Como ya sabrás, nos es la primera vez que hablamos de los catalizadores. Bien sea por el robo catalizadores, por su costoso reemplazo o por su función medioambiental, los catalizadores siempre han estado en nuestros pensamientos.
Hoy os vamos a hablar sobre el reciclaje del catalizador, un proceso que nos revelará el por qué son tan valiosos y por qué tan necesarios.
Si posees un automóvil gasolina, has de saber que tienes trozos de metales sorprendentemente valiosos en tu sistema de escape. Los convertidores catalíticos cumplen una función importante y tienen algunos componentes muy preciados que pueden valer mucho dinero, de hecho, por eso son tan caros.
Como norma general, el dinero que suelen darte en los desguaces por tu coche ya amortizado, viene dado por elementos como el catalizador y es que aunque elementos de chapa, interiores, faros y demás, se terminan vendiendo, el reciclaje del catalizador es muy rentable.
Los especialistas en reciclaje de metales se pirran por los catalizadores y lo mejor es que te contemos el motivo.
¿Qué es un catalizador?
Los catalizadores son parte del sistema de escape de los vehículos modernos. Estos ayudan a reducir el efecto ambiental negativo de los gases producidos por los motores de combustión interna. El conjunto de catalizadores convierte los gases peligrosos producidos por los automóviles en sustancias menos nocivas.
Por ejemplo, el monóxido de carbono y los hidrocarburos se convierten en dióxido de carbono y agua. Los metales preciosos, es decir, el platino, se utilizan en los catalizadores y fomentan las reacciones cuando fluyen los gases de escape.
Aunque están pensados para durar toda la vida útil del coche, es posible que sea necesario reemplazarlos antes si se producen fallos en las emisiones. La avería de un catalizador y su reemplazo es extremadamente costosa y es que los catalizadores contienen una gran variedad de metales preciosos como cobre, níquel, cerio, hierro, manganeso, rodio, platino y paladio.
Los tres últimos metales mencionados son especialmente valiosos y utilizados para la joyería, la electrónica y la industria.
Exteriormente, no es más que un cilindro de acero inoxidable, pero en su interior cuenta con materiales muy interesantes. En primer lugar y, a causa de las elevadas temperaturas que alcanza, el catalizador está recubierto con una pantalla antitérmica de metal que evita que el calor dañe nuestro vehículo. Éste alberga una matriz cerámica cilíndrica u ovalada que adopta forma de panal –alrededor de 70 celdas por centímetro cuadrado- y está impregnada de una resina en la que encontramos algunos elementos nobles metálicos, tales como Paladio (Pd), Platino (Pt) y Rodio (Rh).
Su función es iniciar y acelerar las reacciones químicas entre las diversas sustancias que llegan al catalizador, con las cuales entran en contacto. Pero es importante aclarar que los propios metales nobles no participan en estas reacciones y, mientras los dos primeros permiten la función de oxidación, el Rodio interviene en la reducción de los gases nocivos.
¿Por qué se recicla el catalizador de un coche?
El reciclaje de los catalizadores debe realizarse siempre que sea posible y es que extraer las materias primas que se usan para crearlos, es extremadamente costoso y perjudicial para el medio ambiente -me refiero a la propia extracción en yacimientos-.
Una vez extraído, el mineral de platino debe tratarse con productos químicos para lograr el metal. Esto no solo contamina el medio ambiente, sino que también es negativo para los mineros, que por lo general reciben un salario muy reducido y se ven obligados a trabajar en condiciones difíciles.
En segundo lugar, se recicla para obtener dinero a cambio de los catalizadores cuando lo vende a comerciantes de chatarra o empresas de reciclaje. Debido a sus valiosos componentes, es común que los convertidores catalíticos se compren y se vendan con facilidad.
¿Cómo se reciclan un catalizador?
Como ocurre con la mayoría de los materiales, una vez que se aceptan en una instalación de recuperación de materiales, el convertidor catalítico se clasifica y los componentes reciclables se separan. Una vez separados, los metales se pueden transferir a instalaciones de reciclaje para su reutilización.
Los componentes metálicos existente dentro del catalizador son difíciles de quitar y pueden ser peligrosos.
Aunque los convertidores catalíticos no representan una amenaza, una vez abiertos, los ladrillos cerámicos, cuando se exponen al aire se consideran desechos peligrosos. Por lo tanto, es fundamental dejarlo en manos de los expertos que tienen la experiencia y el equipo de seguridad pertinente.
La forma más segura y eficaz de reciclar los convertidores catalíticos es llevarlos a un depósito de chatarra / proveedor de reciclaje de metales.