Renting sí o renting no, esa es la cuestión

El renting de coches se ha popularizado considerablemente en el último año, sin embargo, ¿qué es lo que hace del renting algo tan popular? En esta ocasión, exploramos cómo funciona el renting para coches, los motivos por los que está pegando tan fuerte y sus principales ventajas tanto para particulares como para empresas.

¿En qué consiste el renting de coches?

El renting, tal y como implica su traducción al español, se trataría de un alquiler de vehículos.

Más concretamente, el renting de coches consiste en alquilar un vehículo en un determinado plazo de tiempo desde un mes hasta varios años.. En este sentido, el propietario del vehículo (arrendador) cede el uso y disfrute de su coche en propiedad a un particular o empresa (arrendatario) a cambio de una cuota fija mensual.

Comprendiendo la popularidad del renting de coches

A pesar de que a priori puede resultar diferente la idea de conducir un coche que no es el propio, el renting resulta ser la alternativa ideal para aquellas personas que quieren despreocuparse de  los gastos imprevistos por las averías o el mantenimiento de un vehículo, mientras que, en el caso de las empresas además, supone una forma fácil de ajustar la flota de vehículos a su actividad, en la que se ahorra en gastos asociados a seguros, grúas y vehículos de sustitución, entre otros servicios

Por supuesto, la selección del arrendador resulta decisiva para que se puedan disfrutar al máximo las ventajas del renting; por eso, es recomendable optar por una empresa especializada en renting.

Alquilar a una empresa de renting por lo general incluye servicios adicionales que van más allá del alquiler. Entre estos servicios se pueden destacar el mantenimiento, el seguro del vehículo, el cambio de neumáticos, la reparación de averías, la disponibilidad de vehículos de sustitución, etc. Por lo tanto, es posible afirmar que la cuota mensual de renting resulta económica dada la cantidad de servicios que incluye. Además, hay operadores especializados en la modalidad de renting flexible, y gracias a una amplia disponibilidad de vehículos para cubrir la demanda de los clientes, la empresa de renting puede ofrecer a los arrendatarios la opción de renting flexible, una opción de alquiler tanto, que no exige una permanencia del contrato, con el que se puede cancelar sin penalizaciones, siempre que el renting se realice a partir de un mes. Esta opción es la ideal tanto para particulares como para empresas, que no quieran comprometerse a un plazo al contratar su vehículo y que precisen de una buena cobertura de servicios.

Cabe destacar con respecto a lo anterior, que los servicios que ofrecen no son los mismos por parte de todas las empresas, por lo que siempre es buena idea explorar las distintas opciones de contratación existentes. Por ejemplo, aunque las empresas de renting ofrecen cierta flexibilidad, actualmente la que se considera más flexible de todas es Northgate, ya que no penaliza que se devuelva el vehículo antes de cumplir el período de contratación, ofrece como disponibilidad inmediata de vehículos y vehículo de sustitución en caso de necesitarlo, e incluye el paso por talleres y servicios en carretera dentro de la cuota.

Al contar con la cobertura de servicios más amplia del mercado es considerada dentro de su ámbito como líder del sector, de ahí que se haya especializado en ofrecer soluciones de movilidad adaptadas a las necesidades de las empresas y profesionales que apuestan por sus servicios, y ahora también para ofrecen su renting flexible a particulares. En Northgate podrás encontrar la mayor oferta de coches de renting, por lo que, si te interesa alquilar un vehículo de forma personal o para tu empresa, te merece la pena solicitar presupuesto.

Entonces, ¿cuáles son las ventajas del renting?

Se opte por la opción que se opte, el renting destaca por las reportar los siguientes beneficios:

• Pone a disposición del arrendatario una gran variedad de coches con distintos precios que se adaptan perfectamente a su presupuesto.
• Se paga el importe fijo, sin ningún tipo de sorpresa ni extra.
• Como el seguro lo pone el arrendador, no hay gastos derivados ni se tiene que pagar ningún tipo de impuesto.
• En el caso de las empresas, cuando el coche está relacionado con su actividad empresarial, es posible deducir totalmente la cuota del renting; lo mismo pasaría en el caso de profesionales y autónomos, que en caso de estar usando el vehículo con fines laborales pueden deducir la cuota en el Régimen de Estimación Directa del IRPF.
• En el caso del renting flexible, se puede finalizar el contrato cuando no se necesite el vehículo o cambiarlo por otro que se ajuste mejor a lo que se necesite en cada momento.

Con todo esto, es posible comprobar cómo el renting supone una opción interesante  y deseable tanto para particulares como para empresas. Gracias a la cantidad de servicios que incluye, y la flexibilidad que proporciona , resulta una opción útil que presumiblemente continuará popularizándose frente a la compra para uso particular.