La última vez que os hablamos de la alianza existente entre Renault y Caterham, las cosas no iban nada bien, de hecho habían surgido tensiones creativas entre ambas marcas que habían retrasado el lanzamiento de los productos.
La relación entre las marcas se inició en 2012 y se basaba en un proyecto para el desarrollo conjunto de un coche deportivo que se ha retrasado por la decisión de la marca del rombo de revisar el diseño inicial ya que por lo visto no ha terminado de convencer a un grupo de clientes a los que la marca ha mostrado en primicia el diseño.
Caterham no estaba muy emocionada con la decisión, ya que esto significa que su propia versión del coche sufrirá algunas modificaciones y no podrá ser lanzada hasta que los galos terminen con sus retoques.
Ahora, según Autocar, Renault y el proyecto de su empresa conjunta con Caterham puede cancelarse por completo y no ver la luz en 2016 tal y como estaba planeado ya que las marcas ya no tienen claro si quiere seguir compartiendo la misma arquitectura y el sistema de propulsión.
Aunque ni Renault ni Caterham han confirmado o comentado nada sobre las afirmaciones de Autocar, las tensiones entre las marcas han aumentado desde que el proyecto se ha retrasado. [Ver más detalles de la colaboración entre las marcas]
Aunque no se sabe mucho sobre el fruto material de la relación, sabemos que ambos estarán por debajo de los 1.100 kg y sus potencias oscilarían entre los 250 cv del Alpine y los 300 cv del Caterham.
La posible ruptura entre ambas marcas perjudicaría gravemente a la firma británica que pretende en los próximos años lanzar una gama completa de productos. [Así es la expansión que la marca quiere llevar a cabo en los próximos años.]