Diseño/Estética
Calidad de acabado
Equipamiento de serie
Equipamiento opcional
Habitabilidad
Maletero
Motor/Refinamiento
Prestaciones
Consumos
Transmisión
Dirección
Frenos y neumáticos
Comportamiento
Calidad de rodadura
Relación valor-precio
7.5
Notable
El nuevo Peugeot 3008 llega con mucha fuerza gracias a una evolución radical de la generación anterior. Ahora con un diseño totalmente renovado y un comportamiento muy capaz pretende conquistar a todos los adeptos a los SUV, aunque tendrá a duros competidores en el mismo segmento este nuevo 3008 promete dar mucha guerra gracias al salto de calidad que ha dado la marca del Grupo PSA. Es verdad que tiene aspectos mejorables, como la carencia de una versión 4x4 pero la realidad es que muy pocos la echarán de menos.
Con la llegada del nuevo Peugeot 3008 ha comenzado una nueva era en la marca francesa, la cual se adentra todavía más apostando de lleno por el mercado de los SUV, y esta vez ha sido con una apuesta segura gracias a su nuevo modelo. Enmarcado dentro del segmento C ha resultado toda una revelación dentro de la marca, ya que se desmarca totalmente de la generación anterior para ofrecernos un producto totalmente nuevo que viene cargado de tecnología en su interior, y un diseño exterior que sorprende y busca diferenciarse claramente de la competencia, con una mirada imponente y que no deja a nadie indiferente a su paso.
Su revolucionario sistema i-Cockpit de última generación y su habitáculo en general nos trasladan a un concepto de vehículo tecnológicamente muy avanzado, en este caso contamos con el acabado GT Line al que no le falta un ápice de detalle en su equipamiento y donde destacan elementos como el i-Cockpit Amplify o el Pack Safety con un sistema de aviso y frenado en caso de emergencia. Presentado en el Salón de París en el 2016 fue una de las grandes estrellas de la compañía francesa, y es que será claramente un contrincante duro de pelar dentro del mercado de los SUV del que tanto hemos oído hablar últimamente.
Con el mercado de los SUV en plena expansión, las ventas de estos se han multiplicado por 2,5 desde el año 2009, cuando se lanzó el primer Peugeot 3008 que pocos parecidos tiene con la generación actual. Las cifras son un dato revelador, y es que actualmente si tenemos en cuenta todos los segmentos, uno de cada diez vehículos en Europa pertenece a la familia de los SUV y ahí es donde Peugeot quiere imponerse con su gran estrella, el nuevo 3008.
Ahora Peugeot quiere poner toda la carne en el asador con esta nueva generación de vehículos, de la que el 3008 es uno de los claros protagonistas. Con una imagen moderna, que pone el acento en el status siempre de la mano de la alta tecnología y las emociones en la conducción. Ya en enero del 2017 las cifras de ventas sitúan al SUV de la marca francesa en el puesto 21 dentro de los modelos más vendidos durante este mes, nada menos que con 1.027 unidades del 3008. Por encima, uno de los reyes del segmento como es el Nissan Qashqai con 1.723 unidades vendidas, el Volkswagen Tiguan con 1.313 y cuatro puestos por debajo el Kia Sportage con 1.132 unidades, solo un peldaño por encima del nuevo 3008.
La aspiración de evasión, de escapadas de fin de semana y de nuevas experiencias son algunos de los valores del 3008 que han sido establecidos por la marca gala, los cuales también afirman que el conductor de hoy en día busca nuevas experiencias en la conducción, que convierta el tiempo de los traslados que a menudo se viven como una carga en un tiempo optimizado por la experiencia, la emoción y la convivencia. Con el nuevo Peugeot 3008, la marca pretende posicionarse de lleno en el segmento C SUV con una propuesta deseable, digna de su mejor saber hacer y coherente con su estrategia de subida de gama.
