Diseño/Estética
Calidad de acabado
Equipamiento de serie
Equipamiento opcional
Habitabilidad
Maletero
Motor/Refinamiento
Prestaciones
Consumos
Transmisión
Dirección
Frenos y neumáticos
Comportamiento
Calidad de rodadura
Relación valor-precio
7.5
Notable
El nuevo Volkswagen Polo llega totalmente renovado, con una apariencia y un lenguaje de diseño moderno, mejores acabados interiores y sobre todo con mucho aplomo en carretera. Ahora más que nunca podemos decir que el hermano pequeño del Golf ha madurado, y lo ha hecho de la mejor forma que podía. Su única pega que hemos encontrado, su alto precio.
El Volkswagen Polo se hace mayor, y con la llegada de la última generación a mediados del 2017 hemos podido comprobar que ha dado un salto importante para actualizar su lenguaje de diseño y parecerse cada vez más a su hermano mayor, el superventas Volkswagen Golf. Aunque el Polo también puede presumir de las 14 millones de unidades vendidas en todo el mundo, convirtiéndose en uno de los compactos de más éxito en el mercado. Ahora llega al mercado una generación completamente nueva con un diseño exterior renovado al completo, un interior muy amplio y bien acabado, un salpicadero reestructurado para el mundo digital y eficientes motores MPI/TSI (gasolina), TGI (gas natural) y TDI (diésel).
En su presentación a nivel nacional celebrada en Pamplona ya nos sorprendió por sus buenas sensaciones al volante y su estética puesta al día, además de poder comprobar las bondades de su motor 1.6 TDI 59 kW / 80 CV. En esta ocasión, para realizar una prueba más a fondo hemos optado por la mecánica 1.0 TSI 70 kW / 95 CV con un cambio manual de 5 velocidades que cuenta de serie como el resto de la gama con el sistema Start-Stop y un modo de recuperación de la energía de frenado.
Y si hablamos de dimensiones podemos decir que el compacto ha crecido respecto a su predecesor, ahora el nuevo Polo suma 4.053 mm de largo, 1.751 mm de ancho y 1.461 mm de alto -vamos, para que os hagáis una idea, hablamos casi del tamaño de un Golf III-. La maduración por la que ha pasado el Volkswagen Polo ha sido más que satisfactoria, tanto en tecnología, como en su gama mecánica o en la calidad de sus acabados en el interior, donde encontramos un diseño limpio y refinado con plásticos que ofrecen un buen tacto en general.
En cuanto a los niveles de la acabado, encontramos hasta un total de tres que van desde el más básico denominado Edition, hasta el que hemos probado en esta ocasión conocido como Advance y el más completo y atractivo, Sport. En todos se incluyen los controles de tracción y estabilidad, ABS, EBD, TPMS, múltiples airbags, sistema de frenada automática en ciudad, aviso pre-colisión, asistente al arranque en cuestas, anclajes ISOFIX, etc. ¿El principal hándicap del nuevo Polo? El precio, y es que el compacto alemán puede presumir de ser uno de los más caros del segmento con un precio de salida de 14.740 euros.
Diseño exterior
El nuevo Volkswagen Polo ha experimentado una actualización notable en cuanto a diseño, y aunque no podemos hablar tampoco de una transformación radical sí que cambia notablemente respecto a su predecesor. Tal y como os enseñamos en una comparativa visual con ambos modelos se puede observar que la actual generación ha madurado muy bien y su frontal ha recibido un rediseño que lo acerca aún más al Volkswagen Golf. Dado que la distancia entre ejes, la longitud y la anchura del nuevo Polo han crecido pero que su altura sigue siendo prácticamente la misma, las proporciones resultantes son bastante más dinámicas.
Comenzando por el frontal descubrimos que las ópticas se han afilado para descubrirnos una mirada más poderosa y elegante, dejando atrás la imagen de su predecesor. La parrilla frontal también ha recibido una actualización y ahora queda dividida con una línea cromada que une ambas ópticas y cuenta con la lama superior en color de la carrocería. Los faros de serie son de iluminación halógena, pero de forma opcional y con un precio de 985 euros puede equipar faros FULL LED con un paquete que incluye luces traseras en tecnología LED rojo oscuro y regulación de alcance de las luces dinámica.
En el exterior disponemos de un total de 14 tonos de pintura diferentes que van desde 5 tonos de color uniformes hasta 9 metalizados/efecto perla que dotan a la carrocería de un toque más exclusivo y atractivo a la vista. En esta ocasión hemos optado por el Blanco Puro con un coste de 270,00 euros.
