Tras la desafortunada pérdida de Paul Walker el pasado fin de semana, la entrega de Fast and Furious 7 lógicamente se retrasará.
Aunque suene duro, tras el dolor que han experimentado los familiares, los amigos y los compañeros de trabajo, hay que mirar por el bolsillo y los negocios.
El desafortunado suceso ha llegado en un momento delicado ya que Walker estaba en las últimas semanas de producción de «Fast and Furious 7» y aún tenía algunas escenas clave que estaban programadas para filmarse esa misma semana en Atlanta, Georgia.
Los ejecutivos de Universal Studios y el director de la película, James Wan, actualmente están investigando y trabajando en la manera más adecuada de manejar esta situación y sobre todo, que va a pasar con el personaje Brian O’Connor.
Paul Walker había estado filmando la película desde septiembre y empezar de “0” con Brian O’Connor costará millones de dólares y horas de trabajo por lo que los creadores deberán de gestionar correctamente la desaparición del actor.
Walker no sólo era un formidable actor, sino que además, su papel en la saga le venía como anillo al dedo ya que como amante del automovilismo, la temática de persecuciones de coches a alta velocidad, acrobacias y explosiones le encantaba.
Matar Brian O’Connor en la película sería lo más simple, sin embargo, también sería una falta de sensibilidad para muchos de los fans de Walker, familiares y amigos, así que un final mucho más digno para tan apreciado actor deberá ser inventado rápidamente sin modificar mucho la trama de la película.
La muerte queda descartada… ¿una situación de la cual huir como le pasó con Lety?, ¿una misteriosa desaparición?…
Pues lo q a pasado en la realidad.