretera.
Unas nuevas superficies de formas tridimensionales unen la parrilla y los faros. Estos nuevos detalles son parte del nuevo ADN de Audi y nos los iremos encontrando en los nuevos modelos de la marca a medida que vayan llegando al mercado. El diseño del frontal en forma de V parece separar el centro y los exteriores del diseño. Mientras que el interior de la V nos topamos con la parrilla de la que os hemos hablado, en el exterior no encontramos con los nuevos faros que aportan un mayor carácter al modelo.
En nuestra unidad pudimos disfrutar de la excelente iluminación de los faros marix LED opcionales (+2.615 euros) que sustituyen a los faros de xenón de serie. Esta iluminación opcional destacaba por sus funciones de iluminación selectiva por cámara, sensores, luz de curva dinámica, intermitentes dinámicos y luz para cruces por GPS. Sin lugar a dudas no solo mejora el aspecto del modelo gracias a la nueva firma lumínica de luz diurna LED, sino que además nos ofrece la mejor visibilidad posible en cualquier situación imaginable.
Faros Matrix LED: Con este opcional, la luz de carretera está compuesta en cada faro por doce pequeños diodos luminosos; dos grupos de cinco LED cada uno emiten su luz a través de dos reflectores, mientras que los dos LED restantes utilizan otro reflector. La unidad de mando, que se comunica con una cámara situada en el retrovisor interior, apaga o enciende por separado los diodos luminosos en función de la situación, e incluso los atenúa en 64 niveles. El sistema de faros es capaz de realizar varios cientos de millones de distribuciones de luz; en todo caso evita deslumbrar al resto de usuarios de la vía pública y siempre ilumina la calzada de forma óptima.
Otra función de los faros Matrix LED es el sistema de iluminación en curva inteligente, que se genera mediante el desplazamiento del centro luminoso. En combinación con el sistema de navegación opcional MMI navigation plus, la unidad de mando utiliza los datos de navegación para iluminar el interior de la curva incluso poco antes de girar el volante.
Junto con los faros Matrix LED, el nuevo Audi TT incorpora el intermitente con indicación dinámica en el frontal y en la trasera. Cuando el conductor activa el intermitente, los LED individuales se van encendiendo de forma sucesiva desde el interior hacia el exterior.
En la esquinas inferiores del frontal nos encontramos con unas angulosas entradas de aire propias del paquete opcional exterior S line (+1.590 euros) que además de la parrilla en negro brillante, los emblemas S liney el difusor de aire trasero, incorpora los paragolpes específicos.
Nuestra unidad de pruebas también equipaba de forma opcional un recomendable conjunto de sensores de aparcamiento tanto en la parte frontal como en la trasera llamados Audi Parking system plus (+955 euros).
Las líneas del frontal se trasladan a través del vehículo gracias a la curvatura del capó y la luna delantera.
La vista lateral del modelo se ha refinado. Desde el pilar A, hacia la parte trasera el modelo se asemeja más que nunca a una gota de agua. El arco del techo no ha abandonado el diseño curvo de la primera generación. El pliegue que nace en la esquina superior de los faros delanteros fluye a través de la carrocería y muere en la trasera, a la altura de los faros. Sin lugar a dudas, es un TT y es algo que nadie puede discutir…
Los abultados y musculosos pasos de rueda se llenan con una gran familia de llanta de aleación de atractivo diseño. En nuestra unidad contábamos con la presencia de unas imponentes llantas de aleación de 20” con diseño de 10 radios en forma de Y (+2.140 euros). Estas llantas equipaban unos recomendables neumáticos Yokohama Advan Sport en dimensiones 255/30 ZR 20 (92Y).
El diseño del lateral es muy limpio lo que contrasta con el cerco de los pasos de rueda y el faldón lateral.
En la trasera nos tapamos con un diseño también en forma de V y que forma parte de la tapa del maletero que además cuenta con un alerón retráctil en la tapa del maletero. En el filo de la tapa del maletero Audi nos ha sorprendido con una alargada luz de freno que visualmente une los dos faros traseros en tecnología LED de serie. La parte inferior de la trasera y gracias a la línea exterior S line nuestra unidad montaba un difusor específico que acogía a las dos salidas de escape redondas de grandes dimensiones.
El alerón se despliega en función de la velocidad o a gusto del conductor pulsando un botón ubicado en la consola central.
La tapa del depósito, situada en la zona de cintura derecha y realizada en el diseño característico, lleva grabada la inscripción TT, y se abre presionando sobre ella, algo que ya es característico del modelo.
Diseño interior
Si las líneas exteriores han sufrido un refinamiento manifiesto, en el interior es donde nos encontramos los mayores cambios. Tal y como os hemos contado, las líneas exteriores han sufrido una “horizontalización”, y esto, en cierto modo, también lo ha sufrido el interior.
El interior del Audi TT es el primer interior dentro de la marca de los cuatro aros que incorpora la nueva y limpia distribución de diseño interior en la que predomina el minimalismo y la simplicidad. Sí, soy consciente de que muchas marcas lo están llevado a cabo (otras no) pero Audi lo ha agrupado todo a la vista del conductor.
En la consola central del nuevo Audi TT predominan tres de las cinco entradas de aire que a su vez recogen las funciones de climatización. La parte central de las redondas salidas de aire incorporan un display monocromo (uno por salida de aire) que funcionan como los mandos del climatizador recogiendo de esta manera los reguladores para la calefacción, la temperatura, la recirculación de aire, la distribución y la potencia del flujo de aire. No solo podemos decir que queda realmente elegante sino que se trata de una función de diseño que ahorra espacio y amplía la sensación de calidad en el interior del modelo.
Debajo de los tres difusores de aire centrales se encuentran los interruptores de los intermitentes de emergencia, del Audi drive select y de otras funciones. Me encantaría seguir con la descripción pero la consola central acaba aquí, lo que demuestra la simplicidad del diseño.
El túnel central se presenta como un cuerpo independiente sin conexión visual con la consola central, se encuentra revestida de aluminio cepillado (+170 euros). En primer lugar encontraremos un hueco portaobjetos con tapa, a continuación tenemos el botón de encendido y los mandos de la radio seguidos de la palanca de cambios que en nuestra unidad correspondían al cambio S tronic
Tras la palanca y continuando el curso del revestimiento del túnel central nos topamos con el nuevo e intuitivo terminal de manejo MMI y el botón del freno de estacionamiento electromecánico que ahorra un espacio muy significativo.
Una vez accedemos al TT nos sentamos sobre unos asientos deportivos de desarrollo completamente nuevo con reposacabezas integrados que no solo son realmente confortables sino que ofrecen al cuerpo la mejor sujeción y apoyo. Nuestra unidad contaba con regulación lumbar eléctrica, calefacción y reposabrazos central entre ambos asientos delantero (+195 euros).
Joan Manuel Romero