Ahora el frontal del Volkswagen Polo muestra mucho más aplomo gracias a su gran anchura (1.751 mm de ancho) y una altura rebajada. El logotipo de la marca toma el protagonismo en la parrilla que ahora descansa sobre un paragolpes delantero mucho más anguloso que da una mayor sensación de robustez. Además esta unidad equipaba el sistema de sensores de control de distancia de aparcamiento «Park Pilot» con un precio extra de 455 euros que son de gran ayuda para aparcar en sitios más ajustados. Los faros antiniebla con luz de giro (175 euros) completan la oferta y el aspecto del frontal.
En la vista lateral y comparándolo con su predecesor observamos como la superficie acristalada ha disminuido como consecuencia de su reducción en altura, además su línea de diseño es mucho más marcada y deportiva gracias a una serie de nervios que parten del frontal y recorren todo el lateral desembocando en la zaga. Es el único Volkswagen con un gráfico de ventanilla que acaba con un giro ascendente tanto delante como detrás. Este contorno, con la ventana integrada en el pilar C, es una versión refinada del diseño anterior. El pilar C presenta un diseño más refinado y adelantado, lo que crea una impresión de dinamismo.
En función de la versión, el nuevo Polo viene equipado con llantas de 14, 15 o 16 pulgadas. Todas ellas son nuevos diseños. Las llantas de 15, 16 y 17 pulgadas de Volkswagen también están disponibles como equipamiento opcional. Además, el Polo GTI equipa de serie llantas de 17 pulgadas y de 18 pulgadas como opcional. En esta ocasión, nuestra unidad probada equipaba un juego de llantas «Las Minas» de aleación ligera y 16 pulgadas con un sobrecoste de 300 euros y aunque no son de las más espectaculares que encontramos en el configurador, sí que aportan un toque más sutil y elegante al conjunto.
Ya en la zaga los cambios pueden no resultar tan notables como en otras partes del conjunto, las ópticas traseras si han sido actualizadas con unas formas más rectas y un mayor oscurecido. La sección de hombros presenta un mayor volumen y la visibilidad a través de la luneta trasera es bastante buena, sin embargo, podría mejorarse equipando la cámara de visión trasera «Rear View», aunque esta es opcional y supone un sobrecoste adicional de 270 euros sobre el ParkPilot. El paragolpes trasero también ha sido ligeramente actualizado y ahora sus formas son más prominentes con un pequeño difusor trasero de plástico negro.
Diseño interior
En el interior podemos notar un importante salto de calidad gracias a unos acabados que en términos generales son bastante buenos, incluso para las versiones más básicas. Es verdad que hay plásticos duros que desmerecen al conjunto, pero en términos generales y comparándolo con sus rivales el Volkswagen Polo destila sensación de calidad una vez nos ponemos al volante. Además habrás podido darte cuenta de que el salpicadero es exactamente igual que el de su hermano del mismo grupo, el Seat Ibiza, todo el salpicadero, sistema de infoentretenmiento y panel de instrumentos es compartido en ambos modelos.
Un diseño sutil y limpio, esa es la clave del interior del Polo donde cada elemento y cada botón está en el sitio ideal para no volvernos locos buscando nada. En este caso, el interior equipa los asientos de serie con un tapizado de tela y diseño «Slash», el techo de color negro a juego con el cuadro de mandos y la moqueta color antracita. Como puedes observar no se trata de uno de los habitáculos más espectaculares que ofrece en su configuración este compacto pero la calidad de los acabados está a un nivel muy bueno, exceptuando quizás el plástico duro utilizado en los paneles de las puertas o en la guantera frente al copiloto.
Los diseñadores del interior y de las interfaces han creado un nuevo y claro diseño interior. El Polo será el primer Volkswagen y el primer modelo del Grupo equipado con la nueva generación del sistema Digital Cockpit. Además, el Polo incorpora la última generación de sistemas de infotainment con pantallas desde 6,5 hasta 8,0 pulgadas.
En el salpicadero, sin embargo, el tacto de los materiales es blando y la moldura «Hierro Profundo mate metalizado» que recorre el mismo supone una buena solución para aumentar la sensación de calidad. Esta última forma parte del Paquete «Style» que equipa esta unidad, que por un precio muy razonable de 500 euros añade alfombrillas textiles delante y detrás, empuñadura del freno de mano en cuero, pomo de la palanca de cambio en cuero, sistema airbag de cabeza para pasajeros de la zona delantera y trasera del vehículo incluido airbags laterales delante, volante multifuncional de cuero, apoyos lumbares delante o asientos delanteros deportivos confort entre otros.
