Este Dodge Challenger tiene una carrocería que mide nada menos que 1,92 metros de ancho, lo que en realidad no es mucho más amplio que un Ford Mustang, pero sin embargo sí lo parece. Dejando de lado su rendimiento y detalles técnicos está claro que este muscle car destaca a primera vista por su imponente exterior, con unos pasos de rueda de vértigo y una altura que ha sido rebajada por el preparador japonés para acaparar todas las miradas a su paso.
Este nuevo kit de carrocería diseñado por Liberty Walk incluye entre otros los ensanches de los pasos de rueda, un splitter frontal y un alerón «cola de pato» que le añade un plus de deportividad. Estos componentes han sido fabricados en fibra de vidrio, y pueden ser encargados por separado o adquirir el paquete completo con un precio que en el Reino Unido de 4.660 libras, que equivalen a 5.190 euros.
No es la primera vez que vemos un Dodge Challenger con un kit creado por este preparador nipón, pero aún así nunca no dejará de impresionarnos. Con esa importante rebaja de altura en la carrocería junto con el color negro de la pintura y sus llantas se consigue un aspecto agresivo y un mayor agarre sobre el asfalto. No podían faltar otros componentes como la suspensión digital de aire denominada «Liberty Walk Airexx«, mientras que bajo el capó podremos encontrar desde un humilde V6 hasta un V8 Hellcat sobrealimentado.
Aunque probablemente muchos piensen que sería mejor una actualización del motor frente a invertir una cantidad así de dinero en un paquete para la carrocería, todo depende de los gustos. Sin ninguna duda este Challenger tan especial ha nacido para ser una estrella.
Es brutal