Diseño exterior
El nuevo 3008 ha dado un cambio a su diseño exterior absolutamente radical respecto a su predecesor, el cual estaba dotado de unas formas más redondeadas y una apariencia algo más tosca que no le favorecía demasiado para ser sinceros. Con la llegada de la nueva generación han creado un coche totalmente nuevo, aunque mantiene prácticamente las mismas dimensiones del anterior 3008, ahora es ligeramente más largo y se sitúa por encima de la media del segmento.
Se ha convertido en todo un SUV, gracias a diferentes detalles como las molduras protectoras de los pasos de rueda o una altura libre al suelo elevada que nos permitirá en ocasiones determinadas poder abandonar el asfalto por terrenos en buen estado. Adopta claramente la misma línea de diseño que su hermano pequeño, el Peugeot 2008, principalmente teniendo en cuenta el frontal de ambos, donde tanto la parrilla como las ópticas guardan una gran cantidad de similitudes. Las líneas verticales son abundantes, gracias a un capó largo y horizontal junto con la mirada que le otorga al SUV los luces diurnas, asimismo la carrocería está elevada con una distancia realzada y las barras del techo perfiladas para darle ese look aventurero e imponente a la vez.
Si algo está claro es que es un vehículo con personalidad propia, no pasará desapercibido entre los demás cuando circulemos por la vía pública gracias a sus formas sinuosas y deportivas. Si observamos el vehículo desde un lateral la sensación es muy similar, además los diseñadores de Peugeot han recurrido a un truco que está cada vez más de moda, el cual trata de colocar un plástico negro en el pilar trasero del vehículo para dar la sensación de techo flotante, uniendo así de forma visual las ventanillas traseras con la luna trasera.
En la unidad de prueba de la que disponemos equipamos el acabado GT Line (desde 28.100 euros), el cual añade al exterior un aspecto más deportivo y atractivo. Gracias en parte a los faros Full-LED con corrección automática de tono, intermitentes delanteros LED con desplazamiento dinámico, techo Black Diamond, las barras de techo longitudinales y unas llantas de aleación de 18 pulgadas DETROIT Gris Haria mate diamantadas bitono, calzando unos neumáticos 225/55 R18 con una rueda de repuesto de emergencia. Toda esta cantidad de tecnología junto con los elementos estéticos tienen como resultado un SUV muy completo que ya desde el acabado más básico incluye un equipamiento de seguridad realmente detallado con sistemas como la alerta de cambio involuntario de carril o varios packs de visibilidad y ayuda a la conducción.
La parte trasera se distancia bastante de lo visto hasta ahora dentro de la compañía francesa para ofrecernos una estética renovada, con una mayor superficie acristalada. El único error que hemos encontrado durante la prueba ha sido el tamaño reducido de los intermitentes, ofreciendo una visibilidad algo reducida cuando queramos señalar al resto de conductores que vamos a realizar alguna maniobra.
Elevando la carrocería así como dotando a la carrocería de gran cantidad de superficies acristaladas y metálicas han conseguido una gran fluidez y han creado un perfil más ligero. El concept car Peugeot XH1 también ha sido utilizado como inspiración para crear el nuevo Peugeot 3008, principalmente en las inserciones cromadas que siguen las líneas marcadas por los faros. Su capó nervado, largo y horizontal le otorga una especial robustez y personalidad al frontal, donde además encontraremos una pequeña cámara que forma parte del sistema VisioPark 1, el cual incorpora una cámara trasera 180º para facilitarnos considerablemente las maniobras de aparcamiento.
Además encontraremos un techo panorámico de grandes dimensiones practicable en su primera mitad, que nos permite mediante dos botones diferentes solo abrir una pequeña cortinilla u optar por abrirlo al exterior. En el techo además no encontramos ningún tipo de antena, ni de corte tradicional ni en forma de aleta de tiburón, lo que le da al conjunto un aspecto más limpio y aerodinámico, lo cual se acentúa gracias a los intermitentes delanteros LED con desplazamiento dinámico que ya equipan otras marcas premium como Audi, con un resultado visual realmente óptimo e hipnotizante.
