Pocos son los preparadores que se atreven a meterle mano a modelos tan exclusivos como Rolls-Royce, pero de vez en cuando alguno nos sorprende con ligeros retoques sobre uno de los modelos británicos más populares. El último en hacerlo ha sido Onyx Concept, que nos muestra el lado más salvaje del Rolls-Royce Ghost con una preparación denominada St Moritz.
Muchos tintarán de locura y aberración el atrevimiento de Onyx, pero lo cierto es que este tipo de preparaciones también tiene su público entre los clientes más adinerados que no se conforman con los leves retoques estéticos de fábrica. Por ello, este Ghost Series II St Moritz cuenta con un kit de carrocería completo en fibra de carbono con detalles satinados que incluye paragolpes modificados, faldones laterales, nuevo difusor trasero, y un discreto spoiler para convertirlo en la «máxima expresión de dinamismo deportivo y estilo«.
Tampoco pasan desapercibidas las grandes llantas de 22 pulgadas con diseño multirradio hechas a medida y el reajuste de la suspensión que permite rebajar su altura algunos centímetros. Para desplazar a este mastodonte de casi dos toneladas y media sobre el asfalto, el preparador también ha optado por aumentar la potencia de fábrica, elevando el ya de por sí potente propulsor 6.6 litros V12 biturbo hasta los 621 CV (de serie cuenta con 571 CV). Un incremento de 50 caballos del que, sin embargo, no disponemos información acerca del aumento de prestaciones.