La presentación anual de resultados de Audi ha dado a conocer una vez más los planes de la compañía para este 2020. Junto al recién presentado Audi A3, la firma de los cuatro aros afirma que veremos hasta 20 nuevos modelos este año, entre los que no faltarán un restyling del Audi Q2 y un Audi Q5 Sportback.
La compañía ha sido tímida con los detalles de este último modelo, pero cabe esperar que su llegada tenga lugar de la mano del facelift del Audi Q5, programado para este año. Como su propio nombre indica, el Audi Q5 Sportback será un coupé crossover en la misma línea que el e-tron Sportback y competirá con los BMW X4 y Mercedes-Benz GLC Coupe.
Audi también nos ha adelantado que continuará de forma sistemática con el proceso de electrificación. De aquí a finales de año, la marca de los cuatro aros lanzará al mercado cinco modelos totalmente eléctricos y aumentará su oferta de vehículos híbridos enchufables PHEV a un total de 12 modelos.
Para entonces, más de la mitad de la familia de vehículos que componen la gama Audi contará con una versión PHEV. De esta forma, el Grupo Audi se prepara para una competencia cada vez más intensa y para una regulación de las emisiones de CO2 cada vez más estricta tanto a nivel nacional como europeo.
Si bien el jefe de finanzas de Audi, el Dr. Arno Antlitz, reconoce que los vehículos eléctricos no son tan rentables como sus homólogos de combustión, asegura que Audi tiene intención de ponerle solución a este problema. Para ello, focalizarán sus esfuerzos en tres aspectos concretos que aumentarán la rentabilidad.
En primer lugar, la compañía está desarrollando una «cartera eléctrica atractiva». Audi cree que los clientes se sentirán atraídos por los nuevos modelos y eso ayudará a fortalecer su posición de precios futura. Por otra parte, tratarán de reducir la complejidad siempre que resulte posible, eliminando modelos, versiones y opciones de personalización.
Con arreglo a esto último, el miembro de la junta dijo que «estoy firmemente convencido de que las características únicas de los vehículos eléctricos nos permitirán satisfacer las expectativas de los clientes con menos modelos«. Por último, la compañía habla de su relación con Volkswagen y Porsche para reducir costes.
Audi está trabajando con Porsche en la plataforma PPE para vehículos eléctricos premium, mientras que los vehículos eléctricos compactos y de clase media se asentarán sobre la plataforma MEB de Volkswagen. La compañía afirma que los modelos basados en la MEB brindarán a los clientes un «producto superior, tradicionalmente identificado con el nombre de Audi, a un precio atractivo«.
Para 2025, Audi prevé tener alrededor de 30 modelos electrificados, entre los que figuran aproximadamente 20 vehículos eléctricos. En ese momento, casi el 40 por ciento de todos los vehículos producidos por Audi serán eléctricos o híbridos enchufables.
Audi también ha hecho referencia a cómo la economía y las previsiones han cambiado de forma significativa en el contexto de la epidemia del coronavirus, que está teniendo un impacto masivo en las cadenas de suministro, en la producción de los vehículos y en su comercialización, asegurando que será difícil lograr los excelentes resultados de 2019.
Las entregas de vehículos Audi crecieron el pasado año, especialmente durante el cuarto trimestre. En un mercado global a la baja, la marca de los cuatro aros terminó el año con un aumento en las entregas del 1,8%, alcanzando la cifra de 1.845.573 vehículos (2018: 1.812.485).
En este contexto, la facturación del Grupo Audi superó la cifra del año anterior, alcanzando los 55.680 millones de euros (2018: 53.617 millones de euros). Gracias a su fuerte mix de productos, la marca Audi aumentó su facturación hasta los 39.467 millones de euros (2018: 37.259 millones de euros).
El beneficio operativo ascendió a 4.509 millones de euros (2018: 3.529 millones de euros). El retorno operativo sobre las ventas fue del 8,1% (2018: 6,6%), impulsado por la mejora en el mix de productos de Audi, el aumento del beneficio operativo de Lamborghini y las exitosas medidas aplicadas dentro del Plan de Transformación de Audi, que totalizan 2.500 millones de euros.
Se espera que el programa de mejora de los beneficios puesto en marcha en 2018 libere un total de 15.000 millones de euros para futuras inversiones hasta 2022. Desde el inicio del Plan de Transformación de Audi ya se ha generado un acumulado de 4.400 millones de euros, y se han identificado medidas para alcanzar el 80% del objetivo global previsto.
El resultado financiero ascendió a 731 millones de euros (2018: 831 millones). La cifra del año anterior se vio impulsada por el efecto puntual de la venta de una participación de capital en el contexto del negocio en China. Con una cifra de 5.223 millones de euros, el beneficio antes de impuestos aumentó un 19,8% (2018: 4.361 millones de euros).
Como reconocimiento a su compromiso en el año 2019, los empleados de Audi participarán en los beneficios de la empresa. Para un trabajador cualificado en las factorías alemanas, el bonus en 2019 asciende a 3.880 euros (2018: 3.630 euros). También existen acuerdos de participación en los beneficios para las filiales de Audi.
Con un cash flow neto de 3.160 millones de euros (2018: 2.080 millones de euros*), ligeramente por encima de la previsión establecida en el Informe Anual de 2018, el Grupo Audi confirma una vez más su elevada capacidad de autofinanciación.