Resumen de Prueba
Equipamiento
Diseño
Confort
Consumo
Motor
6.8
BIEN
Un vehículo difícil de clasificar por su versatilidad. Lo mismo puede cubrir funciones de trabajo, que familiares o de ocio, pero siempre con un objetivo claro: maximizar el espacio
Esta semana en Autonocion toca cambio de tercio y os traemos una de las compañeras de trabajo más solicitadas desde hace ya tres décadas: La Volkswagen Caddy. Se trata de un vehículo que debutó en el año 1980 y del que han pasado ya cinco generaciones (tres en Europa), cada una de las cuales deriva de un vehículo distinto, a excepción de las dos últimas, que lo hacen del Touran [Ver Prueba Volkswagen Touran]. La primera generación de la Caddy fue concebida para el mercado americano con el fin de competir con modelos como el Ford Courier, para lo cual se tomó como base el Golf Mk1. La siguiente versión, que sustituyó a la primera en el año 1996 compartió plataforma con el Skoda Felicia Fun, del que os hablamos hace algún tiempo. Coexistió con la tercera Caddy, que derivaba del Polo y el Ibiza (1998) y que tuvo su homólogo en SEAT bajo la denominación Inca. A partir del año 2005, las dos generaciones de Caddy que han aparecido en el mercado están basadas en el Volkswagen Touran.
Diseño Exterior
Lo primero que debemos tener en cuenta de la Caddy es que presenta dos estéticas bien diferenciadas en función de si nos decantamos por la versión comercial denominada Pro o la versión turismo, como la nuestra bautizada con el nombre Edition. La segunda cuestión que determinará el aspecto de nuestra furgoneta será que nos decantemos por el tamaño normal o el tamaño Maxi. En nuestro caso hemos probado la de tamaño normal. Y a partir de ahí podremos elegir un acabado u otro en función del equipamiento que deseemos y de nuestras necesidades.
En el frontal, la parrilla lleva integrada el logo VW, asimismo rediseñado, y forma una unidad con la parte inferior del parachoques. Dependiendo del modelo, el parachoques es de color negro o del color de la carrocería. Este componente integra los nuevos faros antiniebla opcionales que también se ofrecen con función de luz de giro.
Además, en la parte frontal superior se han rediseñado completamente el capó y el guardabarros. Ahora la antena se monta en los retrovisores para protegerla de daños.
Desde una perspectiva lateral, la Caddy viene marcada por las llantas de aleación ligera de 15 pulgadas (opcionalmente se pueden montar de 16 y 17) y una concisa línea lateral de diseño que transcurre desde los faros hasta las ventanas triangulares de las columnas del pilar A. Además, por primera vez, la Caddy se ofrece a partir de la versión Comfortline con barras en el techo de serie que realzan la silueta del modelo. Las puertas deslizantes en ambos laterales aportan funcionalidad además de encajar en el diseño lineal del vehículo.
En el portón trasero llaman la atención los distintivos y los faros traseros rediseñados, así como el nuevo diseño del logo VW. Asimismo, se ha perfeccionado el dispositivo de alumbrado del soporte de la placa de matrícula (la versión Comfortline como la nuestra lleva el color de la carrocería y una moldura cromada) y la manilla del portón trasero que se acciona eléctricamente, al igual que en el caso del Multivan [Ver Prueba Volkswagen Multivan].
En cuanto a la paleta de colores, la Caddy está disponible en un total de 15 colores diferentes. Muchos de ellos son nuevos. Además, dependiendo de la versión de la carrocería y del equipamiento resultan combinaciones específicas.
Las dimensiones del exterior del Caddy no se han modificado apenas. Sin la barra del techo todas las versiones de serie miden 1,833 metros de alto y 4,405 metros de largo; la anchura (sin retrovisores) es de 1,794 metros. El Caddy 4MOTION de tracción a las cuatro ruedas mide 1,846 metros de alto y el Caddy con BlueMotion Technology mide 1,806 metros. En el caso del Caddy Maxi más largo, la longitud total es de 4,875 metros y la altura de 1,841 metros. La altura del Caddy Maxi 4MOTION alcanza 1,862 metros.
Diseño Interior
Dos cuestiones diferentes nos importan especialmente a la hora de examinar el interior de la Caddy. Por un lado, la comodidad para el conductor y los ocupantes (5 como máximo en nuestro caso aunque como opción pueden añadirse dos plazas más); por otro, el más importante quizá, desde un punto de vista funcional, el espacio para la carga.
En la consola central llaman la atención los elementos de mando de los climatizadores manual y automático (Climatronic) de nuevo diseño en consonancia con el resto de la gama Volkswgen. Las versiones de equipamiento Trendline y Comfortline ofrecen una guantera refrigerada en combinación con el climatizador.
Las sensaciones al subirnos son como siempre muy similares a las que nos transmite cualquier otro VW, especialmente a la Multivan y sobretodo al Touran. La disposición de los mandos es muy cómoda y todos ellos se manejan de forma bastante intuitiva.
En lo relativo a los huecos portaobjetos –al margen del maletero-, la Caddy ofrece multitud de espacios portaobjetos diferentes, entre bandejas, redes portaobjetos en las puertas (delante para botellas de 1,5 litros), en la consola y el apoyabrazos centrales, en el tablero de instrumentos, en el suelo del vehículo de la segunda fila de asientos, debajo del asiento del conductor y en la zona del techo. Entre los asientos delanteros, dos portavasos forman parte del sistema portaobjetos y otro se encuentra al final de la consola central, delante de la segunda fila de asientos.
es de 1999