El Subaru Outback es uno de esos coches que sigue el estándar tradicional y no se ha complicado la existencia apostando por tecnologías muy caras. Bajo el capó conserva su característica motorización bóxer sin ninguna electrificación y esto es algo que gustará a los amantes de la marca pero no tanto a los que buscan contener el gasto.
La última generación del Subaru Outback ha mejorado en todos los aspectos que tenía que hacerlo como eran la presentación interior o el silencio de marcha, y conserva las muchas virtudes de siempre (espacio, fiabilidad, calidad) que lo han convertido en un verdadero éxito comercial en países como Estados Unidos, Australia o Canadá.
He tenido la oportunidad de probar un Subaru Outback 2.5i Bóxer AWD Field y tengo que reconocer que me ha parecido un producto todavía muy válido que además me ha sorprendido con unos consumos mucho más contenidos de lo que pensaba. Es por tanto un automóvil muy recomendable todavía.
Diseño
Estéticamente el Subaru Outback nunca ha roto esquemas. Es un familiar con carrocería sobre-elevada que juega la baza del toque campero para conquistar al público que pone sus ojos en un todocamino pero quiere algo que a priori es más parecido a un turismo convencional. A pesar de su aspecto ojito que fuera del asfalto se desenvuelve muy bien.
Lo primero que podría llamar la atención del Subaru Outback es su tamaño. Aunque no es exageradamente grande se percibe algo aparatoso y esto es algo curioso pues a sus mandos resulta justo lo contrario, muy manejable e incluso práctico. Eso sí, para buscar aparcamiento en ciudades como Madrid podrás sudar.
La nueva entrega se vende en tres acabados que pueden modificar su aspecto exterior. La unidad testada corresponde al intermedio Field que incluye paragolpes en negro brillante, barras de techo modulares, detalles en color verde o las llantas de aleación en aluminio oscurecido.
Interior
Sin duda alguna el interior ha pegado un salto enorme en calidad y presentación. Lejos queda el típico salpicadero de diseño complicado con multitud de pantallas que te complican la existencia. Ahora cuenta con una enorme pantalla central de 11,6 pulgadas que en este caso no cuenta con navegación integrada, algo que yo al menos no entiendo.
Ese sistema multimedia tiene una calidad de sonido muy buena y además permite controlar multitud de detalles del vehículo. También se integran los mandos para el climatizador automático pero no me ha parecido que su manejo resulta complicado o pueda distraer tanto como ocurre en otros modelos. Aquí por lo menos conserva algunos botones físicos directos.
La sensación de calidad ha subido muchos enteros, apostando por materiales más vistosos y además de generoso acolchado. El tapizado en piel transmite buena sensación y todos los ajustes me han parecido muy cuidados. Solo se puede poner pega a los reflejos que genera la pantalla cuando incide directamente el sol.
La instrumentación es otro de los puntos que en Subaru han mantenido a la vieja usanza. En otros modelos ya cuentan con una digital configurable así que es de suponer que aquí se conserva la más veterana por una cuestión de costes y tal vez también para contentar a un tipo de cliente más tradicional.
Repartidos por el interior hay muchos huecos para dejar objetos y resultan muy útiles. Además la guantera principal es generosa y el gran hueco bajo el apoya-brazos resulta muy práctico. En las plazas traseras también hay algunos portaobjetos e incluso posa-latas, algo que gusta mucho en Estados Unidos.
Habitabilidad
El Subaru Outback me parece de los mejores coches para viajar en familia por la sensación de espacio que transmite. Ya sea en la fila delantera o en la posterior, los ocupantes tendrán una agradable sensación de mucho espacio, con el techo lejos y unos asientos muy confortables que ayudan a mejorar esa grata impresión.
En las plazas delanteras todo queda muy a mano. El diseño de la consola no molesta -salvo por el sol en algunos momentos del día- y la postura ideal al volante se logra en pocos segundos gracias a las múltiples regulaciones que posee tanto el propio volante como el asiento (con ajustes eléctricos).
En las plazas posteriores hay una sensación de espacio igualmente enorme sobre todo para las piernas. También la anchura me ha parecido generosa para que puedan viajar dos adultos y un niño sin problemas. Para estas plazas hay salidas de aire, tomas USB e incluso calefacción para los dos asientos laterales.
El volumen del maletero arranca en unos generosos 522 litros. Es verdad que hay coches más pequeños con mayor capacidad pero una vez se superan los 500 litros pocas pegas se pueden poner. Tiene quizás demasiado fondo y poca altura, resultando un poco incómodo si aquello que depositas termina cerca de los respaldos (cuesta llegar).
Equipamiento
Todos los Subaru Outback comercializados en la actualidad (junio 2022) están equipados con el motor 2.5 Bóxer de 169 CV en combinación con una transmisión automática de tipo CVT y con la tracción total a las cuatro ruedas. Los interesados pueden elegir los niveles de acabado Trek, Field y Touring.
La unidad probada corresponde al acabado Field. En seguridad ya cuenta con faros LED inteligentes, SmartBeam, alerta y asistente de carril, detector de fatiga, aviso pre-colisión, frenada automática en ciudad, sensores de estacionamiento, cámara posterior, lector de señales de tráfico, etc.
También de serie son el climatizador automático (solo dos zonas), tapizado en piel, asientos térmicos, acceso y arranque sin llave, barras de techo, portón automático, pedales de aluminio, llantas de aleación de 18 pulgadas, freno de mano eléctrico, sistema de sonido, Apple CarPlay, Android Auto, bluetooth, radio DAB, etc.
