El éxito que están logrando Skoda y SEAT con sus Karoq y Ateca respectivamente está causando algún que otro dolor de cabeza a los responsables de producto. Desde su lanzamiento hace dos años, el Ateca ha sido todo un «caramelito» que podría haberse vendido en números mucho más altos mientras que el Karoq, en solo unos meses, sigue los pasos del español.
El problema de ambos modelos es que se producen en una planta de la República Checa que no da para mucho más y aunque se ha movido parte de la producción del Kodiaq, sigue siendo insuficiente. SEAT está estudiando la posibilidad de producir unas 50.000 unidades del Ateca en México para abastecer a la región, además de otros mercados internacionales fuera de Europa pero no termina de ser la solución.
No hay que olvidar que actualmente el Ateca supone muy pocas unidades para SEAT más allá del viejo continente por lo que esas 50.000 unidades previstas serían para conquistar a nuevos clientes de América Latina (Colombia, Perú, Ecuador, Uruguay, República Dominicana, Panamá y también Chile/Argentina una vez estén presentes), y algunos mercados internacionales (Singapur, Nueva Zelanda).
Sabiendo esto y con Skoda intentando cuadrar los números, es posible que unos meses SEAT pueda tomar la decisión de traer algunas unidades del Ateca a Martorell, algo que sería muy interesante para los trabajadores de la planta. No supondría la eliminación total de las unidades checas sino un refuerzo para poder cumplir con los objetivos de demanda y también para dejar más hueco al Karoq.
La decisión principal la tienen que tomar en Skoda dado que son los responsables de la producción del modelo y los que negociaron en su momento las condiciones para hacerlo. Si dan el visto bueno quizás podríamos tener un Ateca español a lo largo del 2019.
[Fuente: La Tribuna de Automoción]