La normativa de emisiones en nuestro país vecino suele ser bastante más estricta que en España y, de cara a 2020, Francia está dispuesta a acabar con la fiebre SUV que lleva varios años azotando a numerosos países de la Unión Europea. No sabemos si lo conseguirán, pero desde luego le cortarán las alas drásticamente a los vehículos de corte crossover más contaminantes.
Así lo señalan desde Bloomberg, donde afirman que los SUV vendidos en Francia pronto se enfrentarán a grandes sanciones si emiten dióxido de carbono por encima de cierto umbral. Al parecer, la medida es fruto de una ley votada recientemente por el Parlamento de la nación gala, la cuál aumenta la cuantía de las multas desde los 12.500 euros actuales hasta nada menos que 20.000 euros.
El ministerio de finanzas francés cree que las sanciones aplicadas a los SUV podrían generar 50 millones de euros al año en ingresos para el gobierno, ya que solo durante los primeros 11 meses de 2019 este tipo de vehículos representaron aproximadamente el 30 por ciento de las ventas de automóviles nuevos, según la consultora con sede en París Inovev.
A ello se sumará un recorte en los incentivos para la compra de vehículos eléctricos y de hidrógeno, una medida que, según apunta Luc Chatel, líder del grupo de presión francés PFA “es una doble pena para los consumidores. El mercado de automóviles eléctricos no despegará sin fuertes incentivos en la compra compra. Todo el mundo tiene algo que perder: la industria, el medio ambiente y el poder adquisitivo de los franceses«.
En 2020 los subsidios para la compra de vehículos eléctricos y de pila de hidrógeno serán de hasta 6.000 euros siempre que se destinen a la adquisición de un vehículo eléctrico cuyo precio no exceda de los 45.000 euros, pero en 2021 y 2022 estas ayudas se reducirán drásticamente, aunque todavía se desconocen las cifras. El año pasado Francia invirtió 550 millones de euros en este tipo de medidas.
En mi opinión deberían incentivar los vehiculos mini para ciudad, como hacen los japoneses desde hace muchos años. Aquí en Europa en cambio es incomprensiblemente un segmento que se está extinguiendo sin que nadie haga ni diga nada. Cada vez menos marcas ofrecen vehiculos de menos de 4metros de longitud.