El precio recomendado del Subaru Outback 2.5 Bóxer 169 CV AWD Field se ha fijado en los 44.990 € aunque en estos momentos (junio 2022) hay una promoción que permite reducir el precio en 3.000 € si se financia con la marca. Te aconsejamos consultar en un concesionario para conocer otras posibles promociones.
Motor
La gama europea del Subaru Outback es muy limitada. Mientras que en otros países fuera de la Unión Europea es posible adquirirlo con varias alternativas mecánicas, en el viejo continente tan solo están disponibles con el bloque 2.5 Bóxer de 169 CV en combinación con la caja automática Lineatronic de tipo CVT.
Si el cliente lo desea es posible pedir en algunos mercados como el español o el italiano la adaptación a gas GLP para conseguir contener el coste de utilización. Es un elemento que se instala en un centro especializado y aunque cuenta con la garantía oficial de la marca, no cuenta con la terminación que podría tener si llegase de fabrica.
El motor de 2,5 litros tiene un andar algo perezoso y aunque hay 169 CV, para hacerlos «trotar» hay que emplearse a fondo. Si se aprovecha al máximo el potencial de motor el consumo sube exponencialmente y puede superar con facilidad los 10.0 L/100 si no se presta demasiada atención.
Lo que me ha gustado es que un uso coherente y normal a velocidades estabilizadas de autovía es posible dejar el consumo medio en cifras inferiores a los 7,5 L/100, un dato muy bueno para un coche de 2,5 litros de su tamaño y peso. Si combinas esto con algo de ciudad terminarás rondando los 8,0 L/100 en ciclo combinado.
La caja de cambios automática de tipo CVT tiene un funcionamiento bastante correcto. Ha mejorado respecto a las anteriores y además trabaja de una manera más silenciosa. Es verdad que no es tan rápida como un cambio automático con convertidor de par pero lejos queda esa sensación de estar «quemando motor» yendo despacio.
Version | 2.5 Bóxer |
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Cilindrada | 2.498cc |
Potencia | 169 CV |
Par | 252 Nm |
Peso | 1.721 kg |
Dimensiones Lar/An/Al mm | 4870 / 1875 / 1675 |
Volumen Maletero | 522 / 1.822 litros |
Aceleración 0 a 100 km/h | 10,2 seg |
Recuperación 80 a 120 km/h | 8,7 seg |
Velocidad máxima | 193 km/h |
Consumo homologado | 8,6 L/100 |
Emisiones CO2 por km | 193 gr |
Pegatina de la DGT | C |
Precio de partida | Desde 44.490 € (Field sin promociones a junio 2022) |
Comportamiento
Creo que la sexta generación del Subaru Outback mantiene intacta su esencia y no es otra que permitir a las familias viajar con total comodidad y de vez en cuando poder salir a disfrutar del campo o la nieve sin tener que estar tan pendiente de si te quedarás tirado o te rozará con alguna piedra.
Vale, no es un 4×4 al uso y si quieres disfrutar del campo en condiciones deberás comprar un Jeep Wrangler. Pero para los que buscan disfrutar de la nieve o se mueven por pistas en más o menos buen estado el Subaru Outback circula con unas garantías muy superiores a las de cualquier turismo convencional.
Y si regresas a la jungla urbana el Outback tiene otras muchas ventajas que además hasta te ahorrarán más de un disgusto; por ejemplo el japonés no se quedará encajado en los bordillos de las aceras al estacionar de frente. Al ser un turismo algo más alto también se puede controlar mejor lo que sucede alrededor y solo al buscar parking te darás cuenta que llevas un «mastodonte».
Me parece que el Subaru Outback es muy recomendable para familias a las que les encanta salir al campo y hacer actividades muy relacionadas con la montaña y el deporte. También para los que viajan con todo y necesitan mucho espacio de carga, y por supuesto para esas familias en las que todos los miembros son muy altos y necesitan espacio en todas las cotas.
Tanto la iluminación como los muchos sistemas de seguridad creo que están calibrados en general. Solo hay uno que puede ser un tanto molesto y es el que observa todo el tiempo al conductor y si detecta que aparta la vista del frente, pita. A veces se hace cansino y apetece desconectarlo por más que esté tratando de ayudar.
Si buscas un coche tradicional, espacioso, muy bien equipado y con una calidad de terminación muy buena creo que el Subaru Outback es una opción estupenda. Nada de tecnologías complicadas para su motor, dejando la hibridación para más adelante. Si quieres etiqueta ECO lo pides adaptado a GLP y de paso ahorrarás en el día a día.
Diseño/Estética
Calidad de acabado
Equipamiento de serie
Equipamiento opcional
Habitabilidad
Maletero
Motor/Refinamiento
Prestaciones
Consumos
Transmisión
Dirección
Frenos y neumáticos
Comportamiento
Calidad de rodadura
Relación valor-precio
7.8
Notable
El Subaru Outback mantiene su esencia en esta sexta generación apostando por un interior muy amplio, un maletero capaz, los robustos motores bóxer y el sistema de tracción total a las cuatro ruedas. Dado todo lo que ofrece, el precio es bastante adecuado.
Lo bueno
- Calidad de acabados
- Amplitud
- Tracción total de serie
Lo mejorable
- Consumos sensibles
- Prestaciones discretas
- Oferta limitada