Diseño interior
Si el diseño del exterior ya es de por si una evolución importante para la marca del Grupo PSA no podía ser diferente en el interior. Peugeot ha trabajado especialmente en el habitáculo del 3008 y lo ha definido como “un amplificador de sensaciones” y es que nada más abrir la puerta del conductor nos daremos cuenta de que no estamos ante cualquier SUV, sino que este tiene un aspecto de “nave espacial” y gracias al afamado i-Cockpit la tecnología ha tomado el control absoluto del interior.
¿Que qué es el i-Cockpit? Pues la marca lo ha definido como el conjunto que conforman el cuadro de mandos, el pequeño volante y el asiento. Una combinación de elementos que se ha configurado siempre en torno a la comodidad y usabilidad del conductor, para tenerlo todo siempre a la vista. Además el volante tan pequeño, nos facilitará realizar cualquier maniobra así como enlazar fácilmente las curvas en carreteras reviradas, es verdad que al principio su diseño puede parecer “de juguete” pero una vez que nos acostumbremos a él será nuestro mejor aliado en múltiples situaciones.
El salpicadero es realmente imponente y futurista, es verdad que los materiales no son de la más alta calidad pero están muy bien acabados y tienen un tacto agradable así como un olor cautivante. La tecnología gobierna, sin duda, el interior del coche y la mayoría de elementos analógicos que encontramos en el 3008 anterior han sido sustitutos por pantallas que nos facilitarán no perder en ningún momento la visión de la carretera. Y es que una de las funciones que destaca la marca del león del i-Cockpit es que la visión del conductor, tanto del panel de instrumentos como de la carretera es en todo momento cómoda y segura.
El nuevo panel de instrumentos es totalmente digital, una instrumentación elevada de 12,3 pulgadas con unos gráficos especialmente futuristas y configurable entre cinco pantallas diferentes según nuestras necesidades. Este cuadro de instrumentos reúne todo lo que el conductor necesita tener directamente en su campo visual, estos cinco modos diferentes nos permiten tener un cuadro de instrumentos a la carta, con un modo “Personal” que es configurable desde la pantalla táctil y nos permitirá elegir entre un amplio abanico de posibilidades e informaciones.
Además encontraremos “Cuadrantes” que responde a la configuración tradicional del cuadro de instrumentos con las dos circunferencias pertenecientes a la velocidad y las revoluciones, o podemos optar por “Navegación” para ver representado un mapa 3D que nos guiará a nuestro destino, desde mi punto de vista el más útil en viajes. Pero además podemos elegir “Mínimo” o “Conducción” que nos mostrará una imagen 3D del vehículo dentro del carril por el que circulamos con la información tradicional de velocidad y rpm.
En el centro del salpicadero encontramos una pantalla táctil de 8 pulgadas que actúa a modo de tablet, a esta le acompañan seis interruptores ordenador de mayor a menor uso, algo que puede parecer otra característica más pero es realmente cómodo para tener todo a mano, permitiendo un acceso directo a todas las funciones del vehículo de forma elegante, con un tacto correcto y que nos recuerda claramente a la aviación. El orden de los botones comienza de izquierda a derecha con: radio, climatizador, navegador, parámetros del vehículo, telefonía y aplicaciones móviles.
El climatizador dispone de una gran cantidad de opciones y de forma opcional en el acabado GT Line incluye el i-Cockpit Amplify que entre otras configuraciones incluye un ambientador con varias fragancias y tres intensidades que podemos programar a nuestro gusto. Cada una de las fragancias nos ofrece una atmósfera totalmente diferente dentro del vehículo a elegir entre “Cuero cósmico”, “Aerodrive” y “Armonía de madera” y como novedad no hará falta activar el climatizador para el funcionamiento de dicho sistema.
Ya en la consola central nos encontraremos con un freno de estacionamiento eléctrico, el botón que activa el modo “Sport” y la palanca de cambios que equipa este modelo de transmisión automática, de una estética realmente futurista e innovadora que en el uso a diario resulta bastante cómoda. Si hablamos de los asientos, en este caso equipamos la tapicería que combina tela con cuero en diferentes tonos y con una costura en tono beige oscuro. Su diseño es atractivo y deportivo, si bien, también es verdad que el agarre en los laterales podría ser mejor y más confortable para el conductor en algunas ocasiones pero en términos generales son bastante cómodos y están bien acabados.
