Tal y como os contamos el 8 de septiembre de 2019, un buque de carga especializado en el transporte de coches nuevos llamado MV Golden Ray sufrió una pérdida de estabilidad que hizo que el barco literalmente volcara y se asentara sobre uno de sus costados.
Las 71.000 toneladas del barco sufrieron el incidente a tan solo 23 minutos del puerto de Brunswick en Georgia. Tras la zozobra y el rescate de sus 23 tripulantes -todos ellos sobrevivieron al espectacular incidente- arrancó una costosa y larga operación de rescate que tenía como finalidad recuperar parte de la valiosa carga así como el buque.
El barco tenía 4200 unidades procedentes de las factorías mexicanas de Chevrolet, KIA y Hyundai y tras más de un año de intenso rescate, se ha podido cortar el casco de 200 metros de largo.
El plan es dividir el casco en 8 secciones que serán transportadas en barcazas. Hoy os mostramos las primeras imágenes de las secciones ya cortadas para que podáis ver las dimensiones económicas de esta tragedia marítima que afortunadamente solo tiene que cuantificarse de forma económica.
El buque elevador VB-10000 transportará cada sección fuera del agua, permitiendo que las barcazas se coloquen debajo. Desde aquí, algunas de las piezas viajarán cientos de kilómetros hasta Louisiana, donde se colocarán en un dique seco mientras se retiran los automóviles.
Se necesitaron tres semanas para cortar la sección delantera del casco del MV Golden Ray, tiempo durante el cual se vertieron escombros, incluidas piezas de automóviles que tras verías mareas, llegaron a la costa. Las playas cercanas no están cerradas, pero el Distrito de Salud Local advirtió a los pescadores recreativos sobre la posible presencia de contaminación en las aguas. Aunque se extrajeron miles de toneladas de combustible del MV Golden Ray, todavía queda algo entre los restos del naufragio.
Vía | CT y News4JAX