Diseño/Estética
Calidad de acabado
Equipamiento de serie
Equipamiento opcional
Habitabilidad
Maletero
Motor/Refinamiento
Prestaciones
Consumos
Transmisión
Dirección
Frenos y neumáticos
Comportamiento
Calidad de rodadura
Relación valor-precio
7.7
Notable
El SEAT Ibiza es un polivalente que siempre debería estar entre los candidatos si buscas un coche amplio, cómodo, de buen comportamiento y con amplias posibilidades de equipamiento. Con la mecánica 1.6 TDI 115 CV diésel gasta poco y se mueve muy bien pero hay que hacer muchos kilómetros para que realmente interese, siendo el 1.0 TSI de 115 CV el mayor rival.
El SEAT Ibiza ha sido durante muchos años el pilar más importante de la firma española en todo el mundo, siendo casi un icono. Gracias a un cambio en la estrategia ahora comparte el protagonismo con otros modelos como los León, Arona y Ateca, todos ellos súper-ventas.
Para poder triunfar en las categorías inferiores es necesario ofrecer una gama amplia, variada y con muchas posibilidades de personalización, todo ello para captar la atención de una mayoría y así evitar que busquen en la competencia. La gama del Ibiza puede considerarse completa e interesante para el público.
Aunque los motores diésel no son los principales protagonistas hoy día, el SEAT Ibiza conserva este tipo de mecánica para poder cumplir con las necesidades de aquellos usuarios que realizan muchos kilómetros al año. Ofrecen buenas cifras de par, prestaciones correctas y consumos ajustados.
Durante una semana he tenido la oportunidad de probar un Ibiza 1.6 TDI 115 CV XCellence y debo reconocer que ha cambiado bastante respecto al anterior bloque de tres cilindros en lo relativo al refinamiento aunque sigue sin ser perfecto. Me ha parecido que tiene muchas virtudes aunque las opciones de gasolina son tan brillantes que a más de uno no le saldrán las cuentas.
DISEÑO
No creo que sea necesario hablar mucho del diseño del Ibiza. Por regla general es un automóvil que gusta, gozando de un toque acertado en sus trazos que combina la elegancia con la deportividad. Para algunos es como un «mini-León» aunque realmente las proporciones nada tienen que ver entre ambos.
Dependiendo del nivel de acabado elegido, el Ibiza puede modificar considerablemente su aspecto. La unidad probada corresponde al nivel Xcellence, lo que implica un mayor protagonismo de los elementos cromados para poder elevar la sensación de elegancia y sobriedad.
Respecto a otros Ibiza, el Xcellence cuenta con una parrilla frontal específica con lamas cromadas, marco de las ventanillas también cromado, paragolpes, manetas y retrovisores pintados en color carrocería, y unas bonitas llantas de aleación de 15 pulgadas. Si se quiere mejorar su aspecto puedes añadir las llantas de 17 de la unidad testada, el llamativo tono para su carrocería y los cristales oscurecidos.
INTERIOR
Nada más pasar al habitáculo el Ibiza te recibe con un interior amplio, bien planteado y cómodo. Se podrían haber mejorado algunas cosas para conseguir una postura al volante perfecta (por ejemplo situar la pantalla del sistema multimedia más arriba) pero por lo general todo queda a mano y es sencillo de manejar.
El nivel de acabado Xcellence puede presumir de una presentación atractiva e interesante que compensa en cierto modo el abusivo uso de plásticos duros. Las molduras en color carrocería, el agradable tapizado de los asientos y otros pequeños detalles hacen que merezca la pena dar el salto respecto al Style (unidad que probé hace unos meses con el motor de gasolina). Lo que no admite tacha son los ajustes, muy bien conseguidos y sin malas terminaciones entre piezas.
La instrumentación es la misma que llevan otros modelos de VAG y debo reconocer que aunque sencilla, es fácil en su lectura y muy completa. Desde el volante es posible ir cambiando los distintos menús, siendo muy intuitivo. Me gusta que la información del navegador también pueda verse en ella.
Por el habitáculo hay repartidos varios huecos porta-objetos de buen tamaño, además de incluir diversos porta-latas, bolsas de las puertas generosas y una guantera principal más que correcta. En el acabado Xcellence también se incluyen las bolsas tras los respaldos de los asientos delanteros, útiles para los pasajeros traseros.
El sistema multimedia ya lo he comentado en otras ocasiones me parece de lo mejor del mercado en estos momentos. Tiene una definición sensacional, responde de manera rápida a las órdenes y tiene una calidad de sonido muy buena, especialmente si se opta por el sistema opcional desarrollado por Beats Audio.
