Estamos acostumbrados a ver pruebas de choque de la gran mayoría de turismos que hay en el mercado gracias a Euro NCAP. Incluso algún fabricante de superdeportivos como Koenigsegg nos sorprende de vez en cuando con pintorescos test de choque de sus vehículos, pero si hay algo poco habitual de ver son los crash test de autocaravanas.
Realmente no es nada descabellado someter a pruebas de choque este tipo de vehículos, pues recordemos que pueden circular a 120 km/h y no están exentos de sufrir un accidente, por mucho aislamiento térmico, muebles y sistemas necesarios para la vida a bordo que se le hayan añadido.
Eso mismo han pensado los chicos de la Trafikverket, la administración de transportes de Suecia, ante la preocupación por un notable incremento de accidentes en las que se han visto implicadas estas cómodas casas sobre ruedas. Los resultados son impactantes de ver, pues la seguridad de estos vehículos es para echarse las manos a la cabeza.
En la prueba, las autocaravanas impactan de frente contra una barrera a 64 km/h. Debido a su peso, sería como un choque de un turismo a 90 km/h.
Las autocaravanas no están sujetas a los mismos estándares rigurosos de seguridad contra choques que los automóviles de pasajeros. Es algo que, por desgracia, ni se plantea, a pesar de que estamos viviendo un notorio crecimiento en las ventas de estos vehículos recreacionales, con nada menos que un 50% de aumento desde 2014.
Más concretamente, Trafikverket seleccionó dos tipos de vehículos recreativos. Por una parte, una autocaravana con diseño semi-integrado, es decir, un chasis y una cabina procedentes del fabricante del vehículo (una Fiat Ducato en este caso) y un espacio habitable de un fabricante de caravanas. De otra parte, una autocaravana completamente integrada, desarrollada por un fabricante especializado.
En ambos casos, los resultados fueron pésimos. El conductor de la autocaravana semi-integrada no sobreviviría a la colisión, mientras que, en el diseño integrado, el cuerpo se separa del chasis y no existe siquiera una estructura de choque, pues los paneles están construidos en madera.
Visto lo visto, Trafikverket tiene la intención de presionar a los fabricantes de autocaravanas para que creen productos más seguros, y la organización está negociando con Euro NCAP para que las pruebas de choque de autocaravanas sean más habituales. Además, se recomienda siempre que los propietarios de este tipo de vehículos no dejen nunca objetos sueltos en el vehículo mientras conducen, porque en caso de choque serán como proyectiles.
Gobiernos corruptos que permiten a estas marcas de vehículos vender la propia corrupcion