En las plazas traseras el espacio abunda y la posición de los pasajeros es correcta así como confortable para largos trayectos. Existe bastante distancia para las piernas, incluso si nuestra altura es considerable quedando un espacio al techo de sobra para no chocar con él. En la plaza central, por un lado no encontramos túnel de transmisión y por lo tanto aumenta en parte el confort del pasajero, pero sin embargo el respaldo es más duro y la distancia al techo se reduce considerablemente. En el caso de solo viajar dos pasajeros en la parte trasera podremos abatir un útil apoyabrazos que además tiene acceso directo al maletero.
El maletero de 520 litros supera al anterior, nada menos que en 88 litros. Este cuenta con una gran versatilidad gracias a un suelo plano y la posibilidad de plegar la fila de asientos de los pasajeros para obtener hasta 1.580 litros de capacidad, además si abatimos el asiento del copiloto podremos cargar elementos de hasta tres metros de largo. En mi caso portando un par de esquís fue necesario únicamente abatir uno de los asientos de la parte posterior del vehículo para obtener un espacio más que suficiente, que se podrá aumentar gracias a un doble fondo. Dispondremos de un portón eléctrico con botón tanto la apertura como para el cierre del mismo, lo que nos facilitará el acceso al mismo.
Motorización
Una vez os hemos hablado del diseño exterior e interior del vehículo es hora de hablar sobre su mecánica. En este caso la unidad de prueba escondía un motor 1.6 BlueHDI de una potencia de 120 CV y un par máxima de 300 Nm a 1.750 rpm, el cual va unido a una transmisión automática de 6 velocidades denominada EAT6 y con un diseño realmente atractivo. Además detrás del volante encontramos unas levas que, junto con el modo “Sport”, nos permiten llevar a cabo una conducción algo más dinámica y divertida, pensadas para aquellos que disfrutan en las carreteras reviradas.
Otra de las novedades es que Peugeot deja atrás con el nuevo Peugeot 3008 el antiguo cambio manual robotizado de la generación anterior, dando lugar a este convertidor de par de seis relaciones que en términos generales tiene un buen comportamiento. El nuevo SUV se beneficia de una gama de motores Euro6, encontrando 4 motorizaciones en gasolina: 1.2L PureTech 130 S&S 6V; 1.2L PureTech 130 S&S EAT6; y la más potente, 1.6L THP 165 S&S EAT6. Por otra parte, en el apartado diésel encontramos un abanico de potencias que van desde los 100 hasta los 150 CV: 1.6L BlueHDi 100 S&S; 1.6L BlueHDi 120 S&S 6V, en versiones estándar y de muy bajo consumo; 1.6L BlueHDi 120 S&S EAT6; 2.0L BlueHDi 150 S&S 6v y la más potente, 2.0L BlueHDi 180 S&S EAT6.
En el caso de la unidad de prueba con 120 CV podemos decir que, aunque cumple con su cometido de forma correcta, quizás no estemos hablando de un motor vigoroso y que nos permita una conducción especialmente dinámica, y menos si vamos cargados y con pasajeros en las plazas traseras. Pero en un modo de conducción normal y sin demasiada carga en la parte posterior es una potencia de sobra, tanto para ciudad como para carretera, teniendo que bajar alguna marcha si queremos adelantar en pendiente. Es verdad que es un coche de notables dimensiones y con un peso considerable de 1.390 kg, pero para nada se muestra como un vehículo torpe o falto de potencia salvo en situaciones muy determinadas.