Un nuevo diseño de salpicadero está llegando a los modelos compactos de Volkswagen a través de la sexta generación del Polo. Los diseñadores de interiores han hecho cambios revolucionarios, más que evolucionarios, concentrándose principalmente en las pantallas y los controles digitalizados, así como en la conectividad. Puedes estar tranquilo si vas a adquirir un Polo en su versión más básica, prácticamente no te vas a dar cuenta de esto, sin embargo, si invertimos en un generoso equipamiento no tendremos que envidiar prácticamente nada a su hermano mayor, el Volkswagen Golf.
Si disponemos de un presupuesto para equipar al máximo nuestro Polo podemos decantarnos por un Sistema de navegación «Discover Media», con pantalla táctil de 20,3cm (8″) por 760 euros o un Sistema de sonido «beats» con 6 altavoces, subwoofer y amplificador digital con un sobrecoste de 480 euros para convertir el interior en una auténtica sala de conciertos.
Las plazas traseras son generosas, con la llegada de esta nueva generación hemos ganado en espacio para rodillas y cabeza gracias al aumento de distancia entre ejes. A pesar de esto, la plaza central permanece impracticable, aunque monta un tercer reposacabezas y cinturón de seguridad de tres puntos. Uno de los puntos más negativos de las plazas traseras es, sin duda, el túnel central tan pronunciado, lo cual se debe a que la plataforma contempla la posibilidad de ser empleada en vehículos con tracción a las cuatro ruedas. En conclusión, viajar hasta cuatro ocupantes no será ningún problema, pero en caso de tener que contar con un quinto mejor que sea para trayectos cortos.
Uno de los puntos en los que más ha mejorado el Volkswagen Polo es en maletero, pasando de 280 litros de capacidad hasta unos 351 litros en la actualidad, y si seguimos necesitando un extra de espacio podemos aumentarlo con la segunda fila de asientos tumbada y hasta 1.125 litros en total. Sin embargo, y como consecuencia de la posición de las ópticas traseras el acceso al maletero se ve reducido considerablemente, lo cual se ve compensando con el enorme espacio del que disponemos bajo el fondo ya que de serie se equipa un kit anti pinchazos y no una rueda de repuesto. También disponemos de diferentes ganchos para fijar bolsas o la posibilidad de equipar una red portaobjetos.
Motorización
El nuevo Volkswagen Polo dispone de una amplia gama mecánica para todos los gustos, un total de ocho eficientes motores de gasolina, diésel y gas natural. Por un lado, la gama de motores de gasolina se extiende desde el 1.0 MPI de 65 CV hasta el 1.0 TSI de 115 CV y los motores diésel (TDI) del Polo llegan al mercado con potencias de 59 KW / 80 CV y 70 kW / 95 CV. El Polo está equipado, por primera vez, con un nuevo motor de gas natural: el 1.0 TGI de 66 kW / 90 CV. Todas las mecánicas están asociadas a un cambio manual pero a partir de una potencia de 95 CV se puede combinar -por lo general- con un cambio de doble embrague (DSG). Nuevamente, la versión GTI es la estrella que completa la oferta de la familia Polo. El TSI del Polo GTI desarrolla una potencia de 147 kW / 200 CV.
En esta ocasión optamos por el motor 1.0 TSi 70 kW que desarrolla una potencia de 95 CV a 5.000-5.500 rpm y un par de 175 Nm entre 2.000 y 3.500 Nm. Las cifras con este mecánica no son nada despreciables, con una aceleración de 0-100 km/h en 10,8 segundos y una velocidad máxima de 187 kilómetros por hora. Estamos ante una de las mecánicas más equilibradas que en general ofrece una buena relación entre potencia y consumos para aquellos que realicen un uso habitual de su vehículo y por ciudad principalmente. Quizás una de las pegas que podemos poner sea el cambio, y es que según mi opinión, el cambio DSG de 7 velocidades es una opción mucho más acertada si vamos a realizar un uso del nuevo Polo en ciudad.
El cambio manual de 5 velocidades nos obliga a estirar demasiado las marchas si queremos disponer de algo de empuje en momentos puntuales, como una incorporación en autopista o un adelantamiento más puntual. Como consecuencia los consumos se ven directamente afectados y notamos como enseguida comienzan a subir si nos pasamos con el acelerador. La marca homologa unos consumos de , aunque se alejan sensiblemente de lo que conseguimos a lo largo de nuestra prueba rondando siempre alrededor de los 6,5 l/100 km en ciudad. El deposito tiene una capacidad de 40 litros.
