Resumen de Prueba
Equipamiento
Diseño
Confort
Consumo
Motor
6.9
Bien
Coche práctico y funcional para moverse a diario por la ciudad y permitirse alguna escapada
Tras haberos ofrecido las pruebas del Volkswagen Up! de 5 puertas, y del propio Citigo en su versión de 3 puertas, en Autonocion.com sólo nos quedaba por probar la versión automática del pequeño de Škoda, y aquí os lo traemos, os presento el Škoda Citigo 1.0 de 75 cv con cambio automático.
Si te interesa saber más sobre este coche, o si quieres saber qué tal funciona con este cambio si ya has leído nuestras anteriores pruebas, tan solo tienes que acompañarnos, arrancamos.
Diseño Exterior
El Škoda Citigo es un coche pensando especialmente para su conducción en ciudad. Por ello se ha tratado de conseguir un coche con un tamaño exterior reducido, pero sin renunciar a un habitáculo espacioso y aprovechable. La unidad probada era de un elegante color Blanco Candy.
Según nos acercamos al Citigo vamos viendo que pese a su reducido tamaño, no da la sensación de ser tan pequeño, recordemos que tiene un largo de 3,56 metros, un ancho de 1,91 metros contando con los espejos retrovisores (sin ellos el ancho es de 1,64 metros) y una altura total de 1,47 metros. Las dimensiones son las mismas tanto en la versión de 3 puertas, como en la versión probada, la de 5 puertas.
Partiendo desde el frontal del coche, vemos que incorpora el logo de Škoda en el frontal del capó, sobre la parrilla de 19 listones situada entre los faros delanteros. Los reflectores, los intermitentes y las luces de circulación diurna resaltan sobre el fondo negro brillante. Por su parte, el parachoques delantero refleja líneas claras. A él se añaden la entrada de aire con aletas verticales, las líneas horizontales y las luces antiniebla, que son circulares y se muestran en el interior de dos marcos negros.
Nos dirigimos hacia la parte posterior del Citigo, y vemos que en el lateral se diferencia a la perfección las dos zonas básicas del mismo: aquella destinada al grupo propulsor y la que está reservada a los pasajeros. En el caso de la superficie correspondiente al motor, esta aparece corta y compacta para dar paso al espacio previsto para los ocupantes, que a la vista, da una sensación clara de amplitud.
Las grandes ventanas y sus contornos inferiores que sobresalen levemente, aportan al Citigo un gran dinamismo y, sobre todo, una gran visibilidad y luminosidad. Como opción, se puede equipar el sistema SunSet, que montaría un cristal más tintado para la parte trasera, dando un aspecto exterior más deportivo y refleja aún más la radiación térmica.
Llegados a la zona trasera, cabe resaltar que sigue los mismos parámetros de claridad y precisión del resto de la carrocería. El nuevo logotipo está ubicado en la zona central de la puerta trasera, que termina en la parte superior con un spoiler con la tercera luz de freno integrada. Los faros traseros, ubicados justo encima del parachoques, poseen un diseño funcional. Además, como no podía ser de otra manera, presentan un detalle característico de Škoda, las luces en forma de “C”.
Diseño Interior
Visto por fuera, nos da la sensación de ser un coche espacioso en el que se ha aprovechado cada centímetro disponible. Esta sensación queda totalmente confirmada cuando se accede al interior. Su marcada disposición horizontal hace que la primera impresión sea que nos encontramos ante un modelo especialmente ancho para su segmento, en cuyo interior se han situado los asientos con reposacabezas integrados.
El Citigo ofrece una gran espacio para el conductor y su acompañante, una virtud que no implica en modo alguno el sacrificio de la comodidad de la zona reservada a los pasajeros de los asientos traseros. En este punto debemos recordar que el Citigo está homologado con 4 plazas, por lo que no habrá problemas de anchura detrás.
Los controles del aire acondicionado se han situado en la parte central del salpicadero, junto con la radio y un buen número de funciones. Justo por encima está la salida de aire central, mientras que las laterales están ubicadas al lado de los pilares A.
El cuadro de instrumentos, que cuenta con un velocímetro circular con indicador de la temperatura (azul = el motor no ha alcanzado la temperatura de funcionamiento / rojo = temperatura demasiado alta), un display digital con las funciones de indicador de combustible, temperatura exterior, indicador de temperatura del líquido refrigerante, indicador de cinturones y sistema de recomendación de cambio de marchas. La iluminación del cuadro de mandos es blanca y verde. A ello se añaden los detalles prácticos, como los ganchos porta-objetos o la toma de corriente de 12V.
Por otra parte, la consola central ofrece un gran número de compartimentos, y en la guantera y puertas se encuentra un espacio de almacenamiento extra para redondear la vocación funcional de este vehículo.
La versión probada contaba con el acabado Elegance, el más alto de gama, que equipa interior Nano, llantas de aleación de 14”, faros antiniebla, retrovisores exteriores calefactables y ajustables eléctricamente. Como opción para los acabados Ambition y Elegance se ofrece el interior Quicksilver con salpicadero negro y una tapicería Colourstar exclusiva en la parte central de los asientos.
En cuanto al maletero, cuenta con 251 litros de capacidad, lo que le convierte en el más grande de su clase.
Precio automatico
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