Además de contar con la cámara posterior y la imagen del vehículo para controlar las esquinas a la hora de estacionar, este equipo incluye Apple CarPlay, Android Auto, Mirror Link y se puede completar con el cargador de móviles sin cables. Redondea el conjunto al doble toma USB, un elemento que no tienen todos los rivales y que resulta muy práctica.
HABITABILIDAD
Posiblemente una de las mayores virtudes del nuevo SEAT Ibiza esté en su espacioso interior. Con una exagerada anchura de 1,78 metros, está claro que la quinta generación ha crecido mucho para conseguir un conjunto más equilibrado. Cierto es que no alcanza las cotas de un Dacia Sandero pero puede presumir de estar entre los mejores.
En las plazas delanteras el espacio para la cabeza es más que generoso (no he probado un Ibiza con techo solar así que no tengo claro el espacio que roba el sistema) mientras que la anchura es bastante holgada, dejando al copiloto bastante alejado. La postura al volante es natural y cómoda, y se consigue rápido gracias a las muchas regulaciones del volante y asiento.
En las plazas posteriores hay que alabar el espacio disponible para las piernas y la buena cota de altura para las cabezas. El ancho es quizás ajustado para tres adultos pero entre los polivalentes es de los más cómodos y aconsejables. Eso sí, habría sido interesante dejar un suelo completamente plano para que el quinto pasajero tuviese una postura algo más natural.
Si hablamos del maletero, casi podemos definirlo como el líder del segmento B junto con el Suzuki Baleno. Ambos cuentan con 355 litros de capacidad mínima ampliable retirando los respaldos de los asientos posteriores y la bandeja. La terminación está conseguida y aunque el borde de carga es algo alto, podemos jugar con el falso doble suelo para intentar reducir el escalón.
EQUIPAMIENTO
La oferta actual del SEAT Ibiza está formada por los niveles de terminación Reference, Reference Plus, Style, Xcellence, FR y la edición especial Beats Audio. Salvo el más asequible que requiere tirar de opciones, realmente todos llevan una dotación suficiente para cumplir con unos mínimos razonables hoy día (aire acondicionado, sistema de sonido, elevalunas, etc).
La terminación Xcellence es de las más costosas pero se nota en la presentación y los acabados. De serie cuentan con climatizador automático de dos zonas, control de crucero con limitador, ordenador, paquete iluminación interior, elevalunas eléctricos delanteros y traseros, apoyabrazos central delantero y llantas de aleación de 15 pulgadas.
También sin coste el nivel Xcellence tiene sistema multimedia con pantalla táctil de 6,5 pulgadas, USB, bluetooth, detector de fatiga, aviso pre-colisión, frenada automática en ciudad, asistente al arranque en cuestas, pilotos traseros LED, faros antiniebla con iluminación en curvas, paquete cromado exterior, etc.
Entre las opciones equipadas en la unidad de pruebas hay que señalar el sistema de sonido con pantalla de 8 pulgadas y equipo Beats Audio, acceso y arranque sin llave, faros Full LED, sensores de parking delanteros , sensor de lluvia, encendido automático de luces, SmartBeam, control de crucero adaptativo, cámara posterior, asientos térmicos, cargador sin cables para móviles, pintura especial y selector de modos de conducción.
El nuevo Ibiza 1.6 TDI 115 CV Xcellence está disponible desde 18.200 € sin contar con todos los descuentos aunque si lo quieres tan completo como sale en las fotos deberás abonar 22.600 €. Es un precio muy elevado aunque te llevarás a casa un Ibiza completísimo. Sabemos que en los concesionarios esa tarifa puede reducirse bastante así que te aconsejamos que eches un vistazo antes de tomar una decisión.
MOTOR
La oferta diésel de Volkswagen ha dado muchas vueltas en los últimos años. Durante un tiempo apostaron por los bloques clásicos de cuatro cilindros; después llegaron los de tres cilindros de bajo consumo pero funcionamiento poco agradable y en esta última parte los pequeños polivalentes del grupo reciben los renovados 1.6 TDI en varias configuraciones.
En España el Ibiza diésel puede pedirse con el 1.6 TDI en variantes con 80, 95 y 115 CV de potencia. Todos van asociados a una caja de cambios manual de cinco velocidades (seis en el caso del más potente), dejando en opción la DSG de doble embrague para la opción intermedia.
