Es habitual que las empresas de transporte por carretera o aquellas que cuentan con comerciales en constante movimiento tengan la necesidad de conocer la ubicación de su flota de vehículos en todo momento, ya sea por seguridad, para tener conocimiento de los lapsus de inactividad o para supervisar el estado en el que está transcurriendo el servicio en general.
Si eres el propietario o el responsable de varios vehículos de la compañía, es muy probable que estés buscando diversas formas de monitorizarlos para tener un mayor control. Un sistema de localización GPS y gestión de flotas permite tener conocimiento sobre el personal a tu cargo desde la distancia y en tiempo real.
Es más, la flota de vehículos comerciales en España ha sufrido un incremento del 15% en el periodo 2018-2019 hasta situarse en el segundo puesto a nivel europeo, por lo que el uso de sistemas de gestión de flotas se ha disparado en los últimos meses. Según recientes estudios de Berg Insight, en 2022 habrá habrá cerca de 3,7 millones de vehículos usando esta tecnología en la región Mediterránea.
En 2023, la cifra a nivel europeo podría ascender hasta los 17,6 millones de vehículos gracias a los avances tanto en los nuevos sistemas telemáticos como en la conectividad de los vehículos empleados por las compañías. Por esa razón, hoy vamos a dedicar parte de nuestro tiempo a analizar si, como gestor de flotas, realmente te interesa o no un sistema de control de flotas.
¿Qué es la gestión de flotas?
Esencialmente, la gestión de flotas es la administración y logística de un conjunto de vehículos de una empresa. La función básica de las tecnologías de este sector es el seguimiento de vehículos, pero en la actualidad estos sistemas incluyen una variedad de funciones que van desde el aumento de la seguridad vial hasta la mejoras de los estilos de conducción.
Algunas de las funcionalidades más habituales en los sistemas de control de flotas actuales son el mantenimiento de vehículos, los sistemas telemáticos de seguimiento geolocalizado y diagnóstico de vehículo (aceleraciones, frenazos, relación tiempo/distancia recorridos…) y conductor, la gestión de conductores y el control del combustible o voltaje (en el caso de los eléctricos).
Gracias a esto, la gestión de la flota permite minimizar o eliminar los riesgos asociados a la inversión en vehículos y mejorar su eficiencia y productividad, siempre cumpliendo con la normativa legal. Además, este tipo de sistemas permite optimizar la toma de decisiones, ya que podremos basar estas en datos reales y exhaustivos de rendimiento real de la flota.
¿Qué beneficios tiene el control de flotas?
Ya hemos mencionado algunos de los beneficios de los sistemas de control y gestión de flotas, pero todavía quedan muchos otros de los que hablar en función de lo completo que sea el software que utilicemos. No es indispensable optar por el más caro para tener todo bajo control, basta con analizar nuestras necesidades y adaptar la tecnología a ellas.
Mayor comunicación con los trabajadores
Los software de gestión de flotas nos permiten una comunicación amplia y en tiempo real con los conductores, pudiendo enviarles órdenes de trabajo a sus dispositivos, crear puntos de interés como pueden ser gasolineras, programar los tiempos de descanso y conducción o utilizar aplicación de mensajería para compartir información, rutas o destinos.
Mayor seguridad
La seguridad es uno de los aspectos donde el control de flotas aporta mayores beneficios. Por una parte podemos conocer el estilo de conducción de los trabajadores, pudiendo actuar al respecto limitando la velocidad máxima del vehículo o la potencia -entre otros-; y por otra, podemos saber el estado en el que se encuentra el vehículo para llevar un correcto mantenimiento del mismo.
Ahorro y eficiencia
Conocer la ubicación del vehículo, las desviaciones de ruta, los tiempos muertos de los conductores o su estilo de conducción permite al gestor de flotas actuar en consecuencia. Las malas prácticas de los conductores muchas veces se traducen en consumos excesivos de combustible o faltas de productividad que le cuestan grandes sumas de dinero a la empresa.
Mayor productividad
Tener un mayor control sobre la ubicación de los vehículos o conocer el estado en el que se encuentra una entrega nos ayuda a gestionar mejor los recursos y nos permite tomar decisiones más rápidas.
Transparencia y comunicación
Un mayor conocimiento sobre la ubicación de la flota no solo nos aporta ventajas de gestión de la misma, sino que además nos permite ofrecer una mejor experiencia al cliente al compartir con él la localización del técnico o del pedido que va en camino. De esta forma, el cliente es partícipe en el servicio que le ofreces y le estás demostrando transparencia y comunicación.
Reducción de emisiones de CO2
La gestión de flotas con inteligencia artificial permite predecir el comportamiento tanto de los vehículos y los conductores y mejorarlos en base a unos datos reales y específicos. Esto se traduce en una reducción de las emisiones de CO2 independientemente del modelo y marca del tipo de transporte.