La rumorosidad y vibraciones del motor se han cuidado especialmente, se nota mucho más refinamiento que en la anterior generación del Polo y es que la marca insiste en que han trabajado mucho en este aspecto para mejorar las sensaciones al volante. Incluso arrancando el motor en frío no notamos un ruido especialmente desagradable y pasa totalmente desapercibido durante conducción, también en parte gracias a su buen aislamiento del interior especialmente notable en carretera.
Ficha técnica
Version | 1.0 TSI 70 kW - 3 cilindros en línea |
---|---|
Cilindrada | 999 cm³ |
Potencia | 95 CV (70 kW) @ 5.000-5.500 rpm |
Par | 175 Nm @ 2.000 - 3.500 rpm |
Peso | 1.145 kg |
Dimensiones Lar/An/Al mm | 4.053 / 1.751 / 1.461 mm |
Volumen Maletero | 351 (1.125) litros |
Aceleración 0 a 100 km/h | 10,8 segundos |
Recuperación 80 a 120 km/h | 11 segundos |
Velocidad máxima | 187 km/h |
Consumo homologado | 5,5 / 3,8 / 4,4 l/100 km (urb. /extraurb. / comb.) |
Emisiones CO2 por km | 101 g/km de CO₂ (Euro 6) |
Precio de partida | 17.035 euros (esta mecánica y nivel de acabado) |
Comportamiento
Es posible que en el apartado de comportamiento es donde más nos demos cuenta de que el Volkswagen Polo ahora es más coche que nunca, y con ello me refiero a que ha ganado en aplomo y en calidad de rodadura para situarse muy por encima de alguno de sus rivales más directos. Ahora la distancia entre ejes y el ancho de rodadura tanto delante como detrás ha aumentado -en la parte delantera 62mm y 49mm en la trasera- lo que se traduce en una mayor estabilidad y sensación de control al volante. El hábitat natural del utilitario alemán es, sin duda, la ciudad, donde a pesar de haber crecido ligeramente se sigue moviendo como pez en el agua para sentirnos los auténticos dueños de la urbe.
Como ya he comentado anteriormente, los que busquen un utilitario para el día a día sin una demanda especial de mucha potencia tendrán en esta mecánica su mejor aliado. Y es que el motor 1.0 TSi 70 kW ha sido pensado para los más urbanitas, aunque no hay duda de que nos permitirá realizar alguna escapada en ocasiones más puntuales. Los consumos en ciudad con este motor rondará en torno a los 6-7 l/100 km, dado que en muchas ocasiones es necesario estirar demasiado las revoluciones para obtener el nivel de potencia deseado que llega en un rango de vueltas alto (5.000-5.500 rpm).
El Volkswagen Polo 2017 ha ganado en aplomo y calidad de rodadura, algo que lo convierte en uno de los mejores de su segmento en este aspecto. Aunque por ejemplo es menos dinámico que un Seat Ibiza y busca más el confort sin emociones al volante.
En carretera destacamos especialmente la calidad de rodadura y el buen aislamiento del nuevo Polo, aunque esta mecánica asociada a una caja manual de 5 velocidades se queda demasiado corta para rodar a velocidades normales en autopista. Como he mencionado anteriormente, circulando a una velocidad de 120 kilómetros por hora el cuentarrevoluciones asciende hasta los 2.750 rpm y echamos en falta una marcha más. Aún así el nivel de confort al volante siempre es alto, gracias al buen hacer de su suspensión, de la que en la parte delantera se encargan unos resortes helicoidales con amortiguadores de gas presurizado telescópicos y detrás equipa un eje semirrígido con estabilizador integrado.
El cambio manual de 5 velocidades tiene como principal pega unos desarrollos demasiado largos, lo que produce que muchas veces la segunda marcha llegue a ser demasiado larga y la primera demasiado corta. Por ello, tenemos la sensación de tener que cambiar de marcha de forma constante, restando gran sensación de confort al volante. Un solución sería equipar el cambio automático DSG de 7 velocidades que es perfecto para ciudad, ganando en comodidad y practicidad.
Una vez nos adentramos en carreteras más reviradas y con curvas podemos experimentar las bondades de su plataforma modular transversal (MQB A0) que ofrece siempre unas reacciones con gran aplomo y suavidad. En las ruedas traseras monta frenos de tambor pero no hemos experimentado un mal tacto en ningún momento y trabajan bien para frenar los 1.105 kilos que pesa el conjunto. Y para aquellos que busquen emociones al volante, el nuevo Polo se puede equipar opcionalmente con un chasis deportivo o con el chasis “Sport Select”, equipado con amortiguadores activos. Además, todos los Polo van equipados con dirección asistida electromecánica y control electrónico de estabilidad ESC.