Respecto al anterior 1.4 TDI de tres cilindros la nueva mecánica ha mejorado considerablemente en agrado y refinamiento, reduciendo el nivel de vibraciones casi por completo y emitiendo un ruido menos molesto. Esto no quiere decir que el 1.6 TDI suene bien ni mucho menos, dejando claro su ciclo cuando está frío o en garajes/parkings.
La versión con 115 CV me ha parecido recomendable para aquellos usuarios que valoran mucho las prestaciones… y es que es capaz de mover con gran agilidad al Ibiza. Gracias a la caja de seis velocidades es posible sacar el máximo partido al bloque, ofreciendo cifras de recuperación sensacionales.
Lo que no me ha gustado es su funcionamiento a bajo régimen, con un retraso en la entrega del turbo que lo hace muy incómodo en ciudad y requiere estar atento al régimen de giro para no quedarse excesivamente falto de potencia. A partir de las 1.800 rpm lo entrega todo pero por debajo no hay nada, algo a lo que hay que acostumbrarse.
En lo relativo a los consumos, el Ibiza 1.6 TDI de 115 CV gasta poco aunque no me ha parecido que sorprenda. Se pueden rondar los 5,0 L/100 con relativa facilidad y en autovías a velocidades legales rara vez superará los 5,5 L/100 pero son registros que están cerca de los obtenidos por el brillante 1.0 TSI de 115 CV, más agradable, silencioso y barato.
Recomendar el Ibiza diésel solo por su bajo consumo es complicado. Los más de 2.200 € de diferencia frente al 1.0 TSI de 115 CV hacen casi imposible su amortización y deberán recorrerse muchos kilómetros anualmente para que pueda interesar. También es cierto que en los concesionarios muchas veces hay ofertas especiales para los diésel que permiten reducir las diferencias, y es ahí cuando estas unidades merecen la pena.
Ficha técnica
Version | 1.6 TDI 115 CV |
---|---|
Cilindrada | 1.598cc |
Potencia | 115 CV a 3.250 rpm |
Par | 250 Nm desde 1.500 rpm |
Peso | 1.258 kg |
Dimensiones Lar/An/Al mm | 4059 / 1780 / 1444 |
Volumen Maletero | 355 / 1.165 litros |
Aceleración 0 a 100 km/h | 10,0 seg |
Recuperación 80 a 120 km/h | 7,4 seg |
Velocidad máxima | 195 km/h |
Consumo homologado | 3,9 L/100 |
Emisiones CO2 por km | 102 gr |
Precio de partida | Desde 18.200 € (1.6 TDi 115 CV Xcellence) |
COMPORTAMIENTO
No hay cambios importantes en el comportamiento entre los Ibiza de gasolina y diésel. Los más quisquillosos podrían notar ligeramente en sus maneras el mayor peso del bloque diésel frente al tres cilindros de gasolina pero no me parece que sea algo importante, influenciando mucho más el equipo rueda/neumático en la calidad de rodadura y respuesta.
Con las llantas de 17 pulgadas opcionales me ha parecido que filtra peor las irregularidades, supera de forma más seca los badenes y resaltos, y también tiene un toque directo. El tacto de la dirección es correcto tanto en autovía como a la hora de estacionar, siendo bastante bueno el calibrado en todo momento.
La unidad testada está equipada con el selector de modos de conducción pero no he notado grandes diferencias entre programas. Se supone que actúa sobre la dirección, gestión electrónica, climatización y tacto del acelerador pero no se perciben demasiados cambios salvo en el modo más deportivo que la potencia parece llegar algo antes.
En general el SEAT Ibiza es un automóvil cómodo, con buena calidad de filtrado y suficientemente silencioso. Permite realizar viajes largos con total comodidad sin que salgan síntomas de fatiga, y los asientos recogen muy bien el cuerpo. Puestos a mejorar, estaría bien aumentar el mullido del apoyabrazos de las puertas (está muy duro).
En ciudad el Ibiza es un coche muy cómodo. Se maneja con agilidad, responde bien a las órdenes y callejea sin problemas. Lo único a lo que hay que prestar atención es al régimen del motor para que no caiga en exceso y te quedes «colgado». Con la cámara y los sensores, estacionar es realmente sencillo.
Por último mencionar el excelente sistema de iluminación Full LED opcional. Totalmente recomendable, mejora mucho la conducción por las noches y me parece que es de las opciones obligadas que deberías tener presente si decides adquirir un Ibiza. El control de crucero adaptativo sin embargo puedes ahorrártelo, con un funcionamiento algo brusco que no me convence.
Comportamiento
Maletero generoso
Prestaciones/consumos
Sonoridad en frío
Respuesta en bajas
Precio respecto al gasolina