Este mismo año se conmemoran 25 años desde la introducción del primer Honda con la nomenclatura Type R. Durante más de dos décadas, la insignia Type R ha representado a la versión de más alto rendimiento de un modelo de la marca nipona, derivado de una filosofía de fabricación de automóviles de calle inspirados en las carreras.
Los modelos Type R de Honda siempre han representado la pureza del concepto original – reduciendo al mínimo el peso al mismo tiempo que se maximiza la potencia, la capacidad de respuesta, la estabilidad dinámica y la eficacia de frenado.
El nombre Type R apareció por primera vez en 1992 con el debut de la primera generación NSX Type R. El objetivo de Honda era diseñar un automóvil que proporcionara un inmenso placer de conducción y tuviera la velocidad de un vehículo de carreras – el modelo estaba propulsado por un motor V6 de 3,0 litros y contaba con una potencia de 280 CV-. Un amplio programa para reducir el peso eliminó casi 120 kg -en comparación con el NSX estándar-, incluyendo nuevos asientos ligeros Recaro Composite que reemplazaban a los asientos de cuero con ajuste eléctrico.
Esta fue la primera vez que el emblema rojo de Honda, la tapicería roja y el color de carrocería Championship White se introdujeron a un automóvil de serie Honda.
La combinación de colores fue un tributo al legado Formula 1 de Honda y reflejan los colores de las carreras de automovilismo que aparecieron en los monoplaza RA271 y RA272. El primero fue el primer vehículo japonés que compitió en Formula 1 y el segundo fue el primero del país en ganar un Grand Prix, siendo el primero en cruzar la meta en México en 1965. Ambos automóviles estaban pintados de blanco con una «marca de sol» roja – inspirada en la bandera nacional de Japón – y establecieron la tendencia icónica para los futuros modelos Type R.
En 1995, Honda introdujo el Integra Type R de primera generación, disponible oficialmente sólo para el mercado japonés. El motor VTEC de 1,8 litros 200 CV de cuatro cilindros alcanzaba límites de 8000 rpm y llevó la experiencia del Type R a un público más amplio. La versión actualizada era más ligera que el Integra estándar, manteniendo su rigidez, y ofrecía una caja de cambios manual de cinco velocidades, así como suspensión y frenos mejorados.
El Honda Civic Type R de 1997, disponible únicamente en Japón, que le siguió era propulsado por el famoso motor B16 de 1,6 litros – el primer motor en un automóvil estándar de producción en serie que proporcionaba una potencia específica de 100 CV por litro. El Type R presentaba un chasis más rígido, suspensión delantera y trasera de doble brazo, mejores frenos y un diferencial autoblocante helicoidal.
En 1998, el público europeo tuvo acceso oficialmente por primera vez al Type R, con el Integra Type R propulsado por un motor VTEC de 1,8 litros de cuatro cilindros, este icónico coupé proporcionaba 190 CV al límite de 8000 rpm. El enfoque en reducir el peso incluso incluyó un parabrisas más delgado para las versiones europeas.
El primer Type R de cinco puertas se lanzó en 1999. El Accord Type R estaba equipado con un chasis y una suspensión más rígidos, frenos más potentes y un diferencial autoblocante. También estaba disponible con un sistema de doble escape y un spoiler trasero opcional.
En 2001 hizo su debut el Integra Type R de segunda generación para el mercado japonés, ese mismo año se lanzó el Civic Type R de segunda generación y fue la primera vez que el modelo Type R se fabricó en la planta Honda UK Manufacturing (HUM) en Swindon. La versión para el mercado japonés, con una serie de mejoras en comparación con el modelo británico, también se fabricó en HUM.
En 2002 se introdujo en Japón la segunda generación del NSX Type R, otro avance de la filosofía inspirada en las carreras de automovilismo. La fibra de carbono se utilizó ampliamente para ayudar a reducir el peso, también en el amplio spoiler trasero y el capó ventilado. Este automóvil sigue siendo uno de los modelos Type R de Honda más raros.
El Civic Type R de tercera generación fue lanzado en marzo de 2007 y se ofreció en dos formatos. A los compradores japoneses se les ofreció un sedán de cuatro puertas con un motor VTEC de 225 CV 2,0 litros de cuatro cilindros y suspensión trasera independiente, mientras que en el mercado europeo el Type R se basaba en el de cinco puertas, con una unidad VTEC de 2,0 litros con una potencia de 201 CV a 7800 rpm.
El Civic Type R de cuarta generación se lanzó en 2015 con una serie de innovaciones técnicas. Su corazón era el primer motor Turbo VTEC – el motor más extremo y de más alto rendimiento jamás fabricado – que proporcionaba 310 CV a 6500 rpm y un par de 400 Nm a partir de 2500 rpm. Un sistema de suspensión adaptativa de cuatro ruedas y una exclusiva configuración de suspensión delantera reforzada de doble eje optimizaban su maniobrabilidad. También se introdujo el nuevo modo +R, dándoles a los conductores la opción de disfrutar una experiencia de conducción más intensa – con una mayor respuesta del motor, sensibilidad del volante y ajustes de amortiguadores – con tan solo oprimir un botón.
Durante su fase de desarrollo, el Civic Type R de cuarta generación estableció un nuevo récord para un vehículo de serie de tracción delantera en el Nordschleife del circuito de Nürburgring.
Tras ser destronado, Honda lanzó hace poco la nueva generación del Civic Type R, un modelo del que os hablamos hace días y del que podéis encontrar todos los detalles aquí.
Eeeeeesta noticia sí me gusta, felicidades