Si hablamos de sonoridad y aislamiento del habitáculo diría que en términos generales es muy bueno, salvo si apretamos a fondo el acelerador para realizar un adelantamiento, momento en el cual el nivel sonoro aumentará considerablemente siendo algo molesto. Rodando de forma habitual por carretera su mecánica se muestra bastante silenciosa, a lo que ayuda un buen aislamiento del interior para poder disfrutar de largos viajes sin un continuo sonido del motor en nuestros oídos.
Respecto a su cambio automático EAT6 de 6 velocidades se podría decir que la compañía francesa ha dado un salto importante respecto a la versión anterior, ofrece un funcionamiento con una suavidad más que correcta, y un cambio que no es torpe ni tosco en ningún momento, cosa que cambiará si optamos por usar el modo manual mediante el accionamiento de levas. La conducción deportiva se complica como consecuencia de una reacción lenta con el accionamiento de las marchas mediante el uso de las levas, aunque realmente no es una forma de conducción que recomiendo especialmente en este vehículo y probablemente muy pocos conductores vayan a usar realmente en su día a día.
En cuanto a los consumos la marca ha puesto en marcha un plan de verificación de consumos en condiciones reales, es decir que encontraremos unas cifras muy cercanas a las homologadas por la compañía gala. Esta unidad presume de un consumo mixto homologado de unos 4,2 litros a los 100, una cifra que varía ligeramente en la conducción que hemos experimentado a lo largo de la prueba, pero no de forma radical. En entornos urbanos, sin duda, ascenderá por encima de los 5 litros a los 100 como es normal, sin embargo circulando por autopista a una velocidad de 120 km/h siempre rondará los 4,5 litros a los 100 o incluso por debajo, estando homologado un consumo extraurbano de 3,9 l/100 km. El tamaño del depósito asciende hasta los 53 litros, más que suficiente para realizar un viaje de distancia media sin tener que hacer paradas innecesarias.
Ficha técnica
Version | 1.6 BlueHDi / 4 cilindros en línea |
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Cilindrada | 1560 cm3 |
Potencia | 120 CV (88 kW) @ 3.500 rpm |
Par | 300 Nm @ 1.750 rpm |
Peso | 1.390 kilos |
Dimensiones Lar/An/Al mm | 4.447 / 1.841 / 1.624 mm |
Volumen Maletero | 520 litros |
Aceleración 0 a 100 km/h | 11,6 segundos |
Recuperación 80 a 120 km/h | N.D. |
Velocidad máxima | 185 km/h |
Consumo homologado | 4,2 / 4,7 / 3,9 l/100 km (urb. /extraurb. / comb.) |
Emisiones CO2 por km | 108 g/km de CO2 |
Precio de partida | 31.400 euros |
Comportamiento
Una vez ya os hemos contado cómo es el diseño del nuevo Peugeot 3008 y su motorización es la hora de hablar de cómo se comporta en carretera, y es que este SUV es realmente cómodo tanto en ciudad como en carretera, pudiendo divertirnos un poco más si optamos por activar el Modo “Sport” para jugar con las levas en alguna carretera más revirada. Pero vamos por orden, primero os voy contar cómo es conducirlo por una ciudad tan ajetreada como es Madrid.
En entornos urbanos el 3008 se desenvuelve de forma correcta, y gracias al sistema Start/Stop siempre podemos conseguir una conducción algo más eficiente cuando paremos en un semáforo o simplemente nos encontremos en uno de los atascos tan habituales en la capital española. La postura de conducción es algo elevada, lo que nos da esa sensación de estar por encima del resto de vehículos y una visión más cómoda a la hora de aparcar. Aunque sin duda, las cámaras situadas en el frontal y en la zaga serán nuestro mejor aliado gracias a su visión 180º que se une para dar una completa de 360º, además de encontrar los tradicionales sensores de aparcamiento de los que dispondremos tanto delante como detrás del vehículo.
