En el Salón del Automóvil de Pekín Rolls Royce ha presentado su última creación, el Ghost Six Senses. Ha sido desarrollado para encender los cinco sentidos de los ocupantes como la vista, el gusto, el tacto, el sonido y el gusto, pero Rolls Royce afirma que dentro de este coche se encuentra el sexto sentido, el placer de disfrutar de las obras de arte.
Uno de los motivos por los que la filial de lujo de Bmw se ha decantado por sacar esta edición se encuentra en los clientes asiáticos. Cada vez son más y mejores las ventas en el continente vecino y los compradores no se conforman con cualquier cosa, tienen que tener siempre lo mejor y aunque Rolls Royce lo haga en cada vehículo que sale de su fabrica en Goodwood en está ocasión han dado un paso más.
Torsten Müller-Otvos, consejero delegado de la marca, afirmaba esta semana: «Este vehículo es un entorno de lujo diseñado para las personas más exigentes que hay en este mundo».
Las diferencias respecto a un Ghost de serie las encontramos tanto en el exterior como dentro del habitáculo. La carrocería pintada en un blanco nacarado muestra un conjunto de nuevas llantas de aleación forjadas y un techo solar ayuda a que la luz del sol llegue a los ocupantes.
El interior conjunta a la perfección con el exterior. Forrado de cuero blanco e inserciones en madera de nogal barnizada hacen de este Ghost un salón sobre ruedas. El cuero trabajado a mano desprende un olor a calidad, algo que según los responsables de la marca también lo podemos apreciar al tocarlo. El equipo de sonido es ahora más potente que nunca, perfeccionado para los oídos más sensibles. Por último, entre los asientos traseros nos encontramos una botella de champan francés, para los paladares más exquisitos.