Equipamiento y precio
El nuevo Volkswagen Polo 2017 ofrece tres versiones de equipamiento: “Edition”, “Advance” y “Sport”. También está disponible el acabado GTI que parte de los 26.330 euros. El equipamiento se puede completar con los paquetes “R-Line”, “Black” y “Style”. Comenzando por el nivel de acabado más básico denominado Edition ofrece numerosos detalles como la luz de conducción diurna LED de serie con función “Coming Home” y “Leaving Home”, un limitador de velocidad y el sistema de vigilancia “Front Assist” con asistente de frenada de emergencia en ciudad y sistema de detección de peatones.
Subiendo un peldaño más accedemos al nivel de acabado bautizado como Advance que ofrece detalles adicionales como el sistema de infotainment “Composition Colour”, un climatizador (“climatic”), el “sistema de detección del cansancio”, reposabrazos central, una elegante tapicería de los asientos aterciopelada, elevalunas con interruptores confort en los asientos delante y detrás, así como un volante multifunción. También de serie: llantas de 15 pulgadas.
Nuestra unidad que dispone de este nivel de acabado intermedio además añade la pintura Blanco Puro por 270 euros, un juego de llantas «Las Minas» – 4 llantas de aleación lig. 6,5J x 16 por 300 euros, faros antiniebla con luz de giro con un coste de 175 euros y el Paquete Style por 500 euros más.
En tercer lugar contamos con una versión más atractiva y con mayor equipamiento denominada Sport que incluye detalles adicionales como el control de la distancia de aparcamiento (PDC), una iluminación ambiental LED (puertas delanteras y cuadro de instrumentos), un volante multifunción en combinación con el pomo de la palanca de cambios y la palanca del freno de mano de cuero (“paquete pequeño de cuero”), así como llantas de aleación ligera de 15 pulgadas (“Salou”).
Motor | Edition | Advance | Sport |
1.0 MPI 65 CV | 14.740 | – | – |
1.0 MPI 75 CV | 15.300 | 16.050 | – |
1.0 TSI 95 CV | – | 17.030 | 17.790 |
1.0 TSI 95 CV 7DSG | – | 18.700 | 19.460 |
1.6 TDI 80 CV | – | 19.325 | |
1.6 TDI 95 CV | – | 19.735 | 20.485 |
- Ofrece mecánicas y acabados para todos los gustos y bolsillos.
- Un aspecto renovado que hace que el Volkswagen Golf ya no quede tan lejano en diseño.
- La calidad de rodadura y su buen aplomo en carretera.
- Los materiales de su interior y acabados que ofrecen un buen tacto y aspecto.
- Un buen equipamiento de serie desde los niveles de acabado más básicos.
- Clara apuesta por la seguridad, la conectividad y el confort
- La mecánica TSI 95 CV es ideal para los más urbanitas.
- El principal hándicap es su precio, bastante superior respecto a sus oponentes directos
- Algunos acabados o plásticos duros desmerecen al conjunto y su interior, especialmente en las puertas o ventanillas.
- No disponemos de la opción de equipar un cambio manual de 6 velocidades, el de cinco queda demasiado justo en muchas ocasiones.
- Frenos de tambor traseros.
- Unos asientos demasiado blandos, que quizás podrían ofrecer un mejor agarre.
- La mecánica probada queda algo justa en su utilización por carretera, donde echamos de menos algo más de potencia y debemos revolucionar demasiado el motor para obtener algo de empuje.
Galería de imágenes
En la comparación de precios de los modelos te faltan los modelos de 115CV y de 6 velocidades
El vehiculo tiene unas terminaciones que dejan mucho que desear.
El techo esta mal terminado, los plasticos suenan, y los faros salen manchas como si el plastico se quemase a los pocos meses. No merece la pena.
Hola.
He probado uno con la misma motorización, y la verdad no te equivocas nada en ninguno de los temas.
Para mi la peor nota se la daría al motor, notándose exageradamente que le perdonas los defectos descarados que tiene. Aunque es bueno, y tratándolo con suavidad tiene unos consumos de diésel, se queda muy corto cuando solicitamos potencia. Con AC, y dos personas (imagínate con dos más atrás) hay que revolucionarlo por encima de las 4K rpm. para que saque algo de nervio, notándose la falta de cilindrada y par en las recuperaciones.
Para mi la nota del motor le quedaría en un 5, ya que los 95 caballos se notan cuando ya saliste del apuro.
Para el resto es un utilitario fabuloso, cómodo, agradable, noble.
Una buena opción para el día a día, eso sí, ojo, los 95 cv si los necesitas ya sabes, no será fácil ensillarlos.