Pero la marca gala ha creado este SUV para aquellos que les encantan las escapadas de fin de semana, y aquí es donde comienza nuestro espíritu aventurero. En mi caso opté por viajar hasta el norte de la península para esquiar unos días aprovechando las recientes nevadas, y el 3008 fue sin duda el mejor compañero de viaje. Tanto si viajamos en las plazas delanteras como traseras, el confort está garantizado, la suspensión es cómoda en autopista y gracias a su buena insonorización viajaremos sin ruidos molestos. Algunos han criticado su suspensión por ser demasiado blanda y algo incómoda si nos encontramos con algún bache en nuestro camino, sin embargo, en mi opinión es correcta y se adapta correctamente a la carretera.
En carreteras reviradas la cosa cambia bastante, lo primero que deberemos hacer si queremos aprovechar al máximo las bondades del SUV en este tipo de vías es activar el modo “Sport”. Este modifica la reacción del motor y el cambio, así como el sonido -apenas perceptible- y la asistencia de dirección, puede que no notemos un cambio radical en el comportamiento del vehículo, pero es verdad que se vuelve algo más dinámico para aprovechar más cada curva y sobre todo divertirnos un poco al volante.
Asimismo, junto con este modo de conducción podremos activar el botón de manual (M) en la situado en la palanca de cambios para hacer uso de las levas del volante, las cuales son bastante grandes y con un buen tacto pero en ocasiones algo lentas. Ya que están situadas en la columna de dirección pueden resultar un poco incómodas, pero realmente debemos tener claro que el 3008 está orientado siempre al confort y a la ámbito familiar, por lo que pocos clientes echarán de menos unas buenas levas.
Por último, en terrenos off-road debo decir que he echado de menos el sistema “Advanced Grip Control”, el cual se encarga de gestionar el control de tracción y estabilidad para movernos con más seguridad sobre diferentes tipos de suelos deslizantes, ya sea nieve, barro, arena o para desactivar el ESP. Muchos se han preguntado por qué la marca no había incluido la tracción integral en ninguno de sus acabados, y es que realmente muy pocos conductores que hoy en día se compran un SUV acaban aventurándose fuera del asfalto.
En esta unidad de prueba, aún sin el Grip Control podemos decir que se desenvuelve de forma correcta fuera del asfalto, gracias una altura elevada y los pasos de rueda reforzados podremos conducir por algún camino de tierra, pero siempre teniendo en cuenta nuestras limitaciones ya que estamos conduciendo un SUV con tracción 4×2.
Precio y equipamiento
El precio de nuestra unidad de pruebas, un Peugeot 3008 1.6 BlueHDI 120 EAT6 Automático 6 vel. con el acabado GT Line y pintura Rojo Ultimate (700,01 euros) está disponible por unos 36.200 euros partiendo el acabado GT Line desde los 28.100 euros.
Por este precio tendremos un SUV realmente completo y con un nivel de equipación alto, con este acabado tendremos de serie un Navegador Conectado 3D TOMTOM con función Mirror Screen: Apple Car Play y Android Auto. Respecto al equipamiento de seguridad tendremos un detector de obstáculos delantero, detección de subinflado indirecta, airbags de cortina delanteros y traseros así como unos faros Full LED delanteros. Sobre el confort y la habitabilidad podemos hablar del cierre centralizado, el i-Cockpit Amplify, retrovisores abatibles eléctricamente, climatizador bizona y las lunas traseras sobretintadas.
En la línea exterior este acabado GT Line también deja claro su sello gracias al techo Black Diamond, las barras de techo longitudinales unas llantas de aleación de 18” pulgadas, aunque en este caso nuestra unidad de pruebas lleva las de 19 pulgadas denominadas “Washington Gris Storm Brillante Tall&Narrow” con un coste de 300,01 euros. Como habéis podido ver esta unidad especialmente va cargada de equipamiento, desde el techo panorámico practicable (1.300,01 euros), el sistema Park Asist en línea y en batería (900,01 euros), VisioPark1 con camara de visión trasera 180º (250,01 euros) y en su interior un sistema de sonido HIFI Premium Focal (850 euros) o el acceso y arranque manos libres (400 euros).
Necesitas un artículo entero solo para escribir el nombre y versión q es…
Caro
logico, si tu solo has tenido una bicicleta. jajaja
Oscar Robleda Hernandez